DIA 13: BANFF -> BANFF ( 3h )
ALOJAMIENTO:
Brewster´s Mountain Lodge (Check in: 16.00h) 489 CAD total 3 noches
208 Caribou street
Banff (Alberta), T1L 1C1
Habitación doble deluxe con cama grande, bañera hidromasaje y nevera. Desayuno continental. Parking 5.25 CAD.
07:00h: Hoy es el día que vamos a hacer nuestra caminata más larga. Salimos a las 7 de la mañana dirección al LAKE LOUISE por la Bow Valley Pkwy. No teníamos mucha diferencia entre hacerlo por ahí o elegir la autopista, ya que ésta está de obras y la velocidad es la misma, y por la carretera la posibilidad de ver animales aumenta en …. digamos un 10%, quizá un 20% jajajaja, así que le hemos dado un margen de 15 minutos más a nuestra ruta de 45, por si hay suerte de parar a fotografiar algún animal.
Es curioso que no haya nadie cuando llegamos al parking. Teníamos la idea de que aquello se llenaba desde primera hora. Quizá las cosas turísticas hayan menguado con esto de la crisis, pero el caso es que estamos de momento solos, y aparcados en la primera plaza.
Es un lujo llegar a esa hora ya que el lago está completamente en calma y el color del agua con la calma es más impresionante. Al igual que en el Emerald Lake, la tonalidad del verde cambia según la luz del día, así que conforme el sol vaya cubriéndolo alcanzará un color más verdoso esmeralda, y más bonito. A los pies del lago se encuentra el Fairmont Chateau Lake Louise. Un impresionante edificio, que le da un poco más de encanto al lugar. Alojarse en él con vistas al lago y al Glaciar Victoria es todo un lujo. No en vano en él se realizan numerosas bodas, etc, etc. Se que a algunos les parece una atrocidad un edificio al estilo castillesco a los pies de un entorno natural tan maravilloso. A nosotros nos gusta. No nos parecería bien si hubiera un montón de edificios de todo tipo de pelaje sin ton ni son, pero así de grande, con ese diseño, un lujo cuidado y un respeto con el entorno, nos parece un contraste entre lo natural y lo humano muy bien encajado. Si lo pudiésemos pagar ya sería la leche, jajaja.
Vista hacia el hotel.
Mismo punto, vista hacia el glaciar.
El lago dispone de un camino para poder recorrerlo por el lateral derecho según se mira hacia el glaciar y poder hacer las fotos con el característico hotel junto al lago. Es la caminata más corta y transitada. Si no pretendes caminar mucho (una hora en total), es más que suficiente para un viajero no amigo de tirar al monte.
En ruta hacia la cima:
La ruta más común aquí es hacer la 33+35+34 ( están muy bien indicadas, y con sus correspondientes desvíos señalizados ). Generalmente se recomienda realizarlas en este orden: Lake Mirror, Lake Agnes (con big o little beejive) y Plain of 6 glaciers, para a la bajada tener le LAKE LOUISE con el Hotel de frente para sacar fotografías con esta panorámica.
www.pc.gc.ca/ ...v1/cc.aspx
www.pc.gc.ca/ ...iv1/c.aspx
Una vez llegados allí rodear el lago se hace cómodo, y comienza la ascensión. Durante el camino te va indicando cuanto falta, la dirección etc..etc.. así que no preocuparse por perderse.
Hay gente muy bien equipada con palos de trekking, botas de alta montaña y toda una parafernalia digna de serpas del Himalaya, y mucha gente con cascabeles ahuyenta OSOS. Maldita sea, dan ganas de decirles que se quiten los dichosos cascabeles, porque aparte de molestos, el resto no queremos ahuyentarlos, hemos venido aquí para verlos. Nosotros, aunque llevamos nuestras botas, y ropa de abrigo por si acaso ,ya que en la montaña nunca se sabe, parecemos más turistas que montañeros. Conforme se escarpa la caminata y mientras seguimos entre pinos y más pinos, valoramos el esfuerzo extra que requiere hacer el Mirror y el Agnes, así que en el desvío decidimos no seguir ese camino e ir directamente al Plain of 6 glaciers, entre otras cosas, porque lagos ya hemos visto unos cuantos y comenzamos a dudar lo que nos aporten unos más por muy “mirror espejil” que sean frente al esfuerzo de la ruta. Tras compartir opiniones con otros Españoles que nos encontramos por la ruta, fue un acierto.
En el parking y en la zona de abajo nada más llegar hacía un frío que te pelabas y la cazadora era más que necesaria, pero una vez dejada la zona de los pinos, el sol nos aploma, vamos en camiseta, y si pudiéramos deshacernos de la cazadora lo haríamos, porque nos sobra todo. Ahora empezamos a mirar más hacia atrás, ya que la vista del lago abajo comienza a ser bonita, lejana, y cada vez más pequeña.
