COSTA OESTE USA 2015 ✏️ Blogs de USA

Pues bien, volvemos a estar por aquí tras lo que se puede nombrar como uno de los viajes de nuestra vida.
En el 2013 viajamos a la Costa Este (podéis encontrar el diario en el foro), y volvimos con muy buena sensación y con la idea de volver, no a mucho tardar, a este país que tanto tiene que ofrecer.
Y aquí estamos, repitiendo en el 2015, con muchas expectativas y muchas muchas ganas de lo que se puede decir un “viajazo”. Y es cierto, lo ha sido, muy intenso, divertido, variado, fácil y que nos ha llenado de experiencias inolvidables, que van desde lo friki a lo alucinante. Naturaleza y diversión, un viaje que es muy difícil que defraude.
Para empezar, comentaros que estuve con mi família en la costa oeste (en un viaje organizado) en el 2006. Muchas cosas han cambiado, otras ni una pizca... ya iré contando a medida que lleguemos

Para haceros un poco de idea de los lugares visitados, os listo el detalle de los lugares donde nos alojamos para que os hagáis una idea de recorrido y distancias. Decir que la mayor parte de días han sido de caña, pero solo un día acabamos agotados porque no nos daban las horas del día. El resto, a tope, como siempre, pero sin sensación de ahogo como nos ha pasado otras veces (soy una agonía y a veces me paso con el planning...)
Comentar también que llevábamos planeando este viaje desde febrero, y viajamos en setiembre, así que si lo queréis hacer bien, hay que echarle horas a la preparación del viaje, y siempre te quedas con la sensación de “¡me he dejado algo por apuntarme que me perderé!”.
Tener en cuenta que es un país gigantesco y que ofrece un montón de cosas, y repito, las distancias son tremendas, tener en cuenta siempre eso a la hora de planificar los días, no os paséis de coche porque puede resultar agotador y acabar con la sensación de “no llegar nunca”, y eso también hace que la cosa pierda un poco la magia...

Aquí va el itinerario, con la distancia recorrida aproximada (tener en cuenta que hago el cálculo con el google maps pero no cuento los desvíos realizados):

- Salida el día 01/09 desde Barcelona, con llegada a Los Ángeles el día 01/09 a las 16h hora local.
- Días 01-02-03/09 LA (California).
- 04/09 LA (California) – Williams (Arizona) - (694 km)
- 05/09 Williams (Arizona) – Page (Arizona) – (263 km)
- 06/09 Page (Arizona) – Green River (Utah) – (522 km)
- 07/09 Green River (Utah) – Las Vegas (Nevada) – (654 km)
- Días 08-09-10/09 Las Vegas (Nevada)
- 10/09 Las Vegas (Nevada) – Bishop (California) – (428 km)
- 11/09 Bishop (California) – Jamestown (California) – (303 km)
- 12/09 Jamestown (California) – San Francisco (California) – (207 km)
- Días 12-13-14-15/09 San Francisco (California)
- 15/09 San Francisco (California) – Pismo Beach (392 km)
- 16/09 Pismo Beach (California) – LA (California), salida del vuelo a las 20:30h hora local
- 18/09 Llegada a Barcelona a la 01 de la madrugada (+2)

Pues como veréis, la paliza de coche es notable, porque lo que os decía, las distancias que os he puesto son orientativas y luego en realidad hemos hecho muchos más kilómetros (recorridos dentro de los parques naturales, desvíos, circular en las distintas ciudades...). El total de kilómetros recorridos fueron de 5534 km!!!

