Portugal y sus pueblos-1996/2023 ✏️ Blogs de Portugal

Llegamos sobre las 13h a una de las ciudades más conocidas de Portugal. Braga es la tercera ciudad más grande de Portugal, repleta de lugares interesantes para visitar. Esta localidad se caracteriza por contar con bonitas y relajadas plazas, numerosas callejuelas antiguas cerradas al tráfico rodado, y una gran variedad de monumentales iglesias barrocas que recuerdan constantemente las arraigadas costumbres religiosas de sus gentes. Vamos a conocer esta linda ciudad y sus monumentos. Esta localidad es famosa en todo el país por sus reputadas fiestas religiosas, de hecho es considerada como el principal centro religioso de Portugal. Cuenta con casas históricas del siglo XVIII y bellos jardines. Os dejo el mapa de la ciudad.


La primera parada la hacemos en el Santuario de Bom Jesús, de estilo neoclásico rodeado de jardines y con el funicular más antiguo del mundo. En 1882, para facilitar el acceso al Santuario, se construyó el Elevador do Bom Jesus, que unía la ciudad de Braga con la colina. Fue el primero de su clase que se construyó en la península ibérica y aún sigue en uso, cuesta 1,10 euros y está abierto de 8/20h. Suelo adoquinado con preciosos dibujos al inicio de la escalinata.


La razón principal por la que es tan visitado es por la impresionante escalinata barroca conocida como Escadiaria do Bom Jesus (Escalera del Buen Jesús). La escalinata data de diferentes décadas del siglo XVIII. La primera escalinata está anexa a dos capillas que representan las estaciones del Vía Crucis.


Consta de cuatro tramos hasta llegar al santuario, en tres de ellos hay distintas fuentes ornamentales. La segunda escalinata destaca la Escadaria dos Cinco Sentidos (Escalera de los cinco sentidos), con sus fuentes alegóricas, cuyos caños nacen en los oídos, los ojos, la boca y la nariz de las distintas estatuas.



Y la Escadaria das Três Virtudes (Escalera de las Tres Virtudes), la más alta de todas, anexa a capillas y fuentes que representan la fe, la esperanza y la caridad. A esta no le hice fotos pero pongo esta otra que también está al lado.


La escalinata de la Vía Sagrada, representa el ascenso al cielo y tiene 577 escalones. El Santuario actual se empezó a construir en 1722. Al final de esta escalera, se construyó, alrededor de 1725, una iglesia barroca. Las obras de las primeras capillas, escaleras e iglesia tuvieron lugar a lo largo del siglo XVIII. Alrededor de 1781, el arzobispo Gaspar de Braganza decidió completar el conjunto añadiendo un tercer tramo de escaleras y una nueva iglesia. La iglesia vieja se demolió y se construyó una nueva siguiendo un estilo neoclásico. Esta nueva iglesia, comenzó en 1784 y fue consagrada en 1834. El santuario está situado a 5 kilómetros del centro de Braga, es uno de los emblemas de la ciudad. Es visitado cada año por numerosos peregrinos penitentes. Se alza en lo alto de una frondosa colina desde la que se puede observar la ciudad. El primer indicio de la existencia de una capilla sobre la colina data de 1373. La capilla está dedicada a la Santa Cruz, fue reconstruida en los siglos XV y XVI. En 1629 se construyó una iglesia de peregrinaje dedicada al Bom Jesus (Buen Jesús), con seis capillas dedicadas a la Pasión de Cristo.


El santuario por dentro, las fotos no salieron especialmente bien






En el siglo XIX, la zona alrededor de la iglesia y la escalera se expropió para convertirla en un parque. Todos los jardines están muy bien cuidados, con flores multicolores y dibujos en los setos, una maravilla de lugar que no os podéis perder.


En el parque hay un templete y debajo una gruta con cascada a un estanque, junto al Hotel Do Parque.


Entramos dentro de la gruta que no es demasiado grande ni demasiado pequeña, pero es preciosa


Arriba de la gruta se encuentra el templete rodeado de flores y plantas.


