Viajar a Groenlandia con agencia o por libre ✈️ Foro Europa Escandinava ✈️ Pg 12 Ir a página Anterior 1, 2, 3 ... 11, 12, 13, 14, 15 Siguiente |
Conchi1982 Escribió: |
Hola foreros! Estoy planteando un viaje de 15 días a Islandia y leyendo el foro de Groenlandia ( siempre me ha "llamado" está gran isla) me ha impactado. Nuestra idea es ir la primera quincena de septiembre y me gustaría saber vuestra opinión para estas fechas y si veis viable una "escapada" de 4 días a Groenlandia para ver los icebergs y glaciares ( es lo que más me gusta)y que zona al tener que seleccionar por ser menos días me recomendáis. |
Viatger360 Escribió: |
Saludos Ader. En la segunda quincena de Agosto no será muy fácil ver auroras, ya que todavía hay mucha luz. En realidad las auroras están todo el año pero en Oct - Feb al haber mucahs mas horas de oscuridad y más oscuridad, son más fáciles de ver (que alguien emcorrija si me equivoco) Yo estuve por libre y no soy nada profesional, ni amateur, de hecho ni aficionado a caminar jajaja. Yo te recomendaría hacerlo por tu cuenta, es sencillo, las caminatas también lo son, hay barcos que van pro al costa (estuve 3 dias) vuelos, Ilulisat que digamos es de lo más espectacular, tiene 3 rutas de colores diferentes, se pueden hacer todas en un día! son sencilals y vistas espectaculare.s Otro tema es si queires cargar con tienda etc y estar 3 días de paseo (no es mi estilo). |
thorbender Escribió: |
Bueno, pues ya estoy de vuelta del que posiblemente haya sido el mejor destino de mi vida. Mira que el año pasado las Feroe pusieron el listón altísimo (aunque mis frailecillos son insuperables, eso sí ), pero Groenlandia está a otro nivel. Aunque tengo que decir que me parecieron más bonitos algunos pueblitos de las Feroe, con los tejados de hierba; y mismamente Tinganes, el "casco viejo" de Thorshavn, es una preciosidad... Es otro mundo, la vida transcurre de otra manera, y eso se refleja también en el tema vuelos, hay que cambiar el chip y dejar fluir...el único vuelo que salió a su hora fue el de Ilulissat a Narsarsuaq; eso sí, en teoría la escala era sólo en Nuuk, pues el avión hizo parada en Kangerlussuaq (eso es como el autobús de línea ) y de ahí a Nuuk; escala larga en un aeropuerto que no tiene absolutamente NADA (y eso que es la capital), y de ahí a Narsarsuaq, llegada con tres cuartos de hora de retraso. De entrada, a la ida, salimos de Copenhague con más de media hora de retraso; yo acongojada porque tenemos una escala de 50 min en Kangerlussuaq para pillar el vuelo a Ilulissat; el avión es portugués (a la vuelta igual, nos explicaron que el pepino de Air Greenland estaba estropeado y les habían pedido el servicio a ellos) con lo que la tripulación me entiende perfectamente. Les cuento la película y me dicen que ni me preocupe, que a la llegada están los aviones vacíos esperando por nosotros, que en ningún caso se irán sin nosotros. Ya más relajada, disfruto del vuelo con el servicio de a bordo con cervezas, vinos chilenos, comida...tanto tiempo sin tener esto "gratis"! . Y disfrutando de unas vistas de Islandia nevada insuperables. Llegamos a Kangerlussuaq y vemos en pista varios autobuses con alas que van a diferentes destinos. En los monitores sólo ponen los destinos y las horas, esperando a que nos toque a nosotros echamos un vistazo por el enano aeropuerto internacional. Todos embarcan por el mismo sitio, uno detrás de otro. Ya pone Ilulissat, por fin. Montamos en el avión de hélices (con lo que me gustan , y los que me he chupado) y una hora más tarde de lo previsto llegamos a nuestro destino. Aquí nos sirven bebidas y galletas. El paisaje, ni que decir tiene, espectacular. Tenemos la suerte de sentarnos del lado que podemos ver