Los Colores del Sur de India ✏️ Blogs de IndiaBitácora de 21 días (del 5 al 26 de julio 2016) recorriendo los estados de Kerala y Tamil Nadu, con un pequeño salto a Maharashtra para visitar Ajanta y Ellora en Aurangabad, y a Rajastan para visitar a unos amigos en Jaipur.Autor: Yennefer Fecha creación: ⭐ Puntos: 5 (9 Votos) Índice del Diario: Los Colores del Sur de India
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Etapas 10 a 12, total 12
Este jornada teníamos vuelo de Chennai a Jaipur, donde pasaríamos unos días visitando a unos amigos. Después volaríamos a Aurangabad, vía Delhi, para poner la guinda monocromática al pastel de colores.
Vuelo con Air India 66 € Etapas 10 a 12, total 12
Hicimos dos noches para dedicar un día a las cuevas de Ajanta y otro a Ellora. Si el conjunto de la primera es fabuloso, el de la segunda es indescriptible.
En internet hay mucha información con datos técnicos de ambas, así que no me extenderé en ellos. **Tanto la entrada a Ajanta como a Ellora cuesta 500 INR **Horario de apertura: 09:00 horas a 17:30 horas. **Cerrado Ajanta los Lunes y Ellora los Martes **A los Templos s entra descalza **Ajanta: Este complejo lo forman 30 grutas artificiales, excavadas, esculpidas y pintadas durante el período del siglo II al I a.C., están situadas al fondo de un valle por el que circula el río Waghora, y a lo largo de una pared de 600 metros de los montes Indhyagiri. Fueron descubiertas por un destacamento de soldados británicos en 1819 y forman parte del Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1983. De las 30 grutas, 5 son templos (chaityas) y el resto monasterios (viharas). Todos los murales representan escenas de la vida de Buda y los cuentos de Jataka. **Ellora: Se sitúa cerca de Aurangabad, a solo 30 kilómetros de la ciudad. Las 34 cuevas están excavadas en la roca de los montes Charanandri. Del total, 12 son budistas de los años 500 al 650, 17 hinduistas de los siglos VII y VIII, y 5 jainistas del siglo VIII al XIII. Al igual que sucede con Ajanta, de Ellora también hay en internet muchas páginas con información, así que los datos técnicos no los toco. Lo que sí me gustaría recalcar es la impresión que me causó ver el increíble trabajo realizado con unas condiciones tan poco favorables. No hay que olvidar que están excavadas de afuera hacia adentro y que la escasez de luz era notoria. La amplitud y la altura de algunas salas, la perfección de las esculturas de Buda, Bodhisatvas y otras divinidades, las escaleras talladas en la roca que comunican los diferentes pisos de una misma cueva, las bóvedas talladas imitando vigas de madera, los restos de pintura que indican que muchas de ellas estaban pintadas….me llevaban inevitablemente a pensar en Petra o Angkor. Y eso que todavía no había visto la joya de la corona: ** El Kailasahatha (Templo Kailash) Atravesar la puerta, salir al gran patio y mirar a tu alrededor te deja sin palabras. Cuando conoces datos sobre su construcción te deja sin respiración. El Templo Kailash fue construido por el rey de la dinastía Rashtrakuta, Krisna I, entre los años 725 al 755 y cubre una superficie el doble de extensa que el Partenón de Atenas. Su diseño pretende recordar el monte Kailash que es la morada de Shiva. En el centro del patio se sitúa un templo de varios pisos y estancias comunicadas entre sí. Galerías con columnas de tres pisos de altura bordean este patio, interrumpidas por paneles esculpidos y enormes esculturas, que en un principio estaban unidas por puentes al templo central. A lo largo de las paredes se describen escenas del Mahabharata a un lado, y al otro del Ramayama. Y todo eso no son edificios independientes, no. Todo el conjunto está tallado en una sola roca. A diferencia del resto de cuevas, Kailasahatha se comenzó a tallar verticalmente, de arriba hacia abajo. Se calcula que fueron retiradas 200.000 toneladas de roca para conseguir esta maravilla monolítica. Salí del templo Kailash asombrada y sin adjetivos suficientes o adecuados para adjudicar a tan impresionante, elaborado y perfecto monumento. **Bibi Ka Maqbara, la última visita, se localiza en las afueras de Aurangabad. Se la conoce como “la tumba de la Dama”, y eso es: una maqbara construida por Azam Shah, hijo del emperador Aurangzeb, dedicada a su madre Dilras Banu Begum, (también conocida como Rabia-ud-Daurani). Se asemeja al famoso Taj Mahal