Algunas zonas tienen preparado para poderse asir a la roca, aunque me imagino será para cuando las condiciones del camino por nieve lo hagan más peligroso, porque en nuestra fecha es un camino más que cómodo.
Tras unas horas de ascensión, hemos llegado al TEA HOUSE, una cabaña montañera que ejerce las funciones de refugio, y bar. No tienen electricidad. (No entiendo por qué, ya que con una plaquita solar bien camuflada asunto solucionado). Imagino que es porque a sus encargados les gusta el royo de vivir UNPLUGUED ya que pasan allí semanas. Curiosamente en la TEA House no funciona el móvil, pero unos metros más allá si. Las vistas en su día eran frontales a los glaciares, sin duda maravillosas. Hoy en día. Pino, pino, pino. –Hay que podar-.
Nos sirven una limonada (sin refrigerar claro) a precio de traspaso del local, pero el sitio lo vale, y tras el cansancio de subir, la deshidratación del sol y la poca oferta de los alrededores (jajaja) no es cuestión de escatimar. Nos explican en su carta que todo es tan caro porque tienen que subírselo en helicóptero o en caballo ¿¿? Queeeeé ¿¿ que se puede subir en caballo ¿¿?¿ pues sí, de hecho sube muchos tramos por una vía alternativa, y nos encontramos excursiones de caballistas allí mismo. Nosotros hemos subido andando cuando podíamos haber subido a lomos de un caballo. Eso no lo pone en ningún sitio cuando lees comentarios.
Otra de nuestras alegrías al llegar al Tea House, fue ver que tenían un baño, ya que no era cuestión de ponerse a mear en medio de la caminata con gente subiendo y bajando, pero si queréis saber lo que es realmente asco y ganas de vomitar sólo tenéis que abrir la puerta del mismo. Hablo desde la percepción masculina del hecho, que hace mucho más fácil la maniobra, pero no me imagino en chica lo que puede suponer aquello.
Después de la gran ascensión llega el momento cumbre. El último tramo de 800 m que nos llevará a la llanura de los 6 glaciares. Me hacía especialmente ilusión eso de subir a los glaciares, llegar a pisar la nieve perpetua aunque sólo fuera por un lateral , y escuchar como se resquebraja un glaciar en vivo. Si tenéis oportunidad de pasar un rato contemplándolo y sucede que un trozo de las montañas altas se resquebraja y cae, es un chasquido de gran estruendo que asombra.
Llevamos subiendo horas para llegar a esa meta final, peeeeeero, un cartel nos indica que no se puede seguir, que los últimos metros son inestables. ¿¿?¿ Queeeeee ¿¿?¿?¿ No puedes poner ese cartel abajo, al principio de todo???….. !!!!!!!! Lo tienen que poner arriba cuando estás a escasos metros de cumplir tu objetivo de llegar al final. Por Dios….!!!!!
Leemos bien el cartel, porque pensamos que quizá lo hayan puesto hoy mismo, y por eso está ahí. No, lleva más de dos meses. No queremos pecar de atrevidos, pero tras ver que muchos montañeros hacen caso omiso (muchos ni se percatan del cartel), y una chica con zapatillas de deporte nos indica que realmente ya lo sabe pero que no está tan mal, tras una tozudez mía, decidimos continuar a pesar de la advertencia. Realmente lo malo son los últimos 100 metros que están formados por una torrentera de predriza sobre la que además circula agua en algunos tramos por arriba e intuyo que por abajo también y pudiera llegar a desprenderse la ladera entera si esas aguas hacen corrimientos. Quizá no suceda nunca, pero ahí esta. Tu no ves el peligro desde tu posición del suelo, pero si pudieras mirar desde un plano cenital con un helicóptero, te darías cuenta que tienen razón.
Tras realizar algo que encima no debiéramos hacer porque nos expone a un cierto riesgo aunque no exagerado del que nos han avisado, mi tremenda decepción consiste en ver que la llanura del glaciar no es blanca, sino que la lengua del glaciar es sucia, cubierta de tierra y piedras que le dan un aspecto más de ladera terrosa que de glaciar. Tan solo estamos un pelín más cerca, pero casi teníamos la misma visión desde el último punto seguro que desde donde se suponía el gran View Point del final de la ruta.
De vuelta al punto del cartel de advertencia, y mientras hacíamos unas fotos para recordar lo ocurrido, nos encontramos a una pareja de Españoles de Barcelona muy majetes que curiosamente también estaban haciendo la ruta por libre muy parecida a la nuestra, y coincidíamos en nuestras fuentes de información de blogs como www.losviajeros.com . Es una casualidad de las que te alegras. Tras una conversación nos despedimos e iniciamos la bajada. Encontraremos más Españoles en nuestro descenso.