Lo primero que reservamos fue el vuelo, a mediados de marzo, después de ver más o menos que los precios no bajaban y empezaban a subir, nos decidimos por la compañía noruega de bajo coste Norwegian. La ida era con escala en Estocolmo y la vuelta con escala en Gatwick (Londres), y nos salió por 1560 los dos. No es barato pero tampoco está muy mal, el mismo vuelo reservado en junio salía por bastante más, así que si tenéis claras las fechas no esperéis mucho, que los precios suben como la espuma.
El coche de alquiler tres cuartos de lo mismo, es recomendable reservarlo lo antes posible, para que no salga más caro todavía (que tela...).
Nos decidimos por uno de la categoría SUV, después de leer muchos de los comentarios del foro y otros diarios de viaje. Un acierto. Son muchos kilómetros, mucho equipaje y merece la pena ir cómodos por unos dolares más. Nos decantamos por la empresa Álamo ya que en el momento de la reserva era de las más baratas y no había demasidadas opiniones negativas. La verdad que la experiencia ha sido buena, mejor que con Dollar hace dos años en la costa este. Ya daré más detalles cuando empiece con el diario, pero nos salió por unos 450 dolares (incluído el conductor adicional), más el añadido allí (yo no era partidaria, pero él prefirió coger el seguro de lunas, neumáticos y antirobo y quitar la franquicia de colisión, que subió otros 150 dolares). Así que al final el total del coche subió a unos 600 dólares.

Pero lo que os digo, con otro coche de gama inferior quizás bajaría a unos 500 dólares con todos los extras que cogimos, pero esos 100 dólares merecen la pena por la comodidad de poder llevar las maletas tranquilamente, la nevera (que gran amiga!!, ya os hablaré de ella...) y viajar de forma confortable....además, carai, que estamos de vacaciones!!

Los hoteles también los reservamos desde aquí, a riesgo de cagarla en alguna etapa. De todas formas, no cambiaría prácticamente nuestro itinerario, un par de días quizás lo reesructuraría, pero los lugares de alojarnos fueron en general un acierto. La mayoría de alojamientos han sido moteles sencillos, a excepción del hotel en Las Vegas y el de Williams, que no tenía nada de motel, ya llegaremos...

El presupuesto se nos fue un pelín de las manos, no os voy a engañar... es una viajazo, pero es caro. Es caro comer, es caro dormir, es caro todo, exceptuando la gasolina (por norma general).

Y pasa lo de siempre, te pegas esa paliza de avión, te gastas ese dinero de base, y luego allí ¿vas a escatimar con la entrada a algun sitio o con pagar algun parking? Pues está claro que no, pero vamos, que se nos disparó un pelín. El total aproximado por persona (que impacta menos que si lo digo por pareja), sin estarnos de demasiadas cosas (pero con cabeza) ha sido de unos 3000 euros. Es caro. Y es mucho más caro que la costa este, que nos salió super bien hace un par de años. Pero vamos, que después del bajón de hacer las cuentas, vamos por faena, que el viaje lo merece de todas todas. Repetiría el año que viene, con eso os lo digo todo!!

Vamos allá....

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Pues llegó el día esperado, el día que no llegaba nunca, ¡el día ansiado! Y cómo no... esa noche no pegamos ojo. Salía el vuelo desde Barcelona con destino Estocolmo a las 8h, con lo que debíamos estar en el aeropuerto antes de las 6h, y allí estábamos, con esos nervios típicos de esos momentos, entre preocupación porque todo vaya bien, muchos nervios, ¡pero muchas ganas!

Primer problema... en la cola de facturación nos dicen que hay que hacerlo en plan self service, en unas maquinitas. Hacemos la colita y ¡sorpresa! El colega pone los datos de su pasaporte y le dice la máquina que los datos son incorrectos... empezamos a estresarnos, la gente detrás esperando resoplando... Finalmente se nos acerca una chica de la compañía y nos pregunta a dónde volamos. Le decimos que a Los Ángeles vía Estocolmo y nos hace un gesto de “ah vaaaale...” y nos dice que mejor pasemos por mostrador.
Primer problemilla con la entrada a USA, son mas pesaditos con los controles...

La chica de facturación nos lo arregla, factura nuestras maletacas (una pesa 19kg y la otra 20kg, por lo que anotamos en nuestra mente comprarnos equipaje de mano allí para poder hacer compras y no tener que pagar por exceso de equipaje..., que no hay cosa que más rabia me de ).
Pasamos el control, nos tomamos un café (a esa hora no hay ganas de mucho más) y compramos unos bocatas para desayunar cuando nos apriete el hambre. Enseguida se nos hacen las 8h y embarcamos en horario sin ninguna incidencia.
El vuelo se hace un pelín largo, son casi 4 horas, y en la cabeza tenemos el vuelo de 11 hoooooras de allí a Los Ángeles, con lo que mejor no pensar mucho...

