Volamos con la compañía Ryanair desde Madrid a Palermo.
Estuve mirando precios para volar a Catania pero salía más económico volar a Punta Raisi, aeropuerto de Palermo. Dos billetes i/v fueron 190€ saliendo el 27 de agosto a las 07:00 am.
Claramente la compañía más barata es Ryanair, aunque cualquiera que lo haya probado sabe la calidad de sus servicios... cada vez peor. Pero si queremos ahorrar en el vuelo para disfrutarlo en el destino, esta es la mejor opción sin duda.
El vuelo fue cortito, unas 2 horas y media aproximadamente.
A la llegada a Punta Raisi y tras recoger las maletas facturadas, hay que salir y hacer cola en una parada de autobús gratuito que te lleva a la zona de alquiler de vehículos. El primero no lo cogimos por estar algo despistados y, en fin... ya sabemos las ansias que les entran a ciertas personas cuando ven que se quedan sin sitio! te doy un empujón, me cuelo y estoy ya sentado en el autobús cuando tú ni te has enterado de que ha parado
El segundo llegó a los 10 minutos y sin problema llegamos a la zona de recogida del coche de alquiler.
Nosotros alquilamos con Sixt y tuvimos la suerte de que el mostrador estaba completamente vacío mientras que para el resto de compañías estaba hasta arriba.
Alquilamos un coche económico con la reserva hecha desde España (270€ del 27 de agosto al 5 de septiembre). Nos tocó un Renault Clio que si llegaba a 100Km/h iba el pobre con la lengua fuera. Pero bueno, era cómodo y sobre todo tenía espacio en el maletero para una maleta grande y dos trolley de mano, que era lo que nos importaba.
El trayecto del aeropuerto a Palermo transcurrió sin problemas.
(Recomiendo a todo el mundo que se baje la aplicación Sygic, nos llevó a todos los sitios perfectamente
Como nota, funciona bastante mejor en Android, que en IOS)Íbamos a pasar 3 días de alojamiento en Palermo, de los cuales uno lo invertiríamos en ver la ciudad y los restantes en hacer excursiones cercanas.
Alquilamos un apartamento a través de Airbnb.
Fue Casa Guiditta, situado en el barrio de Kalsa.
La localización es bastante buena para ir a pie a los monumentos más importantes de la ciudad, pero sobre todo lo escogimos porque no había problema de aparcamiento. Era gratuito en las inmediaciones del apartamento y había sitio de sobra.
El precio fueron 129€ por 3 noches, más 19€ de tarifa de Airbnb. 148€ en total.
La casa era grande, tenía wifi y aire acondicionado.
Podíamos entrar a partir de las 12:30, pero solo pudimos dejar las maletas ya que aún estaban limpiando la casa de la visita anterior.
Estábamos reventados del viaje puesto que tuvimos que estar en Barajas antes de las 6 de la mañana. Así que dimos una vuelta por el barrio y después de comer un par de arancines (son una especie de croquetas de arroz y con muchos rellenos a elegir) en un puesto que había en la calle (llenan muchísimo) nos echamos una siesta para coger la tarde con fuerzas.
Por la tarde, nos dispusimos a salir y conocer Palermo.
Mentiría si dijese que la primera impresión fue buena... es una ciudad ruidosa y algo caótica, las callejuelas están sucias y los edificios mal conservados.
En un paseo no muy largo, pasamos por Piazza Marina (genial para cenar, muy cerca de nuestro apartamento), Quattro Canti, Plaza Pretoria con su Fuente de la vergüenza, el Mercado de la Vucciria (del que leí muy buenas opiniones pero supongo que al ir por la tarde, solo vimos 2 puestos y muchísimos restos de basura y olor a pescado horrible) la Catedral de Palermo y el Teatro Massimo. Bajamos dando una vuelta hasta el puerto y después fuimos a cenar a Plaza Marina.
El nombre del restaurante no lo recuerdo, pero estaba en un extremo de la plaza, al lado de unas escaleras que daban a una calle donde hay un supermercado Carrefour.
Salió bastante barato y cenamos de maravilla. La calzone espectacular!
Por las noches ofrecen pizzas y pollo a la brasa. Por las mañanas, se puede pedir pasta (buenísima) y pollo pero no a la brasa ya que las tienen apagadas.
El restaurante tiene una terraza que siempre está hasta arriba por las noches.
Después de cenar, tomamos un mojito en una terraza de al lado.
Recomiendo esta zona para salir a cenar e incluso después tomar unas copas.
Hay muchos bares con música en directo y mil sitios para cenar.
Nuestro "casero" nos comentó que había marcha los fines de semana hasta altas horas de la madrugada, por si a alguno le interesa.
El día fue bastante tranquilo, pero al día siguiente empezaríamos con más movimiento.