Queríamos irnos unos días fuera para desconectar pero no sabíamos muy bien donde nos apetecía ir asi que después de mucho mirar nos decidimos quedar por España y hacernos una rutilla por La Rioja.
Tras mirar en los foros nos decidimos por Logroño, Vitoria y un día para visitar la zona de las bodegas de alrededor de las que la gente habla muy bien. Sobre todo, y lo más importante es que todo el mundo coincidía en que por la zona se comía genial y como somos grandes comedores nos decidimos sí o sí.
Salimos el lunes 29 de Octubre de Madrid y en 4 horitas, y sin problemas de tráfico debido a que era lunes laboral, estábamos en Logroño.
Nos alojamos en el AC La Rioja que aunque está a 15 minutos andando del centro estaba bastante bien. La habitación genial y el precio también muy bien porque yo tenía descuentillo aunque quizá os aconsejo quedaros más cerca del centro porque por el día no, pero por la noche nos dío da un poco de pereza ir y volver al hotel...
Tras dejar las maletas nos dirijimos al centro de la ciudad para visitarla. Eran sobre las 12 de la mañana y es que aunque nos gustó mucho tengo que decir que Logroño es pequeñito y se ve en seguida...
Desde el hotel cogimos recta la calle Madre de Dios y luego giramos a la derecha por la calle Doce Ligero de Artillería hasta el moderno ayuntamiento creado por Moneo.
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Al lado está la bonita escuela de Arte y mas tarde entramos en la calle Portales hasta la bonita Catedral de la Redonda con sus torres gemelas situada en la Plaza del Mercado.
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La calle Portales es el centro de Logroño con sus tiendecitas de complementos y sus restaurantes. Os dejo una foto de la calle y la de la chimenea de la antigua tabacalera situada al final de esta.
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Al final de la calle está la oficina de turismo y ya detrás esá toda la zona nueva de Logroño.
Cogimos bastante información de la zona en la oficina y seguimos andando por las diferentes callecitas hasta el mercado de Abastos. Este mercado está muy bien si se quiere comprar vino o embutidos y otras cosas típicas de la zona (muy buena fruta y verduras aunque no era plan de comprar claro....
A esta hora teníamos hambre y teníamos que empezar a probar tapitas y que mejor sitio que la Calle Laurel y sus aldeañas como la de San Agustín.
En el bar Tío Agus probamos un pincho moruno metido en un panecillo super blandido y aderezado con especial diferentes...Muy bueno!
En El Soriano probamos sus famosos champis que estaban bueníiisimo, quizá fue el que más me gustó porque la salsa de los campiñones era increiblemente buena, me podía comer 20 pero claro había que probar más tapitas....
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En el Muro problamos unos bollos preñaos de picadillo con huevo de codorniz buenísimos. También probamos otro de foie con queso de cabra muy rico también.
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Mmmmmm...... Todo estaba super rico....
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El último fue en un bar más moderno que resultó ser el peor pero bueno tampoco estaba mal. Se llamaba La Fontana y probamos Salmón con queso Nueces y otro de morcilla que no se proqué estaban un poco secos....
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Todo esto claro, con tintos de la Rioja, unos jóvenes, otros crianza....Muy buenos pero claro después de la quinta tapa yo ya me sentía un poquillo mareadilla y decidimos volver un rato al hotel a echarnos la siesta antes de volver a salir por la tarde....
Volvimos al hotel por la zona por donde pasa el camino de Santiago por la calle del Norte que es paralela al gran Parque del Ebro pasando por el Puente de Hierro primero y luego por el Puente de Piedra, muy emblemático en Logroño por donde entran los peregrinos a la ciudad.
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Un par de horas más tarde estabamos ya recuperados de tanto vinito y volvimos al centro.
Esta vez fuimos hasta el final de la calle Madre de Dios para ver de noche el Puente de Piedra y subir por la Rua Vieja por donde pasa el Camino de Santiago.
Pasamos por la Iglesia de Santa María de Palacio, y más adelante la Plaza del Juego de la Oca donde tal y como su nombre dice hay un tablero del juego de la Oca con dados con caritas incluidos y al lado la Fuente del Peregrino y la preciosa Iglesia de Santiago que pude visitar antes de que cerraran (os dejo unas fotitos)
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Al final de la calle Barriocepo estaba el Parlamento de la Rioja con su bonito edificio y más adelante La Puerta de Revellín por donde salían de la ciudad los peregrinos que seguían el camino de Santiago que son los restos de las fortificaciones de Logroño.
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Todavía las tiendas estaban abiertas y nos metimos un poco a pasear en la zona nueva, en la calle Gran Vía.
Esta muy chula y además al ser día laboral había mucha gente por todas partes y fue muy agradable.
Callejeamos por allí pasando por la Plaza de la Paz y el Parque El Espolón y nos adentramos de nuevo en la Calle Portales para ver la por la noche y sacar algunas fotitos.
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Teníamos hambre y no sabíamos si comer de nuevo de tapas por la misma zona que durante la comida o hacerlo en un restaurante y esta vez nos decantamos por lo segundo.
Mi chico lo había visto por la mañana y como tiene un radar para detectar restaurantes buenos decidimos entrar y como no, genial.
Se llamaba Herventia y estaba justo en frente de la catedral. y la verdad es que los camareros majísimos y la comida buenísima, os dejo unas fotitos de los platos que eran abundantes y riquísimos:
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Encima no fue muy caro para todo lo que comimos, no nos terminamos ni el vino que nos lo tuvimos que llevar...jejeje...
Después de cenar volvimos caminando al hotel otra vez por la Rua Vieja ya que estabamos bastante cansados Era tarde y encima entre semana y no había mucha gente por la calle pero nos gustó mucho pasear y no hacía mucho frío asi que genial.
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