Blogs / Diarios 
En febrero tenía todos los findes muertos, y es que ahora solo tengo una asignatura en la carrera que no es demasiado complicada y el lío lo tengo por semana (prácticas, beca de colaboración...) Así que hablé con mi mejor amigo que estudia en Salamanca, y a quien debía una visita desde hacía tiempo y nos pusimos de acuerdo para que bajarla a verlo el fin de semana del 19 al 21. Pillé los billetes de ALSA con oferta (20€ ida y vuelta) y así iba a estar allí un par de noches, pero solo un día completo (llegaba el viernes a las 20:30 y me volvía el domingo a las 14), así que reservamos el sábado para hacer una visita turística a Salamanca, aunque se nos pegaron las sábanas y tuvo que ser un paseo por la tarde por el precioso centro de la ciudad. Comentar que Salamanca y su provincia merecen un viaje más a fondo, así que este paseo es casi que una introducción a un viaje futuro en el que explore más a fondo la ciudad y sus interesantísimos alrededores.
Como siempre empiezo con una explicación histórica de la ciudad, la más importante a nivel universitario de todo el país, hecho que se nota nada más pisar la calle, y es que la mayoría de gente que te encuentras son jóvenes, una gozada. Al ser una historia tan extensa, y esto un mero paseo os dejo algunos datos de interés sobre la ciudad, para no hacerlo muy pesado:
• Cristóbal Colón reunió en el Claustro de la Universidad de Salamanca un consejo para ayudarle en su primer viaje a las Indias (que desembocó en el Descubrimiento de América)
• Aquí se creó la primera gramática del castellano, en 1492 de la mano de Antonio de Nebrija; iniciándose así el Siglo de Oro y siendo el primer estudio de las reglas de una lengua europea aparte del latín
• El mismo Antonio de Nebrija fue la primera persona del mundo en reclamar los derechos de autor, y lo hizo aquí, en Salamanca
• Aquí estudió Beatriz Galindo, la primera universitaria del mundo
• En esta línea esta Universidad dio trabajo a la primera catedrática de la historia: Lucía de Medrano, en el curso 1508/09
• Aquí estudió Hernán Cortés antes de irse a América y conquistar el Imperio Azteca
• En contra de Cortés surgió aquí la Escuela de Salamanca, que con Francisco de Vitoria a la cabeza reformuló el Derecho natural y sentó las bases del Derecho Internacional y el Derecho de Gentes Moderno.
• Fueron matemáticos de la Universidad de Salamanca quienes propusieron al Papa Gregorio XIII el calendario gregoriano, utilizado a día de hoy en todo el mundo.
• En la USal trabajó el primer bibliotecario a sueldo de la historia.
• La estancia de Miguel de Cervantes en la Universidad influyó de forma notable en su obra, apareciendo la ciudad en varios de sus libros, incluyendo el Quijote (el Bachiller Sansón Carrasco, la Tía Fingida y el Licenciado Vidriera son salmantinos)
Toda esta historia hace que la Ciudad Vieja de Salamanca sea Patrimonio de la Humanidad desde 1988 en virtud de 3 criterios:
· Criterio I (Representar una obra maestra del genio creativo humano) al ser la Plaza Mayor un logro único en el Barroco y siendo el corazon de la Ciudad Dorada. Esta obra de arte del siglo XVIII es uno de los mejores ejemplos de arquitectura urbana del siglo XVIII en Europa
· Criterio II (Testimoniar un importante intercambio de valores humanos a lo largo de un periodo de tiempo o dentro de un área cultural del mundo, en el desarrollo de la arquitectura, tecnología, artes monumentales, urbanismo o diseño paisajístico) al ser uno de los centros esenciales del arte churrigueresco, un estilo de considerable influencia en el siglo XVIII en la Península Ibérica y Latinoamérica.
