Paris ¿otro diario mas? ✏️ Blogs of France

Lo que me gusta del turismo de ciudad es que siempre llega un dia en que dejas de ver monumentos y te dedicas a pasear, ver barrios de dicha ciudad y disfrutar de sus bares, tiendas, etc...
Este dia era hoy ya que lo único que ibamos a hacer era subir a la Torre Eiffel de noche.
Nos levantamos de la buena noche que tuvimos ayer con el crucero y desayunamos en la brasserie de otros dias sus deliciosos croissant.
Una vez desayunados nos dirigimos al mercado de las pulgas, marche aux puces, que está en una zona llamada Porte de Clignancourt, es un gran mercadillo al estilo de candem en londres (si bien el de Candem es mucho mas grande y en mi opinión mas cuidado) y tiene un gran mercado de antiguedades preciosa llamado mercadillo vernaison que era lo que fundamentalmente nos llevaba hacia allí.
Una vez sales de la estación de metro te das cuenta de que ya no estás en el Paris centrico y monumental sino en un barrio que, a mi por lo menos, no me gustaría estar a las 12 de la noche.
De camino al mercado ya se ven tiendas de piel, ropa deportiva, zapatos, .... todas ellas regentadas por inmigrantes arabes o de raza negra que te invintan a entrar en las tiendas. Despues te encuentras con un descampado llena de puestos de ropa, electrónica y todo tipo de artículos, tambien te ofrecen tabaco ilegal, relojes de marca a bajo precio, hay trileros jugando a las cartas etc...
Pasado este mercadillo nos encontramos con nuestro destino el Mercado Vernaison, esta zona es un laberinto de callejuelas estrechas con encantadoras tiendas de antiguedades, hay de todo pero hay muchísimas con "grandes muebles" me explico, en muchas tiendas de españa o mercadillos de antiguedades (o incluso en el famosísimo mercado de portobello londinense) se centran en pequeños objetos como abrecartas, botellas, postales, lámparas, etc... pero aquí puedes encontrar de todo mesas, sillas, muebles de salón incluso había una tienda con lápidas y otros objetos de marmol tipo angelotes o cruces.
El dia era precioso y algunos dependientes de dichas tiendas que les preguntamos precio y época de los muebles fueron muy amables y no escatimaron en explicaciones, aunque no os gusten especialmente las antiguedades es un lugar que merece la pena acercarse por lo encantador de sus callejuelas y lo sorprendente de algunos de sus objetos. No tengo muchas fotos ya que muchos anticuarios tenían cartelito de no fotos.
Pasamos allí media mañana y luego vamos a la Plaza de la Bastilla donde ibamos a dar una vuelta y a comprar las entradas para nuestra visita del dia siguiente del Palacio de Versalles, nuestra intención tambien era dar una vuelta por el Marais pero una vez compradas las entradas no nos atrajo mucho lo que vimos y nos apetecía mucho comer al aire libre en un parque, un picnic vaya, así que marchamos de esa zona y nos fuimos a los Jardines de Luxemburgo, en los aledaños de los jardines compramos unas baguettes y en un Quick, una cadena tipo Mc Donalds o Burger King, unas hamburguesas y con eso nos fuimos a comer en un precioso lago que está en el centro de los jardines
Aquí se ven los jardines con la torre Montparnasse de fondo
Despues de comer intentamos hechar una cabezadita en esas sillas que veis pero se levantó un aire muy molesto así que hechamos a caminar (tengo un amigo que cuando hace turismo de ciudad dice que cansa mas que caminando de todo lo que trabaja), salimos por una de las salidas del parque y nos encontramos con el Panteón. Es un edificio imponte de corte neoclasico, en el descansan los restos de personajes históricos franceses como Victor Hugo, Voltaire, Marie Curie, Louis Braille, ....
