Llegó el día de la excursión por el valle del Danubio hasta Melk, con su famosa Abadía.
Salimos del hotel sobre las 9h de la mañana, después de confirmar en la página de los transportes en ferrocarril, www.oebb.at/en/index.jsp, que el tren que queríamos coger hasta Melk salía a las 10h14m. Cuando llegamos a la estación de Westbahnhof ( línea de metro U1 en Schwedenplatz al lado del hotel, una parada hasta Stephansplatz y allí, con la línea U3, cinco paradas hasta Westbahnhof), comprobamos que el tren hasta St. Valentín (el que debíamos coger) de las 9h14m (el anterior al nuestro), no había salido todavía, con lo que nos vino muy bien, por que fue éste el que al final cogimos a eso de las 10h.
Sacamos un “Tagesticket für regionalzuge für 2 bis 5 personen in wert von 28 / einfach raus” (casi ná), vamos, un bono que por 28€ te permite, a un grupo de hasta 5 personas, coger los trenes regionales que quieras durante un día.
Una vez en el tren, y después de 1h15m y múltiples paradas, llegamos por fin a Melk. Nada más bajarnos del tren, es fácil orientarse para llegar a la Abadía.
Después de alguna que otra cuesta y varias escaleras, nos plantamos en la entrada principal de la Abadía, www.stiftmelk.at/ ...index.html, y tras pagar el ticket familiar a 19€, pudimos pasar. De la visita a la Abadía me gustaría destacar tres puntos: el primero la Iglesia, cargada con todo lujo de detalles, como por ejemplo, esta escalera de caracol:
*** Imagen borrada de Tinypic ***
A continuación, la terraza con unas vistas impresionantes del valle del Danubio a la derecha y de la localidad
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Y por último, la biblioteca, pequeña pero preciosa y que tantos recuerdos nos trae a los que hemos leído “El nombre de la rosa” (con el famoso “detective medieval” Guillermo de Baskerville y su ayudante Adso).
*** Imagen borrada de Tinypic ***
A la salida, y en la calle principal de Melk, Ratheusplatz, nos paramos a comer en un bar con terrazas, llamado “Cafe Restaurant zum Fürsten”. Muy bien, (calidad / precio), y hasta con la carta en español. Hacía un día estupendo y caluroso de sol, pero al correr un poco de brisa, la verdad es que se estaba muy bien.
De ahí al barco. Conviene antes de ir tener controlados los horarios, para evitar que os pase lo que nos pasó a nosotros y que ahora contaré. Dos páginas web interesantes para esta planificación son: www.donaustationen.at/ ...n/donau_e/, donde podéis ver las diferentes paradas que hay a lo largo del Danubio y el número de cada una. En concreto, desde la que teníamos que coger el barco que salía de Melk es la número 11, y www.ddsg-blue-danube.at/ ...wac_fp.asp, donde podéis ver el nombre de los barcos, el precio, los horarios. Será corriente abajo desde Melk hasta Krems.
Lo que nos pasó es que no tuve presente los horarios y llegamos a la taquilla del muelle 11 a las 14h. Como podéis comprobar en la web anterior, sale un barco a las 13h50m (lo vimos marcharse tal como llegábamos) y el siguiente a las 16h15m. Es decir, nos tocó esperar más de 2 horas.
Vista de la Abadía desde el muelle 11:*** Imagen borrada de Tinypic ***
Para hacer tiempo nos dimos una vuelta por los alrededores, mi hija perdió un anillo muy importante para ella, mi mujer tocó ortigas buscándolo y todavía se está rascando, apareció el anillo, volvimos a la calle central de pueblo a tomar un refresco y por fin, ya eran las 16h y al barco.
Mi consejo es que toméis el de las 13h50m, y así podéis parar en Dürnstein y ver esta localidad y su preciosa Iglesia azul.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
El viaje en el barco merece la pena ya que las imágenes que se ven son preciosas (el valle de Wachau es Patrimonio de la Humanidad). Muy bonito, la verdad. Las fotos más bonitas del viaje fueron éstas.
El barco hace dos paradas antes de llegar a Krems. Primero en Spitz, donde hay que hacer trasbordo, después en Dürnstein, con su preciosa Iglesia azul y las ruinas del castillo donde estuvo preso Ricardo Corazón del León a su vuelta de las cruzadas.
El barco hace dos paradas antes de llegar a Krems. Primero en Spitz, donde hay que hacer trasbordo, después en Dürnstein, con su preciosa Iglesia azul y las ruinas del castillo donde estuvo preso Ricardo Corazón del León a su vuelta de las cruzadas.
El barco nos dejó en Krems a eso de las 18h15m. Queríamos coger el tren a Viena de las 19h05m, así que nos tocó andar y muy rápido, ya que la estación está bastante retirada (yo tenía una idea de que Krems era más o menos como Melk pero es bastante más grande y por lo tanto, las distancias mayores) Una explicación rápida de como llegar a la estación desde el barco sería, bajarse del barco y a la derecha, seguir en línea recta, paralelo al Danubio, hasta llegar a un puente con vías del tren. Girar a la izquierda siguiendo estas vías y, al cabo de 35 minutos (andando rápido), tienes la estación.
Y ahora la vuelta en tren a Viena. Un detalle a tener en cuenta es que, si bien la última parada de este tren es la estación de Franz Joseph Bahnhof, hay que bajarse en la anterior, llamada Spitelav, que es la que tiene conexiones con las distintas líneas de metro, (U4 y U6).
Y ahora la vuelta en tren a Viena. Un detalle a tener en cuenta es que, si bien la última parada de este tren es la estación de Franz Joseph Bahnhof, hay que bajarse en la anterior, llamada Spitelav, que es la que tiene conexiones con las distintas líneas de metro, (U4 y U6).
Cenamos en una pizzería cerca de la Catedral, y luego, de camino al hotel por Rottenturnstrasse, un helado en Zanoni & Zanoni (¡qué de gente!), y a dormir que al día siguiente, sábado, era el último que pasaríamos completo en Viena, o eso pensábamos...