Día 3 (18/08/16): Jackpot- West Yellowstone- Lake Yellowstone
Este tercer día tocaba hacer ruta desde Jackpot hasta Yellowstone y empezar ya a visitar algunas zonas de interés de camino a nuestro alojamiento en el Lake Lodge, en pleno corazón del parque . Dividimos el día en dos etapas:
1) Jackpot- West Yellowstone: unos 500 km, accederíamos al parque por su entrada Oeste. Los amarillos y ocres del desierto (y las bolas rodantes que parecen pelusas gigantes) irían dando paso al verde de Idaho, Montana y Wyoming. Pasaríamos por Twin Falls, Pocatello, y Idaho Falls, donde haríamos una parada técnica para cargar provisiones, y una última parada en West Yellowstone antes de adentrarnos en una de las maravillas del salvaje oeste.
2) West Yellowstone- Lake Lodge: unos 92 km, pero la idea era ir parando por el camino a ver cosas como la zona de Madison, Gibbon Falls y Artists Paint Pots.
Como veréis en las siguientes etapas, no entraré en describir minuciosamente cada una de las atracciones de Yellowstone, ya hay otros diarios que lo hacen de manera muy detallada. Mi intención es relatar nuestro día a día, contar alguna anécdota y dar una visión general de cada zona, así como dejar algunos enlaces de interés para profundizar más si se desea. Pero no voy a nombrar cada manantial ni cada géiser, ni a describir todos los recovecos del parque, o esto se haría interminable .
Así que lo primero fue levantarse a las 6:30 y desayunar en la habitación del hotel (las provisiones que habíamos comprado el día anterior) para ponernos en ruta lo antes posible. Luego hicimos el check-out en Cactus Pete’s, nos despedimos interiormente de los ludópatas y sobre las 7:30 nos pusimos en marcha. ¡Rumbo a Yellowstone!
Nada más salir de los límites de Jackpot ya se entra en el estado de Idaho, famoso por sus patatas como bien anuncian en sus matrículas orgullosamente .
Circulábamos por carreteras prácticamente vacías, atravesando extensas zonas de campos y granjas.
Al rato nos incorporamos a la autopista en dirección a Pocatello, parando a repostar a media mañana en una gasolinera perdida en medio de la nada. Seguimos por la autovía hasta Idaho Falls, donde hicimos la compra de provisiones. Una de las adquisiciones fue la famosa nevera de porexpan para mantener bebidas y otros alimentos fresquitos durante el viaje, aunque aquellos primeros días en Yellowstone solo la utilizamos al final del día para enfriar cervecitas. Eran las 12:30 cuando nos poníamos en marcha de nuevo, primero por una carretera bastante transitada, pero que después se va vaciando a la vez que empiezan a aparecer zonas de montaña y bosques, el paisaje se vuelve mucho más interesante de nuevo.
Atravesamos una zona de obras (una constante durante el viaje, durante el verano hay frecuentes obras en las carreteras de USA) y poco más adelante entramos ya en el estado de Montana. Seguimos hasta West Yellowstone, una pequeña población que sirve de base y de entrada para explorar el parque. Eran ya las 14:30 y decidimos comer allí, una buena pizza en un restaurante muy pintoresco, decorado con motivos típicos de la zona (se llamaba “Gauches” o algo así).
Una hora más tarde seguimos hacia Yellowstone y enseguida llegamos a la entrada, no había cola (supongo que la gente a esa hora ya empieza a salir del parque en lugar de entrar). Foto clásica del cartel que anuncia el parque:
Tras mostrar nuestro pase anual de los parques y recoger la información que nos entregaron, entramos y primera parada: Gibbon Falls. En nuestra euforia ya nos parecieron fantásticas, pero la verdad es que nada que ver con lo que nos esperaba en la zona del cañón… a posteriori y en la foto las veo bastante birriosillas .Había bastantes árboles caídos debido a las tormentas y las lluvias (supongo).
Seguimos la marcha adentrándonos en el parque y, de repente, coches parados en la carretera: había algún animalillo cerca, seguro. Y efectivamente, a unos metros teníamos a un coyote que inevitablemente se convirtió en la víctima de un montón de cámaras hambrientas de instantáneas dignas de National Geographic. Aquí Míster Coyote:
Y aquí lo que hizo cuando nos vio fotografiarlo :
Una vez hubo dejado clara su postura al respecto de los guiris pesados, siguió su camino tan tranquilamente. Mucho miedo no tenía, también lo digo… Mirad qué bonico:
Seguimos hacia Artists Paint Pots, aquí tenéis una breve explicación sobre lo que se puede ver:
www.americansouthwest.net/ ...-pots.html
Un poco de información extraída de esa web:
El llamado Artists Paint Pots comprende un grupo de unos 50 manantiales, geysers, fumarolas y, especialmente, “ollas de barro”. Éstas exhiben gran variedad de tonos de azul, gris y marrón, y diferentes texturas, pudiendo sufrir cambios a lo largo del año en función de la cantidad de agua subterránea que haya en ese momento.
Todos estos elementos se pueden contemplar haciendo un trail de dificultad fácil (0’6 millas), por un camino parcialmente de madera (una pasarela). Es prácticamente plano, solo hay una pequeña subida y algo de pendiente, pero muy asequible para todo el mundo.
