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El Monte Sion es una colina de Jerusalén. Se encuentra fuera de las murallas de la ciudad vieja. El término Sion fue usado por primera vez en las Sagradas Escrituras hebreas para referirse a la Ciudad de David. Parece que los habitantes de Jerusalén del siglo I d.C. consideraron que era la localización del palacio del rey David.
A finales del periodo romano, se construyó una sinagoga en la entrada de la estructura conocida como la Tumba de David, probablemente por la creencia de que David trajo aquí el Arca de la Alianza desde Beit Shemesh y Quiriat-Jearim antes de la construcción del templo.
Durante la guerra palestina de 1948, el Monte Sion fue conquistado por la brigada Harel el 18 de mayo de 1948 y se convirtió en la única parte de la ciudad vieja que quedó en manos israelíes hasta el armisticio. Al principio se conectó con el barrio judío de Yemin Moshe a través del valle de Hinón a través de un túnel estrecho, pero con el tiempo hizo falta una alternativa para transportar suministros y evacuar soldados heridos en Monte Sion. Para ello se diseñó un teleférico capaz de cargar 250 kilos. El teleférico solo se usaba de noche y se bajaba al valle durante el día para no ser detectado. Realizaba el trayecto desde la posición israelí hasta el hospital de San Juan en dos minutos. En la actualidad se conserva en el hotel Mount Zion.
Entre 1948 y 1967, cuando la ciudad vieja estaba bajo ocupación jordana, los israelíes tenían prohibido el acceso a los lugares sagrados. El Monte Sion quedó como una tierra de nadie entre Israel y Jordania.
El Monte Sion era el lugar accesible más cercano al antiguo templo judío. Hasta que Jerusalén fue tomado por Israel en la Guerra de los Seis Días, los israelíes escalaban hasta la Tumba de David para rezar.
Visitamos la presunta tumba del Rey David. La tradición cristiana desde el siglo IV identifica en ese monte el lugar donde murió el Rey David.
Está situada en una esquina de la planta baja de los restos de Hagia Zion, una iglesia bizantina. El piso superior del mismo edificio se asoció también al Cenáculo, el lugar donde tuvo lugar la Última Cena y donde se instituyó de la Eucaristía. Luego hablaré de ello.
En 1335, la iglesia se convirtió en una monasterio franciscano, que se mantuvo hasta 1521, año en el que los otomanos de Jerusalén decretaron la expulsión de los monjes, que aún pudieron conservar alguna sala. Finalmente, y debido a las tensiones con el patriarca ortodoxo de Constantinopla, el monasterio se cerró en 1551 y fue ocupado por una familia musulmana, que la convirtió en una mezquita dedicada al Rey David. La entrada a los cristianos fue totalmente prohibida hasta el siglo XIX.
Después de la guerra árabe-israelí de 1948, cayó del lado israelí de la Línea Verde. Entre 1948 y 1967 la Ciudad Vieja fue ocupada por Jordania, que prohibió a los judíos rezar en el Muro de las Lamentaciones. Como el Monte Sion era el lugar más cercano al Monte del Templo, los peregrinos judíos optaron por rezar en el tejado de la Tumba de David. Desde 1949, una tela azul con una sencilla ornamentación cubre el sarcófago. El edificio es actualmente administrado por la organización Diaspora Yeshiva y es propiedad del Estado de Israel. Y, por cierto, no se permite que se hagan investigaciones entorno a la tumba y a su ocupante (si es que hay alguien dentro). Los cruzados lo pusieron en ese sarcófago en el siglo XII y nadie lo toca desde entonces (si hasta lo cubre un plástico). Se dice también que solo es un cenotafio (una tumba vacía; monumento conmemorativo).
Los arqueólogos modernos han puesto en duda la ubicación real del Monte Sion y han buscado la tumba real en otras partes de la Ciudad de David.
Para los judíos es un lugar de gran devoción. Incluso el acceso para hombres y mujeres está separado (el de los hombres 2/3 y el de las mujeres 1/3 de la tumba) y ellos deben cubrirse la cabeza.
En el patio hay wc públicos.
En el piso superior está el supuesto Cenáculo. El Cenáculo es el lugar de Jerusalén donde, según el Nuevo Testamento, Jesús celebró con los apóstoles la Última Cena de su vida, antes de morir en la cruz, y lugar donde se produjo la venida del Espíritu Santo en Pentecostés.
También recibe el nombre de aposento alto.