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No lo visitamos por dentro ya que había que pagar y la verdad, tampoco nos apetecía mucho así que ya que hacía un magnífico día decidimos dar un paseo a la luz del dia por el Barrio Latino. Lo primero que hicimos fué rodear el Panteón y nos encontramos co el Hotel des grandes hommes, lo había visto cuando buscaba alojamiento y me pareció encantador pero muy caro, si os encaja en el presupuesto alojaros allí. Sin mas caminamos durante casi una hora hasta que llegamos a la Mezquita de Paris (مسجد باريس), era un edificio que ya que lo teníamos muy cerca del hotel me apectecía visitar pero no se veía entrada ni salida de gente y a los que vimos salir o entrar no tenían en absoluto aspecto de turistas y además a mi pareja no le apetecía nada entrar así que me quede con ganas de visitar una mezquita, otra vez será. El edificio en si desde fuera no tiene nada de especial ya que hay un muro que lo cubre y solo sobresale el minarete. Alrededor de la mezquita en las calles adyacentes hay todo tipo de negocios enfocados al público arabe: librerias, teterías, carnecerías, tiendas de ropa, .....
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Muy cerca de ellos estaba el Jardin des Plantes que son de entrada gratuita así que nos dimos una vuelta por ellos y nos hicimos unas fotos, si bien no los visitamos demasiado ya que estabamos muy cansados y todavía queríamos darnos una vuelta por el Museo de Orsay. Si bien los Jardines son preciosos y parecen ideales para dar un paseillo, están muy cuidados y a lo largo del mismo las flores y árboles tienen una plaquita donde nos informa de la especie que son.
En el Jardin des Plantes tambien podeis encontrar el Museo Nacional de Historia Natural de Francia, en este ya hay que pagar para entrar. Resumiendo, estuvimos muy poco tiempo así que disfrutaremos de los jardines y el museo en nuestra próxima visita.
Hasta allí cogimos el metro de Jussie para ir a ver el Museo de Orsay, no queríamos marchar sin ver aunque fuera muy rapidamente este museo dedicado a las artes plásticas del siglo XIX y especialmente famoso por sus cuadros de impresionismo. Cronológicamente, cubre la historia del arte entre los maestros antiguos (Museo del Louvre) y el arte moderno y contemporáneo (Centro Georges Pompidou).
Como leisteis mas arriba nos habíamos decidido por visitar mas a fondo el Museo del Louvre y nos arrepentimos mucho ya que este período de la Historia del Arte nos llama muchísimo mas que el 90% del Louvre, pero es lo que hay.
Llegamos y lo primero que queríamos ver era la tienda ya que queríamos llevar alguna lamina para enmarcarla en casa, buscando la tienda entramos al museo sin querer y....... no pagamos la entrada, no presumo de ello pero así fue.
El museo por dentro es precioso ya que ocupa el sitio de una antigua estación de tren y tiene zonas muy abiertas y otras salas mucho mas pequeñas, otro punto a favor es que no hay las multitudes del Louvre. En el museo vimos obras famosas que nos encantaron: el Moulin de la Galette de Renoir, Almuerzo sobre la hierba de Manet y otras muchas que seguro conoceis. El museo tambien es de las Artes Decorativas y hay estatuas y otro objetos. Dejamos para una próxima una visita mas pausada.
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Compramos las láminas que queriamos y llega el momento del dia en el que estamos agotados ya que no habíamos parado en todo el dia, cogemos el metro y nos "arrastramos" hacia el hotel para descansar un rato, cambiarnos y visitar la Torre Eiffel y ver la ciudad de la luz iluminada por todas sus luces desde la cima de la Torre.
Una vez descansados cogemos el metro y para allí vamos, había llovido por el dia pero había quedado una noche muy agradable así que una vez allí nos ponemos a la cola ¡que cola!, estaríamos una hora y cuarto para llegar al ascensor que te sube al primer piso. Hasta dicho primer piso puedes subir las escaleras y no te cobran el ascensor, si bien hasta el 2ª sólo se puede subir en ascensor. El ascensor al 2ª piso solo lo podeis comprar abajo así que pensarlo bien. Nosotros cogimos ascensor para las 2 plantas.