Algunas fotos de las ollas de barro, en este caso, prácticamente blanco:
Por desgracia cuando estábamos haciendo la ruta por la susodicha pasarela, empezó a llover bastante fuerte y tuvimos que salir pitando . Llegamos al coche hechos una sopa y decidimos ir tirando hacia el Lake Lodge, ya que no veíamos factible seguir con las visitas.
Cuando atravesábamos la zona de Hayden Valley, llegó una nueva sorpresa: ¡nuestros primeros bisontes!
Un poco de información respecto a tan curioso bichejo: el bisonte americano es el animal terrestre más grande de América del Norte. Tiene una cabeza enorme, inclinada hacia abajo, una especie de joroba sobre los hombros, y las patas traseras relativamente delgadas. Pueden pesar de 500 a 1000 kg y medir de 2’2 a 3 m, con las hembras siendo de un cuarto a un tercio más pequeñas que los machos. Ambos sexos tienen cuernos, que son lisos, negros y curvados hacia arriba. El hábitat del bisonte americano lo constituyen los valles fluviales, las praderas y las llanuras. La actual población de bisontes americanos, que llegaron prácticamente a extinguirse pero fueron reintroducidos en Yellowstone y otras zonas naturales, es de unos 350.000 ejemplares.
Acabamos viendo muchos: algunos de lejos, otros pasando junto a la carretera, otros incluso circulando frente a nosotros en la carretera… una maravilla y un privilegio poder contemplar a estos peculiares animales tan de cerca.
Además de bisontes varios, en ese tramo también vimos otro coyote, pero no tengo foto . Éste fue algo más respetuoso y no se meó en nuestras narices .
Respecto a la zona donde nos dirigíamos: el lago Yellowstone es el lago de montaña más grande de América del Norte, con sus 32 km de largo por 23 de ancho. Es enorme, una especie de mini-mar con sorpresa subterránea incluida, y ocupa un antiguo cráter volcánico. Su superficie suele estar helada hasta el mes de Junio, debe de ser un espectáculo impresionante verlo en invierno...
Entre bisonte y bisonte, acabamos llegando a la recepción del Lake Lodge casi a las 6 de la tarde. Este alojamiento se compone de un edificio principal y una serie de cabañitas en las cercanías, que son las habitaciones. En el edificio principal es donde se hace el check in, hay un restaurante, una tienda y un salón muy acogedor. También cuenta con un porche con balancines desde los cuales se ve el lago. Como veréis en la reseña (en el apartado de información práctica del día), se trata de alojamientos muy sencillos y rústicos pero para mí la situación es privilegiada y el entorno idílico.
Exterior del Lake Lodge:
Y el interior:
Y, bueno, las normas están claras, ¿no?
En la recepción del lodge nos dieron las llaves de la “cabin” y movimos el coche hasta allí (hay plaza de aparcamiento en la misma puerta). Pero al llegar… ¡sorpresa! Había un bisonte justo en la puerta de la cabaña vecina, seguramente venía a darnos la bienvenida a su hogar. Aquí tenéis la prueba:
Cuando estábamos embobados mirando al bisonte pasó una comadreja corriendo, pero no me dio tiempo a hacerle foto (lástima).
Finalmente descargamos las maletas y la comida y nos fuimos un rato al edificio del Lake Lodge a chafardear. Aparte del restaurante y la tienda de recuerdos (con cosas chulísimas) también hay un sitio donde se puede coger hielo picado gratis, imprescindible para nuestras cervecitas de recompensa después del duro día.
Como os comentaba, puede que el Lake Lodge tenga las cabañas más rudimentarias de muchos km a la rodonda, pero para mí llegar y encontrarme con un bisonte prácticamente en la puerta no tiene precio.
Así que aquél día nos retiramos felices y satisfechos, contentos con todo lo que habíamos podido disfrutar hasta el momento. Y, por suerte, aquello no había hecho más que empezar.
Información práctica del día:
- Itinerario del día:
1)Jackpot- West Yellowstone
Distancia: 500 km
Tiempo previsto: 4 horas 40 minutos (4 horas 30 minutos sin tráfico)
Tiempo real: 7 horas (con paradas)
Mapa:
2) West Yellowstone- Lake Lodge
Distancia: 92 km
Tiempo previsto (sin paradas): 1 hora 40 min
Tiempo real: 2 horas 30 min
Mapa de la zona del lago Yellowstone:
- Lake Lodge, Pioneer Cabin. Precio por noche: 88 $ + tasas= 100, 36 $
Cabañas de madera con baño privado, muy básicas y rústicas (necesitan una reforma) pero situadas en un entorno idílico. Allí mismo nos vimos una tarde rodeados por una manada de bisontes que pastaban entre las cabañas. Bastante económico comparado con el resto de opciones en Yellowstone y con West Yellowstone. Los amaneceres frente al lago, una gozada. El edificio principal del Lake Lodge es muy bonito y acogedor, tiene restaurante y cerca hay una pequeña tienda de comestibles.
- Animales vistos: dos coyotes (uno de ellos con incontinencia urinaria), una comadreja, muchos bisontes, aves varias (patos y cuervos entre ellas). Esto no es información práctica pero lo fui apuntando en cada etapa y os lo pondré al finalizar cada día, por si algún amante de la fauna está interesado en tener una idea de lo que puede encontrarse por allí