Es la 1ª vez en mi vida que visito el Fuerte, teniéndolo a tan pocos kilómetros
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Con las obras que hay en las afueras de Errenteria, nos costó un poco localizarlo. El parking no es muy grande, pero como llegamos temprano, aparcamos sin problemas. El que vaya recomiendo aparcar con el morro para adelante, porque a la tarde se llena de gente que aparca mal, y es complicado salir.
El entorno me encanta. Mires por donde mires, las vistas son preciosas.
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Hay un enorme prado con unas mesas donde comer. Y un parque infantil con arena justo al lado. Está en bastante mal estado, tanto el parque como algunos bancos, pero espero que con la queja que he puesto al ayuntamiento, acondicionen un poco la zona. ¡Es una pena!
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Como hacía bastante fresco a la sombra, comimos al sol, encima de la hierba. ¡El mejor lugar para tener controlados a los niños!
El Fuerte está muy bien conservado, no es muy grande. ¡Me ha encantado! Entras por unos túneles
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y llegas a un patio, donde está el bar-restaurante
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Subiendo las escaleras a la parte alta del fuerte, las vistas son impresionantes: San Juán de Luz, las gemelas de la playa de Hendaia, Hondarribia, Oiartzun, Pasai Donibane, San Sebastián...
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Todavía no me explico cómo no he podido descubrir antes este lugar.
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Con un poco de atención, no tiene mucho peligro para los niños. Además seguro que se lo pasarán bomba subiendo y bajando por la pequeña pendiente de hierba que hay. Los nuestros desde luego se tiraron más de 1/2 hora dando volteretas.
Comimos abajo en la campa. De vez en cuando venía un ligero olor del vertedero de San Marcos
Un lugar idóneo donde pasar el día en familia o con amigos.
La próxima cita, el 25 de abril, día de las "opillas".