el Fiordo al aterriza, y es para caerse de culo. Nos está esperando el transfer, reservé el Icefjord Apartments. Gran elección, está en el centro de la ciudad (aunque sea pequeña en habitantes para nuestros estándares, está muy extendida y a lo tonto acabas andando) y al lado de supermercados, bares, la oficina de excursiones... Como teníamos cocina, nos llevamos la comida de aquí; hay varios supermercados con precios caros, y la comida en los restaurantes ni qué decir. Las camas comodísimas (necesario para descansar de tanta pateada) y con baño propio. Cada noche cuesta un huevo, pero como todo allí. al menos, hemos comido bien, y lo que nos hemos ahorrado. Reservé dos excursiones en barco con World of Greenland en su web; el paseo entre icebergs y el safari de ballenas. Geniales, y tuvimos la suerte de poder ver ballenas. Hablan inglés de corrido. Eso sí, te cobran la famosa tasa por pagar con tarjeta, pero no te queda otra... Ilulissat es una maravilla, no me extraña que el fiordo sea Patrimonio de la Humanidad. Hay varios trekkings para hacer, de diferentes colores, y sólo hay que seguir las marcas para hacerlos. No son excesivamente duros, pero los riscos son elevados y acabas el día reventado. En Ilulissat está la mayor concentración de perros de trineo, hay muchísimos, y había mucha crías, para comérselos. Están atados y te recomiendan no acercarte, te dicen que no son animales de compañía sino de trabajo; pero las crías están sueltas y son ell@s los que se acercan corriendo a por carantoñas. Un frío que pela, una mañana hasta nos nevó; y en los barcos hay que abrigarse pero bien. Afortunadamente, no había excesivo turismo, quizá por lo pronto de la temporada. Había mucho hielo en el agua y unos icebergs impresionantes. Vuelvo convencida de que ha sido la mejor fecha para ir. Eso sí, el sol no se pone en todo el día y para mí fue muy estresante; tapando la ventana con colchas y toallas para mitigar un poco, aunque del cansancio dormíamos como marmotas. Viajamos después al sur, a Narsarsuaq. Allí hace menos frío y está llenos de mosquitos-helicóptero. Afortunadamente, o la loción me debió de hacer efecto o que yo no les gusté, he vuelto sin una picadura. Mi marido con dos Vamos al Hotel Narsarsuaq, el único que hay, que es hotel y hostal. Son barracones (como prácticamente todo el pueblo) aprovechados de cuando fue base americana en la II GM. Habitación sin lujos y el baño bastante mal, a precio de oro la noche . Eso sí, de nuevo las camas comodísimas, la vida nos da. Aquí el sol tampoco se pone pero al haber montañas altas, se mitiga la luz más. El desayuno bien, te sirve para alimentarte y tirar luego sólo de bocadillos. Hay un supermercado (también caro) pero con lo necesario para aprovisionarse; pensando que no habría nada compramos el pan en Ilulissat para los bocadillos para las excursiones y lo podríamos haber comprado reciente allí sin problema...eso sí, a las 5 cerrado. Tenemos contratada una excursión con BlueIce, al glaciar Qooroq y a Igaliku. Vamos a la oficina a pagarla y nos explican todo perfectamente, también inglés sin problema. La reservé desde aquí a través de su e-mail. Al día siguiente, hacemos el famoso trekking por el Valle de las Mil Flores (estaban saliendo, eso en su apogeo tiene que estar muy bonito) y subimos a ver el glaciar Kiattut. Madre de dios qué salvajada. Tras la pateada por el valle, nos toca escalar literalmente una montaña que dicen de 400m (y lo será, oye) pero que fue demencial. Encima con el sol cascando de pleno. Arriba un vendaval frío, menos mal que vamos con ropa en las mochilas, además de comida y agua. Eso sí, la visión del glaciar, te quita toda pena. Bajamos hasta él lo más que pudimos, y comimos allí. La