Bajamos las escalinatas y no podemos irnos sin ver las fantásticas vistas de la ciudad, un mirador impresionante.


Cogemos el coche y bajamos a la ciudad. Son cerca de las 15:00h y vamos a pasar calorcito del bueno pero es lo que toca, de vez en cuando nos iremos mojando la cabeza con alguna fuente para refrescarnos. Comenzamos a patear la ciudad y llegamos al centro neurálgico, a la Plaza de la República, conocida como Plaza de Arcada. El nombre de Arcada se debe a la galería existente construida en 1715 y que estaba formada por arcos. La plaza se inauguró a finales de la Edad Media. En 1910, con el establecimiento de la República Portuguesa, la plaza recibió su nombre actual.


En un lateral de la plaza se puede apreciar la Basílica de los Congregados. Fue mandada construir por la Congregación de los Padres Oratorios de San Felipe Nery cuando éste llegó a Braga en 1687. Es de estilo barroco, también fue convento de una orden de religiosas, biblioteca y posteriormente ocupado por la Universidad de Minho.


Continuamos por Avenida de la Libertad, adornada con millones de flores


Al final de la avenida a la derecha, se encuentra la Casa do Raio o Casa do Mexicano, con una fachada preciosa cubierta de azulejos de estilo rococó. Se trata de un monumental palacio construido entre 1754/1755. El edificio pertenece a la Santa Casa da Misericordia de Braga y desde el año 1956 ha sido declarada como Inmueble de Interés Público.


En Largo Carlos Amarante, se encuentra el edificio del Hospital y de la Iglesia de San Marcos que vemos actualmente y datan del siglo XVIII. En estilo barroco, con sus dos torres gemelas, contrasta con las dependencias hospitalarias creando un conjunto precioso. En su decoración exterior destacan las estatuas de los apóstoles a tamaño natural en la balaustrada superior. En la mitad de la fachada de la Iglesia, en un nicho, podemos ver la imagen de San Marcos. En el lugar existía antes una Iglesia y un hospital que Don Diogo de Sousa ordenó construir en el sigl XVI. El hospital se destinaba entonces a asistir a los pobres, peregrinos y viajantes que pernoctaban en la ciudad de Braga. Don Diogo de Sousa está sepultado en la capilla mayor de la Iglesia, en un sepulcro de jaspe blanco trabajado en mosaico.


Y al lado se encuentra la Iglesia de Santa Cruz, con elementos manieristas y barrocos, se comenzó a construir en el siglo XVII por orden de Jerónimo Portilo, fundador de la Cofradía de Santa Cruz. Se dice que la construcción del templo fue posible gracias a las limosnas que recogían de los devotos. De la iglesia original sólo queda la fachada. La fachada está presidida en su panel central, por la Santa Cruz titular, figurando en el arquitrabe los instrumentos de la pasión.


En Largo do Pazo se encuentra la Fuente de los Castillos erigida en 1723. El conjunto está coronado por una imagen femenina que simboliza la ciudad y está decorada con castillos, almenas y putti.


En la misma plaza se puede ver el Antiguo Palacio Episcopal que se comenzó a construir durante el siglo XIV. Constituye un conjunto de edificios levantados a lo largo de varios siglos que tuvo como resultado un extraordinario conjunto urbano multi arquitectónico. Así como en el pasado fue la sede de la mayor entidad sociocultural de la región, hoy lo sigue siendo como rectoría de la Universidad de Minho. También se utiliza como biblioteca y archivo. La fachada data de los siglos XIV, XVII y XVIII, su interior fue destruido en el siglo XIX por un incendio. Un ala del edificio da a los preciosos Jardines de Santa Bárbara. Los jardines datan del siglo XVII y está muy bonito decorado. En el centro hay una fuente donde se alza la estatua de Santa Bárbara.


Seguimos paseando por esta bella ciudad llena de monumentos y llegamos a la Plaza del Municipio donde se encuentra el Ayuntamiento. En su fachada destaca el cuerpo central, con la puerta resaltada con dos grandes volutas dispuestas oblicuamente, sobre ella una gran hornacina que alberga una imagen de la Virgen con el Niño, único elemento del antiguo edificio del concejo.


