2 DIA lunes 5Nov
Escala en Bari: desembarque 11:00 embarque 14:00
Nos levantamos y fuimos al restaurante Ceres a desayunar, era tipo buffet y luego si querías tenias alimentos de carta tipo revueltos etc., que por cierto tardaron muchísimo tiempo en servir. Después de desayunar, desembarcamos en Bari, nada mas bajar a unos 200 m hay unos trenecillos verdes que por 18 euros y 1h y 30 min. te enseñaban la ciudad, nosotros no lo cojimos nos parecía una timada y en realidad lo era según decían otras personas, así que decidimos ir andando al casco antiguo que en realidad esta muy cerca y no tiene mucho que ver, ya que es una parada técnica en la cual embarca y desembarca gente.
Bueno según salimos del puerto giramos a mano izquierda y ya de frente comenzaba el casco antiguo que se compone de calles estrechas llenas de tendales, cortinas en las puertas, muchísimas motos que sino vas con cuidado te atropellan y tiendas de souvenirs. Como en otros lugares de Italia estaba lleno de paredes con imágenes de santos y vírgenes a los que ponen velas.
Seguimos caminado y vimos un puesto de fruta, compramos unas manzanas que son buenas para el mareo del barco y que por cierto estaban buenísimas y llegamos a una iglesia, entramos a verla y en la cripta tenia una momia.
Seguimos caminado llegamos al castillo que hay en la ciudad al cual no entramos y con las mismas al Serena otra vez.
A la hora de la comida volvimos al restaurante Ceres y nos colocaron en una mesa con otros 4 que no conocíamos de nada y encima extranjeros. Las mesas las aprovechaban así te sentaban con otras personas, pero eso no era lo peor, resulta que nos servían a todos los de la mesa a la vez, catastrófico, me explico, si unos pedían entremeses y otros nada hasta las pastas, por ejemplo, hasta que los de los entremeses no los acababan, y tomaban el siguiente plato que eran sopas y cremas frías a nosotros no nos servían nuestro plato, para así ir todos a la vez comiendo lo mismo, con la consiguiente espera e indignación. ¿Por que tengo que estar esperando 40 minutos a que unas personas que no conozco acaben de comer para así poder comer yo?. Con los postres paso lo mismo, como los otros habían pedido quesos antes que los dulces pues nosotros a esperar. Se lo dijimos 200 veces a los camareros y ni caso pasaban de nosotros, nos decían “ahora, ahora” pasados otros 30 minutos, y ya cansados de esperar y de poder comerlos nos levantamos y nos fuimos, pensando que por lo menos podríamos terminar de comer en el buffet pero ya estaba cerrado.
Después de comer fuimos a echarnos la siesta al camarote y después a seguir conociendo el barco. Los cafés del buffet y de los restaurantes eran malísimos así que compramos un bono en el que venían 22 cafés y 3 especiales (mokachino, capuchino y el otro no me acuerdo) por 20 euros me parece, y la verdad es que merecía la pena porque si cada vez que tomabas un café te metían una buena clavada, así por lo menos lo amortizabas y esos si que sabían bien.
Por las noches después de cenar, sobre las 24 horas, siempre había un buffet de media noche y otro tipo de sorpresas nocturnas como esculturas de hielo, bailes en la discoteca, en general la animación era bastante buena y tenían un humor los pobres animadores… siempre pendientes de que los pasajeros lo pasáramos bien.
También cuando ya ibas al camarote a dormir tu camarero de habitación te preparaba la cama lista para meterse y la limpiaba otra vez, (la limpian 2 veces al día). Te dejaba el TODAY que es una hoja informativa sobre la escala del día siguiente, con información también de los horarios de restaurantes y todas las actividades que habría en el barco durante ese día. (parrilladas, bingo, espectáculos, clases de baile, seminarios…)
Por las tardes el buffet también servia meriendas, (frutas, helados, tartas, embutidos, pastas…) y pizza durante todo el día. Las pizzas eran un poco flojitas pero para matar el gusanillo antes de cenar valían.