India y Maldivas - 31 días por libre ✏️ Blogs of Indian Subcontinent

Si bien el objetivo de nuestro viaje eran India y Maldivas, por un hallazgo en la web añadimos un día en Estambul.
Buscando el pasaje más económico unos cuatro meses antes, vi una oferta de Turkish Airlines a 998 dólares y no lo dudé. Era muy buen precio. Quizás por los recientes atentados (era año 2016) querían promocionar estos vuelos.
Algunas personas tienen reparos con destinos conflictivos, pero personalmente consideré que era una oportunidad para conocer algo de Estambul. Mi hija se enteró posteriormente por sus amigas que era un destino "complicado".
Luego de recopilar información en foros y blogs definí el itinerario. Ésto se dice fácil pero no lo es, sobre todo Maldivas y su enorme cantidad de islas...cuáles elegir?

Ruta:
Domingo 5 Febrero 2017 : Turkish Airlines Buenos Aires - Istambul (Turquía)
Lu 6 Feb : Estambul
Ma 7 Feb : Istambul - Delhi
Mi 8 Feb : Delhi - Aurangabad
Alojamiento: Ellora B&B , Ellora Tq.Khuldabad , Aurangabad.– Shaikh Rafiq Mo.+919822534157- Shaikh Sadeeq (a 24 Km de la ciudad de Aurangabad, cerquita de las cuevas de Ellora y de la carretera que va a Ajanta).
Ju 9 Feb: Cuevas Ajanta
Vi 10 Cuevas Ellora

Sa 11: Aurangabad - Mumbai- Chennai (India)
Alojamiento: Just Guest House (cerca Aeropuerto) No 3, Veeramamunivar Street, Palavanthangal, Chennai Dom 12 Chennai- Mamallapurán
Hotel Mamalla Heritage
Lun 13 Mamallapurán - Kanchipurán ( a 60 km de Chennai) - Tren nocturno: Chengalpattu- Trichy
Mar 14 Trichy (Rock Fort y T Ranganathaswamy)
Hotel Susee Park (US 17) en Super Bazaar, muy cerca de Fort Rock
Mie 15 Trichy - Tanjore (templo Brihadisvara c/toro Nandi ) - Madurai 157 Km
Padman Hotel (U$18) 24 /54 No.1,Perumal Tank,West Street,Town Hall Road
Jue 16 Madurai- Munnar 169 km
Vie 17 Munnar
Sab 18 Munnar
Dom 19 Munnar- Thekkady 81 km
Hotel Tekkady Woods (U$42)
Lun 20 Thekkady– Allepey 146 km
Alojamiento: Lotus homestay ( 490 la doble c bańo y Fan)
Mar 21 Allepey – Kochi 72 km
Mie 22 Kochi

Jue 23 Feb: Kochi - Male (Maldivas)
Vie 24 Rasdhoo
Sab 25 Rasdhoo
Dom 26 Rasdhoo
Lun 27 Diffushi
Mar 28 Diffushi
Mie 1 Marzo: Diffushi
Jue 2 Marzo: Maafushi
Vie 3 Marzo: Maafushi (NO Ferry)
Sab 4 Marzo: Maafushi

Dom 5 Marzo: Maafushi - Male- Cochin - New Delhi (India)
Alojamiento: The Madpackers Hostel: S-39A, Third Floor, Panchsheel Park ; Superior 6 Dorm fem. Baño (INR899.00)
Lun 6 Delhi
Mar 7 Delhi
Mie 8 Delhi - İstanbul (Turquía)
Hotel.
Jueves 9 de Marzo 2017 : İstanbul - Buenos Aires (Argentina)