Llegamos al aeropuerto de Estocolmo en hora. Allí tenemos un par de horas de espera, así que lo dedicamos para ir al baño, desayunarnos los bocatas que tenemos guardados y cargar el móvil (hay un montón de enchufes para eso). Durante la espera se nos plantan al lado un grupito de chavales españoles que viajan a los Ángeles para estudiar en una escuela de danza, rollo “Fama, a bailar”. Mientras los escuchamos se nos pasa el tiempo más rápido...

Nos dirgimos a la puerta de embarque, y ahí empieza una de las odiseas... Antes de pasar a la sala de espera de nuestra puerta, hay que pasar por otro torno y un control donde has de enseñar el justificante de pago del ESTA (no os he hablado de él, pero está más que comentado en un montón de diarios y el foro, por eso no me he extendido).
Que por cierto, en muchos sitios pone que no es necesario llevarlo impreso porque ellos mismos lo comprueban...¡MENTIRA! Si no lo hubiéramos llevado impreso igual hubiéramos tenido algo de problema, porque a los dos nos lo pidieron, junto con el pasaporte. Así que llevarlo, no cuesta nada.
Después del quinto grado, (me preguntaron por qué viajaba a USA y dónde me alojaba), pudimos embarcar.

El avión bastante chulo, los asientos eran bastante cómodos, las ventanas tenían un botoncito para nivelar la cantidad de luz, pudiendo dejar el cristal negro como si fuera de noche. Pantalla individual, con películas, series, música, algun juego... eso sí, todo en inglés y los auriculares pagando.
La comida bastante bien, en el momento de hacer la reserva por internet te hacían escoger qué tipo de menú querías (normal, vegetariano, sin gluten...), así que genial, porque estoy acostumbrada a no poder comer nada en los aviones al ser vegetariana. No sabía cómo lo montarían para dar los menús, pero al poquito de despegar sirvieron la comida y se acercó una azafata a mi sitio y preguntó si había pedido menú vegetariano y me lo sirvieron. En la cacharra ponía mi apellido y mi butaca. Después de servir los menús “especiales” sirvieron el resto con los típicos carritos.
Como decía, la comida muy bien, me pusieron espinacas con frutos secos, arroz con legumbres y verduras al curry, ensalada y fruta fresca. El menú normal era pollo al curry con patatas y pasta al pesto y un yogur. Nada mal para ser lo que es.


Después de la comida nos dejaron a nuestro aire (qué eternidad...) hasta que a un par de horas para aterrizar nos sirvieron la merienda. En este caso me tocó un sandwich muy apañado de berenjena al horno, verduras... y una galleta de chocolate con un zumo y café.

El vuelo muy muy largo y cansado. Además, al volar de día, el sueño no acaba de vencer y haces pequeños descansos interrumpidos que al final hacen que cojas dolor de cabeza y se te ponga un mal cuerpo... Ni leer pude del dolor de cabeza y el abotargamiento...pero ya se sabe, ¡sarna con gusto no pica! Además pasé mucho mucho frío, y eso que iba con ropa ya sabiendo que en los aviones suele hacer frío. Contaba con que nos dieran mantas, pero cuando vi que había que pagar 5 dólares me entró mala leche y pasé...cosas que me pasan.... pero debía de haberla cogido,¡¡ hacía un frío polar!!
Después de 11 horas eternas, culo carpeta y malestares varios, aterrizamos en Los Ángeles en horario previsto, sobre las 16h, sin ninguna incidencia durante el vuelo, a parte de nuestro cansancio y casi desespero...

La salida del avión un poco densa dada la cantidad de gente que habíamos, ya se sabe... Nada más salir del avión, fuera hay policías que le piden el pasaporte a la gente de forma aleatoria. A mi pareja, cómo no, se lo piden... Lo enseña y seguimos camino.
Ahora viene lo bueno... ¡¡Pasar el control de pasaporte!! Teníamos muy presente el control que tuvimos que pasar al llegar a NY hace dos años y se nos ponían los pelos de punta de pensarlo...cansancio, ganas de recoger equipaje, de olvidarnos de aeropuertos y ¡¡ser libres!!
Hicimos una cola de aproximadamente 45 minutos, pero nada muy destroyer, realmente fue más ágil que en Nueva York y con menos impedimentos.

