09.10.13 Tokyo - Kamakura - Yokohama - Tokyo
Anoche no pusimos alarma con la intención de dormir a gusto y rehicimos la ruta del día de hoy… estamos muy saturados de templos y aún nos falta visitar Nikko y tenemos que hacer de “marujos” y poner lavadoras, así que el día de hoy era ideal para dormir un rato más y tomárnoslo con mucha calma. Pero tantos días madrugando y yendo pronto a dormir, a las 9h ya no podemos dormir más. Ponemos lavadoras y bajamos a desayunar bien justillos de tiempo (el comedor está abierto hasta las 9,30h) y volvemos a por la ropa. Me encanta este país, lo he dicho ya?? En los hoteles tienes lavadoras gratuitas que en 30-40’ están listas y secadoras a monedas muy baratijas, en este caso 100¥ el secado. En poco más de 20’ están listas pero como era mucha ropa, ponemos la que ha quedado más húmeda en otra y la acabamos de secar. Volvemos a la habitación y “tendemos” la que está aún húmeda y ponemos el cartel para que no hagan la habitación hoy, si entran las de la limpieza les puede dar algo al ver cómo está la habitación con ropa por todos lados jaja! Cogemos la mochila y nos ponemos en marcha a eso de las 10h y pico.
Vamos a JR Shimbashi, desde dónde cogemos un tren directo de la línea JR Yokosuka Line que en 1h nos deja en Kamakura. En función de los templos que quieras ver de Kamakura hay que parar en la parada anterior, Kita-Kamakura, pero como decía decidimos rehacer la ruta de hoy y vamos directos a Kamakura Sta.
Kamakura 镰仓: Kamakura fue el centro político del país cuando Minamoto Yoritomo eligió la ciudad como sede de su nuevo gobierno militar en 1192. El gobierno de Kamakura continuó gobernando Japón durante más de un siglo. Hoy en día, Kamakura es una pequeña ciudad costera y un destino turístico muy popular. También conocida como la Kyoto Oriental, Kamakura ofrece numerosos templos, santuarios y otros monumentos históricos. Además, sus playas atraen a grandes multitudes durante los meses de verano.
Salimos de la zona JR de la estación y cogemos el tranvía de la compañía Enoshima Electric Railway, Enoden, hasta la parada Hase. Salimos siguiendo las indicaciones hasta llegar al templo del Gran Daibutsu (200¥ x 2). Durante el corto paseo de unos 10 minutos nos llama la atención unas señales que hay pintadas en el suelo en las que pone “SOS Tsunami, Exit” y una flecha hacia el norte. Me quedé muy asombrada, pero luego te paras a pensar que Kamakura es ciudad costera y que hay riesgo de tsunami… cruzaremos los dedos para no tener que usar esas indicaciones…
El gran buda (o Daibutsu) de Kamakura es una estatua de bronce del Buda Amida que se encuentra en los terrenos del templo Kotokuin y cuenta con una altura de 13,35m de altura, siendo la segunda estatua de bronce más alta de Japón (sólo superada por el Buda de Nara). La estatua fue fundida en 1252 y originalmente se encontraba en el interior de una gran sala del templo, pero el edificio fue destruido y reconstruido en varias ocasiones por el azote de tifones y un tsunami en los siglos 14 y 15, y curiosamente la estatua siempre se ha mantenido en pie. Desde 1495, el Buda se encuentra al aire libre.
A pesar de que ya habíamos visitado el de Nara en el primer viaje y que este es algo más pequeño, nos gusta mucho más. No sabemos si por la cara de gran bondad del Buda o por el entorno natural… nos deleitamos con los detalles de la figura.
Lo rodeamos y fotografiamos por todos los ángulos. Nos sentamos un ratito junto a él en unos bancos de piedra que hay, qué maravilla!
