Una semana en San Petersburgo ✏️ Blogs de Rusia

Hola a tod@s,

Este es mi primer diario, normalmente nunca escribo aunque sí leo lo que otros escriben, es por ello que me he decidido a escribir una líneas para comentar algunas cuestiones que no he visto por ahí ahora que todavía tengo el viaje fresquito y que pueden ser de ayuda para alguien.

Hablando de fresquito, llegamos a Pulkovo el día 18 de Mayo con la cifra de 30º centígrados que no hizo sino subir los restantes días...y ahora vienen la curiosidades, Rusia, país frio, mucha nieve, inviernos largos...pues no tienen hielo oiga!! ni tampoco bebidas frías...sacan a la calle unos congeladores (literalmente) en los que tienen (en teoría) helados y bebidas frías, pues no, no voy a hablar de la cadena de frío de los productos, está más que rota, las bebidas están calientes y los helados derretidos...

Llegamos en un vuelo con salida del Palma de Mallorca vía Berlín (Tegel) con Air Berlin, nos salió por 675€ dos personas. El hotel fue el Hotel Deluxe situado en la calle Galernaya, la elección se debió a que está a 1km del Hermitage y la Plaza del Palacio, lo cogimos con Agoda, muy barato, una semana dos personas 450€. El hotel si no sois muy exigentes es pasable, ahora bien si vais, solicitad explicitamente que no quereis la habitación nº 4 es la peor. Fue la que nos dieron a nosotros, a nuestros acompañantes les dieron otra habitación por el mismo precio que a nosotros y era una suite con dos plantas, sofas, aire acondicionado, minibar....la nuestra....la nº4 sin comentarios, super pequeña y con alguna que otra cucaracha haciéndonos compañía. El desayuno te lo haces tú, ellas simplemente se limitan a poner todo encima de la mesa, tu vas a la nevera a la hora que quieras y puedes cocinar incluso, tomar un yogurt un colacao con galletas, un té, zumos....y no sólo durante el desayuno siempre que quieras, es como estar en casa e ir a la nevera.

Lo llevan unas chicas muy majas con pocas nociones de inglés (algo muy habitual como luego comprobamos) buena voluntad pero pocas ganas de trabajar. No siempre nos hacían las camas ni nos cambiaban las toallas, menos mal que sólo era una semana y tampoco somos muy remilgados....

Algo que nunca pensamos que caracterizaría a los rusos es la frase caribeña "Me estás estresando" nosotros hicimos por nuestra cuenta todos los trámites del visado, preparamos el viaje como hacemos con los demás planificando días y horas, compramos la Petersburg City Card para 5 días, las entradas del Hermitage y del Palacio de Catalina por internet y nos disponíamos a cumplir nuestro plan de viaje.....sshhh...relax...sin estres...

Según llegamos al hotel dejamos las maletas y nos fuimos corriendo a la plaza del palacio, a una oficina de turismo a recoger nuestra tarjeta para usarla al día siguiente a primera hora en el palacio de Catalina. La oficina cerraba a las 7, apuramos el paso, entramos en la oficina, nos atiende una rusa monérrima de la muerte con un kilo de maquillaje en los ojos que sonriendo nos dice: para la tarjeta mejor mañana después de las 10. Bieeen...primer gol...Rusia 1 Nosotros 0

A las 10, buena hora...allí nada abre antes de las 10, 10:30 nos levantamos con tiempo para desayunar con calma y fuimos a buscar la tarjeta. Ya teníamos nuestra tarjeta y nuestro librito de cupones, cada vez que entras a un sitio te quitan el trocito correspondiente. Rumbo al Palacio de Catalina nos vamos....fuimos en taxis compartidos que vienen a ser furgonetas a las que les han acoplado asientos, son muy baratos, los puedes para en cualquier sitio y cuando hace 30º son lo mejor para perder el sentido porque obviamente aire acondicionado no tienen...pero.... ventanas tampoco!! sólo una en el techo. Menos mal que sólo son 25Kms.

Para ver el palacio, primero hay que entrar en los jardines, la tarjeta incluía la entrada a los jardines y yo que lo llevaba todo preparado me coloco en la fila, con mi voucher de entrada al palacio pagada y mi tarjeta. Me atiende una señora rubia de unos 60 años que literalmente me ladra en ruso y mira el papel como si le estuviera enseñando un contrato de venta de su alma. Obviamente no habla ni una palabra de inglés...total que para probar suerte le enseño la tarjeta y le explico que me incluye la entrada a los jardines. Yo hablando en inglés y ella respondiendo en ruso, fue una conversación apasionante (la primera de muchas) cuando vió el librito de los cupones se le encendieron los ojos y pasó olimpicamente de la tarjeta, la cual debería haber pasado por un escaner pero...que más dá...nos dió la entrada a los jardines.