El policía que nos tocó no nos preguntó nada, únicamente nos hizo poner las huellas dactilares en la máquina y nos hizo la fotito, comprobó pasaporte y ya.

En la recogida de equipajes, enseguida salieron nuestras maletas, que mal se pasa pensando que no van a salir eh...

A las 17:15h aprox., estabamos dispuestos a salir del aeropuerto, pero no....¡¡otro control antes de salir!! Y en ese si nos preguntaron por qué viajabamos a USA, dónde nos alojábamos, si habíamos estado allí antes, pasaron policías con perros que olfatearon las maletas y por fin, después de otros 20 minutos, salimos del aeropuerto.

Nos dirigimos a la zona de Shuttles a las compañías de alquiler de coches y cogimos el bus que llevaba a Álamo y National. Es un servicio gratuíto, y tardó en llegar el siguiente bus menos de 3 min. Llegamos a Álamo a los 5-10min, tener en cuenta que es muy grande y está muy lejos del aeropuerto.
Una vez allí, a eso de las 17:30h, otra cola para recoger las llaves del coche y todos los papeles. Firmamos papeles, contratamos seguro adicional y antirobo, lunas y neumáticos (no cogimos GPS porque era una barbaridad de caro y mi pareja se había encargado de bajarse un mapa del país y usar el móvil como GPS), y el hombre que nos atiende nos dice que ya podemos salir a por el coche.
De camino comentamos que no nos han dado las llaves, así que preguntamos al primer empleado que vemos, y nos indica hacia la zona de SUV (los coches estan aparcados por categorías), y cuando llegamos pillamos la historia, y es que ¡¡puedes coger el que más te guste!!

Nos volvimos locos mirando maleteros, asientos, motores... y claro,¡ íba llegando más gente que hacía lo mismo! Fue un poco así como estresante pero estuvo muy chulo. Finalmente, después de que me quitaran uno que me gustaba mucho (no recuerdo el modelo....;)), nos decidimos por un Ford Escape negro muy majete, maletero immenso, cristales tintados y salpicadero muy chulo.
Metemos las maletas en el maletero y definitivamente, ¡ese iba a ser nuestro coche! Ya os lo presentaré más adelante...
Subimos y ya estamos, ahora sí que sí, ¡¡estamos de viaje por el Oeste!!!

El coche, automático, como prácticamente todos los coches estadounidenses, así que mucha complicación no tiene. Cuando mi novio controla más o menos el tema de luces y toda la pesca, ponemos en el GPS del móvil la dirección del hotel, rezando que funcione... y ¡funciona!. Nos ponemos en marcha, hay unos 45km, y pensamos, bueno, si cogemos algo de tráfico igual tardamos una horita y pico...

Madre mía...¡¡qué barbaridad!! Algo de tráfico no vale en LA... esta todo absolutamente atascado, no hay ni una carretera o autopista que se libre, es algo inhumano. Cuando leáis esto creeréis que exagero, pero en serio que no lo hago, en días de diario es algo brutal. No se cómo será en fin de semana, pero a diario (llegamos en martes), es ver para creer. De camino por los atascos pudimos ver bastante cerca el Staples Center, el Downtown y podemos ver el cartel de Hollywood a lo lejos...si chicos, ¡estamos en LA!


Tardamos en llegar al hotel más de dos horas, llegando al Vagabond Inn Executive Pasadena pasadas las 20h. Evidentemente el planning que teníamos para hoy (ver algo de Pasadena y el Instituto tecnológico de California) se van al traste.
Cuando por fin llegamos y entramos a la recepción del motel para hacer el check in estamos tan reventados que casi no me aguanto de pie y me entra una tiritona que pa qué... tenía frío acumulado del vuelo y en la recepción, como en la mayoría de sitios allí, tienen puesto el aire a todo meter... Un frío, una tiritona... que solo pienso en una ducha caliente y en pillar la posición horizontal pudiendo estirar bien las piernas...