Pagamos (20¥ x2) para acceder a su interior. Aunque desde dentro la estatua no parece tan grande como por fuera, es impresionante ver todos esos detalles marcados en la estructura de bronce. Además, tan solo somos 4 personas aquí dentro por lo que podemos estarnos un ratito.
Salimos del buda y vamos hacia la parte trasera de los terrenos. Hacemos parada en boxes y nos bebemos algo fresquito. Recorremos un par de tiendas de souvenirs del templo y compramos una estatua-hucha del Buda para regalarle a unos amigos (3000¥). Volvemos hacia el Buda, echamos la última foto y salimos a la calle principal de nuevo.
A lo largo de la calle principal hay varias tiendas de artesanos, algunas de armas y con souvenirs. Compramos otra figura del Buda para nosotros (5000¥), vamos a tener el piso lleno de Budas!!
Tras unos 5 minutos de paseo mirando las tiendecitas llegamos al Templo Hasedera.
Compramos las entradas (300¥ x 2) y accedemos a sus jardines. El Hasedera fue construido en la ladera de una colina arbolada, los jardines están en la zona inferior y los edificios principales del templo en lo alto de la colina a los que se accede por unas escaleras, las cuales nos sorprenden porqué vemos que están separadas como en dos carriles, uno para subir y otro para bajar. Estos japos son ordenados hasta para esto!! Los jardines cuentan con un gran estanque con pequeñas cascadas que caen de la colina.
En el camino hacia los edificios principales, se encuentra el Jizo Hall, con cientos de pequeñas estatuas de Bodhisattva Jizo, que ayuda a las almas de los niños muertos a llegar al paraíso. Es asombroso ver la cantidad de estatuillas Jizo que hay!!
Seguimos subiendo y llegamos a una gran explanada en lo alto de la colina dónde se encuentran los edificios principales del templo. El Hasedera alberga una estatua de 9,18m de altura de la diosa Kannon (diosa de la misericordia), con once cabezas, cada una representa una característica de la diosa. Es considerada una de las estatuas de madera dorada más grandes de Japón y se encuentra en el edificio principal del templo, la sala Kannon-do. No se puede hacer fotos en el interior, una lástima porqué la estatua es preciosa!
Junto al Kannon-do, encontramos el Amida Hall, dónde se exhibe una estatua dorada de casi 3m de altura del Buda Amida (tampoco se puede fotografiar el interior).
Y muy cerquita de este edificio, se encuentra un mirador desde el cual se puede ver la ciudad costera de Kamakura, así como sus playas. El mar hoy está bastante picado y hay unas buenas olas para hacer surf. Se ven varios surfistas y alguna vela. Nos llama mucho la atención un cartel que informa del riesgo de comer en esta terraza ya que las gaviotas y los halcones te pueden atacar…
Hay unas buenas vistas desde aquí. Hay un chiringuito de aperitivos y un restaurante. Vemos unas escalerillas que llevan más arriba en la colina y allá que vamos. Éstas llevan hasta un pequeño cementerio y hay unas bonitas vistas del conjunto del templo. Bajamos de nuevo y nos dirigimos hacia la Benten-do, una pequeña sala que contiene una figura de Benzaiten, diosa de la belleza y de la riqueza femenina. Y entramos en la cueva Benten-Kutsu, dónde se pueden encontrar Jizo, Benten y alguna pequeña Kannon. Hay trozos que hay que andar muy agachado para no darte con los techos. Está todo iluminado por velas e inciensos.
Este templo nos ha encantado! es de los más bonitos que hemos visitado y está lleno de Jizo por todas partes, también protector de los viajeros y mi buda favorito!! Bajamos hacia los jardines y salimos del templo hacia la calle principal para volver a la estación Hase, dónde tomamos el tranvía para volver a Kamakura. El tranvía es muy retro, mola! Y está claro que se acerca Halloween porqué hay calabazas por todas partes, hasta en el freno de seguridad de las vías!!!