vuelta, temiendo la bajadita de marras. Hay una cuerda, que da bastante cosica porque la ves un tanto ajada, pero que me dio la vida. Y eso que en alguno tramos acabé bajando sentada, de lo empinado. Lo bueno de todo, solos. Absolutamente. Por fin un rincón en el mundo donde no vimos a nadie. LLegamos al hotel a media tarde reventados; duchita, algo de cena, voltadol, ibuprofeno y a la cama. Al día siguiente, excursión con BlueIce. Icebergs infinitamente más pequeños que en Ilulissat pero muy bonitos porque la mayoría son azules. Hace rasqui pero muchísimos menos que en Ilulissat. Vamos con dos señoras inglesas nada más. Nos dan un martini blanco, con hielo que coge del mar. No se acerca al frente del glaciar cuando podía haberse acercado más perfectamente, pero bueno y lo vemos desde lejos. Pero a cambio, "atraca" en un iceberg plano y podemos subirnos a él. Pasote total!!! Volvemos a dejar a las señoras y nos llevan a Itillaq, desde donde parte el camino para Igaliku, otra vez a andar 4 o 5 km . El camino es muy incómodo porque es de piedras grandes y se anda muy mal, buscamos senderos por la hierba. Igaliku es muy cuco, un asentamiento pequeño en un paisaje precioso. Tenemos la suerte de que aún hay bastante nieve en las altas montañas y con los icebergs en el agua queda precioso. Comemos allí los bocadillos, y vuelta al "puerto" a por el barco de regreso a Narsarsuaq. El sur es muy diferente, más verde, con árboles y altas montañas. Creo que se debe ir a los dos sitios para ver el contraste, y eso que la isla es tan enooooorme que hemos visto una micro parte . Las distancias son enormes, los espacios son muy vastos, ves una cosa que parece que está cerca pero coñe lo que se tarda en llegar. El parque móvil que hay en las ciudades está hecho polvo, llenos de abolladuras y muy sucios; la mayoría son furgonetas, jeeps, e Igaliku, el paraíso de los quads. No hay aceras, sólo márgenes de tierra en las calzadas, hay un polvo constante por los coches y la gente (me refiero sobre todo a Ilulissat, en Narsasuaq no vimos a casi nade por la "calle"). Así te queda el pelo y la ropa... El tema comunicaciones, yo con mi operadora Pepephone, que usa cobertura movistar, sin problema de red, podía emitir y recibir llamadas (a 3€) y enviar mensajes (a 1,20€). No hay un p***uto sitio que tenga wifi gratis, todo es de pago, puedes comprar desde 30min a 24 horas, a precio de oro. Te ríes por no llorar. El tema aeropuertos es un mundo aparte, ya no por sus tamaños. He estado en aeropuertos reducidos (el de las Feroe no es que sea muy grande que digamos ), pero lo que más me ha sorprendido es que no hay ningún tipo de controles. Dejas las maletas en la cinta, te sientas con los dedos cruzados rezando para que no retrasen mucho tu vuelo, y cuando te toca, sales a la pista por la puerta de embarque. Ni control de líquidos, ni tablets fuera, ni arcos de seguridad. Nada. Cero. Sólo pasamos un control a la vuelta en Kangerlussuaq para ir ya a Copenhague, por eso de ser salida internacional, digo yo... A pesar de tanto vuelo y retrasos, no hemos tenido ningún problema con las maletas, no se perdió ni rompió ninguna Los aviones internos son de hélices de 37 plazas, no más. Como es obvio, se tira mucho de helicóptero, sobre todo en la parte sur lo vimos muchísimo, para ir a las poblaciones cercanas. No sé si ellos tendrán descuentos de residentes, porque se les debe ir el sueldo en vuelos... Los groenlandeses son muy majos y muy "de pueblo" en el sentido de que te saludan al pasar y siempre están con una sonrisa, acostumbrados a ver mochileros perdidos por esos lares. Hay obviamente también daneses, sobre todos los que llevan las oficinas de excursiones. El idioma no hay dios que