La bajada es más amena ya que las vistas del lago te acompañan hasta que llegues a la zona de pinos. Como el sol está más alto ahora puede verse el lago en su mejor color, hasta que el sol no está en su cenit no le da por completo, ya que las montañas que le rodean son altas, escarpadas y provocan algo de sombra durante la mañana. Sin duda ahora tiene el color más esmeralda, y llegados al final del descenso, desde el lado opuesto al hotel, se tiene una panorámica desde la que por el color parece una auténtica piscina pintada. Es muy muy bonito.
A nuestra llegada, realizamos una vista por dentro del hotel que tiene unas terrazas en toda la zona baja por si quieres tomar algo y disfrutar de la vista. Nos hacen gracia los aparcacoches vestidos al estilo tirolés. Ahora si que hay mucha gente en el parking y han llegado algunos autobuses. Lo hemos hecho muy bien, porque hemos podido disfrutar con toda tranquilidad del entorno, hacer fotos, etc. sin ninguna aglomeración, porque a esta hora ya no sería lo mismo.
Como no hemos hecho la ruta completa que pensábamos, nos ha sobrado tiempo en nuestros planes, y decidimos acercarnos al LAKE MORAINE.
La ruta en coche desde aquí es corta y sin darnos cuenta ya hemos llegado.
A estas horas el parking no está completo porque hay mucha rotación de gente que ya se va, y aunque veas coches aparcados hasta el final, merece la pena ir hasta el principio para buscar huecos libres.
El lago tiene un color diferente, es cristalino y turquesa, y el embarcadero con las canoas le da cierto encanto. Es un lago diferente al anterior en cuanto a su forma, ya que no se ve entero desde el lateral.
Desde aquí teníamos la intención de hacer el trail 43 a Larch Valley, que es también uno de los más recomendados- Este sale a 100 metros pasando el Lake Moraine Lodge por la orilla del lago, y desde allí se ve el valley of de 10 Peaks (en total 3 horas). No se por qué nos empezamos a dar cuenta de que ver un lago tras otro, ver un pico tras otro, y trepar por una montaña tras otra, por muy “Las rocosas” que sean, no nos aporta tanto placer como hemos leído que le sucede a otros viajeros. Así que tras un descanso, un disfrute del paisaje desde su orilla, y algo de tentempié, continuamos nuestra ruta para hacer el loop que teníamos previsto de las cosas atractivas de los alrededores de Banff.
Tras nuestra salida del parking, los coches están detenidos en ambos sentidos. Eso es señal de animal a la vista. Hemos leído en todos los carteles que los Osos son peligrosos, que no hay que molestarlos, que no bajes del coche, que no hay que hacerles fotos, que si son pequeños cuidado porque la madre está cerca y se le pone mala leche, etc..etc.. En este caso se trata de un Oso chiquitín. A los pocos minutos, se abre paso entre la fila de coches una pick-up de la policía de los parques, y se baja una ranger. Todos expectantes por ver cómo maneja la situación, y de repente, comienza a gritarle, a pegar palmas y a espantarlo para que salga corriendo. Juasp!!!! Pues si que era peligroso. Menos mal que si veías uno no había que hacer ruido ni asustarlo ni nada.
17:00h: Salimos de nuevo por la autopista y a pocos kilómetros volvemos a tomar la Bow Valley Pkwy, a ver si hay suerte y vemos animales. La ruta merece la pena aunque sea más lenta porque tomas más contacto con la naturaleza, y paramos en una gasolinera, que para los Españoles que estamos acostumbrados a verlas todas iguales: REPSOL, CAMPSA, PETRONOR, parece de película de los años cincuenta, con un entorno cuidado con mucho mimo.
La gasolina, no es más cara que en otros sitios como habíamos leído, así que sólo por lo bonita que nos parece es buena idea echar gasolina en ella.
Al principio de la Bow Valley Pkwy tienes un cartel que te indica en qué puntos kilométricos y qué tipo de animales vas a ver en cada uno de ellos. Si te imaginas que va a ser como los safaris de los parques de Orlando, no te hagas ilusiones, porque lo más que llegamos a ver son los carnuzos de los Caribou, y alguna cabra tomando la sombra bajo los puentes de la autopista. Los Caribou tienen una cosa muy curiosa, y es que ellos no creen que tú les vayas a hacer nada malo, no piensan que el coche les va a atropellar, así que sencillamente ellos van por su camino, o directamente no se apartan. Al verlos ya puedes frenar porque si esperas que se vayan a apartar de la carretera porque llegues tú, vas directo al accidente. De ahí que haya tantos atropellos.
18:00h: Llegamos al Minnewanka Lake. En este lago se hacen muchos tours turísticos en barco, se alquilan canoas, motos acuáticas y demás. Es más un lago de recreo a diferencia de los otros que hemos visto. Hacemos la Lake Minnewanka Scenic Drive, y nos encontramos con un grupo de cabras que se pone a correr al lado de nuestro vehículo (están como cabras).