El recepcionista le dice a mi pareja algo que no entendemos, algo que suena como “Menú?”, nosotros que estamos algo empanaos, también hay que decirlo, no pillamos la pregunta...hasta que el tío nos señala la reserva y nos hace entender que ¡¡le está preguntando si se llama Manuel!!!
En fin, finalmente nos da la llave y vamos para la habitación. No es gran cosa, la típica habitación de motel con cama extragrande y baño impersonal y funcional, pero nos vale, nos vale muy mucho

Nos aseamos un pelín y nos obligamos a salir a buscar algo para cenar, para aquello de aclimatar el cuerpo...
El hotel se situaba en Pasadena, pero no en la zona comercial, y no queríamos coger el coche, por lo que andamos un poco y encontramos que había restaurantes de comida rápida (McDonalds y varias cadenas de allí, pero en ninguna me podía llevar nada la boca), así que acabamos en un sitio algo extraño de comida asiática, donde no había refrescos ni alcohol, solo agua de grifo (no embotellada) y batidos y zumos...
Nos comimos un arroz blanco con verduras y el amigo un pincho de pollo con arroz, de secano, ya que zumos no nos encartaba con esa comida , y agua del grifo el primer día de viaje no nos queríamos arriesgar, que tenemos los estómagos delicados y algunas malas experiéncias...jeje

Nos fijamos que había un montón de asiáticos, bueno, en realidad eramos los únicos que no...

Después de cenar rapidin, fuimos a la gasolinera que estaba en frente a comprar agua, estabamos secos después de la cena...

Nos pasó algo muy gracioso allí... compramos una botella grande de agua, pero como sabemos que fuera de España es muy típico que el agua sea con gas, y no las teníamos todas por lo que ponía en la botella, mi novio le preguntó al dependiente si llevaba “gas”. Lo miró con cara de alucinar y le respondió que era “only water”... Mi novio ya vio que no iban a entenderse, a lo que me comentó con voz baja “este tio me está mirando como si fuera un loco...”, a lo que el hombre le dijo en nuestro idioma“qué es lo que quiere?”, visiblemente asustado. Le volvimos a hacer la pregunta, esta vez en español, “si lleva gas, si lleva espuma!”, y el tio ya algo aliviado nos dijo...”¡¡aaaaah!! carbonato!!, ¡¡gas es gasolina!!”.
El hombre alucinó pensando que le preguntábamos si la botella de agua llevaba ¡gasolina! Así que nada de gas, agua carbonatada

Después de las risas nos fuimos para el hotel andando, nos metimos en la ducha y a las 22h estabamos rendidos en la cama, ni la tele encendimos. Después de más de 24h danzando, podíamos descansar

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A las 3h de la mañana estoy con los ojos como platos, el jet lag había venido a visitarme . Como vi que el colega seguía muy dormido intenté coger el sueño otra vez, así que finalmente lo conseguí, hasta que a las 6:30h ya no puedo más y me pongo en marcha. Nos duchamos, preparamos la mochila de turista (ya sabéis, agua, cámara, mapas, pañuelos,...) y vamos a desayunar a la recepción del hotel. Bastante correcto, baguels, gofres, algo de bollería, tostadas, cereales y fruta. Después de cargar pilas, nos montamos en el coche para empezar nuestro primer día antes de las 9h

Primera parada: Hollywood. En el mapa parece que estamos cerca, pero tenemos unos 30km, y esperamos no coger el atasco que cogimos ayer por la tarde... pero sí, atasco hay, a todas horas y en todos los sitios, así que tardamos en llegar a Hollywood algo más de una hora. Aparcamos el coche en el parking del centro comercial del Dolby Theatre, sin mucha pérdida.
Al salir del parking nos encontramos en el centro comercial, por lo que aprovechamos para dar una vueltecilla (alguna tienda está cerrada todavía porque son als 10h tocadas).


Subimos al primer piso, desde donde hay una panorámica del Hollywood Sign. Mucha gente, cuesta hacer la foto sin que aparezca nadie por el medio...;)


Una vez hechas las fotos, vamos al paseo de la fama, hacia el teatro chino, donde delante hay una zona llena de huellas de pisadas y manos de muchos famosos... Es un sitio muy chulo, te puedes pasar allí un buen rato. No puedo más que hacerme una foto con uno de los grandes...


Paseamos un rato por el paseo, fijándonos en las estrellas, te puedes marear fácilmente y coges dolor de espalda...