lo entienda, leerlo es un trabalenguas, aunque suena como el finlandés, es decir, como si les estuviera dando un ictus al hablar. En Ilulissat, los horarios de los supermercados son más amplios, algunos Spar están hasta las 23:00, y todos abren en domingo también. Una cosa que no sabía y me chocó al leerlo en la carpeta informativa en el apartamento, es que tienen restringido el horario de venta de alcohol. De lunes a viernes hasta las 18:00, los sábados hasta las 13:00 y los domingos no se vende. El sábado dio la casualidad de que entramos en un súper a las 13:05 y tenían echada una lona en el frigo de las cervezas, y luego vimos en los demás las cámaras frigoríficas apagadas. Menos mal que el día que llegamos compramos cervezas artesanales locales y tuvimos para todos los días, antes de haber leído las restricciones Los alcoholes fuertes están en un aparte y los tienes que pedir. En Groenlandia hay un alto grado de alcoholismo, supongo que piensan que así lo pueden mitigar, cuando el viernes un hombre se estaba llevando cervezas por cajas... Y también es el top de suicidios En fin, un viaje caro pero indescriptible, impresionante, ya estamos haciendo cruces a ver si podemos volver. Cualquier duda sobre organización o cualquier otra cosa, fresquito lo tengo |
thorbender Escribió: |
Bueno, pues ya estoy de vuelta del que posiblemente haya sido el mejor destino de mi vida. Mira que el año pasado las Feroe pusieron el listón altísimo (aunque mis frailecillos son insuperables, eso sí ), pero Groenlandia está a otro nivel. Aunque tengo que decir que me parecieron más bonitos algunos pueblitos de las Feroe, con los tejados de hierba; y mismamente Tinganes, el "casco viejo" de Thorshavn, es una preciosidad... Es otro mundo, la vida transcurre de otra manera, y eso se refleja también en el tema vuelos, hay que cambiar el chip y dejar fluir...el único vuelo que salió a su hora fue el de Ilulissat a Narsarsuaq; eso sí, en teoría la escala era sólo en Nuuk, pues el avión hizo parada en Kangerlussuaq (eso es como el autobús de línea ) y de ahí a Nuuk; escala larga en un aeropuerto que no tiene absolutamente NADA (y eso que es la capital), y de ahí a Narsarsuaq, llegada con tres cuartos de hora de retraso. De entrada, a la ida, salimos de Copenhague con más de media hora de retraso; yo acongojada porque tenemos una escala de 50 min en Kangerlussuaq para pillar el vuelo a Ilulissat; el avión es portugués (a la vuelta igual, nos explicaron que el pepino de Air Greenland estaba estropeado y les habían pedido el servicio a ellos) con lo que la tripulación me entiende perfectamente. Les cuento la película y me dicen que ni me preocupe, que a la llegada están los aviones vacíos esperando por nosotros, que en ningún caso se irán sin nosotros. Ya más relajada, disfruto del vuelo con el servicio de a bordo con cervezas, vinos chilenos, comida...tanto tiempo sin tener esto "gratis"! . Y disfrutando de unas vistas de Islandia nevada insuperables. Llegamos a Kangerlussuaq y vemos en pista varios autobuses con alas que van a diferentes destinos. En los monitores sólo ponen los destinos y las horas, esperando a que nos toque a nosotros echamos un vistazo por el enano aeropuerto internacional. Todos embarcan por el mismo sitio, uno detrás de otro. Ya pone Ilulissat, por fin. Montamos en el avión de hélices (con lo que me gustan , y los que me he chupado) y una hora más tarde de lo previsto llegamos a nuestro destino. Aquí nos sirven bebidas y galletas. El paisaje, ni que decir tiene, espectacular. Tenemos la suerte de sentarnos del lado que podemos ver el Fiordo al aterriza, y es para caerse de culo. Nos está esperando el transfer, reservé el Icefjord Apartments. Gran elección, está en