Road trip por el oeste de Canadá, pisando un par de veces Alaska ✏️ Blogs de CanadaMás de 6600 kms en coche para 25 días por la Isla Vancouver, zona de Stewart-Hyder, Rocosas y Yukon. Naturaleza en estado puroAutor: Ymyr Fecha creación: ⭐ Puntos: 5 (11 Votos) Índice del Diario: Road trip por el oeste de Canadá, pisando un par de veces Alaska
01: Preparativos y 22/07/2019, día del viaje
02: 23/07/2019. De Vancouver a Ucluelet
03: 24/07/2019. Ucluelet. Por Pacific Rim N.P.
04: 25/07/2019. De Ucluelet a Campbell River. Excursión osos y McMillan P.P.
05: 26/07/2019. De Campbell River a Port McNeill. Elk Falls P.P. y Strathcona P.P.
06: 27/07/2019. De Port McNeill a Prince Rupert. Inside Passage
07: 28/07/2019. De Prince Rupert a Stewart. Nisga'a Memorial Lava Bed P.P.
08: 29/07/2019. Stewart. Fish Creek Wildlife Reservation Site. Salmon Glacier
09: 30/07/2019. De Stewart a Smithers. Más osos por la carretera y Seven Sisters P.P
10: 31/07/2019. De Smithers a Prince George. Twin Falls y Eskers P.P.
11: 01/08/2019. De Prince George a Jasper. Ancient Forest. Zona de Maligne Lake
12: 02/08/2019. Jasper. Icefields Parkway (I): cascadas, lagos y glaciares.
13: 03/08/2019 De Jasper a Field. Icefield Pwy (II) Athabasca G. P Ridge. Mistaya C.
14: 04/08/2019. Field. Día de Lagos: Chrephen, Waterfowls, Peyto, Moraine
15: 05/08/2019. Field. Natural Bridge. Wapta Falls. Elbow Lake (Kananaskis Co.)
16: 06/08/2019 Field. Emerald Lake. Yoho Lake Trail. Siverton Falls
17: 07/08/2019. De Field a Banff. Johnston Canyon. Black Prince Cirque Trail.
18: 08/08/2019. Banff. Sunshine Meadows. Vermillion Lakes
19: 09/08/2019 Banff - Calgary - Whitehorse - Haines Jt. Mala entrada en el Yukon
20: 10/08/2019 Haines Jt. Road trip buscando fauna, sobre todo grizzlies
21: 11/08/2019 De Haines Jt. a Haines (Alaska) St. Elias Lake Trail (Kluane N.P.)
22: 12/08/2019 Haines. Chilkoot River Corridor. Battery Point Trail
23: 13/08/2019 Haines - Skagway - Carcross
24: 14/08/2019. Carcross - Whitehorse - Vancouver.
25: 15 y 16/08/2019. Vancouver - Madrid. Conclusiones y enlaces útiles
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Etapas 7 a 9, total 25
Hoy toca un día completito hasta llegar a Stewart. Me despierto temprano y me voy para la cocina del alojamiento a hacerme un café. Luego espero a que mi mujer despierte mirando fotos en el ordenador y tras desayunar tranquilamente ambos en el salón, recogemos y para el coche con algo de pena porque el alojamiento es fantástico. Primera parada a las afueras de Prince Rupert para echar gasolina y comprar hielos para la nevera. Reanudamos el camino y al poco vemos cruzar por la carretera un animal parecido a un perro grande. Nos ponemos nerviosos porque puede ser un lobo. Un zorro seguro que no es porque era más grande. Paramos por donde se ha internado pero no vemos nada. Cuando ya nos vamos a ir, dejándonos con la duda de qué era aparece de nuevo... y efectivamente, era un perro grande. A saber qué haría él solo por ahí. El trayecto hasta Terrace es muy bonito, con el río Skeena a tu izquierda y montañas de las cuales caía agua por todas partes. Luego justo antes de coger la Nisga'a Hwy estuvo sobrevolando a baja altura un águila calva durante unos segundos a nuestro lado. Una experiencia bichera muy chula. Antes de llegar a Nisga'a Memorial Lava Bed P.P. pasas al lado del Lago Rosswood, nuestro primer lago con un tono "especial" un verde claro muy vistoso. Hay que saber que esta es de las pocas zonas donde se han visto Osos Kermode o Spirit Bears como antiguamente los llamaban que son medianamente accesibles. Los kermode no son más que osos negros con un gen recesivo que los hace ser blancos. Hay muy pocos y la mayoría están por las islas de imposible acceso por carretera. Para tener posibilidades de verlos hay que dejarse un pastón e ir a partir de septiembre a los lodge que solo se llega por avioneta. Y llegamos al parque provincial. Este parque es donde se cree que hubo la más reciente erupción volcánica en Canadá, hace ya unos 300 años. Se supone que pudo matar a unas 2000 personas del pueblo Nisga'a, uno de los denominados Primeras Naciones. Nuestra idea