PALENQUE ✏️ Diarios de Viajes de Mexico

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Ha llegado el momento de hablar de los mayas. La civilización maya se desarrolló dentro del área cultural mesoamericana, una región que se extiende del centro de México hacia el sur en América Central. Así que también en Guatemala encontramos importantes ciudades como Tikal. También en Belice, Honduras o El Salvador.

Es una civilización muy antigua, con antecedentes en el 2000 a.C. o incluso antes. En sus asentamientos, cuktivaban maíz, frijoles o calabazas y ya elaboraban cerámica. Petén, en Guatemala, es uno de esos primeros asentamientos.

La época de mayor apogeo de los mayas se da entre el 250 y el 900, con ciudades muy bien organizadas y pobladas y con gran influencia de Teotihuacan. Fue la época de creación de ciudades como Palenque o Tikal.

Durante el siglo iv, el centro de la región maya experimentó un gran colapso político, marcado por el abandono de las ciudades, el fin de las dinastías y un desplazamiento del foco de actividades hacia el norte. Se desarrollan más ciudades como Uxmal o Chichén Itzá.

Desde el siglo X a la llegada de los españoles vivieron un momento de decadencia.

El rey era el gobernante supremo, y tenía un estatus semidivino que le permitió actuar como mediador entre el reino de los dioses y el de los mortales. Desde tiempos muy antiguos, los reyes fueron identificados específicamente con el joven dios del maíz.

La administración política maya, basada en torno a la corte real, no tenía un carácter burocrático. El gobierno era jerárquico y los cargos oficiales eran patrocinados por los miembros de alto rango de la aristocracia.

El 90%de la población era pueblo llano, plebeyos, pero apenas se sabe nada de ellos.

Al nacer el niño o la niña, la mujer maya recostaba a la criatura en una cuna compresora atando muy firmemente la cabeza, el abdomen y las piernas. Iniciando así con el proceso de la deformación craneana el cual era fundamental poner en práctica desde los primeros días de nacido el infante para aprovechar la plasticidad del cráneo. Eso les da un aspecto muy característico.

También era muy tíñica la decoración dental con piedras preciosas como el jade.

Los mayas eran un pueblo guerrero pero también con un importante desarrollo del comercio sin dejar de lado la agricultura.

Construyeron palacios, templos, pirámides, observatorios astronómicos (hicieron muchas observaciones de astros, generalmente con fines astrológicos y de adivinación) y campos de juegos de pelota. Tuvieron un desarrollado sistema de escritura, una especie de jeroglíficos llamados glifos. Desarrollaron las matemáticas y los calendarios.

La sangre se consideraba un potente alimento para las deidades mayas, y el sacrificio de un ser vivo era visto como una poderosa ofrenda de sangre. Así pues, hacían muchos sacrificios en importantes rituales. Al principio solía decapitarse a la víctima (antes podía haber sido torturada con golpes o desmembración). Hacia el final, y por influencia azteca, el ritual consistía en la extracción del corazón.

La ofrenda de sangre que no es raro ver estelas que representan al rey provocándose heridas para sangrar (como atravesarse la lengua con cuerdas con pinchos).

La visita de Palenque es, sin duda, la que más me gustó de todo el viaje, mucho más que Chichén Itzá. Seguramente se deba a que aún se encuentra en una zona boscosa que debes atravesar antes de llegar al complejo importante. Es más propio de una peli de aventuras. Es por eso que uno debe ir provisto de sombrero o gorra, calzado cómodo, agua y repelente de insectos. El área descubierta hasta 2005 abarca 2,5 km², pero se estima que no se ha explorado ni un 2 % de la superficie total que alcanzó la ciudad. El resto permanece oculto en la selva.

Es interesante mirar hacia arriba. En las ramas de los árboles pueden verse monos aulladores.

El recinto abre temprano, a las 8, y nosotros estábamos allí a primera hora para evitar aglomeraciones. Habíamos dormido cerca, en el pueblo, pero otros días son tocó madrugar mucho porque los trayectos son francamente largos en algunos casos. La entrada actualmente cuesta 80 pesos. Es Patrimonio de la Humanidad desde 1987.

Si no vas en un tour, se puede llegar en faxi o autobús. Creo que estos no salen propiamente de la estación sino que están justo al lado. Conviene asegurarse.

En la entrada hay restaurantes, tiendas y wc. Luego ya no vamos a encontrar nada. He visto que ahora hay muchos vendedores dentro. En nuestra visita no había. Otra advertencia, no se puede subir a las pirámides.