Detrás del Ayuntamiento se encuentra el Arco de la Puerta Nueva de estilo barroco y neoclásico. El arco muestra el escudo de armas del arzobispo José de Braganza. Está catalogado como Monumento Nacional. Era una antigua puerta de la muralla, mandada construir por el arzobispo Diego de Sousa en el siglo XVI, aunque su aspecto actual es fruto de la reforma llevada a cabo en el siglo XVIII.


Continuamos y nos vamos hasta la Catedral, el templo religioso más antiguo de Portugal. Comenzó a construirse durante el año 1070 y su construcción duró un siglo Tiene un conjunto de estilos como el románico en su estructura, el manuelino en su recubrimiento o el barroco en sus magníficos adornos. El románico es el más interesante, y es el que puede apreciarse por la forma de la catedral en conjunto, y en la entrada presenta un tallado con paisajes de una leyenda medieval conocida como el Zorro Renart. De su exterior destacan sus torres de estilo manuelino y el tejado realizado por João Castilho, quien también construyó parte del Monasterio dos Jerónimos de Lisboa.


A dos calles de la catedral se encuentra el Cruzeiro do Campo das Hortas, en la Plaza das Carvalheiras. Se construyó en el siglo XVII. Clasificado como Monumento Nacional desde el 16 de junio de 1910. La cruz se basa en un cuadrilátero con cojines, seguido de una columna dividida en tres partes, la inferior decorada con puntas de diamante o huevo, y las dos restantes estriadas, rematadas por una esfera y rematadas por la cruz arzobispal.


Después de ver los monumentos más importantes de la ciudad y con el calor metidos en el cuerpo, cogemos el coche y nos vamos al Santuario do Sameiro que se encuentra a 14km en la cumbre de la montaña de Buen Jesús. La primera basílica se inició en 1863 y fue fundado por el Padre Martinho António Pereria da Silva, quien en 1871 hizo colocar en él una imagen de Nuestra Señora de la Concepción, pero ante la gran afluencia de fieles, en 1890 se inició la construcción de la actual Basílica. Éste es uno de los centros de mayor devoción mariana de todo Portugal, tras el Santuario de Fátima y el Santuario de la Madre Soberana.


El santuario es el punto más alto de la ciudad, se encuentra a 572 metros y la visita es gratuita. Destacan cuatro estatuas de ángeles frente a la Casa de las Estampas y tienda de souvenirs. Los Tres Arcángeles San Gabriel, San Miguel, San Rafael y el Ángel de la Guardia de Portugal. También hay grandes méritos en relación a Nuestra Señora, como Ángel de la Guarda de Portugal que se convirtió en el precursor de las apariciones de Nuestra Señora en Fátima.


En la cripta puede verse un conjunto de paneles con azulejos diseñados por Querubim Lapa. Inaugurada el 17 de junio de 1979, excavado en el sótano de la Basílica, está destinado a albergar a los peregrinos que acuden en masa al Santuario en fechas especiales. Es una maravilla, muy distinta y original a todas las que he visto hasta ahora


Construida en forma de cruz latina, donde destaca la cúpula y dos torres que contienen el carillón de campanas.


Frente a la basílica hay una extensa esplanada que hace de mirador a la ciudad y los alrededores.


A continuación se encuentra la increíble escalinata de 265 escalones, que desemboca en la carretera que conduce a Buen Jesús y ofrece una de las mejores vistas de la ciudad. Como podéis apreciar en las fotos, detrás de la basílica había un incendio y el humo cada vez era más intenso y más negro


También imágenes del Vía Crucis.


En los laterales de la escalera hay dos pedestales altos de granito, de 20 metros de altura cada uno, que sostienen en lo alto las representaciones de la Virgen María y el Sagrado Corazón de Jesús.


Al final de la escalinata, se encuentra la imponente Estatua de Juan Pablo II.


Volvemos a subir la escalinata y nos vamos junto al Hotel Juan Pablo II donde se encuentra esta cruz.