Las casas de los antiguos romanos no tenían primitivamente más que un piso y en esta habitación de arriba era donde ordinariamente se cenaba o se comía en común, por extensión, se llamó «cænacula» a todas las piezas del piso superior. Según la tradición cristiana, la casa del Cenáculo pertenecía a la familia del evangelista San Marcos. En esta morada el Jesucristo oraba y hacia milagros y los discípulos también se quedaban con frecuencia para pasar la noche.
Según Epifanio de Salamina, del siglo IV, la iglesia que los primeros cristianos crearon en el lugar de la Última Cena quedó en pie después de que el romano Tito arrasase la ciudad de Jerusalén en el año 70. La peregrina hispanorromana Egeria, que hizo un viaje a Tierra Santa entre el 381 y el 384, escribió que en la iglesia de Sion donde se conmemoraba la Última Cena se conmemoraba también la aparición de Jesús resucitado a los apóstoles.
El 15 de septiembre de 387 el obispo de Jerusalén, Juan II, consagró la Basílica de Santa Sion (Hagia Sion), de grandes dimensiones, donde se encontraba la iglesia del siglo i de la Última Cena. Algunos creen que en la nave septentrional se conmemoraba la Dormición de la Virgen, mientras que desde la nave meridional se subía a una capilla superior donde se recordaba la Última Cena y Pentecostés y de ahí se bajaba a otra capilla inferior donde se conmemoraba el lavatorio de los pies de Jesús a sus discípulos.
Entre el 440 y el 460, en el periodo en que la emperatriz Elia Eudocia vivió en Jerusalén, el Cenáculo quedó incluido dentro de las murallas.
En el 614 se produjo la invasión persa, en la que se destruyeron 35 iglesias, entre ellas la Basílica de Santa Sion. El emperador Heraclio reconquistó la ciudad en el 628. La Basílica de Santa Sion fue parcialmente reconstruida. Se destruyó de nuevo en época musulmana.
Se reconstruyó en época cruzada y más tarde acabó convertido en mezquita. Se sabe que los franciscanos abandonaron Tierra Santa en 1291 y regresaron a comienzos del siglo xiv. En 1333 los reyes de Nápoles, Sancha de Mallorca y Roberto de Anjou, compraron unos terrenos junto al Cenáculo y se los entregaron a los franciscanos, construyendo allí para ellos el Convento de Sión en 1335. Los reyes de Nápoles consiguieron, por cinco millones de escudos, que se les cediesen el Santo Sepulcro y el Cenáculo, que quedaron a cargo de los frailes franciscanos, alojados en el Convento de Sión. La Custodia de Tierra Santa en pro de los franciscanos quedó establecida por el papa Clemente VI con dos bulas del 21 de noviembre de 1342: Gratias agimus y Nuper carissimae.
En 1517 el turco Solimán I conquistó Jerusalén. En 1523 los turcos obligaron a los franciscanos a abandonar el Cenáculo y en 1551 se les ordenó abandonar el anejo Convento de Sión.
En el siglo XIX se permitió a los franciscanos y los peregrinos visitar el Cenáculo el Jueves Santo y en Pentecostés.
Varios Papas han tenido el permiso para hacer una misa allí (Pablo VI, Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco I).
El Cenáculo actual es de estilo gótico. Algunos creen que fue construido por los cruzados antes de la conquista de la ciudad por Saladino en 1187. Otros atribuyen su construcción al emperador Federico II Hohenstaufen, coronado rey de Jerusalén en 1229. Nada permite afirmar con rotundidad ninguna de esas teorías.
Otra teoría dice que la actual Capilla del Coenaculum fue construida por los franciscanos a su retorno a la ciudad en 1335. Las aristas de la cúpula del cielo raso son típicas del gótico lusiñano o chipriota. El esculpido mihrab, el nicho de oraciones musulmán, fue agregado en 1523, cuando los franciscanos fueron expulsados del edificio y el recinto fue convertido en mezquita.
La escultura de bronce en forma de olivo (ubicada sobre un escenario en el centro de la sala) fue colocada por la asociación católica que financió la restauración.
La visita no fue cómoda. ¿A quién se le ocurre entrar en un sitio pequeño y lleno con un grupo numeroso y pretender que se oigan las explicaciones sin micro?. Eso hizo el guía. La mitad de la gente no se enteró de nada.
Para llegar a estos dos puntos pasamos por delante de la Abadía de Hagia María, hoy cerrada. Se encuentra en el lugar en el que, según la tradición, tuvo lugar la Dormición de la Virgen María, por lo que antiguamente se conocía como Abadía de la Dormición de la Virgen María. En 1998 cambió el nombre en referencia a la iglesia bizantina de Hagia Sion que hubo antiguamente en ese lugar y cuyos restos se encontraron al hacer la actual (fue destruida por los musulmanes).
