Día 4: Gran Palacio Real, Wat Pho y Pak Klong Thalat
Amanecía un nuevo día en la ciudad de Bangkok. Nos despertamos muy temprano ya que hoy teniamos pensado visitar el Gran Palacio Real de Bangkok. Costó salir de la cama pero era necesario para así evitar las ordas de turistas que acechan la zona durante todo el día.
Desayunamos y con la barriga llena pedimos nuestro Grab al hotel, una aplicación fácil, cómoda y rápida de usar. Puedes contratar tu taxi desde tu smarthphone y te recoge muy rápidamente en el punto de encuentro.
Una vez llegamos compramos la entrada, nos costó 500 baths, fue cara pero la verdad es que vale la pena pagarlo. El palacio es precioso y pudimos gozar de él con muy poquitos turistas afortunadamente.
Paseamos por sus patios, hicimos fotografías a tutiplen, todo son detalles que admirar.. Sus estupas doradas, patios, panteones, figuras, dragones... Una mezcla policromática, dorada y brillante que te deja boquiabierto.. Luego el calor te saca de tu sueño y te recuerda que te estás achicharrando..
Tras visitar el palacio entramos al Wat Phra Kew, templo que alberga una venerada imagen de Buda tallada en un solo bloque de jade. El buda está sentado una elevada plataforma donde nadie tiene permiso para acercarse excepto el rey de Tailandia.
Primero nos quitamos los zapatos y aunque habían bastante cola entramos muy rápido. Una vez dentro nos quedamos un ratito ya que allí se estaba fresquito.
Dentro de este templo está prohibido realizar fotografías de modo que si queréis un recuerdo deberéis sacarla desde fuera, si los miles de asiáticos que están en la zona os lo permiten.
Estuvimos una hora aproximadamente en el Gran Palacio y nos marchamos al Wat Pho que está suuuuuper cerca de él.
Compramos la entrada que incluye la botellita de agua pero perdí el ticket y nunca conseguí mi deseada botellita de agua.
El templo es bonito, otro recinto cargado de decoraciones, estupas, patios, fuentes, etc.
El buda reclinado es impresionante y muy bonito PEEEERO sacarle una foto decente es tarea casi imposible. Hacia el centro de la estatua hay una zona habiliada donde la gente se saca fotografías una a una. No tardas mucho y te llevas tu recuerdito.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Hacía tanta calor que no quisimos explorar más la zona y nos fuimos a comer algo a un sitio que tenía fichado... Make me mango. Un pequeño restaurante donde sirven muchos platos y postres con Mango...
Nos pedimos el Make me mango que viene con medio mango, sticky rice, una especie de flan/pudding de mango, panacotta de mango y otras dos cositas que no supimos que eran. También probamos el mango smoothie con panacotta, estaba delicioso y mientras sorbías por la caña te llegaba pequeños trozos de mango a la boca. El local es pequeño y muy curioso además de bonito. El servicio es impecable. No os dejéis engañar por el callejón donde se encuentra.. volvería!
De aquí nos fuimos al mercado de las flores.. El Pak Klong Thalat, llegamos a él tras coger el ferry...
Es un mercado local donde no hay turistas. Hay dos zonas, la de al lado de el río y la que está cruzando la calle. La de arriba es de comida (fruta y verdura), la parte de abajo es de flores, muchas flores y también algo de fruta y verdura. Es bonito de ver aunque muy pequeño y se ve rápido, solo iría si queda cerca de alguna parada a la que vayáis, ya que es interesante pero si no, no me tomaría la molestia de desplazarme hasta allí.
Cogimos el ferry de vuelta y nos dimos un chapuzoncito en la piscina
Tras esto nos dirigimos al aeropuerto para coger nuestro vuelo hacia Chiang Mai
LLEGADA A CHIANG MAI
Solicitamos transporte directo al hotel desde el aeropuerto (muy barato) porque estábamos cansados así que nos recogieron y nos dejaron en la puerta del hotel. Nada más hablar con el taxista ya nos dimos cuenta de que Chiang Mai era otro rollo.. La gente es mucho más simpática y agradable, no como en la gran ciudad..
Para nuestra estancia en Chiang Mai escogimos el Golden Bell Hotel justo en las afueras del la muralla, perfecta ubicación, bastante cerca de todo pero fuera del barullo super turístico del gran bazar.
El hotel es muy bonito y está situado justo a las afueras de la muralla. La habitación era grande, la cama grande y cómoda y la piscina muy bonita. El personal fue muy amable y servicial. El desayuno era muy completo, aunque no de los mejores que he probado en Tailandia. Además...Te ofrecen transporte del hotel al aeropuerto por 160 baths. Yo repetiría.
Nos duchamos y deseosos nos dirigimos al Gran Bazar, cogimos el primer tuk tuk y tras regatear un poquito.. creo que por 70 baths nos llevaron allí.
El tuk tuk nos dejó en la calle principal, alrededor del bazar hay miles de puestos ambulantes con ropa, amuletos, fruta disecada.. DE TODO! Hay varias secciones en el bazar y varias entradas, es muy fácil perderse por ahí... Sin duda el que más nos gustó fue el Kalare Night Bazaar.
Nos encantó este mercado nocturno básicamente por su food center. Hay miles de puestos de comida, es imposible no encontrar algo apetecible! El puesto de la esquina derecha que sirve pollo satay tiene una receta buenísima, el puesto de sushi también es brutal, 5 baths un maki. Delicioso todo!! La cerveza chang a 60 baths, de lo más barato del bazaar.
De vuelta al hotel y a dormir!