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4 SEPTIEMBRE
BARCO LABUAN BAJO (RINCA, PINK BEACH, KOMODO)
Llegó el gran día, ducharme, desayunar y despedirme del hotel. Tuve que esperar afuera de una agencia a que llegara toda la gente que íbamos a ir en el barco. Por ahora solo estábamos 3 y yo todavía pensando en los 18 que teníamos que ser. Pasados unos minutos nos juntamos 9 personas y nos pusimos en marcha hacia el puerto, esta vez no pagamos nada por pasar al puerto. Llegamos a nuestro barco, que no era el de la foto que me habían enseñado, a mí me pareció mucho mejor (Medang II creo que se llamaba). Subimos y alojamos las mochilas y pertenencias en la estancia principal del barco y zarpamos. 9 Personas hacíamos la excursión nada más! y 5 de ellas somos españoles! y los otros 4 tienen nociones de español! y ninguno nos mareamos! A eso lo llamo yo tener suerte. Aparte de nosotros la tripulación consiste en 5 personas más. El barco para 9 personas estaba muy bien, había 2 baños, 1 para mujeres y 1 para hombres. En plena travesía es difícil mear de pies para que os voy a engañar, y para limpiar el inodoro teníamos un barril con agua y una palangana. El papel higiénico la mayoría de las veces está húmedo como poco, así que mejor llevar el propio. Hay agua embotellada en el barco, cada uno coge una botella hasta que la acaba y ya sacaran más. Las comidas hay 3 al día, a las 6 de la mañana, a las 12 del mediodía y a las 18:00, pero suelen sacar galletas entre comida y comida para reponer fuerzas de las excursiones. Hay electricidad a 220v en el barco, pero no siempre funciona. También hay un equipo de música pero gracias a dios solo lo usaron un poquito el primer día que les gusta mucho la canción de Despacito-Luis Fonsi. Ahora las excursiones, hoy tocan Rincca, Pink beach y Komodo. Una de mis metas en este viaje era ver dragones de komodo y ya estaba a punto de hacerlo.
Rincca: Fue la primera de las paradas, es una isla con menos vegetación que Komodo, hubo que pagar la entrada al parque y ya que estábamos también dejamos pagada la entrada a Komodo y esperamos a que llegara nuestro guía. Antes de llegar a la caseta ya habíamos visto un búfalo deambular por debajo de unos árboles y al lado de las casetas paseaban unos ciervos. Llego nuestro guía y nos explicó cómo iba las isla y los caminos que había largo medio o corto y los tiempos que llevaba hacer cada uno. Cuando nos dio a elegir todos dijimos el largo, entonces el dijo que en esta época del año hace mucho calor que mejor el largo para Komodo que hay mas selvas y mas posibilidad de verlos etc... que haríamos el medio allá (te da la posibilidad de elegir para acabar haciendo lo que él diga). Nos llevó a ver a los dragones de komodo abotargados que suele haber tirados en las casetas. Eran bichos enormes de más de 2 metros pero ninguno parecía querer moverse mucho (ni nada). Estuvimos sacando fotos mientras explicaba cosas y al rato apareció un ejemplar bastante joven de menos de 1 metro andando hacia ellos. Yo pensé que se lo comían, pero no, paseó entre ellos y se volvió al monte por el mismo camino por el que había venido. Empezamos la caminata y empezamos a ver monos y aves locales, paramos al lado de un montículo de tierra que estaba encintado con plástico de no pasar. Sobre Él había un dragón de komodo grande, era la hembra y su nido, a principios de septiembre se encuentran protegiendo el nido donde han depositado los huevos enterrados y no se mueven ni comen hasta que eclosionen (como los cocodrilos). Vimos un par de lugares de puesta de huevos más, pero no hubo suerte de ver alguno grande andando tranquilamente. Volvimos al barco.
Pink Beach: Esta playa se encuentra en el parque nacional de Komodo. El nombre viene de su arena rosada, que no es más que una gran abundancia de trocitos de coral rojo entre los granos de arenas y demás que hace que parezca rosa desde lejos. El barco tuvo que echar anclas lejos de la playa, había corriente, y la gran cantidad de coral que hay a los lados de la playa hizo que costase mucho llegar hasta ella, pero todos llegamos. Tuvimos 30 minutos y a volver a nado al barco, que fue mucho más fácil.
Komodo: Llegamos bastante tarde, casi quedaba un cuarto de hora para cerrar el parque al público. El guía nos dijo los caminos que había, pero que por falta de tiempo haríamos el corto. Aquí vimos muchos jabalís en la caminata, al volver nos llevó a la caseta de cocina donde había un dragón de komodo abajo y le tiraron algo de carne para que se moviera cuando tuvimos preparadas las cámaras, no es lo que yo esperaba pero bueno. Andamos un poco más por un camino que lleva la playa y de repente por fin un dragón de komodo andando lentamente montaña arriba, la verdad es que no tiene nada de especial, pero no me quedé sin verlo. Un poco más adelante en mitad del camino se encontraban (siempre según el guía) 2 de los dragones de komodo más grandes de la isla, estaban parados pero con la cabeza en alto, en vez de parecer abotargados. Hubo suerte de que no se movieran y pudimos echarnos unas fotos con ellos. Acabamos y volvimos al barco ya casi de noche.