era hacer algunas de las pequeñas caminatas que tiene el parque. La primera que hicimos es la denominada Crater Creek. Entre i/v ni al km llega. Te mete de lleno en el río de lava. Si siguieras más adelante llegarías al cono volcánico. Se ve más claramente en vistas de google maps, pero a partir de cierto punto no se permitía avanzar. Luego paramos para ver las Beaupra Falls, una cascada muy bonita a tan solo unos 200 metros del parking. A continuación otra cascada, las Vetter Falls, más ancha y con menos caída. También a poco más de 200 metros del parking. Como desde el mirador no se veían muy bien me metí en el río saltando de piedra en piedra. Tseax River es nuestra siguiente parada. Un río salmonero que atrae a los grizzlies. Y, efectivamente, se nota por el pestazo a muerte y los salmones pudriéndose en la orilla que es así. Y lo último que vimos fue el Tree Cast. Una zona de lava petrificada donde a los 5 minutos de andar encuentras los huecos en forma de tubo que dejó la lava cuando alcanzaron los troncos de los árboles y luego se fueron quemando, pero dejaron la forma del tronco. Curioso. Tras esto fuimos dirección a la Hwy 37. Tras Nass Camp la Nisga'a Hwy se convierte en carretera de tierra durante unos 50 kms. Es una carretera bichera, se supone, y tenía bastante expectativas de ver algún oso, pero nada de nada. Eso sí, solitaria como ella sola. Un par de coches nos cruzamos y ya casi llegando al cruce unos cuantos moteros. Ya en la Hwy 37 y dirección Meziadin Jt. nos paramos en el primer área de servicio que pillamos para comer, que a lo tonto son casi las 4 de la tarde. Nuestro picnic habitual: ensalada, pringles y alguna lata de arenque u otro pescado. En camino de nuevo, recién pasado el puente del Nass River, que está siendo arreglado, se encuentra a mano izquierda un camino que lleva a Meziadin Fish Ladder Aquí desde julio hasta mediados de septiembre se pueden ver salmones tratando de saltar el megaescalón (artificial) y es posible ver osos. El google maps te dirige bien hasta el desvío pero despúes has de ir a tanteo. Tras dar un par de vueltas dimos con la zona. Había que seguir indicaciones al Fish Camp y unas tiras rojas que había colgadas en los árboles. Allí había unos indios estilo campamento de pesca que también vendían camisetas. La escalera está muy chula y se ven unos cuantos salmones tratando saltarlo. Uno de los hombres me preguntó cómo había conocido el sitio y le dije que por internet al buscar zonas donde poder ver osos. Le pregunté si se veían y me dijo que sí, que al otro lado había visto varias veces grizzlies e incluso por un camino que sale más adelante es frecuente verlos. Tras esta información nos dirigimos al camino, que ponía con grandes letras cuidado con los osos. No llevabamos ni 150 metros recorridos que vimos justo en mitad del camino un mierdón de oso que se veía reciente, reciente. Solo había que ver el brillo y las moscas revoleteando. Suficiente. Acojone total y nos volvimos. Me puse a hablar con otro indio que había allí diciéndole que había un mojón reciente en el camino y me dice que es de un grizzly que había visto él hace un par de horas. Coge su ipad y me empieza a enseñar fotos que le ha hecho. Madre mía, qué bicharraco. Y estos como si vieran un animalillo. Pasadas las 17:30 nos fuimos, que aún queda un trechillo de una hora sin paradas hasta Stewart. Pasado Meziadin Jt. donde vimos las gasolina más cara del viaje, a 1,53 CAD por litro, el paisaje ya de por sí interesante se volvió impresionante. Además llevábamos unos chaparrones de vez en cuando, por lo que las nubes, el verdor, los glaciares que empezaban a verse, las montañas, todo resplandecía. La verdad es que estaba embobado y llegamos a Bear Glacier, una auténtica preciosidad al lado de la carretera. Tras ver el glaciar y escuchar los crujidos que hacía el hielo, seguimos nuestro camino cuando de repente veo un bicho negro al lado de la carretera comiendo hierba. ¡¡Un oso negro!! Nos apartamos, paramos, 4 luces y fotos a diestro y siniestro. Estuvimos un buen rato hasta que cruzó la carretera y se perdió y solo vino un coche en dirección contraria que