Entramos en alguna tienda, y bueno, la sensación es de que todo es de cartón piedra, pero a ver, estamos en Hollywood, era lo esperado.
Mi novio se compra un par de camisetas (una de Chuck Norris, es superior a él, y una de Linterna Verde, que muchas veces lleva Sheldon, el protagonista de “The Big Bang Theory”, somos muy fans).
Nos dirigimos al 1628 N.Cahuenga Blv, que cruza el paseo de la fama, dónde se encuentra el estudio de tatuajes “Ink Kandy”, que sale en la tele y programa del que somos fans (Tatuajes hasta el amanecer). La pena que llegamos y además de estar cerrado, ¡¡está en alquiler!! Aquí la muestra...


Lo bueno que de camino a la tienda, encontramos dos de las estrellas que queríamos encontrar y no teníamos claro conseguir, las de Kaley Cuoco y Jim Parsons, ¡¡los actores que interpretan a Penny y Sheldon de TBBT!! Qué ilusión me hizo encontrarlas, aquí van las fotitos...



Volvemos a la zona del Dolby Theatre, y de camino, se nos acerca un chico y empieza a darle la chapa a mi novio. Mi novio agunta el chaparrón y de golpe veo que le da un billete de 5 dólares y el otro le da un CD. Se dan un abrazo y el chico le grita “¡¡You are mi nigger!!”. Más tarde en el coche, pusimos el CD y era rap, pero muy poco escuchable... pero si el chaval triunfa, tenemos su CD firmado...jeje

Damos por zanjada nuestra visita a Hollywood, que la agenda es tremenda, así que entramos de nuevo en el centro comercial, paramos a tomar un par de refrescos ya que si consumes algo en el centro comercial te hacen descuento en el parking. Al final nos costó 2,5 dólares y no nos quedó muy claro qué descuento nos aplicaron, pero vamos, estuvimos alrededor de 2 horas y media y nos costó 2,5 dólares, no es muy caro.

Volvemos al coche y nos acercamos a N. Robertson Blv, donde según la Lonely Planet, es zona de tiendas y restaurantes donde se pueden ver a famosos haciendo alguna compra o tomando algo. No vimos nada, y la calle en sí no tenía mucha gracia...

Después del safari sin ver leones , ponemos en el GPS siguiente destino: Beverly Hills. De camino, pasamos por una zona de claro ambiente gay, se ve chulo, lleno de garitos y restaurantes.
Aparcamos el coche en un garaje cercano a Rodeo Drive, menos de 2 horas gratuíto. Nada más salir del coche, notamos que se respira un aire muy distinto al de Hollywood. Tiendas muy muy caras de firmas muy muy caras, cafeterías que da miedito entrar y gente muy Barbie&Ken. Hacemos una foto en el típico cartelito y caminamos por Rodeo Dr, que se hace en un momento si no entras en las tiendas.



Después vamos al Hotel Beverly Wilshire, donde se grabó la famosa Pretty Woman, situado en el 9500 Wilshire Blv. Muy chulo, entramos al vestíbulo y nos hacemos una foto de rapidillo para que no nos digan nada, pero nos ven y no pasa nada de nada, deben estar más que acostumbrados a que los turistas entren a hacer la fotito.
Tiene pinta de ser lujoso y caro. En el restaurante del hotel vemos a gente fashion en la terracita comiendo unas pizzas pequeñitas con no muy mala pinta. Más adelante vemos la carta y cada pizza cuesta alrededor de 30 dólares... que no está mal para un poco de harina, queso y rúcula...
Limusinas, coches de alta gama, muchas mujeres de mediana edad vestidas de leopardo... ya me entendéis. Seguimos andando un poco y damos con la famosa escalera de incendios por donde Richard Gere se hacía unos paseos en la película. Foto al canto y seguimos


Decidimos para a comer, ya son más de las 13h y allí el horario de comidas es un poco distinto al nuestro, teniendo en cuenta que cenan como muy tarde a las 20h en la mayoría de sitios.
Así que decidimos comer en la terraza del The Cheescake Factory, una cadena de restaurantes que ya conocíamos por la serie TBBT, los fans sabréis que Penny trabaja allí...;)


