Como no podía ser de otra manera, otra vez pillamos la huelga de taxis, este año elegí para salir el 26 de Julio, ya que el año pasado el 27 cuando salimos hicieron huelga los taxistas, pues nada, esta vez también huelga con los consiguientes nervios si bloquean o no el aeropuerto. Para asegurarnos salimos con bastante antelación.
A llegar al aeropuerto, ¡sorpresa!, el vuelo se retrasa dos horas, teníamos 3 horas para el transfer en Dubái y se nos quedaron en una sola hora, así que tocaba ir corriendo en Dubái para acceder a la otra terminal y coger la conexión a Hanói, por suerte llegamos a tiempo y no tuvimos problemas con el embarque.
Los vuelos duraron unas 6 horas y media cada uno aproximadamente, tiempo suficiente para ver tres o cuatro películas y dormir algún rato.
Una vez en Hanói, pasamos los controles de pasaportes sin problemas, al ser una entrada con estancia menor a 15 días no hizo falta el visado, recogimos la maleta y nos dirigimos a la otra terminal para coger el vuelo a Siem Reap, en los paneles nos marcaban un retraso de 40 minutos para nuestro siguiente vuelo, pues a esperar tocaba.
Como teníamos tiempo de sobra comimos en el aeropuerto unos bocatas, que con el descontrol horario teníamos algo de hambre.
El vuelo a Siem Reap al final se retraso casi una hora así que llegamos a Camboya de noche, el aeropuerto es bastante pequeño, sin fingers, bajamos del avión por la escalera y enseguida notamos el calor tropical, los edificios de aeropuerto tienen los bonitos tejados tradicionales.
Una vez dentro del aeropuerto tuvimos que rellenar para el visado tres formularios, uno del visado en sí ,que hay que entregar junto una foto de carnet, otro de objetos a declarar y otro de donde debes poner la dirección de donde te vas a alojar, el precio del visado fue de 30 $.
Muy curioso el proceso del visado, hay exactamente 14 funcionarios todos alineados, vestidos de militar con galones varios, poniendo sellos, para revisar los visados, parece un tribunal.
Al salir del aeropuerto nos recogió el Sr. Sok nuestro guía de habla hispana, muy simpático y agradable.
Después de un Trayecto de media hora llegamos al hotel, ya eran las 10 de la noche, el hotel estaba situado a cinco minutos del centro en tuk tuk, muy bien decorado, con abundante vegetación tropical y una bonita piscina que ni probamos.