El día de hoy nos depara terminar la visita a Heidelberg para más tarde visitiar unos pueblos encantadores: Bad Wimpfen, Schwäbisch Hall y Bad Mergentheim, todo esto en la región alemana de Baden-Württemberg. Hoy realizamos 173 km con el coche.
El sol nos despierta temprano en la habitación del Hostel donde dormiamos, recogimos las cosas y aprovechamos para desayunar en la cocina. Ahora estaba mucho menos concurrida que por la noche. Cuando montamos todo en el coche nos vamos con el hasta el castillo (Scholss). Sabemos que no podemos llegar hasta él con el coche, pero lo vamos a acercar todo lo que podamos. Aprovechando que era temprano y no había mucho tráfico por la ciudad conseguimos dejarlo bastante cerca. Aun así nos toca subir un tramo grande de escaleras hasta llegar a la entrada, pero lo compensa las vistas.
Las vistas desde los jardines del castillo no defraudan y la entrada es gratis (a los jardines)
Nosotros no pasamos al interior del castillo, cuando llegamos quedaba todavia media hora para que abrieran y preferimos seguir nuestra ruta. En su interior está el museo de la farmacia de alemania, que dicen que está muy bien. Desde fuera también se ve la belleza del castillo
Desde el castillo y una vez que encontramos el coche (nos desorientamos un poco al salir..) pusimos rumbo a Bad Wimpfen a unos 90 km. Habiamos leido que el recorrido más bonito era el de la carretera que va paralela al Neckar, así que para que el GPS nos lleve por ahí le ponemos que pase por Eberbach (nosotros no paramos ahí, al pasar con el coche no nos pareció que tuviera nada interesante...). En Bad Wimpfen dejamos el coche en el parking de la antigua estación de tren, donde se encuentra la oficina de turismo y desde alli se sube andando en 3 minutos al pueblo. Bad Wimpfen es un pueblo bonito, con muy poco movimiento, calles empedradas, tejados de pico, un par de torres altas y desde el patio de una iglesia que hay cerca de la entrada unas vistas muy bonitas del Neckar.
Aprovechamos para comer algo a media mañana y desde allí nos fuimos a Schwäbisch Hall a unos 50 km. Este pueblo era bastante más grande que el anterior. Dejamos el coche en la parte alta de la ciudad y desde alli bajamos callejeando hacia el río. Lo primero que nos encontramos fue la plaza principal del pueblo. No era excesivamente grande, pero sí los edificios que la rodeaban destacando el ayuntamiento y la iglesia, a la que se llegaba subiendo unas escaleras que hacia que pareciera mucho más alta.
Desde ahí bajamos a la zona del río, sin duda la más bonita donde se pueden ver varios puentes cubiertos y los árboles creciendo al ras del agua.
Desde aquí abajo se podía ver cómo crecía el pueblo en la ladera de la colina (hacia donde teníamos aparcado el coche...)
Ya desde aquí nos fuimos a Bad Mergentheim, último destino del día. Pusimos la dirección de la oficina de turismos que estaba en la plaza del mercado (todos los pueblos tienen una plaza del mercado, Am Markt... y muy probablemente esté también ahí el ayuntamiento, Rathaus...). Allí nos atendió una chica muy amable llamada Mai, hablaba muy poco español pero se esforzó en hacerlo a pesar de que le dijimos que podíamos hablar inglés. Después de explicarnos lo que había que ver en el pueblo le dijimos que teníamos que buscar alojamiento en los alrededores. Nos contó las distintas posibilidades que había y cómo los hoteles se nos iban un poco del presupuesto nos habló de las Gästehaus. Es cómo llaman en alemania a los B&B. Nos habló muy bien del Stolz que se encontraba en un barrio a las afueras a unos 2 km y ella misma llamo a la señora para decirle si tenia habitaciones libres. Menos mal, por que luego descubrimos que la señora no tenía ni idea de inglés... El precio fueron 50€ por una habitación grande, limpia y una grandisima terraza con vistas al campo, el desayuno también estaba incluido. Era la casa en la que vivía la señora y tenía una planta con habitaciones para alquilar mientras que ella vivía en la de abajo.
Dejamos las cosas en la casa y nos volvimos a visitar el pueblo. Empezamos por la parte noreste donde habia un parque enorme (Kurpark) con un jardín japones y diversas atracciones para los lugareños...
Desde aquí nos adentramos en el centro donde destaca el castillo y sus jardines frente a la plaza del mercado
El pueblo no tenía mucho más que ver, así que despues de comer algo para merendar hicimos un tour por los pueblos de alrededor con el coche, que tenían menos que ver la verdad pero nos encontramos con algo curioso por la carretera, un tractor hecho de alpacas
Cogimos algo de cenar en un McDonnalds y nos lo llevamos para cenar en la terraza de nuestra habitación mientras disfrutabamos de las vistas.