El káiser Guillermo II compró este solar en el Monte Sion por 120.000 marcos de oro al Sultán Abdul Hamid II y donado a la católica "Unión alemana de Tierra Santa". La primera piedra fue colocada el 7 de octubre de 1900 y se terminó 10 años después. La actual basílica copia el modelo medieval de la catedral de Aquisgrán, en Alemania.
La iglesia fue pasto de las llamas en 1967. Más recientemente ha sido objeto de un buen puñado de actos vandálicos.
Es de planta circular, con un gran ábside en el centro y seis absidiolos (tres a cada lado) con capillas. Por dos escaleras de caracol se accede a la cripta. La tradición señala a la cripta de la abadía como el lugar de la dormición de la Virgen (no se murió, se durmió). Todo el conjunto tiene mosaicos muy bonitos pero, lamentablemente, no se pueden ver. En la cripta hay varios altares laterales en honor de la Virgen María. En el centro se conserva una bella escultura de la Virgen, con el rostro y las manos de marfil.
Estuvimos un buen rato parados allí en un puesto de frutos secos, turrón blando y frutas escarchadas. Y luego no hay tiempo para otras cosas... En fin...
Por cierto, en varios sitios he visto que frente al lugar de la tumba y junto a la Iglesia de la Dormición hay una estatua dorada del rey David tocando el arpa. Pues no estaba. No he conseguido saber qué ha sido de ella.
El valle de Cedrón se extiende desde la parte oriental del muro de Jerusalén entre el monte del Templo y el de los Olivos. En tiempos de Jesucristo el valle de Cedrón era mucho más profundo que ahora. Es un lugar de enterramiento desde hace siglos. Desde la Edad Media, la tradición religiosa sitúa tres tumbas de relevantes personajes aquí: Absalón, hijo del rey David ; Santiago, pariente de Jesús y primer obispo de Jerusalén, y Zacarías, padre de Juan Bautista.
La Yad Avshalom es una tumba monumental excavada en la roca con un techo cónico. De hecho es la más llamativa de las tumbas del Valle de Cedrón. Aunque tradicionalmente se le atribuye a Absalón, el hijo del rey David que se rebeló contra él (alrededor del año 1000 a. C.), los arqueólogos modernos datan el monumento en el Siglo I d.C. Tiene tres nichos funerarios. Se dice que durante mucho tiempo fue costumbre tirar una piedra al pasar por allí como muestra de desprecio hacia el hijo rebelde del rey arpista.
Por detrás está la cueva de Josafat, un sepulcro excavado en la roca. Muy cerca está la tumba de Bnei Jezir, donde dicen que se recluyó Santiago después del prendimiento de Jesús. Santiago el Mayor. Pero hemos dicho que hay dos Santiagos.
Santiago el Menor sirvió como primer obispo de Jerusalén y fue martirizado allí según otra tradición, arrojado desde el techo del templo y, dado que aún estaba vivo, fue golpeado y apedreado hasta la muerte. Según la tradición, Santiago fue enterrado en el Monte de los Olivos, con vista a Jerusalén. En el siglo VI, el emperador Justiniano II trasladó sus reliquias a Constantinopla. En algún momento, una parte o quizás todas las reliquias de Santiago se trasladaron a la Iglesia de los Doce Apóstoles en Roma, donde hoy se encuentran en el mismo santuario con las reliquias de su compañero apóstol, San Felipe. Y los restos de Roma se han datado y corresponden a alguien150 años menor...
En realidad la tumba de Bnei Jazir tiene una inscripción en hebreo que alude a la familia de dicho nombre. Está documentado que era una familia de sacerdotes del Segundo Templo. Y ésta es su tumba. Data del siglo I a.C.
La presunta tumba de Zacarías tiene forma piramidal. Es un monolito cuadrado de 5,5 m de lado y sin apertura. Su parte inferior consta de una plataforma escalonada. Su parte superior es piramidal, como ya dije. El monumento tiene un estilo compuesto, con columnas de estilo jónico y una cornisa egipcia. No es una tumba, sino un monumento funerario semítico un nefesh. Y por supuesto no es la tumba del padre de san Juan Bautista. Pero en los textos bíblicos hay otro Zacarías, un profeta del siglo VI a.C. El monumento que vemos es del siglo I a.C. por lo que tampoco es la tumba de este Zacarías.
