DÍA 3: Siena- Montepulciano- Rocca D´Orcia- Siena
Itinerario- mapa de ruta:
Y aquí tenéis el enlace:
Mapa ruta día 3
152 km – aprox. 2h 56 min:
67,8 km: 1h 9 min a Montepulciano
29,6 km: 38 min a Rocca
54,5 km: 1h 8 min a Siena
Tras desayunar en el hotel empezamos nuestro siguiente día introduciendo en el GPS nuestra primera parada: Montepulciano. ¡Cuál fue nuestra sorpresa al ver que nos metía por carreteras de servicio paralelas a la autovía y caminos rurales! Así pudimos apreciar la auténtica campiña, y como fueron pocos kms se pasó pronto, pero ya pensaba yo que no llegaríamos nunca a la civilización. Aquí os dejo algunas fotos que hice:
Por fin llegamos a Montepulciano. Había viñedos por todas partes.
Aparcamos en un aparcamiento gratuito que hay junto a la oficina de turismo. ¡Llegamos a las 12:32 y ya estaban cerrando! Le dije a la muchacha que sólo quería un mapa, que no iba a tardar, y casi me lo tira a la cara… Cuando vi que costaba 3€ le dije que no, gracias, que no era ese el que quería sino uno de la zona, y ese sí era gratis. Le pregunté por el bus para subir a la plaza principal y me dijo que en el bar al otro lado de la plaza vendían el billete y me dio con la puerta en las narices. Os podéis imaginar el cabreo que me pillé cuando llegué al bar y me dicen que allí no lo venden, que en la oficina. Yo intentando explicarle medio en italiano (lo que me acordaba) medio español que nos habían mandado allí a comprarlo… Pues nada, nos tocó subir andando con un sol y un calor horroroso, y encima la del bar cabreada porque éramos unos pesados… En fin, que empezamos con mal pié.
Nos tomamos con calma el subir. La 1ª parada fue en un mirador. Aquí tenéis las vistas:
Después entramos por una de las puertas al casco antiguo. Aquí es donde se coge el bus para los que tengan ya el billete.
Al subir vi que aquí habían rodado una de las secuencias de Luna Nueva, en la que Alice entra con el Ferrari.
Seguimos nuestra ascensión y vi que todo el pueblo estaba repleto de rincones con encanto como este:
Aunque hacía muchísimo calor había muchos turistas como nosotros, aunque a esa hora estaban en los restaurantes.
Seguimos subiendo, y en las fachadas de los edificios se veían obras de arte:
La torre del reloj marca las horas, y es curioso ver al muñeco moviéndose.
Ahí podéis ver el minibús que nos hubiese ahorrado ese golpe de calor, pero al ir disfrutando de la zona no me arrepentí.
En el escaparate de una tienda, junto al arco de la foto anterior, había fotos del rodaje de la película. Aquí os pongo una del arco desde el otro lado.
Al llegar a la plaza del ayto hay un mirador al lado del edificio con unas vistas preciosas de la campiña.
Dentro del ayto también rodaron:
Y aquí lo tenéis por fuera. Se puede subir a la terraza, pero con el calor que hacía descartamos la idea. En la película sale una fuente en el centro de la plaza, pero era de pega.
La plaza en sí es muy bonita.
La catedral estaba al otro lado de la plaza:
Vimos que ya era hora de ir buscando donde comer, así que empezamos el descenso, pero por otra calle para ver otros edificios. Vi un callejón con mucho encanto por el que bajamos, y al volver a ver la película vi que Bella corría por él. Si sois fans de la peli en las tiendas venden como un libreto con información del rodaje y de las localizaciones, creo que por 3 o 4€.
Bajando por la calle principal vimos un restaurante muy bonito y entramos. Se llama La Grota dei Sapori. Comimos muy bien: ensalada, brocheta, le ciacce con stracchino e salsiccia (especialidad de la zona, como una especie de pizza-calzone blanca que estaba buenísima), pan y agua, todo por 20,50 €. Tened en cuenta decidles que no os pongan pan si no lo queréis, que os lo cobran a precio de oro y con esa comida ni se toca… A partir de ahí nosotros lo tuvimos en cuenta.
Enfrente de la Torre del reloj hay una iglesia muy bonita.
Terminamos de bajar, cogimos el coche y salimos del pueblo. Vimos el Templo di San Biagio, que está a las afueras, y decidimos ir a verlo por dentro.
Para ir a verlo se entra por la entrada al cementerio, a la derecha según salís del pueblo.
Por dentro es redondo, y muy bonito. Merece la pena hacer una breve parada para verlo.
En la parte de atrás había un jardín con unas vistas bonitas de la zona.
Seguimos con la ruta, esta vez hacia Rocca D´Orcia, pero no sin antes parar en la carretera para hacer una última foto de Montepulciano a lo lejos.
En nuestro camino el paisaje era el mismo: campos de trigo recolectados, girasoles… La Toscana es preciosa.
Llegamos a Rocca bastante rápido. Aquí la tenéis a lo lejos.
En este pueblo está rodada una película de Joshua Jackson llamada “En un rincón de la Toscana”, Shadows in the sun.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
El pueblo principal es Castiglione di Rocca, aquí tenéis una de sus plazas.
No encontrábamos como llegar a la parte de Rocca, que es una pedanía, peatonal, preciosa. Paramos en una gasolinera y una mujer de unos 65 años nos explicó en italiano, mientras nos echaba gasolina, que había que aparcar en el parking (un descampado sin señalización que habíamos pasado sin percatarnos) y subir andando. Ese fue un día de grandes cuestas y muchísimo calor. Aquí tenéis la primera cuesta.
Todas las casas estaban construidas con las mismas piedras, y le daba un color muy bonito al pueblo.
Por fin llegamos a la piazza della Cisterna, centro del pueblo. El único restaurante estaba cerrado, así que ni agua pudimos tomar. El sitio es precioso y tiene mucho encanto, tal cual sale en la película.
Aquí podéis ver la escena rodada en dicha plaza:
Esta es la torre de Rocca, está en lo más alto del pueblo. Estando allí pasaron 2 cazas a toda velocidad.
Al bajar nos encontramos a un lugareño muy mayor, que medio en italiano-español empezó a contarnos batallitas de cuando vino a España. La gente alli es muy amable, sobre todo los más mayores.
Ya muy cansados decidimos volver a Siena. Por el camino seguimos viendo muchos viñedos y casas preciosas, hasta que vimos Siena a lo lejos. Parecía algo mágico, mirad.
Al llegar a Siena volvimos a dejar el coche en el aparcamiento junto a la muralla, y nos fuimos hacia la derecha, a un mirador para ver atardecer desde allí. Precioso, como podéis ver.
Nos encantó ver cómo los edificios iban cambiando de color según se ponía el sol. La catedral se veía preciosa.
Nuestro hotel estaba al lado, por eso teníamos esas vistas tan bonitas. Como estábamos destrozados decidimos comer algo ligero en el hotel y madrugar la mañana siguiente, que queríamos ver la catedral antes de irnos a Florencia, y así lo hicimos.