Día 14. Savuti (Chobe)
Me levanté con la sensación de que algún animal había estado merodeando por nuestro coche esa noche. Y estaba en lo cierto: vimos unas huellas de elefante apenas a un par de metros de donde habíamos dormido y me vino a la cabeza lo que había leído acerca de un elefante que es asiduo al campamento de Savurti.
Recogimos las tiendas y salimos pronto de safari. Nos dirigimos hacia el sur a través de la sandridge road (la marsh road estaba inundada) y fuimos por todos los loops que pudimos alrededor del canal y de las colinas circundantes. Tras tres horas dando vueltas lo único interesante que vimos fue a una familia de mangostas.
Y encima nos volvimos a quedar encallados en la arena. Otra vez. En esta ocasión fue en la zona arenosa al sur del sable loop. Era tan arenoso que no podíamos usar el hi-lift Jack adecuadamente ya que se hundía constantemente en la arena. Ni siquiera con la ayuda de una tabla se sujetaba el maldito. Afortunadamente un tipo nos vio y nos sacó con su cabestrante…hay que ver qué útiles son. Tras una mañana un poco decepcionante por lo poca variedad de fauna que pudimos ver, regresamos al campamento a comer algo y darnos una ducha. La verdad es que las instalaciones estaban bastante bien mantenidas y siempre te podías duchar con agua caliente.
Con los ánimos renovados, estábamos listos a probar suerte de nuevo; esta vez al otro lado del canal, cruzando el puente. Encontramos la zona con mucha arena por lo que condujimos con mucho cuidado para no encallar de nuevo. Nos acercamos a cada charca de la zona, pero lo único que conseguimos ver fueron elefantes así que decidimos volver al otro lado del puente, por la zona encharcada y las pequeñas colinas. Pero nuestro gozo en un pozo, elefantes y elefantes.
Ante tal éxito, optamos por una visita “cultural” para ver las pinturas rupestres. Las pinturas en sí no son nada del otro mundo (hay que escalar un poco para verlas) pero al menos las vistas que se tienen desde ahí están bastante bien. Ya que no pudimos ver muchos animales, al menos disfrutamos del paisaje.
Poco más hicimos el día de hoy. Regresar al campamento y preparar nuestra barbacoa para cenar. La anécdota del día es que mientras preparábamos nuestro chiringuito, a apenas unos metros de nuestro sitio, pudimos ver a un enorme elefante que estaba comiendo cerca de los baños, dentro del propio campamento. Nos subimos al muro que protege las instalaciones colectivas para poder verlo de cerca y la verdad es que era muy grande. Por fin habíamos visto al elefante del que todo el mundo hablaba y que se paseaba por el campamento como pedro por su casa. Lo malo es que un poco tarde y no había luz para hacerle fotos.
Teníamos muchas esperanzas de ver felinos en Savuti…pero la verdad es que quedamos muy decepcionados. Mala suerte, qué se le va a hacer.