el centro de la ciudad (aunque sea pequeña en habitantes para nuestros estándares, está muy extendida y a lo tonto acabas andando) y al lado de supermercados, bares, la oficina de excursiones... Como teníamos cocina, nos llevamos la comida de aquí; hay varios supermercados con precios caros, y la comida en los restaurantes ni qué decir. Las camas comodísimas (necesario para descansar de tanta pateada) y con baño propio. Cada noche cuesta un huevo, pero como todo allí. al menos, hemos comido bien, y lo que nos hemos ahorrado. Reservé dos excursiones en barco con World of Greenland en su web; el paseo entre icebergs y el safari de ballenas. Geniales, y tuvimos la suerte de poder ver ballenas. Hablan inglés de corrido. Eso sí, te cobran la famosa tasa por pagar con tarjeta, pero no te queda otra... Ilulissat es una maravilla, no me extraña que el fiordo sea Patrimonio de la Humanidad. Hay varios trekkings para hacer, de diferentes colores, y sólo hay que seguir las marcas para hacerlos. No son excesivamente duros, pero los riscos son elevados y acabas el día reventado. En Ilulissat está la mayor concentración de perros de trineo, hay muchísimos, y había mucha crías, para comérselos. Están atados y te recomiendan no acercarte, te dicen que no son animales de compañía sino de trabajo; pero las crías están sueltas y son ell@s los que se acercan corriendo a por carantoñas. Un frío que pela, una mañana hasta nos nevó; y en los barcos hay que abrigarse pero bien. Afortunadamente, no había excesivo turismo, quizá por lo pronto de la temporada. Había mucho hielo en el agua y unos icebergs impresionantes. Vuelvo convencida de que ha sido la mejor fecha para ir. Eso sí, el sol no se pone en todo el día y para mí fue muy estresante; tapando la ventana con colchas y toallas para mitigar un poco, aunque del cansancio dormíamos como marmotas. Viajamos después al sur, a Narsarsuaq. Allí hace menos frío y está llenos de mosquitos-helicóptero. Afortunadamente, o la loción me debió de hacer efecto o que yo no les gusté, he vuelto sin una picadura. Mi marido con dos Vamos al Hotel Narsarsuaq, el único que hay, que es hotel y hostal. Son barracones (como prácticamente todo el pueblo) aprovechados de cuando fue base americana en la II GM. Habitación sin lujos y el baño bastante mal, a precio de oro la noche . Eso sí, de nuevo las camas comodísimas, la vida nos da. Aquí el sol tampoco se pone pero al haber montañas altas, se mitiga la luz más. El desayuno bien, te sirve para alimentarte y tirar luego sólo de bocadillos. Hay un supermercado (también caro) pero con lo necesario para aprovisionarse; pensando que no habría nada compramos el pan en Ilulissat para los bocadillos para las excursiones y lo podríamos haber comprado reciente allí sin problema...eso sí, a las 5 cerrado. Tenemos contratada una excursión con BlueIce, al glaciar Qooroq y a Igaliku. Vamos a la oficina a pagarla y nos explican todo perfectamente, también inglés sin problema. La reservé desde aquí a través de su e-mail. Al día siguiente, hacemos el famoso trekking por el Valle de las Mil Flores (estaban saliendo, eso en su apogeo tiene que estar muy bonito) y subimos a ver el glaciar Kiattut. Madre de dios qué salvajada. Tras la pateada por el valle, nos toca escalar literalmente una montaña que dicen de 400m (y lo será, oye) pero que fue demencial. Encima con el sol cascando de pleno. Arriba un vendaval frío, menos mal que vamos con ropa en las mochilas, además de comida y agua. Eso sí, la visión del glaciar, te quita toda pena. Bajamos hasta él lo más que pudimos, y comimos allí. La vuelta, temiendo la bajadita de marras. Hay una cuerda, que da bastante cosica porque la ves un tanto ajada, pero que me dio la