de Agra, pero en pequeño, motivo por el cual se le conoce con el nombre de El Taj del Decán. El parecido no es casual ya que Azam Shah era nieto de Mumtaz Mahal (para quien se construyó el Taj Mahal), y Ata-Ullah el arquitecto y diseñador del Bibi Ka, fue el hijo de Ustad Ahmad, diseñador principal del Taj Mahal. Su construcción fue del 1651 al 1661. Es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. **Templo Grishneshwar. Este templo estaba incluido (junto con otros que decidimos no visitar) en el paquete de Ajanta y Ellora. Se encuentra cerca de Daulatabad, en un pueblecito llamado Verul. Es lugar de peregrinación por ser uno de los doce Jyotirlingas (lugares sagrados dedicados al dios Shiva). La entrada es gratuita, sin bolso, mochila o bulto de ningún tipo y descalzo. La fila para entrar al templo sale hasta la calle. La leyenda sobre la creación de este templo es bonita y me parece interesante dejarla aquí. El texto y la foto proceden de wikipedia. . Una leyenda cuenta que un día, estando el dios Shivá con su esposa Párvati en este lugar, la diosa estaba triste, y Shivá, para animarla, clavó su tridente en el suelo y creó un lago llamado Shivalay. Más tarde, Parvati estaba haciendo sindur (la pasta de color rojo que se colocan las mujeres en la frente cuando están casadas). Mientras frotaba con el pulgar el polvo de color bermellón y lo mojaba con agua del lago, la pasta se convirtió en un lingamy se llenó de luz. Parvati instaló el lingam en este lugar y lo llamó Grisnéshuar, porque había sido creado por grisna (que quiere decir ‘fricción con el pulgar’). En el Shivá-purana se cuenta que vino a vivir a este lugar un brahmán llamado Sudharma con su esposa Sudeha, pero puesto que ella no podía tener hijos y había que continuar con el linaje familiar, Sudeha instó a su hermana Ghushmá a tener relaciones con el brahmán. También le dijo que tenía que hacer 101 lingams y adorarlos sumergiéndolos en el lago Shivalai. Ghushma dio a luz a un niño, y lo trataban tan bien que Sudeha no pudo resistir la envidia y un día lo asesinó. Sin embargo, Ghushmá siguió adorando a Shivá y sumergiendo los lingams en el lago, de tal modo que un día vio surgir de las aguas ante ella a su niño resucitado. Ghushmá le prometió a Shivá que sería adorado eternamente en ese lugar, y el dios lo agradeció dando al santuario el nombre de Ghushmeshwar (‘el dios de Ghusmá’), para que aquella mujer fuera recordada siempre. . Etapas 10 a 12, total 12
Llegamos por la tarde/noche, dedicamos todo el día siguiente a patear algunos lugares de los más conocidos y salimos de madrugada de regreso a España.
El vuelo de Aurangabad a Bombay lo hicimos con Jet Airways y costó 32 € El alojamiento lo reservamos en el Residency Hotel Fort, muy cerca de la estación Chhatrapati Shivaji que es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. He de manifestar que no soy “de asfalto” y no me gustan las ciudades grandes. Si le sumamos exceso de ruido, polución, caos de tráfico, suciedad, abandono, roedores, una altísima densidad de población (29.000h/km2), entre otras cosas, tal vez resulte fácil entender por qué Bombay no me gustó. Nada de nada. Es la ciudad más poblada de India y la 4ª del mundo con cerca de 15 millones de habitantes. Nuestro paseo no fue muy largo y, a medida que avanzaba, menos ganas tenia de continuar la visita. A pie y callejeando llegamos a la Puerta de la India, un gran arco de basalto de 26 metros de altura construido en 1911, situado en el paseo marítimo del puerto de Bombay. Frente a él se encuentra el despampanante edificio colonial que alberga el hotel Taj Mahal & Tower. Entre mercados, más edificios del mismo estilo colonial, (algunos en precario estado de salud), otros más actuales pero en mucho peor estado y con poco interés, decidimos negociar un taxi para llegar a la zona de la antigua “Estación ferroviaria de Victoria”. Nuevo callejeo, hora de comer e intentar descansar un rato ya que a las tres de la madrugada teníamos que estar en el aeropuerto. Y este fue el punto final de nuestro viaje a Los Colores del sur de India. Espero que la lectura haya sido entretenida y amena; que los datos y la información os ayude a preparar vuestros viajes y que las fotos os den una idea de los lugares visitados. Hasta el próximo diario. . Etapas 10 a 12, total 12
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