· Criterio IV (Ofrecer un ejemplo eminente de un tipo de edificio, conjunto arquitectónico, tecnológico o paisaje, que ilustre una etapa significativa de la historia humana) al tener una de las mejores instituciones académicas de la Europa Medieval, pese a estar fundada la universidad después de la creación de otras universidades de referencia europeas como Bolonia, Paris u Oxford. A día de hoy se conserva una herencia admirable que ilustra las diversas funciones de una universidad en el Mundo Católico.
No preparé nada, y es que al tener anfitrión "local" él se ocupaba de enseñarme la ciudad, así que después de comer (al final de la etapa pongo un par de sitios que me gustan, no es la primera vez que bajo a Salamanca) empezamos a patear el centro. Veníamos desde la zona de Van Dyck y entramos al casco histórico, claramente delimitado por amplias avenidas, por la Plaza de Gabriel y Galán, que acoge una biblioteca municipal delante de la cual nos encontramos con una estatua de este poeta de finales del siglo XIX.
Nos metemos al centro por la conocida Calle de Toro, una de las arterias salmantinas, y es que une la Plaza España con la Plaza Mayor. Está realmente animada y tiene una buena cantidad de tiendas y comercios.
Aquí está la Iglesia de San Juan de Sahagún, construida en 1896 en estilo neorrománico en honor del patrón de la ciudad.
Nos vamos acercando a la plaza central salmantina y mucha gente pasea al sol del mediodía, que no calienta mucho pero deja un día agradable para patear.
Y entramos a la espectacular Plaza Mayor, ya había estado aquí varias veces (incluyendo la noche anterior), pero es un lugar que impresiona. Es lo más conocido de la ciudad con toda la razón del mundo.
Fue diseñada por Alberto Churriguera, quien creó la tendencia barroca del churrigueresco (Salamanca es la ciudad con más obras de arte de este estilo) en el siglo XVIII, y rapidamente se convirtió en el centro de la vida social de la ciudad.
En los arcos que unen las columnas hay medallones con caras de reyes de la historia española. Como no, mi amigo me deja buscar el de Don Pelayo, que tiene más que localizado (es de los míos jeje)
Como podéis ver la plaza impresiona, y es de los lugares más bonitos que os podáis encontrar no solo en Salamanca o en Castilla, sino en toda España.
Salimos de la plaza por la Rua Mayor, la calle principal del centro histórico, y es que une la Plaza Mayor con la Catedral. Al principio de la calle está además la Iglesia de San Martín de Tours, románica.
A medio camino está la Casa de las Conchas, aunque a la Rua da la fachada trasera. Tras ella asoman las torres de la Iglesia de la Clerecía
Esta iglesia es el Antiguo Real Colegio del Espíritu Santo, de estilo barroco y construido entre los siglos XVI y XVII
Y esta es la fachada principal de la conocida Casa de las Conchas, un palacio gótico construido entre la última década del siglo XV y la primera del XVI. Tiene varias conchas levantadas, y es que cuenta la leyenda que bajo una de ellas hay un tesoro, por lo que algún salmantino que otro probó suerte.
Y de esta esquina sale una de las calles más curiosas de la ciudad, la Calle de los Tres Coños, luego os cuento porqué. Quedaros con la ubicación del inicio, entre la Casa de las Conchas y La Clerecía.
Nos desviamos de la Rua para ir a la Universidad de Salamanca, y su edificio más conocido, el de los Colegios Mayores, con una trabajadísima fachada construida entre los siglos XIV y XV y que acoge la archiconocida rana (que es casi imposible de encontrar, ya os lo aviso, pero no desvelo su posición, tiraros vuestro rato buscándolo y si no preguntar a alguien jeje) Se puede visitar el interior, pero no hay tiempo, lo de hoy es un paseo, evidentemente cuando venga con más calma entraré.
Este edificio está en la Calle Libreros, empedrada y verdaderamente bonita.
[img][/img]farm2.staticflickr.com/ ...5783_z.jpg
Nos acercamos desde aquí (el centro de Salamanca es pequeño, está todo a tiro de piedra) a la Catedral, que aún no se deja ver al completo. Hay que comentar que en esta ciudad es erróeno hablar de Catedral en singular, y es que tiene dos (la Nueva y la Vieja) que están pegada una a la otra, dando lugar a un templo de dimensiones colosales.