Cogemos el coche y muy cerquita se encuentra la Iglesia Santa María Magdalena, también conocida como Iglesia de Falperra, fue construida con el propósito de santuario en el siglo XVIII en estilo barroco. En 2016 fue declarada Monumento Nacional. No subimos a verla porque ya habíamos cubierto el cupo de subida de escalones y porque ya eran las 19:15h y teníamos que seguir viaje.


Después de 6 horas visitando los distintos lugares de la ciudad, volvemos a Oporto. Nos vamos al alojamiento a descansar un rato y dejar las cosas y después salimos otro rato a pasear por la ciudad y buscar algún sitio para cenar algo. Primero vamos a ver la Muralla Fernandina en Escadas do Caminho Novo. Durante el siglo XIV comenzó a ser construido un nuevo cinturón de murallas que quedó prácticamente concluido alrededor de 1370. El hecho de que la obra se concluyera durante el reinado de D. Fernando, explica el hecho de ser corrientemente designada como "Muralla Fernandina". Las murallas comenzaron a ser progresivamente demolidas a partir de la segunda mitad del siglo XVIII para dar lugar a nuevas construcciones, plazas y edificios. La mayoría de la muralla fue demolida a finales del siglo XIX. Los tramos de las Murallas Fernandinas que hoy día quedan en pie, fueron clasificados como Monumentos Nacionales en 1926.


La muralla tiene una altura de 9 metros, estaba recortado por almenas salientes, teniendo varias torres cuadradas y otras elevadas y 17 puertas y postigos en total. Con un perímetro de 2.600 metros. En una esquina se puede ver la Estatua de Arnaldo Gama, periodista y escritor portugués, autor de medio ambiente de novelas históricas.


Nos vamos paseando por la rivera con vistas al precioso Puente Luis I.


Vamos por Cais da Ribeira y vemos una gaviota en unas escaleras, no podía volar y estaba a punto de caer al agua y se podría ahogar, fuimos a rescatarla y ponerla en una zona llana donde no corriera peligro alguno.


Seguimos callejeando por sus calles solitarias y con escasa luz que las hace misteriosas a las 23h.


En Rua de Sá da Bandeira, construida en el siglo XVII, donde existía una capilla dedicada a San Antonio, la Iglesia de los Congregados tiene una sobria fachada decorada en el siglo XX, con los azulejos característicos de Portugal. Los murales de Acácio Lino, representan escenas de la vida de San Antonio, el trabajo fue realizado en el año 1927.


Al lado se encuentra la famosa Estación de tren São Bento del siglo XIX, famosa por sus elaborados azulejos en el vestíbulo principal.


De camino al alojamiento vemos la Confitería Sical y entramos a cenar algo. Se encuentra en la Plaza D. Filipa de Lencastre. Tomamos un bocadillo de tortilla francesa a la plancha y otro de filete también a la plancha con patatas fritas, todo esto ya era casi a las 00:30h de la noche.


Después de tantas horas de aquí para allá, mi cuerpo y mi cara ya van diciendo que eche el freno y a dormir, jajajajaja.


Y de camino al alojamiento paramos hacernos otra foto en la Iglesia San Ildefonso que está al lado de nuestro apartamento.


Y hasta aquí llegó el día de hoy, mañana más y mejor

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Llegamos sobre las 12:30h a esta preciosa ciudad. Aveiro es una ciudad pequeña, conocida por sus canales, la llaman la Venecia portuguesa. En pocos años ha conseguido hacerse un hueco y ser reconocida por el turismo a nivel internacional. Hay tres canales que dividen la ciudad, hasta hace poco, fueron usados para transportar sal y algas comestibles en los “Moliceiros”, unas coloridas góndolas que ahora son usadas para paseos turísticos. Os dejo mapa cogido de internet.