Para pasar la noche el barco se metió en una zona entre islas donde había más barcos como el nuestro preparados para pasar la noche, algunos con música y gritos y otros más tranquilos. Después de cenar apareció una txalupa con un hombre que vendía bintangs a 50.000IDR y la verdad es que ya vendía ya, yo compre 2 pero solo nuestro barco compraría casi 20. Hablar con la gente mientras bebíamos cerveza y a dormir. Como hacía buena noche subimos las colchonetas que teníamos por cama a la parte arriba para dormir al raso (aún así hace bastante frio así que hubo que echarse sabanas y toallas por encima).
5 SEPTIEMBRE
BARCO (MANTA POINT, GILI LABA)
Nos levantamos y desayunamos mientras el barco estaba en marcha, íbamos a Manta Point, a media mañana o así llegamos al punto. La tripulación bajo a una txalupa con motor con nosotros y se puso a buscar las manta con uno de ellos tirado en el agua con gafas de bucear y agarrado a la txalupa mientras esta se movía. Cuando vieron la primera, todo el mundo al agua y a seguir al bicho. Son aguas profundas 6 o 7m más o menos, y las mantas no van por la superficie exactamente (menos cuando saltan), así que haciendo snorkel no se acerca uno mucho a estos animales. Además íbamos en manada detrás de ella, a mi me cogieron y me echaron para atrás en medio de la carrera a nado a por la Manta, en vez de seguirlos me aparte de ellos, siempre siguiendo al animal con la vista y tuve suerte de que diese la vuelta y vinera exactamente donde yo estaba y poder grabarla durante un par de minutos yo solo desde arriba. Dudo que siempre se vean mantas, nosotros vimos 2 nada más y ya estuvimos un buen rato.
A la vuelta al barco sacaron galletas para ir picando mientras llegábamos al siguiente destino, Gili Laba. Es una isla deshabitada sin apenas arboles y con un pico muy alto desde donde se ve mucho paisaje. La subida es difícil y cansa muchísimo, pero puedes descansar todas las veces que quieras, ya que nadie se va a perder allá, pero hay que tener cuidado de no caerse ya que las laderas son muy empinadas. Desde arriba se ven las aguas cristalinas y azules y en septiembre un manto de hierba amarilla cubre toda la isla. El único pero de esta isla es que la playa suele tener bastante basura. Al bajar al barco nos dejaron un rato para poder bañarnos y quitar el sudor que llevábamos encima. Después de esto el barco se puso en marcha y ya no pararía hasta mañana cuando llegásemos a nuestro siguiente destino. Dormir con el barco en marcha acarrea más frío y el ruido del motor.
6 SEPTIEMBRE
BARCO (MOYO ISLAND, MEDANG ISLAND)
Desayunamos todavía en marcha y a media mañana llegamos a Moyo Island, nos pasan en txalupa a la playa desde donde haremos un pequeño trekking hasta unas cascadas (mata jitu) y pozas de agua dulce (aconsejo llevar deportivas que se puedan mojar y embarrar). Cuando llegamos a la cascada hay que subir por ella, es muy empinada pero hay zonas donde no resbala y con ayuda de los árboles y alguna cuerda todo el mundo fue capaz de subir. Una vez arriba están las pozas donde por fin después de 2 días podrás bañarte en agua dulce. Nos dejaron descansar 30 minutos y vuelta al barco donde nos preguntaron si queríamos bañarnos en aquellas playas y salió que sí. Antes de atracar esa mañana a mi me había parecido ver algo parecido a un sálpido (google) y quería ver de más cerca esas cosas gelatinosas. fue saltar desde el barco y empezar a picarme distintos puntos del cuerpo que no iban protegidos (llevaba camiseta de manga larga acuática muy y mucho aconsejable) sin que aparentemente hubiera nada en el agua ni medusas ni nada que yo pudiera ver. Así que me volví lo más rápido que pude a subir al barco, desde el pude ver un par de muchachos indonesios en una barca y que llevaban leotardos a la hora de meterse al agua así que por algo será. Yo lo llamé el caso de las cosas que pican pero no se ven.
Después de esta parada y de comer con el barco en marcha, se saltaron el itinerario y no sé exactamente donde nos llevaron (Medang island), era una isla muy estrecha y con muchas palmeras donde estaba el poblado donde vivía la familia de la tripulación. Nos pasearon por el pequeño pueblo, y pudimos comprar cervezas y alguna cosa más. Tuvimos tiempo más que suficiente para hacer snorkel en aquellas playas, donde por sorpresa encontré un pez escorpión descansando debajo de una roca, aparte de este encuentro nada que resaltar. Ya al atardecer volvió la tripulación y nos pusimos rumbo a Lombok (Bangsal) pero ya no llegaríamos hasta mañana y otra vez con el barco en movimiento toda la noche.
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