Lo primero que vemos es la puerta, barroca, y con una decoración impresionante. Es preciosa (comentar que no entramos tampoco, fue un paseo por los exteriores, ya entraré)
La Catedral Nueva (la más visible) se construyó en los siglos XVI y XVII, y está a caballo entre el Renacimiento y el Barroco, siendo un templo muy bonito, es una gozada pasear alrededor de él.
En esta fachada hay un relieve muy característico, un astronauta, y es que a un restaurador en 1992 le dejaron dejar una marca personal, y esto esculpió; pero costó llegar a esta conclusión y se llegaron a creer todo tipo de leyendas acerca de la existencia de un astronauta en un templo de quinientos años de historia.
Por su parte la Catedral Vieja se construyó entre los siglos XII y XIV, estando a caballo entre Románico y Gótico. Es así el conjunto catedralicio un crisol de estilos artísticos, desde el Románico al Barroco en su totalidad, no en reformas que modifican elementos ya existentes, siendo un templo (y es que los dos están unidos) único.
Las Catedrales ocupan mucho espacio, estando rodeadas de un conjunto monumental muy bonito y que enriquece mucho la Plaza de Anaya, donde se encuentran los templos. Destaca por encima de todos el Colegio de los Anaya
Pero también hay bonitas estatuas y palacios.
Como veis el entorno ayuda a dar encanto y monumentalidad al conjunto catedralicio.
Seguimos el paseo y pasamos por la pequeña Plaza de los Leones, desconocida a nivel turístico, pero me pareció encantadora.
Desde la parte trasera la Torre de la Catedral luce muy bonita.
Y llegamos al Huerto de Calixto y Melibea, en honor a los protagonistas de La Celestina, que tiene una estatua junto a la puerta.
Se construyó en 1982 para conmemorar que fuera aquí donde Fernando de Rojas recreó esta obra teatral, y la verdad que es un rincón precioso y muy tranquilo.
Pero lo mejor son las vistas, tanto de la Catedral sobre los árboles de este jardín como de la parte baja de la ciudad, y es que está en lo alto de las antiguas murallas. Lo que no se ve es el Puente Romano sobre el Tormes, nuestro siguiente destino.
Y bajamos ya hacia el río y caminamos por el Paseo del Rector Esperabé, el sol está en lo alto pero claro, es febrero, el día está la mar de agradable. Vemos en lo alto el muro del Huerto, y un poco más alante la conocida Casa Lis, un museo de arte moderno con un ventanal bastante conocido.
Llegamos a la calle principal que baja del centro, Tentencio, que desemboca en este amplio paseo en una bonita plazuela. El nombre de esta calle se debe a una leyenda del siglo XV, cuando San Juan de Sahagún, el patrón de la ciudad, se encontraba paseando por aquí cuando se escapó un toro de lidia que empezó a sembrar el caos hasta dar con él; erguiéndose el santo mientras decía: ¡Tente, necio! y obedeciéndole el toro de forma inmediata. Puede ser verdad, y es que si el toro venía del río había subido desbocado ya una buena cuesta por lo que estaría agotado, o una leyenda, la verdad no se sabe a ciencia cierta.
Justo enfrente está el Monumento al Lazarillo de Tormes, el célebre buscavidas salmantino que intentaba sobrevivir en el complicado siglo XVI pasando de amo en amo a base de triquiñuelas. Como todos sabéis esta obra transcurría en la ciudad salmantina, como su propio nombre indica. En esta estatua aparece con el ciego avaricioso, su primer y más conocido amo.
A su lado está el verraco de piedra, que también esta muy relacionado con esta obra literaria, puesto que es contra el que el ciego le pega un fuerte golpe en la cabeza al inocente Lázaro (inocente al principio de la obra, claro)
Detrás de las dos estatuas se encuentra la Iglesia de Santiago del Arrabal, un templo modesto pero de los más antiguos de la ciudad, y es que está construída en el siglo XII; siendo románico.