Paseando por sus calles se pueden ver estas curiosas esculturas que en 2009, la ciudad en colaboración con la Galería VerArte, instaló 14 esculturas alrededor de la ciudad. Esta exposición de Luís Queimadela se titula "InVitro". Según el artista, las esculturas representan cuerpos posmodernos a través de extremos, como la cara y los pies, está relacionada con el concepto de cuerpo cósmico. La estructura cuadrangular significa control político de cierre y asfixia. Este concepto retrata la ósmosis perfecta entre la belleza y la angustia. A mi me encantan éstas esculturas raras


Paseando por sus calles, llegamos a la Iglesia de N.S. de la Presentación. Construida sobre una capilla dedicada a San Gonzalo, su construcción pertenecía a la primera parte del siglo XVIII y fue modificada en la segunda mitad del mismo siglo. La fachada tiene dos maravillosos paneles de azulejos con motivos hagiográficos.


Se pueden contemplar edificios muy pintorescos por toda la ciudad.


Mirar que pinta tienen estos postres típicos, son el Bollo Inglés y la Gelatina de Frutas, tienen que ser una delicia


En el suelo de sus calles hay mosaicos con dibujos como éste de un Moliceiro.


Sobre los canales Central y Cojo, se encuentra la Plaza General Humberto Delgado, aquí se celebra la entrada del Año Nuevo. A cada lado del puente se pueden ver las esculturas del Salinero y la Salinera.


Vistas del canal central de Aveiro.


Continuamos hasta la Catedral de Aveiro, que su aspecto desde fuera parece una simple iglesia de ciudad, nada ostentosa ni llamativa. La antigua Iglesia de N.S. de la Misericordia fue consagrada en 1464 y estaba vinculada con el Convento de los Dominicos del mismo nombre. Entre los siglos XVI/XVII se llevaron a cabo algunas obras y en 1834 el convento fue transformado en Cuartel Militar y años más tarde, ardió en un incendio. En la fachada principal se puede ver un portal barroco enmarcado por 4 columnas salomónicas, un friso con decoración vegetal y el escudo de armas del Infante D. Pedro, Duque de Coímbra. La catedral en 1835 se convirtió en la iglesia principal de la Parroquia de N.S. de la Gloria y en 1938 se convirtió en la Catedral de la Diócesis de Aveiro por bula Papa Pío XI. En el atrio que hay frente a la catedral, se alza un hermoso crucero gótico de finales del siglo XV, asentado en un pedestal del siglo XVII. Sobre él se recorta una representación de Cristo en la cruz cuyos brazos terminan en flor de lis. El capitel, de gran valor iconográfico, está decorado con los pasos de la Pasión.


Continuamos hasta la bonita Estación de tren de Aveiro. La fachada está decorada con azulejos polícromos, en tonos azules y amarillos, que representan varias escenas ferroviarias, naturales y de cultura con actividades tradicionales. Esta estación está considerada como un buen ejemplo, a nivel regional, del estilo denominado de Casa Portuguesa. Las obras de las vías y de la estación se iniciaron en agosto de 1861 hasta principios de 1862, teniendo lugar la inauguración el 10 de abril de 1864. El pequeño edificio original fue insuficiente para el creciente movimiento en la estación y fue ampliado en 1915. En 1916 pusieron los primeros azulejos decorativos y en 1986 fue de nuevo remodelada con ocasión de las conmemoraciones del 75º aniversario del Ramal de Aveiro y se colocó un nuevo panel de azulejos y en el año 2000, dos nuevos paneles de azulejos decoraban la fachada. La antigua estación entró a formar parte del circuito turístico City Tour, organizado por la Región de Turismo de Aveiro en julio de 2006.


También se puede apreciar otra de las esculturas de Luis Queimadela "InVitro".


Nos vamos a uno de los canales para contemplar de cerca los Moliceiros, sus dibujos y sus colores. Los Moliceiros tienen una proa y una popa muy elegantes que suelen estar decoradas con cuadros que ridiculizan situaciones cotidianas.


El Casco Histórico de Aveiro es una maravilla, podrás admirar sus preciosas y coloridas fachadas como la del Museo Arte Nova, es el centro interpretativo de la extensa red de motivos Arte Nova distribuidos por toda la ciudad de Aveiro. Dentro del museo también tienes un salón de té.


Otro de los edificios emblemáticos es el Museo de la Ciudad.