Arribamos al Aeropuerto Atatturk de Estambul desde Bs As, a las 22 hs del lunes 6 de febrero de 2017. Había numerosos efectivos policiales armados con ametralladoras o similar, mi conocimiento de armas es escaso, pero éstas eran muy grandes. Retiramos el equipaje y nos dirigimos al Tourist Desk de Turkish donde asignan el hotel por orden de llegada. A los 20 minutos nos trasladaron en Van al hotel Wish More. Muy buen alojamiento, generalmente trabajan con hoteles cinco estrellas.
Por qué elegimos la opción hotel y no el tour que ofrece Turkish? En base al día de estadía, martes, los tours por horario y recorrido no eran convenientes. Se muestran en la página de la aerolínea. La otra opción era por nuestra cuenta alojarnos en un alojamiento céntrico, pero tenía dudas de llegar a tiempo a tomar el vuelo ya que decían que , según los horarios, las rutas se congestionan mucho. No era mentira y lo pudimos comprobar en el viaje de regreso a Bs As.
Dormimos como angelitos en ese hotel fantástico al que nuestro presupuesto no hubiera accedido. Estaba ubicado lejos de Sultanameth, pero había una estación de Metro cercana . Cambiamos algo de dinero en la recepción del hotel y salimos temprano en la mañana. El empleado nos explicó cómo llegar al centro. Sacar el boleto en las máquinas Jetonmatik tiene sus mañas, pero mi hija se las descubrió. En 20 minutos estábamos en la zona turística. Hacía frío, unos 7°C, nos tomó de sorpresa ya que al ir hacia destinos de calor llevábamos nuy poco abrigo. Con la ayuda de mi infaltable app Maps Me, llegamos fácilmente a la Mezquita Azul. Ésta se divisa desde muy lejos por la altura de sus minaretes. Para ingresar al recinto de oración , nos pusimos unas faldas que te prestan al entrar, ya que íbamos con pantalones. Además nos tuvimos que tapar la cabeza con los pañuelos que llevábamos.
Pudimos admirar la belleza interior de la Mezquita, sus techos, lámparas alfombras. Al salir, entregamos las faldas y nos dirigimos a Hagya Sofia que se encuentra muy cerca. La entrada es cara y la estaban refaccionando, si bien se aprecia la belleza de techos , altares y demás, no se puede apreciar todo su esplendor. Hacía muchísimo frío allí dentro.
Salimos, cruzamos la plaza y seguimos por una calle comercial. Los locales estaban abriendo y los comerciantes, con muy buen ojo para los turistas, nos invitaban a entrar para ver sus artículos y enseguida ofrecen té. Riquísimo y entraba muy bien con ese frío. Reconozco que tienen un don para vender, son muy amables y agradables. Lamentablemente no hicimos caso a la recomendación de uno de ellos para ver La Cisterna, de la cual estábamos a un paso. Por tiempos y horarios nos fuimos de Estambul sin ver esa belleza. Casualmente aparece en una película, no recuerdo su nombre, que ví en el avión.
Almorzamos sándwich de pescado a la orilla del río, cruzamos el Bósforo y vimos la Torre Gálata. No subimos , se paga entrada. Es una zona pintoresca como todas las que recorrimos, nos gustaron mucho. Fuimos al Gran Bazaar y al de las Especies. Los ojos no paran de admirar el colorido de ropas, chalinas, aromas de tes , especias, dulces. Pero las compras serían a la vuelta. Hay que cuidar el peso del equipaje que cargaríamos durante un mes.
Tomamos nuevamente el Metro de regreso al hotel. No es subterráneo sino que va a ras de tierra. Sus vías pasean por la ciudad. Vimos un shopping muy grande y tomamos un té y torta riquísimos. Nos llamaba la atención ver los muchachos jóvenes tomar té. Aprendimos que Turquía es el consumidor No.1 del mundo de esta bebida. Asimismo, al ser un país musulmán no toman bebidas alcohólicas. La gastronomía es impresionante en cuanto a dulces, kebabs y mucho más que no nos dio tiempo a disfrutar.
En el hotel, empacamos nuestro escaso equipaje y nos pasó a buscar una van para llevar al grupo al aeropuerto. A las 21 hs volamos a India.