Comemos unos ramen (1900¥) en un restaurante de la estación JR Kamakura que nos saben a gloria!! Y cogemos de nuevo un tren de la JR Yokosuka Line que en 25 minutos nos deja en Yokohama.
Yokohama 横 浜: Segunda ciudad más grande de Japón, con una población de más de tres millones. Hacia el final del período Edo (1603-1867), en la que Japón mantiene una política de auto-aislamiento, el puerto de Yokohama fue uno de los primeros en abrirse al comercio exterior en 1859. En consecuencia, Yokohama creció rápidamente a partir de un pequeño pueblo de pescadores hasta convertirse en una de las principales ciudades de Japón.
También rehicimos la ruta para esta ciudad y decidimos prescindir del barrio chino y de la zona de Minato Mirai. Cada vez tenemos más claro que habrá un tercer viaje, así que ya volveremos a ver la ciudad con calma en otra ocasión. Hoy nos conformamos con ver la Landmark Tower. Así que cogemos un tren de la JR Negishi Line y paramos en la primera parada, Sakuragicho que nos deja en frente de la torre. Hay muchas formas de moverse por Yokohama (barco, metro, tren y buses…) pero esta es la forma más rápida y económica si solo quieres ver la torre o un trocito del Minato Mirai.
Minato Mirai, es un área urbana junto al mar en el centro de Yokohama, cuyo nombre significa “puerto del futuro” que cuenta con varios rascacielos, centros comerciales, hoteles, centros de convenciones, un parque de atracciones, una de las norias más altas del mundo, un spa, museos y parques. La zona es realmente extensa, pero nosotros tan solo vamos a visitar el edificio más alto de Japón, la Landmark Tower de 296m de altura.
Hay mucha gente en esta zona, jóvenes y salaryman sobretodo. Se nota que estamos muy muy cerca del mar por la brisa que se respira. Nos acercamos hasta la Landmark Tower y es realmente impresionante, no solo por su estructura que destaca del resto de rascacielos si no por su forma.
La torre alberga oficinas, un gran centro comercial a sus pies y el Sky Garden Observatory en lo más alto, a 273m del suelo, siendo el más alto de Japón.
Pagamos la entrada (1000¥ x 2) y entre mil reverencias y saludos de no sé cuantas tías trajeadas llegamos al ascensor. El ascensor de la torre es uno de los más rápidos del mundo, alcanzando una velocidad de 45km/h llevándote a lo alto de sus 70 plantas en 40 segundos. Da la sensación de levantar los pies del suelo y zumban los oídos que dan gusto… una que ya se conoce el dato, saca la cámara en modo vídeo nada más entrar al ascensor, la chica que nos acompaña me sonríe, y cierra las puertas.
El observatorio permite una vista de 360º alrededor del edificio. Hay carteles en inglés que explican cómo era la zona antes de la remodelación y qué es cada edificio o lugar que se puede ver desde aquí. En días despejados se puede contemplar el Fuji, nosotros tan solo intuimos su silueta porque hay una neblina. Se ve como Yokohama y Tokyo están prácticamente unidas… increíble! poder ver los edificios más bajos que éste, con sus helipuertos y la gente en la calle muy muy pequeñita… además hay una luz y un cielo muy bonitos!
Tras tomarnos un café en el bar del mirador y habernos recreado mirando por todos lados, volvemos a bajo y de nuevo parece que se levanten los pies del suelo en el ascensor jaja! Para salir una vez bajas del mirador, tienes que bajar un par de plantas del centro comercial y alucinamos con las escaleras mecánicas… son curvas! no habíamos visto nunca unas así!! y ya nos veis volviendo a subir para volver a bajar grabando jaja! los japos que nos vieran debieron flipar con nosotros pero nos hizo mucha gracia! jajaja!
