Amanece con lluvia así que estamos en el apartamento hasta la una, y cuando para visitamos lo último que nos queda, el jardín del Palacio de Cristal.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
No existe tal palacio, sino un pavellón con una cúpula enorme. Eso sí, los jardines son enormes, con pavos reales, fuentes, patos en los lagos… Todo muy limpio, los setos recortados recientemente, es de lo menos descuidado que vemos en Oporto. Como el terreno, por supuesto, no es llano, va haciendo niveles y zonas distintas (jardín romántico, jardín de hierbas aromáticas…). Ideal para un paseo relajado.
Y antes de tomar el metro hacia el aeropuerto comemos en el restaurante Migalhas, muy cerca de Trindade. El único sitio donde nos ponen una cesta de pan y un bol de paté sin pedirlo nosotros y luego en la cuenta vemos que nos lo han cobrado. De todas formas no es caro, el pan 1€ y el paté 2’5€. Ya había leído en el foro sobre esta costumbre así que ya me lo esperaba.
Los precios muy buenos y las raciones enormes. El local es muy bonito y el servicio correcto. Muy recomendable.
Y hasta aquí nuestra escapada invernal a Oporto. Gracias a todos por leer y a Roger, como siempre, por las fotos.