Una vez en la 1ª planta las vistas son ya maravillosas aunque yo no las disfrute mucho porque me dan miedo las alturas y esta primera planta estás en la estructura de la torre así que estás totalmente en el exterior y yo mas bien pasé miedo aunque mi pareja lo pasó como los indios haciendo fotos y disfrutando de las vistas. En esta planta esperamos algo mas de media hora para coger el ascensor a la 2ª, aunque esta espera se hizo eterna porque hacía un frio del demonio allí arriba, el viento cortaba.
Una vez arriba me relajé mas ya que antes de llegar a la cumbre hay una sala con una pequeña exposición sobre la torre y está entera acristalada, ahí hay letreros en los que se puede las distancias a las principales ciudades del mundo (no está Gijón), despues en un derroche de valor subí hasta la cumbre y hasta miré un poco para fuera. Aquí os dejo uns fotos.
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Cada hora los primeros 10 minutos la torre se ilumina, es preciosa, las estrellas mas grandes que veis son porque durante nuestra visita a Francia le correspondía la presidencia de turno de la Unión Europea[/URL]
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Las vistas que se ven desde arriba son muy bonitas y además ir a Paris y no subir a la Torre es como raro, la espera mereció la pena. Despues de la visita fuimos hasta la zona de nuestro hotel y tomamos algo para terminar el dia. Al dia siguiente nos espera el Palacio de Versalles.

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Este dia lo pasariamos en Versalles. A mi personalmente me apetecía hacer noche allí e incluso lo llegamos a mirarlo ya que el viaje en tren es casi una hora pero al final lo descartamos. Nos gusta conocer lugares mas pequeños, no grandes ciudades, pero lo descartamos ya que la cercanía a Paris lo convierte en una especie de ciudad dormitorio y la oferta hotelera no era demasiado abundante mas los problemas de mover maletas y demas, pues nada viaje en el dia.
Muchas veces cuando se planean viajes a Paris de pocos dias se piensa en dejar de lado esta visita por estar alejado del centro, tener que dedicar un dia practicamente entero a la visita y por el precio de entrada al Palacio y jardines si bien nosotros despues de esta visita lo consideramos un "must" como dicen los modernos, o lo que es lo mismo, de visita obligada.
Nos encantó por lo grandioso de sus jardines, fuentes, estanques y lo super cuidado que está y también está sus espectaculares interiores. Te maravilla pensar que en una época tan miserable y turbulenta de la Historia de la humanidad hubiera personas que se atrevieran a vivir con tal opulencia y que al fin y al cabo paseaban y habían ideado el lugar que tu estabás disfrutando ahora.
Lo primero de todo y el mejor consejo de todo este diario: COMPRAR LAS ENTRADAS POR ANTICIPADO, nosotros las compramos en la fnac de la bastilla y que yo sepa hay otra en los campos eliseos, la cola para comprar las entradas en Versalles era muy muy larga.
Nos levantamos pronto y a eso de las 9 cogimos el RER que te lleva directo a Versalles el trayecto dura algo menos de 1 hora (creo recordar) y es ameno ya que vas viendo la periferia de Paris, una vez en la estación no tienes mas que seguir a la turba que cámara de fotos en mano camina decidida, despues de un paseo de unos 5 minutos llegas a una explanada donde está la entrada a los jardines y al Palacio.
Hay dos tipos de entradas para jardines, para palacio y para ambos, cogimos esta última que es la que recomendamos ya que los interiores son espectaculares y conservan intacto incluso el mobiliario de la época.
Comenzamos nuestra visita por los jardines, esto de aquí abajo es digamos la "calle principal"
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digamos que la foto que veis queda el palacio de espalda ahí se ve una fuente muy famosa y super fotografiada, ahí a los lados teneis jardines con estatuas todo muy muy cuidado y bajando por la avenida principal se llega al lago donde se pueden alquilar barcas.