Volvemos de nuevo hacia la JR Sakuragicho para coger el tren hacia JR Yokohama y allí, tomamos la JR Yokosuka Line hasta Shimbashi. Solo son las 17,30h y hemos pensado en acercarnos al hotel a dejar las mochilas, ir a Akiba a comprar la réflex y de allí ir directos a Ueno dónde hemos quedado con dos foreros para cenar. Así que tras descargar en el hotel, volvemos a JR Shimbashi dónde cogemos la Yamanote Line a Akiba. Esta vez no vamos a dar vueltas puesto que vamos derechos al Yodobashi dónde vimos una oferta muy buena, compramos la cámara y hacemos los trámites para ahorrarnos los impuestos (Dutty Free) y rápidos y veloces nos vamos hacia Ueno, a una parada en la Yamanote.
Nos cuesta un poco orientarnos a pesar de ya conocer la estación del primer viaje porqué habíamos quedado en la salida este, pero vemos que los carteles no marcan con este, norte… si no con lo que hay en cada salida… brújula del móvil en mano salimos por la que creemos que es más al este y allí damos con los dos chicos españoles que habíamos quedado a través del foro, uno de ellos es Milo (perdonad pero no recuerdo el nick del otro chico).
Vamos hacia Ameyoko a cenar… esta zona es muy molona… son unas callecitas bajo y junto a las vías del tren repleta de tiendas, restaurantes y puestos de comida. Vamos a un restaurante de ramen y charlamos un buen rato de aventuras niponas, nos preguntan cosas de ciudades que visitaran y que nosotros ya conocemos y hablamos de viajes en general… Cuando los tipos del bar nos empiezan a mirar mal (en Japón está muy mal vista la sobremesa), salimos y volvemos hacia la JR Ueno, dónde nos despedimos de ellos.
De nuevo Yamanote Line hacia Shimbashi y nos vamos al hotel, aunque no hemos madrugado hoy no hemos parado ni un momento y estamos cansadillos. Toqueteo un poco la nueva adquisición y nos vamos a dormir, mañana nos toca una excursión que nos hace especial ilusión… mañana veremos al gran icono nipón: el Mt Fuji!!!
Anoche no pusimos alarma con la intención de dormir a gusto y rehicimos la ruta del día de hoy… estamos muy saturados de templos y aún nos falta visitar Nikko y tenemos que hacer de “marujos” y poner lavadoras, así que el día de hoy era ideal para dormir un rato más y tomárnoslo con mucha calma. Pero tantos días madrugando y yendo pronto a dormir, a las 9h ya no podemos dormir más. Ponemos lavadoras y bajamos a desayunar bien justillos de tiempo (el comedor está abierto hasta las 9,30h) y volvemos a por la ropa. Me encanta este país, lo he dicho ya?? En los hoteles tienes lavadoras gratuitas que en 30-40’ están listas y secadoras a monedas muy baratijas, en este caso 100¥ el secado. En poco más de 20’ están listas pero como era mucha ropa, ponemos la que ha quedado más húmeda en otra y la acabamos de secar. Volvemos a la habitación y “tendemos” la que está aún húmeda y ponemos el cartel para que no hagan la habitación hoy, si entran las de la limpieza les puede dar algo al ver cómo está la habitación con ropa por todos lados jaja! Cogemos la mochila y nos ponemos en marcha a eso de las 10h y pico.
Vamos a JR Shimbashi, desde dónde cogemos un tren directo de la línea JR Yokosuka Line que en 1h nos deja en Kamakura. En función de los templos que quieras ver de Kamakura hay que parar en la parada anterior, Kita-Kamakura, pero como decía decidimos rehacer la ruta de hoy y vamos directos a Kamakura Sta.
Kamakura 镰仓: Kamakura fue el centro político del país cuando Minamoto Yoritomo eligió la ciudad como sede de su nuevo gobierno militar en 1192. El gobierno de Kamakura continuó gobernando Japón durante más de un siglo. Hoy en día, Kamakura es una pequeña ciudad costera y un destino turístico muy popular. También conocida como la Kyoto Oriental, Kamakura ofrece numerosos templos, santuarios y otros monumentos históricos. Además, sus playas atraen a grandes multitudes durante los meses de verano.
