Hoy ya era nuestra vuelta y despedirnos de Barcelona, pero el vuelo nos salía a las 14.30 horas así que había tiempo para aprovechar algo la mañana y ver un poco más de Barcelona.
A la salida del hotel hicimos el pago de la tasa turística que a fecha de octubre de 2013 es de 0.65 euros por día y persona. Obligatorio para todos los hoteles.
Nos íbamos sin ver muchas cosas, como la subida al Tibidabo, el Camp Nou, El Montjuic
Los chicos de recepción además de sacarme las entradas online de la Sagrada Familia, nos habían recomendado ver el laberinto de Horta que no estaba muy lejos del hotel y que Miguel también me había dicho que era buena idea verlo y que merecía la pena. Tengo claro que cuando un local te sugiere visitar algo, no dudes en hacerlo, ya que son lugares menos conocidos pero con mayor encanto.
Desde el metro del hotel estaba muy bien ya que no era necesario hacer trasbordo y es la parada de Mundet.
Una vez que sales es subir la calle recta (cuesta arriba) y girar a la derecha, donde veras un velódromo y unas escaleras que ya te suben directamente a la entrada.
Abre a las 10.00 y cuesta 2.30 euros. Domingos gratis.
Una zona verde muy bonita, con tres niveles, tranquilo para pasear y con un laberinto de jardines en la parte central y que es lo más identificativo, que quiere reflejar las distintas etapas de la vida.
El laberinto es fácil de salir pero lo pasas bien recorriendo y encontrándote con calles sin salida. Subiendo las escaleras que hay una vez que sales del laberinto consigues unas fotos fantásticas.
Hay baños con acceso gratuito y limpios
Una vez dado por visto el laberinto, nos volvimos nuevamente para recoger maletas, y llegar al aeropuerto, pues aunque no facturábamos, el cercanías tarda media hora y la frecuencia es cada media hora, así que tener en cuenta los tiempos.
Vuelo sin complicaciones, con puntualidad tanto al salir como al llegar.
Desde aquí dar las gracias a todas las personas que me ayudaron a que mi estancia fuera buena, desde el personal del hotel que me facilitó y me asesoró para ver lo mejor de la cuidad, de Miguel, el chico de Sandemans por su magnífico trabajo y sus consejos de ver monumentos a partir de unas horas para ahorrarme las entradas, a los policías que me sacaron las fotos muy serviciales y a los catalanes que les pedí ayuda cuando necesite para llegar a algún punto de visita. Petons para todos ellos!!!!
A la salida del hotel hicimos el pago de la tasa turística que a fecha de octubre de 2013 es de 0.65 euros por día y persona. Obligatorio para todos los hoteles.
Nos íbamos sin ver muchas cosas, como la subida al Tibidabo, el Camp Nou, El Montjuic
Los chicos de recepción además de sacarme las entradas online de la Sagrada Familia, nos habían recomendado ver el laberinto de Horta que no estaba muy lejos del hotel y que Miguel también me había dicho que era buena idea verlo y que merecía la pena. Tengo claro que cuando un local te sugiere visitar algo, no dudes en hacerlo, ya que son lugares menos conocidos pero con mayor encanto.
Desde el metro del hotel estaba muy bien ya que no era necesario hacer trasbordo y es la parada de Mundet.
Una vez que sales es subir la calle recta (cuesta arriba) y girar a la derecha, donde veras un velódromo y unas escaleras que ya te suben directamente a la entrada.
Abre a las 10.00 y cuesta 2.30 euros. Domingos gratis.
Una zona verde muy bonita, con tres niveles, tranquilo para pasear y con un laberinto de jardines en la parte central y que es lo más identificativo, que quiere reflejar las distintas etapas de la vida.
El laberinto es fácil de salir pero lo pasas bien recorriendo y encontrándote con calles sin salida. Subiendo las escaleras que hay una vez que sales del laberinto consigues unas fotos fantásticas.
Hay baños con acceso gratuito y limpios
Una vez dado por visto el laberinto, nos volvimos nuevamente para recoger maletas, y llegar al aeropuerto, pues aunque no facturábamos, el cercanías tarda media hora y la frecuencia es cada media hora, así que tener en cuenta los tiempos.
Vuelo sin complicaciones, con puntualidad tanto al salir como al llegar.
Desde aquí dar las gracias a todas las personas que me ayudaron a que mi estancia fuera buena, desde el personal del hotel que me facilitó y me asesoró para ver lo mejor de la cuidad, de Miguel, el chico de Sandemans por su magnífico trabajo y sus consejos de ver monumentos a partir de unas horas para ahorrarme las entradas, a los policías que me sacaron las fotos muy serviciales y a los catalanes que les pedí ayuda cuando necesite para llegar a algún punto de visita. Petons para todos ellos!!!!
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