Nos levantamos sobre las 8.30 y preparamos nuestras mochilas para ir de excursión a Borobudur. Decidimos hacerlo por nuestra cuenta porque teníamos tiempo de sobra. Haríamos hoy Borobudur y al día siguiente Prambanan.
Como he comentado en la etapa anterior, ir por tu cuenta sale más barato, pero la verdad que cuando lo comparas a euros ves que quizás con un tour habríamos podido ver algunos templos más o hacer una actividad extra a un precio muy reducido. Pero bueno así también tenemos la experiencia de ir a verlo todo rodeado de locales y la verdad que fue una aventura.
Para ir a Borobudur teníamos que ir a la estación Jombor, que está al noroeste de Yogyakarta. En el hotel fueron un poco incapaces de explicarnos otra manera de llegar a Jombor desde ahí que no fuera un taxi. Preguntamos cuando costaría yendo en taximetro hasta ahí y nos dijeron que alrededor de unos 50K (unos 3,30€). Como visto así es muy barato, nos decidimos a ir en taxi hasta allí. Al final fueron 48K con taxímetro y unos 25 minutos de trayecto.
Nos bajamos y ya corriendo vino un hombrecillo a decirnos "Borobudur Borobudur Borobudur" y nos llevó hasta su autobús. Nos metía dentro sin decir el precio... y yo que había leído muchos blogs y no quería empezar el viaje intentándonos timar le dije a Roger que hablara con él del precio...que sino nos bajábamos y que por lo que había leído en otros blogs tenía que ser unos 15K por persona. Pues bien, Roger se bajó y se puso a "intentar" hablar con el hombre. Finalmente le dijo el precio, 25K por cabeza y no bajaba del burro. Entonces decidimos bajar del autobús. En ese momento 3 hombres que estaban sentados enfrente del autobús empezaron a chillar que no, no, no, que volvierámos adentro, que el bus marchaba yo. Nosotros empezamos que, o 30K por los dos o nada. Al final nos dijeron que sí y nos metimos. El bus arrancó medio con sólo unos 5 locales más. Era una verdadera tartana. Había un conductor y luego el chico que cobraba que estaba en la puerta de entrada trasera, de pie, con la puerta abierta y el fajo de billetes en la mano. Aún no nos había cobrado cuando arrancó el bus..y ya pensaba ya verás tu que ahora no pagamos lo que él dice y nos deja tirados por ahí en medio...Pues bien sucedió que con los billetes más pequeños que teníamos hacíamos 40K, y teníamos dudas de que realmente nos devolviera el cambio. Y en efecto, miró los billetes, se rió e hizo un gesto que yo interpreté como un "ale, que os den", jajaja así que nada..no fueron ni los 30K que queríamos ni los 50K de él. Hemos de decir que tras una semana más de viaje vimos que íbamos demasiado del palo...si que es verdad que no quieres que te timen...pero pelearse por 30 céntimos, tampoco era muy normal. Cuando ya vimos los precios en sitios como Bali, Gili, Lombok creímos que nos pasamos discutiéndonos por esa diferencia, pero bueno queda como anécdota graciosa.
La tartana de bus local que nos llevó a Borobudur
El autobús iba parando y se iba subiendo todo tipo de gente por el camino. Casi una hora después llegamos a Borobudur. El chico del autobús nos dijo por dónde teníamos que ir para llegar, un gesto amable tras nuestra disputa inicial. Por el camino ofrecen llevarte de mil maneras, pero andando son unos 10-15 min.
Al llegar fuimos a pagar la entrada de extranjeros (que, claro está, tiene un precio muuuuy superior al local). Decidimos llevar nuestros carnets de estudiante. Yo hace 3 años ya que dejé de estudiar, pero colé mi carnet de estudiante de erasmus de la universidad de Maastricht ya que no tenía fecha de caducidad. Roger justo acabó de estudiar su máster este mes de Julio, y en su carnet ponía Fecha Final diciembre 2015. Nos pusieron problemas porque las muy avispadas ya sabían que final signifaba eso, y nos dijeron que estaba caducado. Por suerte nos dijeron que si entrase el intranet de la universidad y tras enseñarle, el perfil con todos los datos y foto nos aceptaron el carnet. Pero vaya, fue una árdua tarea. Aprovechamos y compramos la entrada combinada, que es un poquito más barata que las dos separadas y así al día siguiente no tendríamos que volver a discutir. La entrada combinada de estudiante son 16 USD por persona (ojo, llevad efectivo, no aceptan visa!) y sirve para dos días consecutivos entrando una única vez en cada sitio. Sin estudiante es el doble, con lo que pica bastante, y si váis a ver el amanecer o el atardecer, pues aún pica más!.
Al poco de entrar ya empezaron a venir locales a pedirnos fotos. La mayoría de ellos eran estudiantes de cursos de inglés que tenían una hojita donde les ponías tu nombre, les firmabas y les dabas una nota. A excepción de una chica, ninguno de ellos nos dijo que rellenáramos el apartado de la nota. Lo que hacían era autoasignarse un 10 cuando les dábamos el papel jajaja. La experiencia fue curiosa ya que sólo vimos a unos 4-5 turistas más en toda la mañana cuando pensábamos que eso sería puro turisteo guiri. Quizá debe ser que llegamos a una hora en la que los tours no suelen estar allí (sobre las 11 de la mañana).
La carta de presentación de Borobudur
El templo nos gustó muchísimo. Fuimos pasando todos los niveles y nos flipaban los grabados en la pared y las estupas gigantes. No necesitamos sarong porque llevábamos pantalones que nos tapaban las rodillas, pero en caso de ser necesario te lo ponen a la entrada del templo sin coste adicional.