Salimos de la zona JR de la estación y cogemos el tranvía de la compañía Enoshima Electric Railway, Enoden, hasta la parada Hase. Salimos siguiendo las indicaciones hasta llegar al templo del Gran Daibutsu (200¥ x 2). Durante el corto paseo de unos 10 minutos nos llama la atención unas señales que hay pintadas en el suelo en las que pone “SOS Tsunami, Exit” y una flecha hacia el norte. Me quedé muy asombrada, pero luego te paras a pensar que Kamakura es ciudad costera y que hay riesgo de tsunami… cruzaremos los dedos para no tener que usar esas indicaciones…
El gran buda (o Daibutsu) de Kamakura es una estatua de bronce del Buda Amida que se encuentra en los terrenos del templo Kotokuin y cuenta con una altura de 13,35m de altura, siendo la segunda estatua de bronce más alta de Japón (sólo superada por el Buda de Nara). La estatua fue fundida en 1252 y originalmente se encontraba en el interior de una gran sala del templo, pero el edificio fue destruido y reconstruido en varias ocasiones por el azote de tifones y un tsunami en los siglos 14 y 15, y curiosamente la estatua siempre se ha mantenido en pie. Desde 1495, el Buda se encuentra al aire libre.
A pesar de que ya habíamos visitado el de Nara en el primer viaje y que este es algo más pequeño, nos gusta mucho más. No sabemos si por la cara de gran bondad del Buda o por el entorno natural… nos deleitamos con los detalles de la figura.
Lo rodeamos y fotografiamos por todos los ángulos. Nos sentamos un ratito junto a él en unos bancos de piedra que hay, qué maravilla!
Pagamos (20¥ x2) para acceder a su interior. Aunque desde dentro la estatua no parece tan grande como por fuera, es impresionante ver todos esos detalles marcados en la estructura de bronce. Además, tan solo somos 4 personas aquí dentro por lo que podemos estarnos un ratito.
Salimos del buda y vamos hacia la parte trasera de los terrenos. Hacemos parada en boxes y nos bebemos algo fresquito. Recorremos un par de tiendas de souvenirs del templo y compramos una estatua-hucha del Buda para regalarle a unos amigos (3000¥). Volvemos hacia el Buda, echamos la última foto y salimos a la calle principal de nuevo.
A lo largo de la calle principal hay varias tiendas de artesanos, algunas de armas y con souvenirs. Compramos otra figura del Buda para nosotros (5000¥), vamos a tener el piso lleno de Budas!!
Tras unos 5 minutos de paseo mirando las tiendecitas llegamos al Templo Hasedera.
Compramos las entradas (300¥ x 2) y accedemos a sus jardines. El Hasedera fue construido en la ladera de una colina arbolada, los jardines están en la zona inferior y los edificios principales del templo en lo alto de la colina a los que se accede por unas escaleras, las cuales nos sorprenden porqué vemos que están separadas como en dos carriles, uno para subir y otro para bajar. Estos japos son ordenados hasta para esto!! Los jardines cuentan con un gran estanque con pequeñas cascadas que caen de la colina.
En el camino hacia los edificios principales, se encuentra el Jizo Hall, con cientos de pequeñas estatuas de Bodhisattva Jizo, que ayuda a las almas de los niños muertos a llegar al paraíso. Es asombroso ver la cantidad de estatuillas Jizo que hay!!
Seguimos subiendo y llegamos a una gran explanada en lo alto de la colina dónde se encuentran los edificios principales del templo. El Hasedera alberga una estatua de 9,18m de altura de la diosa Kannon (diosa de la misericordia), con once cabezas, cada una representa una característica de la diosa. Es considerada una de las estatuas de madera dorada más grandes de Japón y se encuentra en el edificio principal del templo, la sala Kannon-do. No se puede hacer fotos en el interior, una lástima porqué la estatua es preciosa!