también hizo un millón de fotos. Todo extasiados proseguimos, diciéndonos que ojalá vieramos una madre con crías cuando de repente, a los 5 minutos de haber dejado al otro oso, vemos ¡¡una madre con dos cachorros!! De nuevo nos apartamos todo nerviosos y disparar con la cámara y grabar videos. Por cierto, uno de los cachorros tenía una mancha blanca en el pecho que hacía parecer tener dibujado un corazón. Para comérselo. Tras esto todo lo que quedaba de camino hasta Stewart mirando a izquierda-derecha, pero sin más suerte. De todas formas de golpe y porrazo hemos aumentado nuestros avistamientos de osos de 4 a 8. Genial. Esta zona me interesaba por esto. Llegamos a Stewart, situado en un valle cerrado con inmensas montañas con nieve y en el final de un entrante de mar. El pueblo es pequeño, pequeño, pero me gustó mucho. La caravana que iba a ser nuestro alojamiento durante las dos próximas noches fue el peor del viaje, pero no por la caravana en sí, sino porque los dueños no se preocuparon en tenerla a punto. El tamaño estaba genial, pero durante nuestra ducha a mí dejó de caerme agua y la que había caído por el grifo no se la tragaba el desagüe. Cuando salí, para hablar con los dueños, que vivían al lado, no había luces ni nada. No sé si porque ya eran algo más de las 9 de la tarde-noche y estaban sobando o habían salido, así que problema no resuelto. A la mañana siguiente la mujer salió y vió que no habían puesto la manguera en la toma de agua y se había gastado la del depósito y luego el atranque era porque el depósito de aguas sucias estaba a tope, pero la mujer no tenía ni papa de cómo se vaciaba y el marido no llegaría hasta la tarde. Luego el segundo día la calefacción dejó de funcionar a saber por qué y por la noche se bajaba a los 8 grados y una caravana no aisla como una casa. Lo del aislamiento también vale para los sonidos. La primera noche llovió y las gotas de agua para la gente con oído ligero molestan. En fin, ya lo he probado y no más. En Stewart este día hicimos una pequeña compra de cerveza y comida. No nos acercamos a la plataforma de observación que se encuentra más allá de Hyder porque ya era tarde. A lo tonto, como he dicho a las 9 estaba yo duchándome. Cenamos y vimos serie, esta vez la tercera temporada de Strangers Things porque el internet no tiraba mucho y hasta mañana. Distancia recorrida: 459 kms Etapas 7 a 9, total 25
Nuevo día nublado, con una noche lluviosa que como dije en la etapa anterior afectó a la calidad del sueño, sobre todo a mi señora. Tras desayunar y prepararnos para el día veo a la dueña de la caravana y le comento los problemas que hemos tenido con el agua. Se da cuenta de que no está enchufada la manguera a la toma del agua y la pobre trata de engancharla al grifo sin éxito. Se pone nerviosa y no da con la tecla. Le indico que me permita e introduzco la manguera en la toma. Más disculpas. El plan de hoy es primero ir a la plataforma de osos a ver si hay suerte. Tras un rato irnos carretera arriba para ver Salmon Glacier, a unos 25 kms en carretera de tierra. Luego volver y hacer el American Creek Trail, de algo menos de 8 km, comer en la caravana y volver a la plataforma y quedarnos allí hasta hartarnos. Hay que saber que en la plataforma se han visto grizzlies, osos negros e incluso lobos cazando salmones. Para información sobre la zona es interesante esta guía Tras resolver el problema del agua y dejar para esta tarde lo del atranque a que viniera el dueño, nos dirigimos a la plataforma que se encuentra a algo menos de 6 kms de Hyder, antiguo pueblo fantasma que está reviviendo y que se encuentra a 3 kms de Stewart. Hay que saber que no hay paso fronterizo para ir a Alaska pero sí para volver a Canadá, por lo que hay que llevar los pasaportes. Pasamos Hyder y de camino a la plataforma vemos un coche parado. El de enfrete para y nosotros detrás de él. Miramos y miramos y no vemos nada. Luego cuando nos cruzamos con el primer coche nos dice que había una grizzly con crías, pero se han perdido en la maleza. Madre mía, esto se pone interesante. Llegamos, aparcamos y vemos que había que pagar para entrar. Ups, esto no lo