Una de las amigas con las que suelo viajar llevaba bastante tiempo con ganas de visitar Polonia. De hecho, tuvo que anular un viaje ya reservado porque la fecha de salida coincidió con la invasión rusa de Ucrania y el consiguiente flujo de refugiados. A principios de este año, me preguntó si me apetecía apuntarme con ella a un tour para jubilados. Y le dije que sí.
Varsovia.


El itinerario me gustó, pese a que faltaban lugares que hubiera incluido de ir por libre, como las iglesias de madera y alguna ruta de senderismo. Por lo demás, me pareció bastante completo y con los hoteles en el centro de las ciudades, cuestión importante en este tipo de recorridos.

Eran nueve días, a finales del mes de mayo, pasando tres noches en Varsovia, una en Gdansk, una en Torun, una en Breslavia y dos en Cracovia. Aparte de esas cuatro ciudades, se visitaban el Castillo de Malbork, Poznan y Auschtwitz.
Gdansk.


Castillo de Malbork.


Torun.


No es que fuese mucho tiempo para lo extensa que es Polonia (322.575 km2), pero estuvo bien repartido y la organización fue buena en general, así que, como se trataba básicamente de ver ciudades, pudimos visitar bastantes sitios tanto con el tour como por nuestra cuenta. También nos ayudó la excelente temperatura de que disfrutamos y lo tarde que anochece en esa época, cuando el sol no se pone hasta pasadas las ocho y media. También hubo que madrugar, y mucho, pero eso ya no es algo que moleste tanto a los jubilados como cuando se está en activo, prueba de lo cual suele manifestarse con la exquisita puntualidad de todo el mundo.
Cracovia.


Potnaz.


Wroclaw (Breslavia).


Por lo demás, poco que preparar al tratarse de un país miembro de la Unión Europea: entrada con DNI o pasaporte, roaming con la tarifa de casa y vale la tarjeta sanitaria europea, aunque incluso en este caso suelo hacer un seguro adicional porque, si bien la atención está garantizada en iguales condiciones que los ciudadanos locales, puede haber copagos y otros gastos no cubiertos. Pero eso ya es cuestión de cada cual.

En Polonia no se utiliza el euro, ya que la moneda oficial es el “zloty”. Actualmente, he visto que 1 euro equivale a 4,35 PLN (siglas bancarias), más o menos como entonces. Para no liarme y saber rápidamente cuánto costaba algo en euros, lo que hacía era dividir entre 4 la cantidad en moneda polaca; en realidad, resultaba un poquito menos, lo que no venía mal. Una conocida de mi amiga es polaca y nos proporcionó unos cuantos zlotys para gastos pequeños. Luego, apenas nos hicieron falta, porque lo pagamos prácticamente todo con tarjeta de crédito.

Ya solo quedaba aguardar a que llegase el día del vuelo hacia Varsovia.