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Arribamos al aeropuerto Indira Gandi, en Delhi, a las 5 AM.
Cometimos el error de no comprar una SIM al llegar. Algo que considero imprescindible en un viaje, es llegar a un país y sacar inmediatamente una SIM. Tienes internet todo el tiempo, sobre todo para usar Whatsapp y moverte con Google Maps por si falla Maps Me, además de llamadas. En Delhi era muy cómodo hacerlo en el mismo aeropuerto, ésta posibilidad no la tuvimos en Aurangabad , un aeropuerto chico al que llegamos de noche.
Era muy temprano y por eso no teníamos apuro en tomar el Metro hacia la ciudad, pero más tarde pensamos que no nos iba a dar el tiempo para ir al centro de Delhi. Salimos del aeropuerto buscando la entrada al metro, no la veíamos y encontramos muchas trabas para reingresar al aeropuerto. En todas las puertas había vigilancia y nos mandaban de una puerta a otra. Hacía mucho frío. Yo recordaba haber transpirado mucho en Delhi en mi viaje anterior. Para mí India era sinónimo de calor y eso le transmití a mi hija. No siempre es así. Finalmente logramos ingresar. Dejamos el equipaje en una Consigna que está camino al Metro. No recuerdo el precio. Cambiamos algo de dinero y en 25 minutos estábamos en la principal estación de tren de Old Delhi.
Esta zona de Old Delhi se llama Paharganj. El impacto emocional para mi hija fue muy fuerte, ver mucha gente durmiendo en las calles, suciedad , una estación de trenes inmensa y caótica. Para mi no fue tanto ya que estuve en India hace tres años, pero todo el recorrido lo hice con chofer y no se ve tanto como moviéndose por cuenta propia. Queríamos ver el Main Bazaar Market, que son los negocios ubicados a lo largo de la calle del mismo nombre. Comenzamos a caminar pero era temprano aún, los negocios abren en general a las 10 hs, casi todos estaban cerrados y no había tanta gente por la calle como lo suele haber en horas de día. Caminamos bastante hasta que vimos la estación de Metro Ramakrishana Asharm y decidimos ir hacia Connaught Place que es más relajado . Entramos a un Banco para cambiar 300 dólares ya que íbamos para Aurangabad y con el problema de billetes en India aconsejaban cambiar en Bancos. En ese tiempo retiraron los billetes viejos y hubo escasez de dinero circulante. Estuvimos allí 2,30 hs. Nos hicieron llenar un montón de papeles, sacar fotocopias, esperar, hablar con uno y otro empleado. Parecía que estábamos por retirar el tesoro del Banco. Perdimos mucho tiempo y estábamos con el cansancio de un viaje largo, así que salimos del Banco, pasamos por Starbucks para calentarnos con un café con leche y regresamos en metro al aeropuerto. Allí dormimos algo en las tumbonas hasta las 18 hs que salía nuestro vuelo a Aurangabad, vía Mumbay.
Legamos a Aurangabad 20 hs, ya de noche y además tardaron en hacernos el trámite de inmigración. Salimos casi últimas. El aeropuerto es muy pequeño, a esa hora debíamos tomar un taxi al centro. Por la hora no daba para buscar alojamiento, miré la dirección de una guesthouse que me había dado una compañera de trabajo y se la mostré a un chofer. Me pareció mucho lo que nos pedía , 1500 rupias . Comenzamos a preguntar a otros y tratamos de regatear, pero había pocos y era muy tarde. No había más opciones, ya casi no quedaba nadie en el aeropuerto, le dije sí a uno y subimos al coche.
Pasamos por las luces del centro de Aurangabad y seguimos, las luces se terminaron , la carretera era oscura y comenzó un camino montañoso. Yo no me podía imaginar a dónde íbamos, no pensé que quedaba tan lejos. El celular ya no tenía carga para consultar cuánto faltaba. A esa hora se nos hizo eterno, con mi hija nos mirábamos y yo supuse que ella estaría intranquila. Era media noche, por un camino de montañas oscuro con una persona desconocida. Al llegar a una zona iluminada, nos esperaba otro hombre que era el dueño de la guest house Ellora. Este subió al auto para darle indicaciones al taxista. Claro, era imposible llegar a la dirección ya que era una zona muy humilde, con callejuelas estrechas llenas de pozos y por donde el coche apenas pasaba. Yo pensaba, cómo pudo mi compañera ir a parar a ese sitio y recomendármelo. Finalmente el hombre dijo que habíamos llegado. Al fin. Comprendí el precio del viaje. Subimos por una escalera que llegaba a un patio y había dos puertas de habitaciones. Elegimos la primera y entramos. Era muy austera pero se veía limpia y por 500 rupias no se podía pedir más. Arreglamos con el hermano del dueño para ir al día siguiente a las Cuevas de Ajanta. Aconsejan visitar éstas primero y con razón, son menos impactantes que las de Ellora, también porque fueron hechas antes . Cansadas nos fuimos a dormir. La cama doble era una tabla con un escaso colchón de 5 cm . A mí me gusta la cama dura, pero esa era muy dura.
Al día siguiente nos despertamos con el llamado a la oración de alguna mezquita, el canto de un gallo y más tarde un canto hindi. Bienvenidos a India! De día y con sol el panorama era mejor, si bien la zona era muy humilde, nos permitió conocer la forma de vivir de ellos. Muchos niños yendo a la escuela, una vecina peleando a los gritos con otro vecino, mucho verde y montañas bajas. La ducha no funcionaba, como suele pasar en la mayoría de los alojamientos indios baratos. Nos arreglamos con los baldes y agua fría, o mejor dicho, mi hija se bañó así. Nos pasaron a buscar a las 7 hs en auto, si bien era más caro (2500 rupias 2 hs) que el tuc tuc (1800 Rs 3,5 hs), nos decidimos por el primero. En buena hora, ya que el camino era largo y muy malo, lleno de pozos. Paramos a tomar un chai con 2 chapatis en un puesto de la ruta, lo disfrutamos ya que no habíamos cenado la noche anterior. La temperatura era ideal, dejamos el frío de Estambul y Delhi.
Nos dejó en la entrada del complejo y allí tomamos un bus (30 Rs) hasta las cuevas de Ajanta, los autos no pueden pasar, la entrada cuesta 500 rupias. Por un bonito jardín se accede a un amplio anfiteatro de colinas rocosas con cuevas dispuestas en forma de U, en el centro muy bajo corre un arroyo con escasa vegetación y un puentecito. Hay que llevar gorro y protector solar ya que hace mucho calor. Hicimos el recorrido por las cuevas una a una, subiendo y bajando desniveles. Había un grupo de chinos, algunos de ellos ancianos y con dificultosa movilidad. Para esos casos hay parejas de hombres que cargan una silla a los hombros y llevan personas. Era llamativo la velocidad con que subían y bajaban escaleras .
*** Imagen borrada de Tinypic ***