Comemos muy muy bien, yo una pasta con verduras y frutos secos y él un sandwich de pollo y unas cervezas. 37 dólares. No es para hacerlo cada día, pero era el primero y teníamos el bolsillo aún lleno

Al acabar de comer, el camarero nos preguntó si queríamos postre. Como estábamos muy llenos le dijimos que no, y el chico se medio indignó de broma y nos preguntó que ¡¿cómo podíamos estar en el Cheescake Factory y no comernos un pastel de queso?!. Pero no lo hicimos porque hubiéramos reventado...
Comentar que en muchos sitios, te sugieren la propina “gratuity”, porque como sabéis, en USA es un concepto que hay que añadir al precio final. Al final de la cuenta te ponen lo que correpondería a un 5, 8, 10%... y tu decides cuánto dejar. Nosotros normalmente dejábamos el la cantidad del medio, a no ser que hubiéramos quedado encantados con el servicio o bien, disgustados... Destacar que en general todos los camareros son muy atentos y se ve que se esfuerzan para que les dejes propinas. Otra cosa es los empleados de los fast food o cafeterías, que a estos, como no les suele caer propina, no tienden a ser tan majos...

Después de comer, fuimos a buscar el coche y siguiente parada, buscar un Sign de Beverly Hills. Lo encontramos en el cruce entre Sta Monica Blv y Moreno Dr. Para muestra un botón.


Después, como nos encontrábamos cerquita, intentamos ir en busca del cartel de Hollywwod desde cerca. Habíamos apuntado varias localizaciones que habíamos sacado de internet, pero no se si es que teníamos ese día la negra o que, pero nos fue imposible y perdimos mucho tiempo. Nos acercamos al 3308 de N.Beachwood, pero llegó un punto que no nos dejaron subir más (había vallas donde ponía “Not cross”), por lo que nos fuimos hacia el 204 de Canyon Lake Dr, pero desde allí no hubo manera de ver el cartel. Eso sí, vimos un parque agradable donde vimos un ciervo, curioso en medio de Los Ángeles.
En N.Beachwood hay una vista muy chula de esa calle con las típicas palmeras y al fondo el cartel, eso si nos gustó.


Además, callejeando en busca del cartel, pudimos ver la zona, y la verdad, muy muy agradable, llena de cuestas, pero unas casitas impresionantes y una sensación de estar en la montaña pero con la ciudad a dos pasos.

Después de este pequeño bajón de no encontrar la señal, vamos de nuevo hacia Robertson Av., donde hay una tienda de ropa de seguna mano llamada It's a Wrap, donde se puede comprar ropa usada en rodajes de películas y/o series. Aparcamos en la calle, y la verdad, la tienda es un poco cromo, la ropa es como de carnaval
Vemos zonas de Anatomía de Gray, Castle, Jurassic World... con ropa, zapatos y todo tipo de complementos (bisutería, pañuelos...).


Después de cotillear un poco, seguimos camino, esta vez ponemos rumbo a Venice, ¡qué ganas de verlo!
Llegamos allí a las 18:30h aprox, mucho tráfico hasta llegar allí (entre las 16-20h es criminal el tema atascos). Teniendo en cuenta que anochece a eso de las 19:15h nos tenemos que meter caña si queremos ver algo de día. Aparcamos el coche en un garaje exterior cerca del Ocean Front Walk, nos cuesta 10$ tarifa única, pero no buscamos más porque el tiempo se nos acaba...:(

Saltamos del coche y vamos hacia el paseo. Qué decir de Venice, la verdad que nos encantó..., ambiente muy playero, lo que imaginas cuando piensas en California es, básicamente, Venice. Gente paseando en bikini o bañador, con la tabla de surf a cuestas, tatuadores en la calle, musculitos rondando, skaters y gente haciendo deporte, pero también mucho homeless, gente que merodea y gente muy rara. La verdad que es para sentarse en un banco y solo observar. Pena que íbamos como las cabras por que se nos hacía de noche. Nos acercamos al mar, y lo dicho, lo que todos imaginamos de una playa californiana. Surf, casetas de vigilantes de la playa (Pamela no estaba...). gente tocando la guitarra, una pista de skate tremenda... todo eso con el atardecer de fondo...no había mejor manera de acabar las horas de sol...





