Llegamos a Varadero pasadas las nueve y media, y en seguida nos ofrecieron taxi. Después de que nos pidieran 12 euros que ni de coña iba a pagar porque nuestro hotel estaba bastante cerca y regatear un par de veces nos fuimos al hotel por 6 cuc.
El hotel elegido fue el BeLive Las Morlas, un resort de calidad muy normalita, pero que no nos defraudó porque por el precio que pagamos y después de leer los comentarios en tripadvisor sabíamos qué nos íbamos a encontrar. Nos costó 275 euros 3 días en Todo Incluido, así que era de esperar un sitio normal y corriente con una oferta gastronómica y hostelera de calidad tirando a baja. Pero para sólo dos días queríamos algo así, porque otros que había mirado se disparaban bastante de precio y para el provecho que le íbamos a sacar al hotel no nos merecía la pena. Eso sí, no lo recomendaría para alguien que quiera pasar allí una semana, porque es un poco cutre. Un punto muy a favor del hotel y que es algo que nosotros íbamos buscando, es que se puede llegar en diez-quince minutos a pie al pueblo, cosa que en muchos otros hoteles es imposible y hay que depender del bus o el taxi.
Aqui nos encontramos por primera vez con un personal bastante menos agradable de lo que estábamos viendo hasta el momento. Cuando entramos a cenar nos dijo un camarero que sólo había agua para cenar, nos pareció raro, pero bueno, vale, pues agua.. Cuál es nuestra sorpresa cuando un ratito más tarde entran unas chicas que nos parecían empleadas, y vemos que se sirven coca-cola!! No fue el hecho de no haber podido beber otra cosa que agua, fue el hecho en sí lo que nos dejó alucinando... Los días siguientes comprobamos nuevamente que el personal del restaurante era con diferencia lo peor del hotel en cuanto a modales.
Después de cenar nos acercamos un ratito al espectáculo y nos tomamos algo pero nos recogimos pronto que estábamos cansado
El hotel elegido fue el BeLive Las Morlas, un resort de calidad muy normalita, pero que no nos defraudó porque por el precio que pagamos y después de leer los comentarios en tripadvisor sabíamos qué nos íbamos a encontrar. Nos costó 275 euros 3 días en Todo Incluido, así que era de esperar un sitio normal y corriente con una oferta gastronómica y hostelera de calidad tirando a baja. Pero para sólo dos días queríamos algo así, porque otros que había mirado se disparaban bastante de precio y para el provecho que le íbamos a sacar al hotel no nos merecía la pena. Eso sí, no lo recomendaría para alguien que quiera pasar allí una semana, porque es un poco cutre. Un punto muy a favor del hotel y que es algo que nosotros íbamos buscando, es que se puede llegar en diez-quince minutos a pie al pueblo, cosa que en muchos otros hoteles es imposible y hay que depender del bus o el taxi.
Aqui nos encontramos por primera vez con un personal bastante menos agradable de lo que estábamos viendo hasta el momento. Cuando entramos a cenar nos dijo un camarero que sólo había agua para cenar, nos pareció raro, pero bueno, vale, pues agua.. Cuál es nuestra sorpresa cuando un ratito más tarde entran unas chicas que nos parecían empleadas, y vemos que se sirven coca-cola!! No fue el hecho de no haber podido beber otra cosa que agua, fue el hecho en sí lo que nos dejó alucinando... Los días siguientes comprobamos nuevamente que el personal del restaurante era con diferencia lo peor del hotel en cuanto a modales.
Después de cenar nos acercamos un ratito al espectáculo y nos tomamos algo pero nos recogimos pronto que estábamos cansado
Martes 5.
Después de las lluvias y tormentas del día anterior, volvió a aparecer nublado, así que mis ganas y esperanzas de playita, se fueron al garete... Había que buscar un plan B, así que cogimos el autobús "hop on hop off" que por 5 cuc por persona puedes aprovechar todo el día para recorrer la península. Es una forma muy buena de moverse si se van a hacer varios viajes, porque un taxi sale mucho más caro. En esta web aparece información tanto de este bus como del de Viñales que como comenté anteriormente no llegamos a ver en funcionamiento www.hicuba.com/ ...istico.htm
Primero nos dimos una vuelta desde el hotel hasta el final, allí bajamos aunque parecía que no había mucho que ver, y así fue... Así que al cabo de un ratito cogimos otro bus. En el plano y en la guía había leído sobre el cactus El Patriarca y decidimos ir a verlo. Fue la primada del día, no lo recomiendo en absoluto!! Además de que no está muy bien señalizado y desde donde nos dejó el bus hay un como unos 20 minutos a pie, al llegar vemos que hay que pagar 2 cuc por persona. Nos pareció un poco fuerte, pero bueno, ya que estábamos. Y tontos de nosotros pensamos que sería una especie de minijardín botánico o algo así, pero no. Hay un camino de arena, al cabo de un par de minutos te encuentras a un chico en una mesa, que es el "cobrador" y allí casi al lado el cactus rodeado por una cerca de madera. Nos quedamos con cara de tontos, y más viendo que el pobre cactus tiene el tronco lleno de inscripciones!! Así que para cobrar está protegido, pero para poco más... El chico en seguida se levantó, que si de qué equipo sois, que si de qué país... buscando la propinilla, pero ya bastante quemados estábamos de pagar 4 cuc por aquello como para soltar más dinero. En resumen, no recomiendo para nada ir a verlo.
