A pesar de tener que madrugar, este día nos levantamos muy animados porque nos esperan las Kasbas, algo que nos ilusiona mucho del viaje. A las 7:30h ya estaba Abrrahim esperando frente a Chez Chengrouni. Una vez en el taxi, comenzaba la excursión hacia Ouarzazate.
Conforme nos alejábamos de Marrakech, se abría ante nosotros un paisaje verde, la zona del Valle de Ourika, con riachuelos, también paramos para ver más de ceraca los poblados bereberes (algunos ya están deshabitados).
Conforme nos alejábamos de Marrakech, se abría ante nosotros un paisaje verde, la zona del Valle de Ourika, con riachuelos, también paramos para ver más de ceraca los poblados bereberes (algunos ya están deshabitados).
La carretera continua y el paisaje sigue sorprendiendo, los valles empiezan a ser cada vez más profundos. A lo largo de la carretera hay muchos puestos para comprar fósiles y minerales. Atravesamos pueblecitos y al ser domingo, en algunos había mercado semanal. Paramos en un mirador para contemplar más de cerca las montañas nevadas y la altura de los valles. No imaginábamos estos paisajes en el sur de Marruecos, estábamos muy sorprendidos. Continuamos viaje y subimos el puerto de montaña de Tizi-n-Tichka con 2260 metros de altitud. Una vez en lo alto, paramos para ver la carretera que habíamos recorrido. También se apreciaban en la montaña las cascadas del deshielo.
Una vez que atraviesas el puerto de montaña el paisaje cambia por completo, se vuelve más desértico y aparecen unas montañas rojizas. La carretera también cambia y comienza a tener menos curvas (cosa que se agradece bastante). Ya quedaba poquito para llegar a nuestro primer destino. Encontramos un desvío hacia Aït Benhaddou (hora de llegada 11:30h, haciendo paradas cortas). La carretera hasta llegar hasta allí es estrechita (son 10 kms). Se pueden apreciar la cordillera del Atlas nevada. Cuando llegas a Aït Benhaddou, primero aparcas en una zona donde hay un hotel, tiendecitas, un restaurante. En el restaurante hay un mirador donde salen unas fotos muy bonitas de la Kasba (para los más entendidos, en realidad se trata de un Kasur, es decir, un conjunto de kasbas, porque la kasba en sí solamente es la construcción con los cuatro torreones).
Caminamos por una cuestecita y ya nos econtrábamos en la ladera, frente al río Ouarzazate, contemplando aquella maravilla, que ha sido declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO, y no me extraña, porque cuando estas frente a ella, parece que has retrocedido cientos de años. El río es poco caudaloso, se puede cruzar a pie si te remangas los pantalones, pero a nosotros nos hacía mucha ilusión cruzarlo en burro (además el agua está bastante fresquita). Le pagamos a los chicos que nos cruzaron 100 Dhrs los dos por cruzarnos ida y vuelta, son chicos del Sahara que viven de eso y la verdad que muy simpáticos.
Una vez cruzamos el río, nos dispusimos a pasear por las callejuelas (la entrada cuesta 10Dhrs por persona). Este pueblo fortificado es la Kasba mejor conservada del Atlas. También es la más famosa por ser una localización cinematográfica muy popular, ya que ha sido inmortalizada en decenas de películas, entre ellas Lawrence de Arabia, La Momia, Gladiator, Alejandro Magno. Las calles están muy bonitas, hoy viven allí 10 familias. Hay tiendas de artesanía, compramos unos imanes de barro hechos por un artesano que eran kasbas (20Dhrs cada uno). También compramos una chilaba típica bereber por 60 Dhrs.
Una vez visitamos el pueblo, y tras estar regateando con un saharaui sobre unos fósiles (al final no llegamos a un acuerdo ,una verdadera lástima). Salimos de la Kasba y cruzamos el río subidos en nuestros respectivos burros. Ya en la zona del aparcamiento compramos en una tiendecita unos refrescos y agua para Adbrrahim, hacía calorcito. Los refrescos buenísimos (Hawai Tropical).
La visita a Aït Benhaddou nos había encantado . Pusimos rumbo a Ouarzazate, ya sólo quedaban 20kms. Ouarzazate es una ciudad de unos 60.000habitantes. Cuenta con numerosos hoteles y ofrece multitud de actividades: paseo en camello, quads y visitas a estudios de cine como los de "Atlas Corporation Studios". En Ouarzazate se visita la Kasba Taurit (también cobran 10Dhrs por persona). Si quieres puedes contratar un guía para que te explique la Kasba (nosotros prescindimos de él, porque nos hacía ilusión ir descubriéndola poco a poco). Dentro de la Kasba es como un laberinto, está muy bien conservada y pasas de unos edificios a otros, pasando por patios interiores, las ventanas de los torreones.
Cuando terminamos la visita ya era la hora de la comida. Adbrrahim nos recomendó un restaurante frente a la Kasba Taourit (Restaurante la Kasbah), que tenía un menú del día por 90 Dhrs (ensalada o harira, cuscus o tajinés y té con dulces o fruta). Como en todos los sitios donde fuimos, la comida muy buena y el sitio está muy bonito, tiene dos terrazas y salas interiores (nosotros comimos en el interior porque hacía algo de calor). Después de comer pusimos rumbo a Marrakech.
En otras tres horitas ya estábamos de regreso en Marrakech. Eran las 19h y estaba oscureciendo. Nos despedimos de Adbrrahim, le dimos propina porque la verdad es que se había portado súper bien con nosotros y nos quedamos con su tarjeta, ya que esperamos volver a Marrakech y si tenemos que hacer alguna excursión (nos hubiera encantado haber tenido tiempo para visitar las cascadas de Ouzoud) no dudaremos en llamarle. . En la calle Rue Agnoau, aprovechamos para tomar el delicioso zumo de caña de azucar que tanto se nombraba en el foro (está súper bueno, y sólo por 6Dhrs), también nos tomamos unos crepes típicos con miel en el mismo sitio (por 4 Dhrs cada uno). Pusimos rumbo al Riad y a descansar que había sido un día lleno de emociones.