El avión salía a las 10 de la mañana desde Barcelona. Hemos quedado a las 07:00 con mis cuñados, nos pasarán a buscar en su coche. En lo poquito que considero que he viajado, siempre tengo algún recuerdo de “dificultad” antes de partir, un “algo” que impide que salgamos con total tranquilidad. Hemos tenido varias anécdotas, que al quedarse, precisamente en eso, recuerdas con cariño y risas, pero que en el momento de pasarlas, pues la angustia es enorme. En este viaje, todo había ido muy bien, lo único que al reservar los vuelos y apartamentos (yo estaba en el paro) justo me llamaron para volver a trabajar donde estuve en verano, al plantearles lo de mi viaje, fueron muy comprensivos y no me pusieron ningún impedimento, de hecho, acabé contrato el dia antes de partir… Esto ya fue un pequeño susto. Pero el SUSTO y así, en mayúsculas, pasó la misma noche antes de viajar. Mi mujer antes de acostarse no se encontraba muy bien, yo lo achacaba a sus nervios (odia volar!), e incluso vomitó!… pero bueno, nos fuimos a dormir! a eso de las 02:00, se despertó y se pasó una hora en el lavabo con una descomposición enorme, esto, ya no eran nervios. Parecía una gastroenteritis o un virus estomacal, no podía levantarse del servicio!… me angustié muchísimo, ya no por ver peligrar el viaje, que también, si no porque realmente lo estaba pasando fatal. Llamé a un médico de urgencias, y nos dio cuatro instrucciones a seguir rápidamente, para cortarle la vomitare. Yo por si acaso llamé a mis cuñados, y ellos (auxiliar y enfermero) nos dan los mismo consejos que previamente nos había dado el medico. A eso de las 4 (debíamos levantarnos a las 6!) parece que se le corta, y aunque muy debilitada y con mucho frío, logra acostarse y relajarse. A las 6 nos toca el reloj, le pregunto como está y me dice que muy cansada, pero algo mejor. Le propongo irnos, y como tenemos una hora de viaje, hasta el aeropuerto, podrá probar, si realmente está bien. Si no es así, nos daremos la vuelta y dejaremos a nuestros cuñados alli.
Afortunadamente, en el coche va durmiendo y parece que algo mejor se va encontrando, así que si, NOS VAMOS A PORTUGAL!
El vuelo transcurre sin incidente alguno, y mi mujer viaja muy tranquila, yo creo que el cansancio le ayuda no pensar en el vuelo.
Llegamos puntuales al aeropuerto. Nuestra idea era ir al centro de Porto en metro. Pero preferimos no marear mucho a mi mujer, que está bastante cansada, y nos vamos en taxi. A nosotros nos costó 25 euros, los 4, que tampoco es un precio muy caro. Son menos de 7 euros por cabeza, y viendo el panorama ha sido la mejor elección.
Habiamos quedado con Luis (nuestro anfitrión) a las 12:00, habíamos dado margen, por si pasaba algo. Pero el llegar puntual, y en taxi, hace que estemos en el apartamento a las 11:00. No sabíamos si estaría allí. De hecho no sabemos a que piso tocar, solo nos había dado dirección sin piso. Mi cuñado Victor toca el primero que cree oportuno, y alguien contesta, pregunta por Luis y la puerta se abre.. nos asomamos, y hay unas escaleras que suben hasta una puerta, en ella aparece Luis, que nos recibe. Nos explica que no puede hospedarnos en el apartamento que habíamos elegido, porque tenía un problema con el baño, que a cambio nos pone en el bajo (Mayka se pone muy contenta al ver que apenas tiene que subir escaleras) que es más grande y con dos lavabos (el que habíamos reservado solo tenía uno), Entramos y Luis nos explica un poco todo. No es el típico anfitrión parlanchín, que te aconseja restaurantes y demás, pero es correcto y nos desea una buena estancia, nos da su teléfono por si tenemos algun problema le llamemos.
El apartamento es modernisimo, una entrada hacia un altillo, con sofás y sillas, y bajando unas pocas escaleras las habitaciones y un lavabo, una cocina abierta, un pequeño patio detrás de una cristalera y otra habitación al fondo con lavabo. Muy contentos con el cambio, lo vemos grande, espacioso.
Subimos un poco por Rua do Almada y giramos en la primera a la izquierda, aquí tenemos un super y nos aprovisionamos muy bien. Dejamos todo en el apartamento, y viendo que la noche había sido dura, y apenas habíamos dormido, decidimos planificar bien la tarde. Son las 12:15, así que decidimos ir ahora a comer, que ya había hambre, y luego echar una siesta de una hora para reponer fuerzas y poder visitar el centro de Porto.
Mi cuñada, nos propone un restaurante que había visto de pasada, pegadizo al apartamento, para no ir muy lejos. Su nombre es BRASAO-CERVEJARIA, y está en Ramalho Ortigao. Es una cervecería, podeis escoger varias, incluso alguna belga, pero aqui venimos a lo que venimos, a comer! Ya os dareis cuenta, que en Porto, todos son especialistas en Francesinhas, este, decían tener la mejor de Porto. Así que yo, mi cuñado y cuñada nos animamos a pedirla, con huevo y al horno. Mi mujer, que ha pasado tan mala noche y está delicada del estomago, pide un solomillo y arroz blanco, hoy no probaría nada pesado y fuerte. Para beber, dos Superbocks y aguas para ellas, debo decir que me gustó bastante la cerveza, algo floja, pero de buen sabor, además nos la ponen en un vaso de barro y me encanta! las francesinhas, tardan un rato en llegar, pero cuando llegan…. buf! que ricas!!! la salsa está de escándalo, y aunque es un plato contundente, entrá muy bien, lo acompañan con una bandeja de patatas! Para ser nuestra primera experiencia, le damos un 9! un sitio muy recomendable para comer! El solomillo de mi mujer está increible también. Pasábamos casi todos los días por aquí, y siempre estaba lleno. Tomar nota!
Son las 16:30, y arrancamos!!! Empezamos, ya que estamos al lado por Aliados, la avenida más famosa de Porto, con su Camara Municipal en el inicio, grande e imponente, y con una Plaza Liberdade al final, a cada lado de ella vamos viendo edificios enormes y con muchos años de historia. Empezamos a ver esa parte decadente de Porto, junto a edificios como el Monte Pio, vemos otros, totalmente abandonados, inmuebles enteros, con cristales rotos, donde se ve por dentro que están en ruinas… nos choca, y le da un aire diferente. Vamos rumbo a Santa Catarina, queremos tomar un café, y hemos elegido pasar por el famoso Café Majestic, de camino pasamos por el Mercado de Bolhao, están cerrando y no vamos a entrar en él hoy, mañana pasaremos. En la misma calle teneis la Aperola do Bolhao, una tienda tipo colmado, increible!! no dejes la ocasión de entrar a chafardear… una tienda de esas que vas viendo por Porto, con solera!…
Vamos a ver las Iglesias das Carmelitas, dos iglesias que parece esta juntas pero no! en medio, separándolas, tenemos la casa mas pequeña y estrecha de Porto, por lo visto, crei entender que en la época, estaba prohibido construir dos iglesias juntas, así que en medio dejaron esta casa. Sus murales de cerámica, son alucinantes! y si, solo la vemos por fuera…
Damos el día por finalizado, queremos ir a dormir pronto para mañana estar a TOPE!… Asi que volvemos al apartamento. Mañana seguiríamos por Porto!