Junto al Kannon-do, encontramos el Amida Hall, dónde se exhibe una estatua dorada de casi 3m de altura del Buda Amida (tampoco se puede fotografiar el interior).
Y muy cerquita de este edificio, se encuentra un mirador desde el cual se puede ver la ciudad costera de Kamakura, así como sus playas. El mar hoy está bastante picado y hay unas buenas olas para hacer surf. Se ven varios surfistas y alguna vela. Nos llama mucho la atención un cartel que informa del riesgo de comer en esta terraza ya que las gaviotas y los halcones te pueden atacar…
Hay unas buenas vistas desde aquí. Hay un chiringuito de aperitivos y un restaurante. Vemos unas escalerillas que llevan más arriba en la colina y allá que vamos. Éstas llevan hasta un pequeño cementerio y hay unas bonitas vistas del conjunto del templo. Bajamos de nuevo y nos dirigimos hacia la Benten-do, una pequeña sala que contiene una figura de Benzaiten, diosa de la belleza y de la riqueza femenina. Y entramos en la cueva Benten-Kutsu, dónde se pueden encontrar Jizo, Benten y alguna pequeña Kannon. Hay trozos que hay que andar muy agachado para no darte con los techos. Está todo iluminado por velas e inciensos.
Este templo nos ha encantado! es de los más bonitos que hemos visitado y está lleno de Jizo por todas partes, también protector de los viajeros y mi buda favorito!! Bajamos hacia los jardines y salimos del templo hacia la calle principal para volver a la estación Hase, dónde tomamos el tranvía para volver a Kamakura. El tranvía es muy retro, mola! Y está claro que se acerca Halloween porqué hay calabazas por todas partes, hasta en el freno de seguridad de las vías!!!
Comemos unos ramen (1900¥) en un restaurante de la estación JR Kamakura que nos saben a gloria!! Y cogemos de nuevo un tren de la JR Yokosuka Line que en 25 minutos nos deja en Yokohama.
Yokohama 横 浜: Segunda ciudad más grande de Japón, con una población de más de tres millones. Hacia el final del período Edo (1603-1867), en la que Japón mantiene una política de auto-aislamiento, el puerto de Yokohama fue uno de los primeros en abrirse al comercio exterior en 1859. En consecuencia, Yokohama creció rápidamente a partir de un pequeño pueblo de pescadores hasta convertirse en una de las principales ciudades de Japón.
También rehicimos la ruta para esta ciudad y decidimos prescindir del barrio chino y de la zona de Minato Mirai. Cada vez tenemos más claro que habrá un tercer viaje, así que ya volveremos a ver la ciudad con calma en otra ocasión. Hoy nos conformamos con ver la Landmark Tower. Así que cogemos un tren de la JR Negishi Line y paramos en la primera parada, Sakuragicho que nos deja en frente de la torre. Hay muchas formas de moverse por Yokohama (barco, metro, tren y buses…) pero esta es la forma más rápida y económica si solo quieres ver la torre o un trocito del Minato Mirai.
Minato Mirai, es un área urbana junto al mar en el centro de Yokohama, cuyo nombre significa “puerto del futuro” que cuenta con varios rascacielos, centros comerciales, hoteles, centros de convenciones, un parque de atracciones, una de las norias más altas del mundo, un spa, museos y parques. La zona es realmente extensa, pero nosotros tan solo vamos a visitar el edificio más alto de Japón, la Landmark Tower de 296m de altura.
Hay mucha gente en esta zona, jóvenes y salaryman sobretodo. Se nota que estamos muy muy cerca del mar por la brisa que se respira. Nos acercamos hasta la Landmark Tower y es realmente impresionante, no solo por su estructura que destaca del resto de rascacielos si no por su forma.
La torre alberga oficinas, un gran centro comercial a sus pies y el Sky Garden Observatory en lo más alto, a 273m del suelo, siendo el más alto de Japón.