Una vez dentro fuimos a la cola para entrar en el palacio, no era muy larga, de hecho luego ya ni había cola a pesar de que todo el mundo decía que eran interminables. Llegamos a dentro y nadie sabía lo que era el papel pagado de internet con el código de barras de las entradas, a nadie le sonaba de nada y lo único que nos decían era Niet (su palabra favorita). En ese momento mi novio se cabreó agarró el papel y se puso a gritar "hay alguien aquí que hable inglés?" apareció una señora a la que le dijimos que aquello estaba de mal organizado para arriba y nos acompañó a la cabina dónde había que entregar el papel de marras para que te lo cambiaran por las entradas. Ya tenéis curiosidad por saber dónde era, no? pues...en la parte totalmente opuesta del palacio sin un miserable cartel en inglés ni una miserable indicación. Una vez ya más calmados le dije a la señora, tienen que poner un cartelito o al menos informar a sus compañeros de a dónde tienen que dirigir a las personas para canjearlo. Me dijo que sí, pero que era un servicio nuevo (que suerte la nuestra). Con la tarjeta también nos entraba el Palacio de Alexander que curiosamente estaba cerrado, cuantos goles van ya 4-0? En ningún sitio decían que estaba cerrado, ni en las guías (llevabamos dos) ni en la web, ni en ninguna parte...pa qué.

Al día siguiente nos fuimos al Peterhof, la tarjeta nos incluía el viaje en hidrofoil pero...el muelle del palacio estaba de obras por lo que el servicio no estaría operativo hasta junio. Hubo que ir primero en metro y luego en mini-bus o taxi compartido algo que nosotros bautizamos como Matruskys, en realidad su verdadero nombre es marshrutka. Aquí viene otro golazo por toda la escuadra....visitas al palacio hasta la 14:30 sólo rusos, con un par...el resto de los mortales a partir de ahí...mientras a pasear por los jardines, beber agua caliente y comprar una salchicha en unos puestos horrorosos en ruso, porque obviamente la chicas de los puestos tampoco hablan inglés.

Dato curioso, allí las personas mayores jubiladas se les permite trabajar haciendo trabajos que no le supongan gran dificultad como estar sentadas en los palacios y museos haciendo punto y diciendóle constantemente a los turista "don't touch" en inglés y una parrafada tremenda en ruso a continuación donde yo creo que te echan alguna maldición o algo así...son una pesadilla...la pregunta es: quien toca las cosas en los museos? alguien que no haya salido nunca de su casa porque no creo que nadie con dos dedos de frente se le ocurra manosear un Monet!!

Con esta visita se terminaron los desplazamientos y el resto de días estuvimos en la cuidad visitando varias catedrales, el museo ruso, varios palacios dónde nos metieron otros goles, como en el de marmol, dónde sólo pudimos ver dos salas, las restantes estaban preparando una exposición, la abrían al día siguiente y se necesitaba invitación y lo mejor que se les ocurre decirnos es "no habéis tenido suerte". En el palacio Mijaelovsky sucedió tres cuartos de los mismo, tampoco nos dejaron entrar estaban preparando un ágape con un montón de mesas como para una cena. A la semana siguiente por lo visto era la semana grande de la ciudad y había muchas celebraciones. El Aurora sólo lo vimos por fuera, ya que aunque en todas partes decían que era gratis, llegamos allí y no lo era, y con el cabreo que teníamos nos negamos a pagar los 10€ que nos querían cobrar....

Total y para finalizar, que esto está quedando super largo, la ciudad es bonita y barata tanto para comer como para desplazarse, nunca pagamos más de 20€ persona por comer con vino y postre, (muy recomendables restaurantes caucásicos, georgianos sobre todo) el transporte en trolebús, bus, etc, sale a unos 0,50€ (otra más, te vende el ticket una persona que está sentada dentro, normalmente con algún tipo de discapacidad y que comenta las novedades de las líneas en ruso, las que cambian las que no llegan a dónde tienen que llegar y se acaban antes... muy entretenido.... cuando ves que gira a la derecha dónde debería hacerlo a la izquierda).

Es una ciudad muy poco preparada para el turismo, sobre todo para el turismo por libre, imagino que si vas con un viaje organizado no tienen problema pero ir por tu cuenta es realmente complicado. No me importa que la gente no me sonría ni que sean amables pero al menos podian indicarte las cosas, con que pongan carteles es más que suficiente. Nuestro viaje anterior fue a Japón y allí tampoco es que hablen mucho inglés, además la barrera cultural es muy grande pero no tienes ningún problema te apañas perfectamente y siempre hay alguien que se desvive por ayudarte, en Rusia, les estorbas, mejor vete a tu casa y no me des la lata.

Podría seguir contando anécdotas mil porque el viaje da para varios libros de curiosidades...sólo os dejo la última, el Hermitage, uno de los mejores museos del mundo y de los más visitados tiene DOS cafeterías con 3 mesas cada una, ahí lo dejo....

---