Fuimos a los baños y bajamos al arroyo . Desde allí se puede subir hasta un mirador pero hacía calor y ya cansadas nos volvimos. Al regreso el conductor nos llevó al mirador al que también se accede por carretera. La vista panorámica es muy linda.
Al día siguiente visitamos las cuevas de Ellora. Salimos en el auto junto con los dueños de la GH, ya que él trabaja en Aurangabad y su madre y hermana venden en la feria. Me llamó la atención que el hábito negro que llevan las musulmanas va encima del saree. Es increíble como se acostumbran a soportar el calor con tanta ropa.
Aconsejan ver última la cueva de Kailasa ya que es la más imponente. Nosotras comenzamos por ésta sin saberlo. Realmente es una belleza impactante los labrados que tiene. Pensar que es un solo bloque de piedra tallado desde lo alto a la parte inferior. Hay bibliografía que describe con detalle ésta cueva y el resto, pero coincido que deja con la boca abierta el trabajo que tiene. Hay quien la compara con Angkor Wat, personalmente me quedo con el imprescindible de Cambodia ya que el entorno en que está emplazado es majestuoso.
*** Imagen borrada de Tinypic ***

Luego visitamos el resto de las cuevas y una ventaja de saltearnos el orden aconsejado, fue que estábamos descansadas al ver Kailasa y la apreciamos en detalle. Hay que caminar bastante para ver todas. Se toma un ómnibus para ver unas que están un poco alejadas. En Ellora hay más visitantes que en Ajanta, muchos de ellos colegios , además de los típicos grupos de asiáticos. Como en toda India, el asedio de sacarse fotos con nosotras por ser occidentales no deja de ser gracioso. Salimos del complejo de cuevas y hay una zona con puestos de comida, recuerdos, etc. Como el auto de quien nos llevaba a la GH no estaba, nos ofrecieron llevarnos en moto pero dudamos de la seguridad de tres en una moto y decidimos esperar. Ya en la casa empacamos para salir en la mañana, pero el dueño nos dijo que su esposa quería regalarnos un tatuaje con henna. Nos trajo unos dibujos a elegir y pacientemente nos dibujó sobre las manos. Mientras los niños se quedaron dormidos obedientemente sobre una alfombra. Previamente el pequeño había disfrutado las fotos que le sacó mi hija con la cámara instantánea, feliz de quedarse con ellas y nosotras de ver su sonrisa. Por la mañana un tuc tuc nos llevó al aeropuerto pasando previamente por el “pequeño Taj Mahal”. Realmente vale la pena verlo para quienes no conocen el de Agra, tal era el caso de mi hija. Es una buena aproximación en miniatura.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Llegamos temprano al aeropuerto y de allí volamos a Chennai (ó Madrás) 18 PM.

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A las 22:30 hs tras una escala de hora y media en Mumbay, arribamos a Chennai, la antigua Madrás. Nos esperaba Prabhu, la persona con quien había arreglado vía mail para hacer parte del recorrido en coche.
Cómo contacté con él? Leyendo foros de viaje. Primero me comuniqué con quien había hecho el viaje en 2013, Nary de Jaipur, pero él sólo hace tours por el norte de India, allí hay muchas agencias. No encontraba chofer para el sur. Finalmente leí sobre Prabhu y le escribí. Como él también se maneja en la zona norte de India, con sede en Jaipur, no sabía si podría hacer con nosotras el recorrido, en caso contrario lo haríamos con gente de su confianza. Nos trasladó al hotel Just Guesthouse cercano al aeropuerto y reservado con antelación. Allí me dijo que nos dejaba en manos de gente local a quienes él había contactado y que nosotras seríamos la “prueba piloto” para que él operase con ellos en el sur de India. En síntesis y nunca mejor dicho, éramos “conejillos de India” . El esperaría ansioso nuestro informe al final del recorrido.
Actualmente pienso que es una persona muy correcta y respetuosa, inspira confianza, pero hizo oídos sordos a mi informe y no se disculpó por equivocarse en el chofer elegido para nuestro segundo tramo, Karthik .