Se cree que los mayas fundaron Lakam Ha durante el período Formativo (2500 a. C.-300), alrededor del 100 a. C., como una aldea predominantemente agricultora, y favorecida por los numerosos manantiales y corrientes de agua de la región. Llegó a ser capital de la región y una ciudad muy floreciente.

Cuando los españoles llegaron a esta zona, la región era conocida por el pueblo chol como Otolum, o ‘Tierra de Casas Fuertes’. Se tradujo como "Palenque" (palabra proveniente del catalán palenc) que significa ‘fortificación’. Para aquel entonces la ciudad estaba casi abandonada.

Una vez caminado todo el tramo, con alguna estructura diseminada y muchos árboles, llegamos a una zona más abierta donde está el grupo principal de estructuras. Es la Plaza Mayor de la ciudad.

El Templo de la Calavera se llama así porque alberga el relieve de una calavera de ciervo. Seguidamente está el Templo XII. En este precioso edificio fue donde se encontró la Tumba de la Reina Roja, nombre que recibe por el color que teñía el cuerpo de la reina y que se cree, después de muchos estudios, que podría tratarse de la esposa de Pakal, Tz'akbu Ajaw, también conocida como Ahpo-Hel. El sepulcro se descubrió en 1994. La Reina Roja que enterrada con una diadema de jade, una máscara de malaquita, un cinturón con una máscara de jade, collares, pulseras, tobilleras, perlas, agujas de hueso, navajitas de obsidiana y conchas y bañada en cinabrio, de ahí su característico color rojo. Tenía el rostro cubierto con una máscara de malaquita.

Durante el siglo VII, la ciudad vivió un momento de gran esplendor bajo el largo reinado de K’inich Janaab’ Pakal I. Fue entonces cuando se erigieron numerosos palacios, templos y edificios administrativos, entre ellos el Templo de las Inscripciones, que acogió el sarcófago monumental del monarca.

Se trata de un templo sobre una pirámide escalonada localizada en el costado oriental, junto al Templo XII. Es la estructura más conocida de todas (la primera imagen que he puesto). Tiene este nombre por tres tableros de roca con inscripciones jeroglíficas, que se encuentran dentro del templo. Los jeroglíficos detallan la historia de la dinastía regente en la ciudad, y los hechos de Pakal el Grande. La estructura está decorada con relieves hechos en estuco. El edificio, una pirámide de mampostería con un paramento de piedra que seguramente estaba revestido de estuco policromado, se alzaba a 36 m y culminaba en la crestería.

En el interior del templo, una baldosa cubría la escalinata que descendía dentro de la pirámide, que en dos tramos, llegaba a la cripta funeraria de Pakal.

Pakal nació hacia el 603. Su padre fue K'an Mo' Hix, un cho'j ajaw, un noble de segundo rango cuyo linaje subordinado vivía posiblemente en el Grupo Piedras Bolas. Su madre fue Sak K'uk, seguramente hija de Janaab' Pakal y nieta de Yohl Ik'nal, por ende, perteneciente al núcleo dinástico del señorío de B'aakal. Era una época de grandes conflictos.

Cuando Pakal aún era pequeño, en un lapso de dieciséis meses, murieron su abuelo Janaab' Pakal y su tío abuelo, Ajen Yohl Mat. Hubo disputas por el trono. Su madre consiguió que él fuera rey. Fue el rey más importange de Pslenque y un buen guerrero. Su magnífica tumba se encontró dentro del templo.

En 1949, el arqueólogo Alberto Ruz Lhuillier encontró en una losa de la parte superior del Templo de las Inscripciones doce agujeros en forma simétrica que parecían haber sido hechos para soportar el trono del gobernante. Al percatarse que había un espacio hueco bajo dicha losa, comenzó a escarbar y encontró los escalones de la escalera interna de la pirámide, cuyo paso estaba totalmente obstruido. El domingo 15 de junio de 1952, tras haber retirado toneladas de piedra y escombro, el equipo de arqueólogos logró penetrar a la cámara mortuoria de 7.00 m de largo por 3.73 m de ancho, la cual estaba cubierta de estalagmitas y estalactitas.

Tanto el sarcófago y la losa que lo cubre, como los muros de la cripta, están decorados con bajorrelieves que muestran, entre otras cosas, la muerte de Pakal y su descenso al inframundo, donde toma la identidad de uno de los dos gemelos que, en el Popol Vuh, derrotaron a los señores del inframundo y alcanzaron la inmortalidad. En los jeroglíficos de la cripta, se describen también el origen y los ancestros de Pakal, así como la banda celeste y una serie de deidades mayas.