Pagamos la entrada (1000¥ x 2) y entre mil reverencias y saludos de no sé cuantas tías trajeadas llegamos al ascensor. El ascensor de la torre es uno de los más rápidos del mundo, alcanzando una velocidad de 45km/h llevándote a lo alto de sus 70 plantas en 40 segundos. Da la sensación de levantar los pies del suelo y zumban los oídos que dan gusto… una que ya se conoce el dato, saca la cámara en modo vídeo nada más entrar al ascensor, la chica que nos acompaña me sonríe, y cierra las puertas.
El observatorio permite una vista de 360º alrededor del edificio. Hay carteles en inglés que explican cómo era la zona antes de la remodelación y qué es cada edificio o lugar que se puede ver desde aquí. En días despejados se puede contemplar el Fuji, nosotros tan solo intuimos su silueta porque hay una neblina. Se ve como Yokohama y Tokyo están prácticamente unidas… increíble! poder ver los edificios más bajos que éste, con sus helipuertos y la gente en la calle muy muy pequeñita… además hay una luz y un cielo muy bonitos!
Tras tomarnos un café en el bar del mirador y habernos recreado mirando por todos lados, volvemos a bajo y de nuevo parece que se levanten los pies del suelo en el ascensor jaja! Para salir una vez bajas del mirador, tienes que bajar un par de plantas del centro comercial y alucinamos con las escaleras mecánicas… son curvas! no habíamos visto nunca unas así!! y ya nos veis volviendo a subir para volver a bajar grabando jaja! los japos que nos vieran debieron flipar con nosotros pero nos hizo mucha gracia! jajaja!
Volvemos de nuevo hacia la JR Sakuragicho para coger el tren hacia JR Yokohama y allí, tomamos la JR Yokosuka Line hasta Shimbashi. Solo son las 17,30h y hemos pensado en acercarnos al hotel a dejar las mochilas, ir a Akiba a comprar la réflex y de allí ir directos a Ueno dónde hemos quedado con dos foreros para cenar. Así que tras descargar en el hotel, volvemos a JR Shimbashi dónde cogemos la Yamanote Line a Akiba. Esta vez no vamos a dar vueltas puesto que vamos derechos al Yodobashi dónde vimos una oferta muy buena, compramos la cámara y hacemos los trámites para ahorrarnos los impuestos (Dutty Free) y rápidos y veloces nos vamos hacia Ueno, a una parada en la Yamanote.
Nos cuesta un poco orientarnos a pesar de ya conocer la estación del primer viaje porqué habíamos quedado en la salida este, pero vemos que los carteles no marcan con este, norte… si no con lo que hay en cada salida… brújula del móvil en mano salimos por la que creemos que es más al este y allí damos con los dos chicos españoles que habíamos quedado a través del foro, uno de ellos es Milo (perdonad pero no recuerdo el nick del otro chico).
Vamos hacia Ameyoko a cenar… esta zona es muy molona… son unas callecitas bajo y junto a las vías del tren repleta de tiendas, restaurantes y puestos de comida. Vamos a un restaurante de ramen y charlamos un buen rato de aventuras niponas, nos preguntan cosas de ciudades que visitaran y que nosotros ya conocemos y hablamos de viajes en general… Cuando los tipos del bar nos empiezan a mirar mal (en Japón está muy mal vista la sobremesa), salimos y volvemos hacia la JR Ueno, dónde nos despedimos de ellos.
De nuevo Yamanote Line hacia Shimbashi y nos vamos al hotel, aunque no hemos madrugado hoy no hemos parado ni un momento y estamos cansadillos. Toqueteo un poco la nueva adquisición y nos vamos a dormir, mañana nos toca una excursión que nos hace especial ilusión… mañana veremos al gran icono nipón: el Mt Fuji!!!
**Encontrarás el diario completo y otros más en mi blog:http://creciendoconmisviajes.wordpress.com/