Esa noche en Chennai estaba el chofer del primer tramo, no recuerdo su nombre, simpático y respetuoso. Lo curioso era que les resultaba muy difícil entenderse ya que en el sur hablan tamil, no hindi y menos inglés. Luego de pagar lo acordado via mail, Prabhu se despidió luego de explicar al chofer que el día siguiente salíamos a las 9 de la mañana.
Por la información de la web había decidido no entrar a la ciudad de Chennai ya que es muy grande y no había nada que nos interesara en particular. Luego de desayunar en una terracita mínima del hotel, partimos hacia Mamallapurán. La distancia era más corta de la imaginada, es una ciudad costera, con playa ventosa. Visitamos lo aconsejado,” los cinco Rathas” de Mahabalipuram (630–638 d. C.) y Krishna´s butter ball (la bola de mantequilla de Krishna). Se paga entrada. También mencionan el faro pero no fuimos, hacía calor y no merecía la pena pagar más.
El conjunto “cinco rathas” es arquitectura monolítica rupestre india del siglo VII, compuesta por cinco monumentos tallados de grandes piezas únicas de granito y cada uno semeja un carruaje (ratha).
” los cinco Rathas” de Mahabalipuram
También mencionan el faro pero no fuimos, hacía calor y no merecía la pena pagar más . Lo que vimos no me deslumbró, quizás por comparar con los palacios que se ven por el norte de India y que me asombraron con su belleza.
Buscamos hotel en base a los que llevaba apuntados en mi agenda y finalmente nos alojamos en el Mamalla Heritage (USD 49) con pileta y muy rico desayuno. Era más caro que el presupuesto que nos habíamos asignado, pero queríamos darnos un pequeño lujo luego de Ellora y Chennai y yo bañarme con agua caliente! Disfrutamos la piscina y salimos a caminar y cenar. Compramos una tarjeta SIM ya que consideramos es la mejor inversión cuando se ingresa a un país, pues no hay que depender del WIFI de los lugares que muchas veces es malo o no hay. Considero básicos del viaje la SIM card y la app MapsMe . Nos sorprendió muy bien ésta ciudad, había muchos turistas de habla francesa y lindo ambiente. Comimos muy bien y al día siguiente nos levantamos temprano para la clase de yoga gratuita dada por un profesor excelente. Otra grata sorpresa.
A media mañana el simpático chofer nos llevó a Kanchipurán, la distancia entre ambas es corta (2 hs), con muchos baches en la carretera. Vimos los templos hinduistas Devarajaswami dedicado a Lord Vishnu, "Ekambareshuara" dedicado a Shiva ,y Kamakshi Amman dedicado a Kamakshi, una de las formas de deidad de Parvati . Hay 150 templos pero con éstos nos bastaba .
Devarajaswamy Temple: comenzamos a familiarizarnos con las Gopurams que adornan las entradas de los templos.
Ekambareshuara Temple (Kanchipuram)
Ya teníamos hambre y el driver nos llevó a un sitio bastante concurrido, amplio, donde comimos muy bien . Si bien los locales comen con la mano, dan tenedor a los turistas. Hay grandes piletas al costado del salón para lavarse las manos. Esta vez Itxi comió algo .
Almuerzo en Kanchipuram
Había leído que ésta ciudad se destaca por los saris de seda Kachi, los choferes llevan a los turistas a las tiendas que les darán algo de comisión . Como yo tenía interés en ver alguna, accedimos a ir. Nos mostraron un telar antiguo y luego un sinfín de sarees, pashminas, etc. No eran tan excepcionales como imaginé , pero me tenté compré una .
No habiendo nada más para ver le dijimos al chofer de dirigirnos a la estación de trenes Chengalpattu donde tomábamos el tren nocturno a Trichy. Faltaban cinco horas para eso , el chofer muy amable no sabía por dónde pasearnos. Nos sugirió entrar a una iglesia y luego caminar por la calle principal para comprar algo de comer. Caminar por las calles de éstos pueblos siempre es interesante, ya que ver cómo vive la gente e interactuar con gestos con ellos es una de las experiencias más lindas que uno se lleva de los viajes.

