13 de agosto de 2.012
Al final hemos sobrevivido a la noche en este nauseabundo hotel de Arizona.
Antes de irnos, pasamos por la universidad de Arizona, para ver la estatua de un leñador que tienen allí. Flagstaff a pesar de estar en pleno desierto, tiene un buen clima, con un buen número de lluvias al año, que hacen que sea una ciudad con muchos árboles. De ahí que el símbolo del pueblo sea un leñador.
Casualmente nos encontramos al equipo de los Arizona Cardinals, que juega en la NFL, entrenando allí.
Para ir a las Vegas, hemos ido por la ruta 66.
Hemos vuelto a pasar por Seligman.
Es un pueblo sin casas. Sólo 4 tiendas y 2 restaurantes, al que constantemente llegan autobuses de turistas que quieren conocer la ruta 66.
En estos pueblos están basados los personajes de Cars.
Peach Springs. He leído, que es Radiator Springs en Cars, pero el pueblo sólo tiene una gasolinera abandonada.
Y llegamos a Nevada.
La presa Hoover.
Primer casino que encontramos en Nevada.
Las primeras casas del extrarradio de Las Vegas.
Las Vegas desde lejos..
Nos pusimos a 45,5 grados.
Esta vez hemos vuelto a alojarnos en el Flamingo, que es lo más barato que hemos encontrado. 35 euros la noche. Parece increible, porque encima la habitación estaba recién renovada. Y más recordando el malísimo hotel en el que hemos pasado la última noche casi por el mismo precio.
Así empezó siendo El Flamingo cuando abrió hace más de 60 años.
Y esto es una porción de lo que es ahora.
Cenamos en un Johny Rocket que han puesto en el hotel.

Bajamos a estrenar las máquinas y tomar una copa. En Las Vegas, mientras juegas en el Casino, las bebidas son gratis. Basta con dar una pequeña propina a la camarera de 1 o 2 dólares.

A las 9 de la noche salimos a dar un paseo, pero a esas horas, el termómetro todavía marcaba 41 grados. Entre eso y las copas gratis, me dió un mareo que casi me desmayo, por lo que decidimos que lo mejor era ir a descansar.