vida. Y eso que en alguno tramos acabé bajando sentada, de lo empinado. Lo bueno de todo, solos. Absolutamente. Por fin un rincón en el mundo donde no vimos a nadie. LLegamos al hotel a media tarde reventados; duchita, algo de cena, voltadol, ibuprofeno y a la cama. Al día siguiente, excursión con BlueIce. Icebergs infinitamente más pequeños que en Ilulissat pero muy bonitos porque la mayoría son azules. Hace rasqui pero muchísimos menos que en Ilulissat. Vamos con dos señoras inglesas nada más. Nos dan un martini blanco, con hielo que coge del mar. No se acerca al frente del glaciar cuando podía haberse acercado más perfectamente, pero bueno y lo vemos desde lejos. Pero a cambio, "atraca" en un iceberg plano y podemos subirnos a él. Pasote total!!! Volvemos a dejar a las señoras y nos llevan a Itillaq, desde donde parte el camino para Igaliku, otra vez a andar 4 o 5 km . El camino es muy incómodo porque es de piedras grandes y se anda muy mal, buscamos senderos por la hierba. Igaliku es muy cuco, un asentamiento pequeño en un paisaje precioso. Tenemos la suerte de que aún hay bastante nieve en las altas montañas y con los icebergs en el agua queda precioso. Comemos allí los bocadillos, y vuelta al "puerto" a por el barco de regreso a Narsarsuaq. El sur es muy diferente, más verde, con árboles y altas montañas. Creo que se debe ir a los dos sitios para ver el contraste, y eso que la isla es tan enooooorme que hemos visto una micro parte . Las distancias son enormes, los espacios son muy vastos, ves una cosa que parece que está cerca pero coñe lo que se tarda en llegar. El parque móvil que hay en las ciudades está hecho polvo, llenos de abolladuras y muy sucios; la mayoría son furgonetas, jeeps, e Igaliku, el paraíso de los quads. No hay aceras, sólo márgenes de tierra en las calzadas, hay un polvo constante por los coches y la gente (me refiero sobre todo a Ilulissat, en Narsasuaq no vimos a casi nade por la "calle"). Así te queda el pelo y la ropa... El tema comunicaciones, yo con mi operadora Pepephone, que usa cobertura movistar, sin problema de red, podía emitir y recibir llamadas (a 3€) y enviar mensajes (a 1,20€). No hay un p***uto sitio que tenga wifi gratis, todo es de pago, puedes comprar desde 30min a 24 horas, a precio de oro. Te ríes por no llorar. El tema aeropuertos es un mundo aparte, ya no por sus tamaños. He estado en aeropuertos reducidos (el de las Feroe no es que sea muy grande que digamos ), pero lo que más me ha sorprendido es que no hay ningún tipo de controles. Dejas las maletas en la cinta, te sientas con los dedos cruzados rezando para que no retrasen mucho tu vuelo, y cuando te toca, sales a la pista por la puerta de embarque. Ni control de líquidos, ni tablets fuera, ni arcos de seguridad. Nada. Cero. Sólo pasamos un control a la vuelta en Kangerlussuaq para ir ya a Copenhague, por eso de ser salida internacional, digo yo... A pesar de tanto vuelo y retrasos, no hemos tenido ningún problema con las maletas, no se perdió ni rompió ninguna Los aviones internos son de hélices de 37 plazas, no más. Como es obvio, se tira mucho de helicóptero, sobre todo en la parte sur lo vimos muchísimo, para ir a las poblaciones cercanas. No sé si ellos tendrán descuentos de residentes, porque se les debe ir el sueldo en vuelos... Los groenlandeses son muy majos y muy "de pueblo" en el sentido de que te saludan al pasar y siempre están con una sonrisa, acostumbrados a ver mochileros perdidos por esos lares. Hay obviamente también daneses, sobre todos los que llevan las oficinas de excursiones. El idioma no hay dios que lo entienda, leerlo es un trabalenguas, aunque suena como el finlandés, es decir, como si les estuviera dando un ictus al hablar. En