Puede verse en el Museo Nacional de Antropología. Esa tumba es una de las grandes joyas arqueológicas del país.

La estructura es una pirámide escalonada con una altura de 22,8 metros de ocho niveles más el templo, simbolizando los nueve niveles del Xibalbá, el inframundo maya.

Solo por ver este templo ya vale la pena la visita. Es magnífico.

El llamado Palacio no es un edificio sino un complejo de edificios interconectados. No se hicieron todos a la vrz sino que se fueron construyendo a lo largo de 400 años. Aparte de recorrerlo por dentro, es bueno tomar distancia para conseguir una foto del complejo.

El Palacio es enorme, tiene más de 5.000 metros cuadrados. Se alza sobre un basamento por el que suben amplias escalinatas en tres de sus fachadas: al norte, al oeste y al sur. En realidad, el subsuelo está constituido por vestigios de un primer nivel de construcciones, encima de las cuales el rey Pakal edificó una segunda fase. Ya dije que se fue construyendo y reconstruyendo a lo largo del tiempo. Hay, además, pórticos y patios internos. Quizás alguno de ellos se usaba para ceremonias. Podemos ver, por ejemplo, el Patio de los cautivos, con relieves.

El Patio de los Cautivos recibe su nombre porque además de funcionar como área de recepción, aquí se traían a los prisioneros de batallas de otras ciudades cercanas, como evidencian los relieves de piedra que lo decoran, acompañados por textos glíficos de sus nombres. En el interior del patio hay mascarones que representan deidades del inframundo.

En el interior del palacio había múltiples salas destinadas a la vivienda del soberano, de su familia y de sus allegados. Los subterráneos seguramente se utilizaban como almacén.


Destaca la Torre, que se cree que fue utilizada por los sacerdotes para ver como se ocultaba el sol por la parte de atrás del Templo de las Inscripciones. Es de planta cuadrada, con un tejadito a cuatro aguas y muy distinta del resto de construcciones mayas. Hay teorías que dicen que se usaba para vigilar.



El Grupo de las Cruces es un conjunto de tres estructuras principales wue fue construido por el hijo de Pakal, después de la muerte de éste, con el firme propósito de que sirviesen como centro espiritual de los tres dioses de Palenque.

El más destacable es el Templo del Sol, con la crestería intacta. El complejo del Templo de la Cruz fue construido por Kan-Bahlum, quien reinó entre 684 d. C. y 702 d. C. Uno de los propósitos del templo era albergar los paneles que registraban la historia ancestral de Kan-Bahlum, su adhesión y el origen divino de su linaje. Las tallas en bajorrelieve en el Templo de la Cruz describen la adhesión de K'inich Kan Balam al trono de Palenque. Dentro de la cámara interior de estos templos se encuentran tallas en bajorrelieve, que representan dos figuras. Al principio, los científicos pensaron que la figura más pequeña era K'inich Janaab 'Pakal, el padre de Kan Bahlum, y que la figura más grande era el propio K'inich Kan B'ahlam. Ahora, con un mayor conocimiento de la iconografía y la epigrafía , se cree que ambas figuras representan a Kan Bahlum: una en su juventud en el ritual de pasaje y la otra en la edad adulta que representa su ascenso al trono. Entre estas figuras está la Ceiba , también conocida como el Árbol del Mundo.

El Templo de la Cruz Foliada está aún sin desenterrar. Aunque no es el más bonito, sus características lo hacen muy especial.



Nos permiten subir las empinadas y rústicas escaleras. En el interior del templo se pueden ver varias inscripciones, en las que se ve a Pakal con un quetzal en la cabeza.




Hay otros grupos menos espectaculares, diseminados en el recinto, en la selva. También hay un campo de juego de pelota y un museo.

Por la tarde decidimos ir con todo el grupo a ver la obra de teatro Palenque rojo. En el año 711 d.c. la dinastía Cráneo de Serpiente “Tonina” decide atacar a “Palenque” y tomar cautivo al gran Gobernante “Kan Joy Chitam II”, hijo del gran Pakal II y hermano del destacado Kan Balam II. La obra es muy interesante, llamativa. Dura algo más de una hora y está hablada en maya.

¡Qué susto cuando se abrió la cortina de mi lado y apareció un guerrero!.

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