sabía. Nos acercamos a la caseta y lo primero que leo es que no admiten tarjetas, solo efectivo. Por mi mente rápidamente pasa que no tenemos dólares estadounidenses, pero sigo leyendo y veo que admiten también el pago en CAD. Menos mal. 6 CAD por barba, pero sabed que hay bonos de 3 días y de semana, por si os tiráis unos cuantos días por aquí. Entramos en la plataforma y lo primero que ves son un par de pieles de oso, de grizzly y negro, para que veas las diferencias. Se nota las mismas en tamaño y sobre todo me fije en las garras. Vaya zarpas se gasta el grizzly. También había unos cuantos folletos e información. [ La plataforma está bien cuidada, con paneles informativos y con vistas al río que está plagado de salmones de diferente tipo. Además al otro lado del río hay un bonito remanso de agua. Nos paseamos por la plataforma y llegamos hasta el final de la misma, que es lugar que más me convence para plantarnos ya que dominamos todo lo que hay más allá y también se ve bien el resto de la pasarela y si aparece por allí algún oso, rápidamente por el movimiento de los demás fotógrafos (algunos con auténticas maquinazas y eso que voy yo con mi cañón) nos enteraremos. En la plataforma estuvimos desde las 9:30 que llegamos hasta las 11 más o menos. Allí nos encontramos con una pareja mayor extranjera que habíamos coincidido con ellos en el ferry de P. Hardy a P. Rupert y que nos saludamos ya que estuvimos en el ferry unos al lado de los otros cuando estuvimos fuera. Durante ese tiempo además de disfrutar de los salmones y de sus arrebatos para avanzar y luego quedarse un buen rato descansando, vimos un águila calva en el suelo (había cogido una pieza de pescado semidevorada que algún oso dejaría en días anteriores) y también un águila calva joven, aún no madura y cuya cabeza y cola aún no estaban blancas. Sobre las 11 y tras el primer intento fallido en la búsqueda de osos, sobre todo grizzlies, nos dirigimos a Salmon Glacier, esperando que no le dé al tiempo por llover, que está la cosa bastante nublada. Aunque la distancia no es ni de 25 kms es todo por carretera de tierra, al principio bastante aceptable y luego con muchos tramos llena de hoyos que hacía que parecieras que ibas por un campo de minas y que hizo que mi estimación del tiempo que tardaríamos fuera mucho menor de lo que realmente tardamos. También influyó que uno cuando avaza y empieza a ver el pie de la lengua glaciar se vuelve loco y se para a realizar unas fotos. También influye que empezamos a ver unos bichitos muy monos, como son las marmotas. En la primera nos paramos un buen rato ya que estaba al lado del camino. Luego, mientras el camino subía y subía, vimos bastantes más. Decenas de hecho. Seguíamos y no llegábamos al final y esto cada vez más nublado. Temiendo que no viéramos todo el glaciar en su máxima expresión por culpa del tiempo imploramos un poco de suerte. Y al final vemos ya el famoso ángulo. Paramos y hacemos unas fotos, que más adelante ya vemos nubes tapando el camino. Estamos por volvernos sin llegar al final porque empieza a chispear pero veo que las nubes se mueven rápido y el camino antes tapado por ellas se vuelve a despejar, así que vamos para allá, que ha de quedar poco. Y llegamos y señores, a pesar del día, el espectáculo es inenarrable. Pedazo de lengua glaciar. No en vano es el quinto más largo de Canadá. Sí, Canadá, porque a mitad del camino de tierra vuelves a entrar en Canadá, aunque aquí no hay paso fronterizo alguno, solo un cartelito. Hacemos muuuchas fotos, desde diferentes puntos. Empieza a llegar gente a ver el espectáculo y tras un buen rato, que a pesar de los 8 grados de temperatura se nos pasó volando decidimos volver. Comentar que se ven más glaciares cercanos, pero con este nadie les hace caso. Pobreticos, en otros sitios serían las estrellas. Salmon glacier en todo su esplendor. El camino por el que hemos venido con la lengua a tus pies Volviendo, vimos a más marmotas. Algunas tan ofuscadas estaban en sus riñas que les daba igual que obstaculizaran el camino y hubiera coches Llegamos de nuevo a la plataforma casi a las 2 de la tarde y viendo que sería imposible