Ilulissat, los horarios de los supermercados son más amplios, algunos Spar están hasta las 23:00, y todos abren en domingo también. Una cosa que no sabía y me chocó al leerlo en la carpeta informativa en el apartamento, es que tienen restringido el horario de venta de alcohol. De lunes a viernes hasta las 18:00, los sábados hasta las 13:00 y los domingos no se vende. El sábado dio la casualidad de que entramos en un super a las 13:05 y tenían echada una lona en el frigo de las cervezas, y luego vimos en los demás las cámaras frigoríficas apagadas. Menos mal que el día que llegamos compramos cervezas artesanales locales y tuvimos para todos los días, antes de haber leído las restricciones Los alcoholes fuertes están en un aparte y los tienes que pedir. En Groenlandia hay un alto grado de alcoholismo, supongo que piensan que así lo pueden mitigar, cuando el viernes un hombre se estaba llevando cervezas por cajas... Y también es el top de suicidios En fin, un viaje caro pero indescriptible, impresionante, ya estamos haciendo cruces a ver si podemos volver. Tengo casi 2000 fotos, verano entretenido en escogerlas y quitar las malas; así cuando me derrita de calor, puedo consolarme viendo tanto hielo Cualquier duda sobre organización o cualquier otra cosa, fresquito lo tengo |
thorbender Escribió: |
A Groenlandia puedes ir por tu cuenta perfectamente, organizarlo tú a tu gusto, tus rutas, tus alojamientos...Hoy día ya se puede hacer todo a través de internet, comprar los vuelos, reservar el alojamiento, las excursiones...Ya te digo que en booking tienes unos cuantos, de hecho yo reservé ahí el de Ilulissat; el de Narsarsuaq desde su propia web. Y si ya te sobra la pasta, hasta puedes hacer excursiones privadas para ti solito, pero si las normales ya son caras, no quiero ni pensar lo que será un barquito para ti solo. Las excursiones en los barcos, pues son como en todas partes, vas con más gente (menos que en un bateau parisino, desde luego ), pero los trekkings que hicimos fuimos nosotros solos por donde nos dio la gana... Yo también pensaba como tú, que sólo se podía ir con agencias y paquetes cerrados, por eso siempre lo iba dejando; pero cuando nos decidimos a ir, empecé a investigar y me di cuenta de que se podía hacer como cualquier otro viaje normal, solo que en vez de alquilar coches, tienes que tirar de vuelos internos . Ah, y no te sale más caro que con agencias, casi que más bien al contrario... Lo único que se necesita es dinero... |
thorbender Escribió: |
A Groenlandia puedes ir por tu cuenta perfectamente, organizarlo tú a tu gusto, tus rutas, tus alojamientos...Hoy día ya se puede hacer todo a través de internet, comprar los vuelos, reservar el alojamiento, las excursiones...Ya te digo que en booking tienes unos cuantos, de hecho yo reservé ahí el de Ilulissat; el de Narsarsuaq desde su propia web. Y si ya te sobra la pasta, hasta puedes hacer excursiones privadas para ti solito, pero si las normales ya son caras, no quiero ni pensar lo que será un barquito para ti solo. Las excursiones en los barcos, pues son como en todas partes, vas con más gente (menos que en un bateau parisino, desde luego ), pero los trekkings que hicimos fuimos nosotros solos por donde nos dio la gana... Yo también pensaba como tú, que sólo se podía ir con agencias y paquetes cerrados, por eso siempre lo iba dejando; pero cuando nos decidimos a ir, empecé a investigar y me di cuenta de que se podía hacer como cualquier otro viaje normal, solo que en vez de alquilar coches, tienes que tirar de vuelos internos . Ah, y no te sale más caro que con agencias, casi que más bien al contrario... Lo único que se necesita es dinero... |
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