Hoy tocaba excursión al volcán!!!!. Por cuestión de tiempo cogimos visita al volcán + aguas sulfurosas, costaba 15€ (más 2€ por persona de tasa en el volcán), pero tenéis mil opciones. Nosotros lo hicimos en el barco Calypso de la compañía Dakoutros Bros. Hay otras que te van a buscar al hotel pero ya no puedes ir en el burro, todo esto os lo explicarán bien en el hotel o si no en cualquier oficina de excursiones en Fira.
Yo tenía ilusión por hacer las dos cosas y después de vivirlo, si queréis tener ambas experiencias, lo ideal es bajar en teleférico y subir en burro. Así lo hicimos nosotros sin haberlo pensado, pero es mucho mejor. Sobre las 10.00 nos fuimos camino al puerto viejo de Fira porque teníamos la excursión a las 11.00. La oficina del teleférico está a un paseo de 20 minutos desde el centro de Fira, ya en el funicular pagamos religiosamente 4€ cada uno y en 2 min estábamos en el Viejo Puerto de Fira esperando nuestro barquito.
En nuestro grupo había bastantes españoles y nos dieron las explicaciones en castellano, nos tocó un guía llamado Dimitris (qué extrano nombre en Grecia! jajajaja) que nos dio una clase magstral de historia y geología para todos los públicos. Después del duro "paseo" por el volcán (bajo un sol ardiente y con menos sombra disponible que en Delos!!!) nos llevaron a darnos un baño en las aguas sulfurosas. Si os bañáis allí os aconsejo que llevéis ropa y bañadores viejos y cuanto más oscuro mejor. Yo iba de blanco y se me quedó la ropa como si fuera naranjito (eso sí, después de un par de lavados intensos, conseguí sacarlo). Fue divertido! Al principio estaba todo el grupo vergonzoso por pringarse la cara y el cuerpo de barro, pero en 5 min la gente perdió cualquier tipo de vergüenza y allí estaba yo con la cara y el cuerpo naranja. No sé si me hizo bien o no, pero al quitármelo se me quedó la piel suuuuper suave.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Después de la excursión, salimos hacia la playa de Kamari, buscamos uno de los restaurantes que nos recomendó la recepcionista de nuestro hotel, el restaurante Nichteri, con terracita en pleno paseo marítimo y vistas al mar. Era cocina tradicional griega de vanguardia, comimos muy bien, pero un pelín más caro de lo habitual unos 30 euros por persona. La playa de Kamari, para nosotros, fue la mejor que visitamos. Es de arena negra y conserva mucho el calor, pero bien merece echarse una siesta a la sombra.
Luego fuimos a Pyrgos, salimos de Kamari dirección Fira y cogimos el desvío a Pyrgos. Al principio pensábamos que nos habíamos perdido, porque era una carretera empinadísima con muchas curvas, a cada cual más pronunciada, parecía no llevar a ningún sitio. Respiramos tranquilos cuando comenzamos a ver en la distancia un pueblecito encantador de casitas encaladas e iglesias ortodoxas con cúpulas azules. Al llegar subimos a la Catedral de Pyrgos, está en lo alto de pueblo, desde donde se tienen vistas de toda la comarca, repleta de viñedos y con la colina del profeta Elías de fondo. Unas vistas increíbles!
*** Imagen borrada de Tinypic ***
A media tarde fuimos a ver el atardecer de Oia. Es visita obligada pero hay tanta gente y se puede ver una bonita puesta de sol desde tantos sitios en Santorini, que a nosotros nos desencantó bastante. Y de verdad, cuando digo que había mucha gente es literalmente muchedumbre, demasiada. Es imposible encontrar sitio si quieres hacer la foto de rigor, a no ser que llegues con un par de horas de antelación y custodies tu puesto como si se te fuera la vida en ello.
Como decía, vimos ponerse el sol desde varios enclaves , y sin duda el más bonito fue el de Imerovigli, donde estaba nuestro hotel, en un pequeño mirador con vistas a la caldera desde el que se veía el sol perfectamente. Esta vez sin apenas gente, sin cabezas que fastidiaran la foto, en silencio... Puro misticismo.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Una cosilla más, desde Imerovigli a Oia no hay gasolineras y son unos 25 minutos en moto con bastantes cuestas, así que no vayáis justos de gasolina por si acaso.