Primero nos dimos una vuelta desde el hotel hasta el final, allí bajamos aunque parecía que no había mucho que ver, y así fue... Así que al cabo de un ratito cogimos otro bus. En el plano y en la guía había leído sobre el cactus El Patriarca y decidimos ir a verlo. Fue la primada del día, no lo recomiendo en absoluto!! Además de que no está muy bien señalizado y desde donde nos dejó el bus hay un como unos 20 minutos a pie, al llegar vemos que hay que pagar 2 cuc por persona. Nos pareció un poco fuerte, pero bueno, ya que estábamos. Y tontos de nosotros pensamos que sería una especie de minijardín botánico o algo así, pero no. Hay un camino de arena, al cabo de un par de minutos te encuentras a un chico en una mesa, que es el "cobrador" y allí casi al lado el cactus rodeado por una cerca de madera. Nos quedamos con cara de tontos, y más viendo que el pobre cactus tiene el tronco lleno de inscripciones!! Así que para cobrar está protegido, pero para poco más... El chico en seguida se levantó, que si de qué equipo sois, que si de qué país... buscando la propinilla, pero ya bastante quemados estábamos de pagar 4 cuc por aquello como para soltar más dinero. En resumen, no recomiendo para nada ir a verlo.
Después nos volvimos al bus con la idea de parar en la Cueva de Ambrosio, que había leído en la guía que tenía pinturas precolombinas. La entrada son 5 cuc y se realiza con guía. Coincidimos con otra pareja e hicimos la visita los cuatro. El guía es muy majo y agradable y se hace muy interesante la visita. Es una cueva pequeña, pero como él nos iba explicando y comentando estuvimos unos 40 minutos. Esta visita sí la recomiendo, además que tuvimos la suerte de ver también a sus principales moradores, los murciélagos. Aunque para tranquilidad de todos cabe decir que son una especie vegetariana y se alimentan de frutas, semillas, etc.
Finalizada la visita nos fuimos al hotel a comer y después a descansar un rato. Hacia media tarde nos volvimos a coger el bus para dar una vuelta por el pueblo. Fuimos primero hasta el otro extremo, donde empieza la península y allí vimos unos simpáticos habitantes
Después volvimos hasta la mitad aproximadamente en el bus y nos bajamos ya para callejear. Lo primero que hicimos fue asomarnos a la playa y pensar que a ver si por fin al día siguiente podríamos disfrutar por fin de ella!
Fuimos a varios mercadillos y paseamos tranquilamente “sorteando” a los cláxones de los taxistas en busca de clientes…
Pasamos por delante de una pequeña iglesia, el monumento a los mártires, etc.
Apurando el paso viendo que cada vez se ponía más oscuro nos acercamos también al parque Josone, muy bonito. Tiene un estanque, hay varios restaurantes y cafeterías, etc. Estuvimos un rato paseando, pero empezó a llover, así que nos tuvimos que ir hacia la parada del autobús.
De ahí al hotel a pasar el rato hasta la cena. Probamos a ir al hotel de enfrente para comprar una tarjeta de wifi y conectarnos, pero nos avisaron en recepción que ese día no estaba funcionando. Así que de vuelta al hotel a pasar el rato, cenar, otra vez a tomar algo viendo el espectáculo (muy flojito) y a dormir esperando levantarnos con sol!
Miércoles 6.
Por fin amaneció soleado así que después del desayuno nos fuimos pitando para la playa. Se estaba de maravilla, la arena fina, el agua turquesa... una gozada!! Cuando salíamos de darnos un baño uno de los empleados nos comentó que con el T.I. teníamos derecho a un paseo en catamarán así que no nos lo pensamos y allá que nos fuimos. Una gozada ir navegando sobre esas aguas turquesas.
Después fuimos a comer y volvimos a la playa, pero ya viendo unos nubarrones que anunciaban tormenta... así que al cabo de una hora o así se empezaron a oir unos buenos truenos y salimos por patas, con el tiempo justo de no mojarnos. Cayó una buena tormenta, así que adiós playa otra vez. Una pena, la verdad, ver las tumbonas recogidas, la arena empapada… Llevábamos unos últimos días bastante pasados por agua y no disfrutamos casi nada de la playa.
Para matar el tiempo nos fuimos al hotel de enfrente a ver si había más suerte y sí que nos pudimos conectar para dar señales a la familia y ver qué tal iba el mundo. El precio, el más caro del viaje, 5 cuc la tarjeta de una hora.
Después como los días anteriores, cena, a tomar algo, y con mucha pena ya pensando que al día siguiente ya nos tocaba volver.
Jueves 7.
Como hasta las 12 no había que dejar la habitación y el transfer al aeropuerto era a las 15:30 h. nos fuimos a aprovechar la playa un par de horitas. Después de hacer el check out nos fuimos al pueblo para comer por allí, pasamos por el lado del Quijote y le dijimos que ese día nos tocaba ya volver para la tierra, muy a pesar nuestro…
Para comer decidimos por un italiano dentro del parque Josone. Comimos un par de pizza que si bien no eran una maravilla porque en Cuba yo creo que por la harina las masas tienen una consistencia diferente, se dejaban comer. Después un pequeño paseo hasta el hotel, y a esperar el bus que nos alejaría de un país que nos había encantado.
Por cierto que recomiendo coger el bus con una horita más de margen, para no ir con los nervios de si surge un imprevisto. Nuestro vuelo era a las 21:00 y el bus mejor cogerlo sobre las 14-14:30. Al llegar al aeropuerto nos esperaba una cola tremenda de facturación, una hora y media aproximadamente que se nos hizo eterna por el calor que hacía en el aeropuerto.
Después de facturar, compramos unas botellas de ron en la tienda y casi sin tiempo de espera empezó el embarque, dejando atrás Cuba, un destino que sin estar entre mis favoritos a priori, me dejó muy buen sabor de boca y resultó un viaje sin duda inolvidable.