En realidad el destino de estas vacaciones no era este, pero por motivos personales, tuvimos que cambiar de planes, y al final Roma fue nuestra opción. Una vez decidido el hotel, y cogidos los vuelos, todo en agencia, lo siguiente fue empezar a ver cosas que ver en Roma, yo las buscaba y mi marido las iba localizando en el mapa
.Trabajo en equipo. Las dudas que nos fueron surgiendo las iba preguntando en el foro, y con las respuestas obtenidas ya teníamos todo preparado, ya solo esperar que llegara el 28 de Junio, fecha de salida.
Este día, mi marido sale de trabajar del relevo de noche a las 6 de la mañana. Ducha, una siestita y ya preparados nos disponemos a coger el bus que nos lleve a Bilbao, para coger el avión. Volar me da miedo, peroooo........ Para cuando me doy cuenta el piloto dice que aterrizaremos antes, porque el viento de cola ha favorecido el vuelo, y yo sin enterarme...Tenemos contratado un taxi que nos llevará del aeropuerto a Roma, y menos mal, que locura
.No pensaba que había tanta distancia hasta la capital. Entre el castellano chapurriado del taxista, y nuestro italiano patatero, entablamos conversación con el chofer, muy majo por cierto, y cuando estamos entrando en Roma nos va diciendo los monumentos que nos encontramos de paso, y por donde ir a otros sitios....y de repente llegando al Coliseo, me situo en el mismo sitio de hace tres años, cuando pasamos un día en Roma, procedentes de un crucero.... y asi hasta llegar a nuestro destino, el hotel Barberini, del que escribiré más adelante. Hacemos el chekking, dejamos las maletas y como tenemos hambre decidimos salir a picar algo, una tabla, en un sitio chiquitin, muy típico romano. Vale, ya hemos comido, habrá que ir a deshacer la maleta, y mi marido, espera un poco..... El había estado mirando por google maps, y tenía muchos puntos localizados. Y yo, pero las maletas.... y el , enseguida, vamos a pasear un poco
y por arte de magia me encuentro ante la Fontana de Trevi
, hace tres años estaba de obras y apenas pudimos verla, pero ahora...... y lo mejor, la teníamos a cinco minutos del hotel....Te acuerdas donde comimos unos helados tan ricos?? y yo, pues no, pero sin tan buenos estaban ya estamos tardando
Después de saborear el primer helado romano, con las mejores vistas(y no iba a ser la única vez), ahora si, vamos al hotel, y en lo que deshago la maleta mi marido, cae en brazos de Morfeo, estaba sin dormir. Para esta noche tenemos cogido un recorrido en microbús, Roma Nocturna lo llaman, me rio, porque casi todo el recorrido fue antes de que oscureciera
Lo único que merece la pena en este recorrido es el Vaticano, que si que los vimos totalmente iluminado, además con tan poco gente como había en la plaza era una gozada estar allí. El microbús nos deja en la Plaza Barberini, muy cerca de nuestro hotel, y ahora si, a descansar que se nota el cansancio
.
Hemos dormido como troncos, para las 7 de la mañana ya estamos aseados y en la terraza de nuestro hotel, en la sexta planta, donde vamos a desayunar todos los días, con unas vistas de Roma, que ya las quisiera yo en mi casa.
Alla vamos, saliendo del hotel, en un minutos, nos encontramos con la esquina de las Quatrro Fontane. Pequeño lio con el mapa, a ver si nos situamos ya, y paseando y sin querer nos encontramos en el Foro y Mercado Trajano y de aquí pasando por el Coliseo , a San Clemente. Están celebrando misa, y por respeto, no voy a sacar fotos, ya pasaremos en otro momento, si que empezamos bien
Como hoy vamos a ir según se nos ocurran los sitios, pues a ve la mirilla de los Caballeros de Malta, que es una cosa que me hace ilusión, pasamos por el Circo Massimo, y nos ponemos en camino. Antes de llegar a la Piazza de la mirilla, tenemos una anécdota. Un señor muy preparado, nos para el coche, y pregunta por donde ir al Coliseo, mi marido le explica, y como le hemos hecho tanto favor, nos dice que es un representante de la casa Valentino, ahí es nada
y como agradecimiento nos quiere regalar un bolso auténtico del muestrario, y para mi marido una reloj con una corbata, todo valorado en 2.000 euros, lo único que ha tenido un problema con la tarjeta y que necesita 10 euros para echarle gasolina al coche, jajajajajaja. Arrivederci, todavía me sale la carcajada cuando me acuerdo del sinvergüenza. A lo que íbamos, llegamos a la mirilla y me quedo prendada de la vista, se ve perfectamente el Vaticano
.Después de un rato por ahí arriba, iniciamos el camino abajo, hacia la Boca de la verdad, joder, vaya cola....Total, que como a nosotros no nos va a morder, sacamos la foto de la dichosa boca por la verja, y ya esta. Vemos los dos templos, cruzamos el puente y al Trastevere. Antes de iniciar nuestra ruta por aquí, entramos un bar, para ir al servicio, nos tomamos un tentenpie y de paso estamos un rato a la fresca con el aire acondicionado , que hace bastante calor. Estamos listos? Pues a Santa Maria del Trastevere, no voy a poner nada que no esté escrito ni dicho, aquí empiezo a aficionarme a los mosaicos. Y luego a callejear un rato y a perdernos...Llevamos una buena pateada, entramos en una pizzería, llenamos el buche, y ha seguir pateando. De propina, nos encontramos de camino con Santa Maria de la Scala, que bonitaaaaa.......Ya está bien del Trastevere, por hoy. Cruzamos el puente Garibaldi y nos metemos en el Ghetto. Vemos el teatro Marcelo y la Puerta de Octavia, esta tampoco nos la esperábamos... Por cierto, cuanto llevamos ya andando???Siguiente destino, Fontana de las Tortugas, y la Iglesia del Ghesu. Había una coral cantando, descansamos un poquito y luego ya apreciamos la iglesia con calma.... De aquí a la iglesia de San Ignacio de Loiola, más de lo mismo, había oído que las iglesias de Roma, son a cada cual más bonita, y lo he comprobado in situ. Y pateando pateando, pasamos por el Panteón, ya entraremos otro día, vemos la columna a de Marco Aurelio, compramos algo para picar en una tienda pequeña y para el hotel Barberin. Después de nuestro banquete y ya aseados y recuperados un poco, decidimos salir a pasear un poco mas. De la Piazza Barberini, subiendo por la Via Sistina llegamos a Trinita de Monti, bajamos la escalinata, entre un montón de gente y pakistanís queriendo venderte rosas y palitos de selfie, y llegamos a ¿la Barcazza? donde está???? hay que hacer un tretis autentico para poder sacar una foto en condiciones
, ya vendremos otro día.... seguimos paseando y a ver la Fontana de Trevi, iluminada, mientras nos comemos un bien merecido helado. Y ya ha descansar que el cuerpo lo pide a gritos