Algo más allá está la llamada Tumba de la hija del faraón. Se ha datado del tiempo del primer templo y, por tanto, bastantes siglos más antigua que las anteriores. Tiene forma cuadrada y antes estaba rematada con una pirámide de piedra que se ha perdido.
También vemos la Iglesia de San Pedro en Gallicantu. El nombre hace referencia a las tres veces que san Pedro negó conocer avJesús antes de que cantata el gallo.
Un santuario bizantino dedicado al arrepentimiento de Pedro se erigió en el año 457. Fue destruido por el califa fatimí Al-Hakim bi-Amr Allah en 1010. La capilla fue reconstruida por los cruzados en 1102 y recibió su nombre actual. Después de la caída de Jerusalén, la iglesia volvió a quedar en la ruina. No fue reconstruida hasta 1931. La iglesia se alza en una ladera. Sobre su techo se alza un gallo dorado, encima de una cruz.
Se dice que la negación de San Pedro fue el patio de la casa del sumo sacerdote Caifás, por lo que no faltan quienes sitúan allí dicha casa.
Bajo la iglesia se encuentra un calabozo que se cree que es la celda en la cual fue detenido Jesús en la noche siguiente a su arresto. La Iglesia de San Pedro en Gallicantu está construida en cuatro niveles diferentes: iglesia superior, iglesia media, el cuarto de guardas y el calabozo.
En el patio hay una estatua que representa la negación. Están representados el gallo, la mujer que preguntó a Pedro y un soldado romano.
En el interior, a la derecha, hay dos mosaicos de la era bizantina. Fueron descubiertos durante la excavación y es muy probable que fueran parte del suelo de la iglesia bizantina del siglo V.
La fuente del Gihón abastecía de agua a Jebús, que luego se convirtió en la ciudad de Jerusalén como ya he comentado. Se trata del único manantial de la ciudad. Esta fuente brota junto al torrente Cedrón y fue el motivo de que allí se instalara la ciudad en tiempos del rey David.
La ciudad siempre ha buscado el modo de abastecerse de agua. En los primeros tiempos se resolvió excavando un pozo subterráneo vertical que llevaba desde la ciudad hasta el manantial. Ese pozo se conoce ahora con el nombre de Warren y se ha conservado.
Según los textos bíblicos, el manantial estaba fuera de los límites de la ciudad. Cuando Jerusalén era sitiada, sus habitantes corrían el peligro de quedarse sin agua. Cuando Ezequías accedió al trono hacia el 727 a.C. la ciudad abarcaba lo que hoy conocemos como Ciudad de David y el Monte del Templo pero él logró su expansión hacia la colina occidental y el valle de Tyropoeon. El rey ordenó excavar un túnel para canalizar el agua de la fuente desde el valle de Cedrón hasta la piscina de Siloé, el oeste. La piscina de Siloé o estanque de Siloé es una piscina excavada en la roca al sur de la Ciudad de David. La piscina se llenaba con agua de la fuente del Guijón, que llegaba a través del túnel de Ezequías, como decíamos. Se menciona en el Evangelio de Juan, en el episodio de la curación del ciego de nacimiento. La piscina fue reconstruida en el siglo I a. C., durante el período asmoneo, o quizás durante el reinado de Herodes (37 al 4 a. C.). No está claro si la piscina del siglo I a. C. fue construida en el mismo lugar que la de Ezequías del siglo VIII a. C., ya que de la primera construcción no se han encontrado rastros. Se cree que la piscina era un importante centro de reunión para los judíos que peregrinaban al templo de Jerusalén. El estanque fue destruido y cubierto después de la caída de Jerusalén en el año 70, al final de la primera guerra judeo-romana.
El túnel fue una gran hazaña, una obra de ingeniería colosal para la época. 533 metros de largo con un grado de inclinación del 0,4%. Y en tiempos convulsos porque Senaquerib, rey de Asiria, amenazaba con ir hacia Jerusalén. Se ignora por qué no se hizo con ella. ¿Quizás Ezequías le prometió dinero?.
El manantial y toda la infraestructura se usaron hasta el siglo XV. Un terremoto lo tapó y lo hizo caer en el olvido. Hoy el túnel puede visitarse aunque uno debe estar dispuesto a mojarse. El agua llega hasta las rodillas y debes llevar una vela o una linterna.
Alrededor de la Fuente del Gihón se han encontrado restos de una red defensiva de la Edad del Bronce Medio y que continuó siendo usada en los periodos siguientes. También se han descubierto dos estructuras de la Edad del Hierro, conocidas como la Gran Estructura de Piedra y la Estructura de Piedra Escalonada. No se sabe si son o no de tiempos del rey David.
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