En unos 10 minutos llegamos al Two Jack Lake. Es un lago pequeño pero en el que merece la pena parar a hacer un picnic ya que tiene unas mesitas en la playa de arena, y lo mejor de todo es que tiene un Spirit Island. Quizá no sea tan famosa como la del Maligne Lake o como la del pirámide Lake de Jasper, pero en esta tienes un banquito desde el que sentado puedes disfrutar del paisaje a la sombra. Un lugar genial para ir a merendar.
Tengo cara de haber tirado una piedra al lago y acertado sobre un pato.!!!!
Nuestra siguiente parada en 8 minutos es el Johnson Lake. Aquí la gente está bañándose como si de un playa se tratase. Teníamos anotado que el hacer una caminata rodeándolo duraba una hora. Pero Bueno . ¡!! Ya vale de rodear lagos ¡!!!
19.50h: Volvemos hacia Banff siguiendo la Lake Minewanka Scenic Drive dirección hacia Tunnel Mountain Rd. con el objetivo de parar en los famosos Hoodoos.
Para ser sincero, no había leído nada de documentación sobre qué era un hoodoo, y aunque creo que se veían en 1º de BUP me queda un poco lejano, o ese día debía estar castigado en el pasillo (en mi época en la escuela eran tan despiadados que hasta castigaban por portarse mal, que atrocidad.). Había visto fotos de los hoodoos por Internet, pero en lo que menos me había fijado era el hoodoo en si, ya que para mi lo más bonito de ese lugar no es las formaciones a lo churrillos de arena que haces cuando juegas de niño en la playa, sino el doble meandro en forma de ojo que realiza el río. Tienes unos miradores para hacerles fotos. Insisto, -hay que podar-. No les quito mérito a los hoodoos y su historia de estar formados después de la época glaciar etc..etc.. pero no dejan de ser dos montones de arena haciendo la vertical. Como lo que había en nuestras mentes es encontrar ese doble meandro en forma de ojo que habíamos visto en tantas fotos, pues eso no nos defraudó, era bonito de ver.
Continuamos la ruta por la Tunnel Mountain Rd, y pasamos por la cabecera del Tunnel Mountain trail. Dudamos de la importancia que se le da en muchas guías de hacer esta caminata monte arriba sin descanso, y acertamos en suprimirla. La ascensión a la Sulfur Mountain al día siguiente desde la cual se ve este trail, nos volvería a dar la razón.
Donde gira la carretera hacia el pueblo para coger la Buffalo St, existe un mirador de madera desde el que se disfruta de una panorámica del Hotel Fairmont Banf Spring. En ese mismo punto puede bajarse por una senda para ver las Bow Falls desde el lado contrario al habitual. Pero con verlas desde el lado normal del rio (el otro ) con parking para coche etc..etc.. es más que de sobras.
Regresamos al hotel y decidimos salir a cenar a la cantina mexicana que tenemos en frente. Hoy nos entra la risa tonta en la cena, porque las camareras con el afán de ganarse la propina son extremadamente risiles y serviciales, que digo extremadamente, llegan a ser ridículamente risiles, pero esa tontería nos hace la cena más agradable. Al final, solamente con lo que nos hemos reído con la actitud de la camarera merece la pena dar la propina.
Repasando las fotos en nuestra habitación comprobaremos horrorizados como todas las fotos de hace dos días han desaparecido por completo, no sabemos por qué pero todo un día completo ha desaparecido. Frustración monumental.
Si hubiéramos tenido un PC habríamos intentado usar un programa de esos de recuperación, pero no tenemos ninguna herramienta. Nos da pena porque ese había sido un día formidable con imágenes espectaculares. Llegados a este punto nos planteamos. ¿ Y si repetimos el día anterior de nuevo? La excursión en canoa por el Emerald Lake nos había encantado tanto así como el resto de esa zona, y visto que nos sobra tiempo para el próximo día podemos permitírnoslo. Fue una gran idea hacer eso, no solo pudimos hacer de nuevo nuestras fotos en los lugares preferidos, sino que al saber ya de antemano los sitios que nos gustaban y como acceder a ellos, el día nos cundió un montón, e incluso disfrutamos de un mejor clima que en el día original. Las rocosas tendrán muchos lagos y muchas montañas, pero es uno de los mejores y más bonitos días que hemos pasado.
A partir de ahí, y visto los precios de las memorias, para próximos viajes en lugar de llevar las 5 tarjetas habituales, decidimos llevar una tarjeta por día de viaje, y no acceder al menú de borrado de nuestra cámara nunca más, para evitar que por si acaso hubieran podido ser nuestras zarpas las causantes de tal desaguisado.