Quizás por tantas visitas a templos pensó que éramos muy devotas. Como el inglés que hablaba constaba de unas pocas palabras, era difícil entendernos a pesar de su sonrisa y empeño. Con calor, cansancio y nada interesante para ver sólo deseábamos subir al tren, pero aún faltaba mucho . Nos despedimos del chofer y nos sentamos a esperar en el andén.

Reconozco que calculé mal los tiempos y distancias . En ambas ciudades había poco para ver y en coche se hace muy rápido. Había decidido el tren nocturno para ahorrar una noche de hotel y ganar tiempo de recorrido. La espera en esa estación se nos hizo interminable y sumado a esto, el ambiente hasta las 23:30 hs, mi hija se puso muy intranquila . Practicamente no se ven mujeres, la estación es enorme con muchos andenes, como lo son en general en India. Temíamos equivocarnos de tren ya que pasaban muchos. La gente que circula se ve de peor aspecto. Lo correcto hubiera sido volver en coche a Chennai y tomar allí el tren, que era de donde salía. El tiempo nos hubiera sobrado para ello.
Finalmente apareció en cartelera . Cruzamos los 3 andenes por el puente peatonal. Subimos al tren y nos acomodamos en las dos literas inferiores. Había sacado ubicación en las camas bajas porque el aire acondicionado suele dar muy directo en las de arriba. Mi hija tenía un poco de reparo, ya que en Tailandia tuvo mala experiencia en tren nocturno con las cucarachas . Yo extendí las sábanas y dormí muy bien ;s), como lo había hecho en mi viaje anterior a India de Agra a Varanasi. Los trenes son excelentes. El final del recorrido era Tichy, imposible pasarnos, pero como no lo sabía chequeaba por donde estábamos con MapsMe .

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