hacer la excursión decidimos entrar de nuevo, echar un vistazo e irnos a la caravana a comer tranquilamente. El vistazo nos sirve para que pregunte a la pareja del Inside Passage, que seguían ahí, si había aparecido algún oso, a lo cual nos contestan que no aún. Bueno, al menos no nos lo hemos perdido. Eso sí, veo un pajarillo colorido que me llama la atención. Ni papa de cuál es, pero me gusta. Pasamos el paso fronterizo donde el guarda nos hace las típicas preguntas de adónde vamos de dónde venimos que si llevamos drogas, etc, etc. Tras cruzar la frontera, en la calle principal de Stewart entramos en una tienda y tras mirar y mirar me decido por una gorra chula con un oso que pone Stewart-Hyder. Además de recuerdo me sirve para sustituir a la que perdí hace unos días. Vamos a comer a la caravana y vemos al dueño de la misma y le comento lo del atranque. Vacía el depósito de aguas sucias y problema resuelto. Tras comer decidimos que no nos da mucho tiempo de la excursión, entre ir al punto y hacerla se nos irían casi tres horas y llegaríamos bastante tarde a la plataforma. Además, para qué negarlo, hemos visto osos por la zona y estos senderos no están para nada concurridos y nos da respeto, así que decidimos cambiar la excursión a pie por excursión dominguera en coche. Vamos para Bear Glacier, que desde allí hasta Stewart fue donde vimos los osos negros ayer. Por supuesto fue un viaje en balde en ese sentido, pero el camino es bonito y Bear Glacier siempre es agradable verlo, pero tras ver hoy a su primo Salmon queda muy mal parado. A la vuelta vamos directos a la plataforma. Justo a la altura del paso fronterizo vemos un zorro, pero no nos dá tiempo a sacar las cámaras. Llegamos a la plataforma sobre las 17:45. La pareja que conocemos siguen ahí y nos dicen que nada de nada, que ellos se van a cenar. Estos no son españoles Llegamos y hay más gente que por la mañana. Yo me posiciono en el punto de esta mañana que me gustaba, más o menos, porque ya lo han pillado. Planto el trípode y la réflex con el 150-600 preparado para cualquier aparición, aunque ya me veo de vacío. Seguimos con paciencia, mi mujer va y viene por la plataforma. En una de esas idas y venidas y justo cuando no hace ni un minuto que se ha ido de mi lado en dirección contraria veo junto a un par de personas más como aparece un grizzly más allá de la plataforma, justo por donde pensé que sería más probable. Mi éxtasis ante mi primer grizzly es total, me doy la vuelta para ver si mi mujer mira pero lo que hace es irse más lejos. Allí nadie habla nada, todos están en silencio haciendo fotos, por lo que no es cuestión de dar voces. Espero que el oso se quede con nosotros el tiempo suficiente para que se de cuenta y pueda verlo. Es meterse en el río y empieza a mirar salmones. La gracia es que va dirigiéndose a donde estamos, por lo que cada vez está más cerca. Solo necesita un par de intentos para que cace su salmón. No es que fuera muy difícil porque los hay a mansalva, pero verlo en directo y no en un documental a mi me llena. La cosa es que ha sido tan rápido todo que mi mujer no ha visto que poco a poco la gente se está dando cuenta y se acerca al lugar donde estamos. Afortunadamente el oso tras coger el salmon se dirige a la orilla contraria y empieza a comérselo tranquilamente sentado. Un bocadito, me rasco, olisqueo, otro bocadito... Menos mal que se queda, porque ahí es justo cuando lo empieza a ver mi mujer. Con el apelotonamiento de gente que ya hay le digo que se ponga delante mía, que estoy en primera fila. Disfruto viviendo esto en pareja. Cuando miro las fotos, la verdad es que solo habían pasado dos minutos entre que apareció y se sentó ya a comer, pero esos dos minutos fueron los mejores. Luego se tiró sentado 20 minutos, disfrutando de la fama y de nosotros como paparazzis que no parábamos de hacerle fotos, videos, etc. Cuando finalizó su comida, se levantó y no se fue por donde se había ido, sino que decidió seguir adelante, justo por debajo de la pasarela. Se la hizo enterica, hasta que pasó por debajo del puente de la carretera y lo perdimos. Todo el mundo detrás de él haciendo fotos y fotos. Yo no fui menos. Fue prácticamente 30 minutos de avistamiento intensos, pero de los que te dejan una sonrisa en la boca. Fue irse el oso y en la plataforma nos quedamos cuatro gatos. Por allí le dió por aparecer de nuevo al águila calva y se me puso enfrente, diciendo que ella también es majestuosa. Sin dudas. 