Uno de los niveles
Nicho de Buda
Ya que teníamos tiempo de sobras, nos decidimos a pasear por el recinto. Subimos a un mirador donde estuvimos completamente solos, viendo Borobudur de fondo. Durante el camino vimos a un hombre subiéndose a un cocotero e ir cortando cocos. Se subía con la misma facilidad que un mono.
También decidimos entrar en un museo que había por allí dónde con la entrada de extranjero se pasaba gratis. La experiencia en ese museo fue más que curiosa. Nada más entrar vimos que la gente se hacía fotos con un enanito. Nos preguntaron si queríamos hacernos una foto con él pero dijimos que no. A mi no me parecía bien que tuvieran al pobre hombre aquí como atracción de feria la verdad... Luego vimos por fotos colgadas por allí que se trataba de una de las personas más bajitas del mundo (creo que no llegaba ni a los 55 cm). Seguimos la ruta por el "museo", por llamarlo de alguna manera ya que nosotros después lo bautizamos como "la cámara de los horrores". Había varias salas dónde había fotos y cuadros tan raros como horripilantes, en plan las chicas con las lenguas mas largas del mundo y miles de cosas por el estilo que no recuerdo porque he querido borrar de mi mente. Salimos de allí ya decidimos emprender nuestro camino de vuelta, haciendo parada técnica para comer. Al salir te obligan a pasar por en medio de un mercadillo donde venden todo tipo de souvenirs. El camino es largo, pero almenos tampoco te acosan a que les compres. Por lo que ví sí que insistían más a los locales, supongo que es porque con nosotros les daría cosa hablar porque no sabrían mucho inglés.
Casi llegando a la estación de buses paramos en un puestecito warung a comer dónde yo comí AYAM (pollo frito) y Roger Nasi Goreng. No cogimos bebida porque ya aún teníamos en las mochilas. El precio fue de risa, 18K los 2!! vaya, 1,20€. La comida estuvo bien de calidad y cantidad. Mientras comíamos llovió un poco, pero al acabar ya no llovía así que cuadramos los tiempos con la metereología a la perfección!
Al llegar a la estación, oootra vez a discutir por el precio de vuelta. Otra vez que los del autobús nos querían cobrar 25K. Nosotros insistimos a un hombre muy pesado (que la verdad, no era ni conductor ni era nada) que habíamos ido por 20K por persona y que íbamos a volver por lo mismo. El hombre era duro de pelar y no paraba de repetir algo como "PAÉH, PAÉH" (pese a preguntar a varias personas locales que narices significaba eso, nos fuimos sin que nadie nos pudiera dar respuesta). El caso es que después de estar discutiendo 10 min vino otro chico que nos aceptó los 20k. Este chico sí que era el que trabajaba en el bus, con lo que no entendimos el papel del otro maromo, que simplemente se subió al bus, se puso al lado de Roger y durante los 10 primeros minutos de trayecto le seguía insistiendo con el paéh paéh de las narices. Al final se cambió de asiente, por suerte para Roger jajaja. La vuelta fue un poco más larga y por el camino cayó un diluvio. Por el camino, cuando el bus hizo una parada, unos chiquillos nos vieron dentro del bus y empezaron a gritar como locos diciendo "i love youuu" y haciéndonos gestos de . La verdad, que nos sentimos como dos famosos durante todo el día, jajaja.
A llegar a Jombor teníamos pensado ir andando hasta Malioboro, la calle donde está todo el ajetreo de la ciudad. Nos dijeron que estaba muy muy lejos, unos 10Km que fuéramos en taxi o bus. Yo creía que exageraban y hombre...10 Km no eran, pero sí vimos después que era un buen buen trecho. Así que cogimos un bus local que por 3,5K por persona nos dejó en pleno Malioboro.
En esta calle había mucho ambiente. Todo lleno de tiendas, un centro comercial, restaurantes de todo tipo ya sea de Warungs hasta Mc Donalds, souvenirs por todas partes. Estuvo bien para ver el contraste ya que dónde nosotros nos alojábamos estaba todo más muerto. Me pareció curioso de que en una de las aceras estaba todo lleno de puestecitos para comer donde directamente comías en el suelo, encima de una especie de alfombra. En el centro comercial se hacía también una especie de show de talentos de niños/adolescentes, pero a la primera actuación ya nos aburrimos un poco y nos fuimos. Paseando por Malioboro vimos una oficina de información al turista y decidimos preguntar información de cómo ir a Prambanan al día siguiente y también como ir hasta Semarang, ya que pasaríamos la noche allí. La chica muy maja nos explicó todo. También nos dijo que para ir a Jombor había un bus justo al lado de nuestro hotel... vaya, que lo podríamos haber usado sin tener que usar el taxi y los del hotel no nos habían dicho nada acerca de eso.. en fin!. Al final de todo Malioboro vimos la entrada del Kraton, al cual como comentamos en la entrada anterior no entramos por cuestión de horarios y también un poco de falta de motivación!
Tras esto decidimos volver dando un paseo hasta el hotel, dónde habíamos visto por la mañana que había cena de bufet libre con barbacoa que nos costaba 75K cada uno. El bufet libre estuvo muy bien, probamos de todo. La barbacoa no estuvo tan bien..sólo había 5 cosas dos de ellas eran patas y cabezas de gallina... cuándo vi eso todo frito se me revolvió un poco el estómago. Había música en directo con lo que pasamos un rato ameno poniéndonos las botas. Nos tomamos algo en la terraza del hotel y después fuimos a dormir. Al día siguiente tocaba Prambanan y despedirnos de Yogya!