Como veis las distancias son bastantes grandes, se pueden alquilar carritos de golf si bien son un poco caros ya que son 30€ la hora aunque pueden ir hasta 4 personas, nosotros le dimos al playero.
Bajando para abajo y como novedad desde ha ce poco se puede ver el "Petit Trianon" que, explicado muy llanamente, era un palacete que hizo Maria Antonieta para estar a su aire y no tener los rigores de la corte, es un palacio muy "modesto" con un estanque y un par de lugares de juego. La audioguía te explica que era un lugar de encuentro de músicos, poetas, etc....
Esta es la fuente que comenté
Esto lo pongo porque el pequeño trianon de Maria Antonieta tenía un teatro para representaciones privadas
Este es el pequeño trianon, no hicimos foto así que os pongo esta con permiso de wikipedia
Esto es el palacio visto desde el gran lago
Esto es otra perspectiva de los jardines vistos desde el palacio
Los jardines como os digo son inmensos y todo en general es enorme si te pones a caminar puedes estar media mañana, incluso había gente corriendo.
Despues de caminar y caminar y caminar nos sentamos a comer un par de bocadillos que compramos en un puesto que había, hay varios sitios y un restaurante para comer sentado los bocadillos eran a 5€ y eran, pues eso, los tipicos de puesto.
La 2ª parte de la visita es el palacio, aquí tengo fotos como para poner una tienda ya que a mi mujer le encanta el estilo Luis XV-XVI y como es fácil de imaginar era lo que allí se estilaba, el único pero son las mareas de gente que lo visitamos y que en ocasiones hacen la visita un poco agobiante pero, como ya dije, merece mucho la pena no dejeis de visitar el interior aunque tire un poco para atras el precio conjunto de las dos visitas. La audioguía es gratis y es bastante amena.
Os pongo unas fotos de la sala de los espejos donde hacían los bailes y alguna otra de distintas estancias, aunque insisto que podría poner cientos




Despues de nuestra visita a Versalles cogimos el tren de vuelta sobre las 17,00 horas, nos fuimos al hotel nos cambiamos y fuimos a tomar algo para reponer fuerzas ya que estabamos agotados, el dia había mejorado hacía sol y habiamos encontrado una terraza en una plaza en el barrio latino donde vimos pasar la tarde.
De camino a dicha terraza habíamos reservado para otra cena que esperabamos fuera muy especial ya que los dos somos muy aficionados a comer queso, toda clase de queso, por algo Asturias pasa por ser la región de Europa donde mas variedades de queso existen. Reservamos en un restaruante por el barrio latino que nos habían recomendado no era el típico sitio turístico cosa que nos gustó, pedimos un entrante y luego la esperada fondie de queso con una gran decepción ya que sabía muchísimo a vino, aquí hubo una anécdota graciosa ya que sabía demasiado a vino y no porque fuera así la fondi, o eso creemos, así que en ingles se lo dijimos al camarero el cual era un señor de unos 50 años que creo no lo entendió muy bien y nos hizo varias bromas luego sobre lo débiles que eran los españoles y lo fuerte que eran los franceses, en plan buen rollo pero ahí lo soltaba.
Para bajar la cena y ya que había una noche super agradable fuimos a dar una vuelta por las dos Islas (Notre Dame y el Ayuntamiento no os los debeis perder de noche, espectaculares), tomamos algo en una terraza de la Isla de San Luis (la pequeña), y dimos un largo paseo. Nos gustó mucho ver los pisos de la gente ya que muy pocos tenían cortinas y dentro se veían pisos de ensueño. Luego compramos algo en un super 24 horas y acabamos la noche tomando algo en el Sena de espaldas a Notre Dame, preicioso. El dia siguiente aviones y vuelta a casa.

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