Día 1. 23 diciembre 2011
Llegamos a la casa particular de Fabiola en la zona de Vedado, donde nos hospedábamos alrededor de las 15:00, el taxi nos cobró $20 desde el aeropuerto.
Nos fuimos a conocer el lugar, primero al Hotel Nacional de Cuba, para comprar la entrada al Cabaret Paricient, nos tomamos fotos con carros viejos; luego a almorzar cerca del Malecón un pescado que no estuvo bueno y probar la cerveza Bavaria.
En la noche fuimos al Cabaret, muy bonito espectáculo.
Día 2 24 diciembre 2011[/align]
Nos levantamos temprano, la señora de la casa nos regalaba una taza de café mu fuerte pero buenísima nos fuimos a andar por las calles, hacia la Habana Vieja, tomamos un bus que era para cubanos, es importante acotar que en la Habana el servicio de transporte al igual que la moneda esta divido entre cubanos y extranjeros.
Llegando a la Habana Vieja, pasamos por la entrada del Barrio Chino, fuimos al Capitolio, pasamos por bar la Floridita, Museo 28 de setiembre, nos cruzamos con calle la Amargura, llegamos a la Plaza Vieja, de ahí hacia la Capitania.
Continuamos el recorrido pasamos por la iglesia Ortodoxa, luego a la iglesia de San Francisco y a su antiguo convento.
Seguimos y pasamos el Castillo de la Real Fuerza, el anfiteatro de la Habana, pasamos a almorzar y disfrutar de unas cervezas, en esa ocasión probamos la Cristal y la Bucanero (mejor la Cristal).
Despúes de disfrutar del almuerzo, continuamos nuestro camino hacia el Malecón.
Conocimos a un chico de China que estaba trabajando en Cuba, seguimos el recorrido por las calles de la Habana Vieja, pasamos por la Bodegita del Medio la cual es muy famosa, no obstante no entramos porque estaba muy lleno, cenamos en esa parte de la ciudad y en la noche tomamos un taxi de vuelta a la casa.
Día 3 25 diciembre 2011[align=center]
Nos levantamos temprano para ir a conocer la zona de Miramar, en esa parte de la Habana se encuentran la mayoría de embajadas, tomamos un taxi para llegar.
Lo primero fue entrar al Acuario Nacional de Cuba, hacen shows con delfines y leones marinos.
Despúes del acuario, visitamos un centro comercial cercano para almorzar, la tarde la pasamos frente al mar en unas sillas de un hotel en la zona.