Estuvimos en la Muscle Beach, que al ser tarde, estaba prácticamente vacía, pero quedaba algun motivado aún...


Teníamos apuntada la dirección del “House of Ink”, otro de los estudios de tatuaje que sale en el programa de la tele (“Tatoos after dark”), y al que tenía especial interés por ver, ya que uno de los tatuadores no tiene desperdicio alguno.... y lo encontramos, pero lo más fuerte es que este si que estaba abierto, y atención....estaba el tatuador que os comentaba tatuando a una chica. ¡Casi me da algo! El gran Asaru tatuando, aquí lo tenéis, la foto es de calidad pésima pero para si hay alguien que lea esto que haya visto el programa, seguro le hará gracia...


Después del subidón, volvimos al Ocean Front Walk y comentar algo... en el momento que se empezó a hacer de noche el ambiente cambió totalmente... Empezó a aumentar la gente rara y a desaparecer la gente más “normal” y aquello tomó un ambiente muy muy raruno, gente que te hablaba, gente gritando, la sensación era de que nos teníamos que ir prontito si no queríamos tener algun problemilla...

Así que eso hicimos, 4 fotos más y pal coche, que aun nos quedaba Santa Mónica en el planning del día.



Pero antes de marcharnos de Venice, nos dirigimos a la zona de los canales, situados cerca del 2302 de Dell Av. Llegamos casi de noche, pero nos pareció un lugar muy bonito y agradable para vivir. Cerca del bullicio del que veníamos y de la playa, pero para vivir tranquilos. Se escuchaban los grillos, había una niña de una casa encarada al canal jugando fuera sola (algo muy atípico por allí), en general se podría decir que parecía Europa (solo esa parte eh...;))


Después teníamos intención de acercarnos al famoso Instituto Rydel, el de la peli de Grease, pero pusimos la dirección en el GPS y nos dijo que no existía... Así que no perdimos mucho más tiempo y pusimos rumbo a Santa Monica, pensando que, sin duda, si volvemos algun día por esa zona, Venice será una parada obligatoria

Llegamos a Santa Monica sobre las 20h, noche ya cerrada, y aparcar en el pueblo fue imposible. Al ser tarde, no se puede aparcar en la mayoría de calles, por lo que tuvimos que ir directos al parking del puerto, donde nos cobraron otros 12$, tarifa fija. Saltamos de nuevo del coche, y nuestra visita se basó en pasear por el Pier. Allí, el ambiente era distinto al de Venice, algo más “normal”, famílias, parejas paseando...

Nada más encontrar a Zoltar fuimos para allá directos a que nos leyera el futuro


Entramos en un centro de esos de arcade, llenos de maquinitas lleno de chavales jugando, músicos callejeros que lo hacían bastante bien...
Llegamos al final del puerto donde hay el mural recordatorio de la ruta 66, la foto se ve un poco oscura



Entramos en el Pacific Park, el parque de atracciones, con la noria iluminada como emblema.
La verdad que la visita estuvo divertida, pero de nuevo nos ocurrió lo mismo, a partir de las 21h la gente se empezó a marchar y quedaron los “caminantes walking dead”, que decíamos de broma, nosotros y algun que otro turista haciendo fotos.
Desafortunadamente, en toda ciudad puedes ver a homeless a día de hoy, pero la gente que está en la calle allí, además de homeless deben tener problemas mentales, ya que se te acercan y te dan conversación, van hablando solos... Que ojo, eso también lo encuentras aquí, pero el ambiente raro de allí es demasiado.
Después de pasear (vimos muchas referencias a la ruta 66) y comernos una hamburguesa rápida en un garito (tiene la mano rota oye, qué ricas estan... ), decidimos que era la hora de marchar, más que nada porque se nos pegó un chaval todo el rato y ya estábamos hasta incómodos...




Teníamos unos 50km hasta el hotel y el cansancio apremiaba, así que nos marchamos para el coche. Menos mal que a esa hora el tráfico íba fluido (que no vacío). Llegamos a Pasadena a eso de las 22:30h, con la sensación de un día magnífico, habíamos visitado muchos lugares y todos habían cumplido las expectativas.
Y a dormir, que mañana más...

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