30 minutos después del adiós del oso decidimos marcharnos. Son las 19:15 y hay que echar gasolina, ducharse y demás. Cuando nos dirigimos para la salida de repente me dice mi mujer ¡¡un oso!! Sí, es un oso que viene en sentido contrario al que vino el anterior. Luego pensándolo fríamente lo más seguro es que fuera el mismo y que llegara hasta un punto y diera media vuelta. El caso es que nos sirvió para darle otra buena sesión de fotos mientras el caminaba por la orilla o el mismo río hasta que se perdió de vista. Entre 5 y 10 minutos más de avistamiento. Perfecto. Ya sí, tras esto nos fuimos. Saliendo nos encontramos con la pareja con la que hablábamos, que volvían tras cenar. Les comenté que hasta hace un par de minutos había estado un grizzly dándose un paseo. Qué mala suerte han tenido. Una vez en la caravana, tras ducharnos comprobamos que el aire caliente que funcionaba perfecto ahora salía frío y daba igual lo que intentaramos que salía frío. Joder con la caravana los problemas que da. La noche pues cenita y en la cama calentitos a ver serie, que cada vez hace más frío. Distancia recorrida: 173 kms Etapas 7 a 9, total 25
Medio congelados nos levantamos perezosos de la cama. Café calentito y galletas para desayunar y adiós muy buenas caravana. Sin dudas nos ha faltado días aquí. No hemos podido hacer ningún trail y un día más en la pasarela no me hubiera importado. A las 9 ya estamos en la carretera, atentos a los arcenes por si aparece algún bicho. Y apareció. Antes de llegar a Bear Glacier vi un oso a mi derecha. Le dije a mi mujer "¡¡Para, un oso!!" Frenó, pero llendo a 75 km/h avanzas bastantes metros. Dimos media vuelta (lo bueno de estar en la gran nada es que hay pocos coches) pero cuando nos acercamos el pobre se asustó y se perdió en la maleza. Solo me dió tiempo a hacerle una cutre foto. No está nada mal para empezar el día. El camino hasta nuestra primera parada para excursionear era largo y decidimos parar un rato en Meziadin Jt. justo donde se encuentra el lago del mismo nombre. Para ello hay que entrar en un camping que tienen unas parcelas preciosas. El lago chulo pero sin colores llamativos. Volvemos a parar en la Fish Ladder de hace un par de días para ver si está el oso por ahí pululando. En el aparcamiento vimos a un grupo de pescadores con una fogata que a saber si habían pasado la noche y nos comentaron que cogieramos el spray antiosos que habían visto un grizzly merodeando. Así lo hicimos y fuimos hasta la escalera. Allí no vimos osos, sino más intentos no fructíferos de los salmones por salvar el escalón y justo cuando nos íbamos a la pareja de extranjeros del ferry y la pasarela. Le pregunté si apareció un oso luego por la pasarela y me dijeron que nanay, pero que sí vieron al menos un castor. Vaya, yo aún no he visto ninguno en mi vida. Les comenté que los de arriba habían visto un grizzly por la mañana y les señalé el camino del pequeño sendero que hay pero que nosotros no nos atrevimos a hacer, por si querían probar suerte. Fueron más valientes que nosotros porque a él se dirigieron. Proseguimos nuestro camino y de repente vemos un oso negro cruzando la carretera. Para cuando llegamos al punto por el cual ha cruzado no hay pista de él. Seguimos y de pasada veo a otro oso negro a mi derecha. Imposible pararse o reducir la velocidad, ahora sí tenemos coches detrás. Madre mía como es la zona. Llevamos tres osos hoy pero no hemos podido verlos bien a ninguno. Lamentándonos de nuestra buena o mala suerte según se mire, en una recta típica de bajada subida vemos a otro oso negro a lo lejos, pastando o comiendo bayas. Esta vez sí que no tenemos a nadie detrás y podemos aproximarnos poco a poco hasta ponernos cerquita de él. Le hacemos unas cuantas fotos tanto nosotros como el coche que para detrás nuestro al rato. A continuación