En la Pastelería Rossio, entramos a probar los famosos "Ovos Molhes". La historia un tanto legendaria que prevalece entre los ciudadanos acerca de este dulce se remonta a cinco siglos atrás, cuando en el extinto Convento de Jesús de Aveiro sus monjas usaban los huevos que les regalaba la caridad para diferentes fines. Calentaban las claras y las usaban para planchar la ropa y las yemas las tenían que tirar porque apenas duraban unos días Una de sus monjas comprobó que si a los enfermos que trataban en el convento los alimentaban con estas yemas azucaradas, manifestaban una mejoría, por lo que en Aveiro fueron las primeras en elaborar repostería a partir de las yemas de huevo. Tras la desaparición de este convento, convertido hoy en el Museo de Santa Joana, algunos artesanos conservaron la receta de las yemas recubiertas con obleas y la convirtieron a partir de mediados del siglo XIX en una de las señas de identidad de Aveiro. Compramos uno con forma de pez y tengo que decir que me encantó, es muy parecido a las Yemas de Santa Teresa de Avila, si las habéis probado y si no, ya estáis tardando, jajajajaja. Creo que nos costó 1/2 euros, no recuerdo bien.


En el canal de San Roque se encuentra el Ponte dos Carcavelos de 1953, también se le conoce como el Puente de los Enamorados, ya que muchos vienen a este lugar para hacerse fotos.


Cogemos el coche y nos vamos a ver Las Salinas. La producción de sal siempre ha jugado un papel importante en la economía de la región de Aveiro aunque hoy día ha disminuido considerablemente, el turismo es una de sus principales fuentes de ingreso.


Cogemos el coche y nos despedimos de Aveiro y continuamos ruta hasta Costa Nova, de la que os hablaré en la siguiente etapa, los mosquitos me están devorando las piernas

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Llegamos a Costa Nova, es más un lugar de veraneo, con bonitas playas con gran oleaje. Se encuentra a 12km de Aveiro, ósea que podéis aprovechar el viaje y ver las dos cosas el mismo día.


Costa Nova es conocida por sus preciosas e interminables playas pero también por albergar un paseo lleno de preciosas casas marineras de colores. Estas se encuentran junto al Club de Vela, pertenecen al Restaurante Club De Vela da Costa Nova.


Tuvo su origen en la apertura de la barra de la ría en 1808. La designación se debe a dos hechos, el primero, "Nueva Costa", en contraposición a la "Costa Antigua" (San Jacinto), en segundo lugar, debido al hecho de que este lugar, ha habido un enorme prado verde (Costa Nova do Prado).


Aunque normalmente se le asocia con la ciudad de Aveiro, Costa Nova es el nombre de una playa del distrito de Aveiro que pertenece a la ciudad Ílhavo. Está situada al lado de la Ria de Aveiro, en la zona turística de Rota da Luz. Es como una pequeña urbanización que se diferencia de todos los pueblos de alrededor por sus “palheiros“, las famosas casas de colores a rayas.


Los palheiros nacieron como almacenes para los pescadores locales que faenaban en Costa Nova. Hace años esta zona no estaba edificada y se utilizaba únicamente como área de pesca. Con el paso de los años la playa de Costa Nova se ha ido convirtiendo en una zona turística y los antiguos almacenes fueron reformados y reconvertidos en viviendas residenciales, todas ellas decoradas con rayas verticales de distintos colores llamativos, y todo esto es lo que hace a este lugar tan bello y especial.


La playa de Costa Nova es de esas pocas playas casi vírgenes que aún no han sido masificadas con apartamentos y hoteles turísticos. A estas playas también se acercan muchos deportistas para practicar deportes acuáticos como el windsurf o el kitesurf ya que el viento que suele haber es ideal para este tipo de deportes.


Nosotros nos acercamos para que mi hijo disfrutara un rato de la playa y relajarnos un poco.


Él y mi marido construyeron un castillo en la arena y disfrutaron mucho.


Damos una vuelta por los alrededores del Club de Vela donde pudimos contemplar un pequeño banco de peces.


Nos despedimos de este precioso y singular lugar y continuamos ruta

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