Cruzamos el Río Tormes por el Puente Romano, uno de los símbolos de la ciudad. Edificado por Trajano en el siglo I fue una pieza clave para la Ruta de la Plata, que unía el norte y el sur de Iberia (Asturica Augusta -Astorga- con Emerita Augusta -Mérida-, aunque luego fuera ampliada hasta el Puerto de Gijón por el norte y Sevilla hacia el sur); casualmente la ruta que seguí para llegar a Salamanca este fin de semana.
Está muy reformado, y no parece que sea un puente con dos mil años de historia al caminar por él. Lo mejor de cruzarlo son las vistas al centro.
Y bajo nosotros baja muy cargado el Tormes, se notan las lluvias de los últimos días.
Y al llegar a la ribera sur tenemos una de las postales más conocidas de Salamanca, con el Puente Romano en primer término y las torres de la Catedral sobresaliendo sobre el centro histórico.
Vamos volviendo hacia casa a comprar la cena y ver el Sporting, que se nos había pasado la tarde volando. Llegamos a la Catedral y la rodeamos por el otro lado, pasando por debajo de la Torre Medieval.
Vamos yendo hacia la Rua Mayor y pasamos por un precioso rincón.
Caminamos la calle principal, con muchísima gente, y entro a una tienda a comprar algún recuerdo.
Y volvemos a la Calle Compañía, conocida como la de los Tres Coños. El porqué es sencillo, el primero es por decir ¡Coño, qué edificios! al pasar entre la Casa de las Conchas y la Clerecía (repito la foto de antes)
El segundo es porque la calle se va estrechando, y la gente suele decir ¡Coño, qué calle!
Y el tercero es que por la forma de la calle siempre entra una ráfaga de aire desde abajo ¡Coño, qué viento!
Y la calle acaba en la Plaza Monterrey, donde se encuentra el Palacio de Monterrey, propiedad de la Casa de Alba y uno de los principales ejemplos de plateresco en nuestro país.
Y con esto dabamos por cerrado nuestro paseo por Salamanca, un muy buen aperitivo de cara a un futuro viaje, y es que me quedé con muchas ganas de visitar todos los interiores que prometen mucho la verdad. Y os dejo unos consejillos de la ciudad que no puse en la etapa, pero claro, estuve un finde no una tarde.
DONDE COMER
Salamanca es una ciudad muy barata para salir a tapear, se nota mucho que es universitaria. Hay muchísimos sitios baratos donde comer o cenar de tapeo, os recomendaré dos (donde me llevó mi amigo):
· Bambú (Calle del Prior; justo al salir de la Plaza Mayor por una de las puertas laterales): En pleno centro, tiene una buena oferta de tapas (abundantes y ricas) y cañas, valen las dos cosas 1,50€ y está realmente bien.
· Rufo's (C/Van Dyck; está un poco más arriba de la Avenida de Portugal): Está alejado del centro, en una zona de mucho tapeo (Van Dyck), es barato y tiene tapas bastante buenas. Íbamos a ir a más bares, pero nos gustó mucho y nos quedamos.
PARA SALIR
No soy un gran experto en el tema, pero la zona de salir está en torno a la Gran Vía y las calles que suben hacia la Plaza Mayor. Me gustó mucho el Gran Café Moderno, un pub con buena música con dos pintas de cerveza por 2.80€ (me sentía un poco como en Budapest jeje) Por la zona hay muchos bares de copas con distintos ambientes, basta con ir probando. Como digo no soy un experto, me dejaba llevar por mi amigo
Y ya sabeis, si os gustó dejar los puntinos, y si quereis sugerir o aconsejarnos alguna ruta o lugar que ver, no dudeis en hacerlo.
Un saludo viajeros!
Volver al índice de España: www.losviajeros.com/ ...hp?e=33305
Etapa anterior
Últimos comentarios al diario: 
Tema: 
Ir a tema del foro