otra parada, esta vez forzosa. Ha habido un accidente y está el tráfico cortado. Estuvimos retenidos algo menos de 20 minutos. Un coche y un camión eran los afectados, nada grave parece pero un buen boyo se ha llevado el coche, además de un megasusto el conductor. Los kms pasan y a lo tonto otro oso negro que veo al pasar a mi derecha pero de nuevo es imposible parar. Llevamos 5 osos negros hoy, todo un récord. Pero un poco antes de las 12:30 vemos a nuestro sexto, esta vez desde lejos por lo que nos da tiempo a apartarnos y documentarle mientras se alimenta de bayas. Un poco antes de llegar al cruce de Kitwanga donde la Hwy 37 (también conocida como la Stewart-Cassier) confluye con la Hwy 16 (o la Yellowhead) nos paramos para ver unos totems indios, pero de los antiguos de los de hace más de 150 años. En el sitio solo había cuervos, unas cuantas personas de las primeras naciones y casas abandonadas. Al lado se encuentra también la iglesia anglicana de St. Paul, que siendo construida a finales del siglo XIX para ellos es una antigüedad. Además está al lado de una torre de madera que contiene el campanario, que la hace única. Son las 13:15 y nos dirigimos para Seven Sisters P.P. Nos empieza a llover y las montañas no se ven por lo que el desviarnos al Sedan Creek Recreation Site para ver la imagen con los siete picos es una tontería. Nos dirigimos para hacer el Watson Lakes Trail y cada vez llueve más fuerte. Google maps no te lleva a él y hago el cálculo a ojo con los mapas que tengo de los trails del parque. Justo tras una curva y en el otro lado de la carretera veo un letrero azul y un camino de tierra. Ese es. Damos media vuelta y entramos. Tras 700 metros por un camino embarrado y muy cerrado por las ramas de los árboles, este se ensancha y finaliza, sirviendo de aparcamiento. Como no para de llover decidimos comer en el coche y esperar que pare. Comemos y no para de llover, habiendo cada vez más charcos. Estamos solos y le digo a mi mujer que yo voy a hacer el sendero. Ella dice que pasa con la lluvia. Así que impermeables, spray antiosos y cámara y allá voy. El trail no está mal, pero me esperaba más. Es fácil, solo 6,5 kms i/v, más si bajas a los primeros laguitos, pero no tiene nada del otro mundo. Al principio pica bien para arriba, me perdí por un momento que confundí el sendero, luego se puso más llanito y más bonico, pero el sendero que finalizaba cuando llegabas al lago grande a una zona con troncos para sentarse y con restos de fogatas (por lo visto es algo frecuentado por pescadores) no lo recordaba de mis apuntes y como se veían senderitos yo seguí hasta que me convencí que eso no podía ser el sendero y volví por donde había venido. Lo bueno fue que paró de llover a mitad de camino. Todo el sendero canturreando para que se me escuchara por si había osos. Parecía un loco Inicio del sendero con mapa del mismo. Utilzando el autodisparo de la cámara. Primer vistazo del lago principal. Otra foto y me vuelvo. Con el paso ligero hice todo en poco más de hora y media. Una vez en el coche, volvió la lluvia. Ahora me tocaba a mí conducir. Salimos a la carretera y no llevamos ni 500 metros cuando vemos un oso negro más en el arcén. Está comiendo bayas para variar y luego empieza a andar por los terraplenes, nos mira y se marcha. Buah, el mejor momento del día y el oso cerquita cerquita de donde hemos estado comiendo y yo haciendo el sendero. Ya, antes de llegar a Smithers nos desviamos hacia Twin Falls Recreation Site con la idea de hacer el pequeño trail para las cascadas, pero allí empieza de nuevo a chispear y mi mujer no tiene ganas, así que lo dejamos para mañana por la mañana. Una vez en nuestro hotel, el Capri Motor Inn más que correcto, y mientras mi mujer se ducha, cojo la ropa sucia de ambos y voy a una lavandería. Allí me tiro una hora aburrido a que acabe la lavadora y secadora. Una vez ya en el hotel, lo de siempre, duchita, cenita y a ver serie hasta que decidimos que es hora de dormir. 7 osos más hoy. 15 negros y 1 grizzly llevamos, no está mal. Distancia recorrida: 416 kms. Etapas 7 a 9, total 25
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