Bled: Un lago con mucho glamour. ✏️ Diarios de Viajes de Eslovenia

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Antes de proseguir el diario con mi primera etapa, quisiera facilitar de forma clara la ubicación de cada lugar que se visita, al lector de este diario. Como yo siempre me "pierdo" cuando leo los diarios de otros, y como no quiero que esto le ocurra a quien lea esto, pues intentaré ser lo más conciso posible.

Vamos a establecer el corazón o el centro geográfico de Eslovenia en la capital, Ljubljana, porque es muy fácil de localizar. A partir de aquí, nos iremos moviendo teniéndola como referencia y de esta forma es muy fácil saber dónde está exactamente cada lugar.

En esta etapa tomamos rumbo noroeste y a 50 kilómetros de la capital se encuentra Bled. Bled es una pequeña ciudad sin nada destacable que visitar en sí misma, si no fuera por el espectacular lago que tiene junto a él.

Son todo calles con multitud de tiendas, bares y restaurantes de todo tipo: italianos, chinos, kebaps, etc. Incluso tiene un Casino. También destacan algunos feos y cuadrados edificios junto al lago, herencia de un pasado "socialista", que sirvieron de residencia de verano a los antiguos mandos militares y políticos de la extinta Yugoslavia (Incluido el Mariscal Tito, que tenía su residencia de verano aquí).

Lo más importante al llegar a Bled es dirigirse directamente a la Oficina de Turismo porque te explican en un ¡¡IMPECABLE CASTELLANO!! toooodo lo que puedes hacer por allí y en los alrededores. No tiene pérdida porque está muy bien señalizado su acceso. Está junto a la orilla principal del lago.

Ahora mismo nos encontramos en la región de Alta Carniola (Gorenjska). El lago Bled es un lago de origen glacial emplazado en los Alpes Julianos. Mide sólo 2 km x 1,40 km.


En Bled, el lago esmeralda, el islote con la iglesia de la Asunción, el risco plateado sobre el que se encarama un castillo y los Alpes Julianos de fondo conforman una estampa imponente.


Isla de Bled. La diminuta Isla de Bled, en forma de lágrima, atrae desde la orilla. Está la Iglesia de la Asunción y el Museo de la Casa del Preboste (pequeña exposición de vestidos tradicionales eslovenos), pero la verdadera emoción es el paseo en pletna (barca). La barca atraca en la monumental escalera sur (Juzno Stopnisce) construida en 1655. Al subir se pasa junto a la casa del capellán y la Casa del Proboste.


Para llegar a la isla hay varios embarcaderos y con bastante frecuencia de viajes, por lo que no hay ningún problema en desplazarse hasta allí desde la orilla. Con barca tripulada se tarda media hora en llegar y cuesta unos 8 € por persona. Las barcas que se alquilan sin remero cuestan 15 € la hora. Si estás en forma esta última es la mejor opción.

Castillo de Bled. En lo alto de un escarpado acantilado más de 100 metros por encima del lago, el castillo de Bled es la imagen arquetípica de una fortaleza medieval, con torres, murallas, fosos y una terraza con magníficas vistas.


Para subir al Castillo tienes dos opciones: o subes a pie o subes en coche. No hay trenecito ni autobús ni nada programado para subir....y está bastante alto...

Desde la misma orilla del lago, justo debajo del castillo, hay un sendero que sube hasta arriba, muy empinado...pero que en 20 minutos te plantas arriba del todo, sin necesidad de bombonas de oxígeno...
Si dispones de coche o moto puedes subir por tu cuenta hasta las puertas del castillo y aparcar cómodamente en su aparcamiento público.


Nosotros, aunque teníamos coche, subimos a pie por este sendero. Disfrutas de muy buenas vistas mientras asciendes...


Una vez has llegado arriba, te toca pasar por caja y pagar 8 € por adulto para entrar en el recinto. En Eslovenia se pagan absolutamente todas las atracciones...lo cual se nota porque están en muy buen estado y con aseos impecables. Creo que prefiero pagar.

Dentro del recinto del castillo hay un bar informal y un restaurante de mantel con precios que ponen los pelos de punta...(el restaurante, el bar tiene precios normales).


NOTA: En todos los bares de Eslovenia te puedes pedir una botella de medio litro de cerveza, marca Union o Lasko (las más comunes) por tan solo 2 €. La mayoría de la gente local que vimos se pedía este envase.

Esta franja vertical de montaña sin árboles que se ve en la foto es el "Straza Bled", una atracción turística muy visitada en Bled. Se trata de un pequeño trineo que se desliza desde arriba de la montaña hasta abajo, haciendo zig zag, a través de un rail o guía metálico. Para subir hasta arriba y dejarte caer asciendes con un remolcador tipo estación de esquí.



Paseo alrededor del lago. Para conocer y disfrutar bien el lago Bled conviene dar el paseo entero bordeando el lago. Es un ameno y gratificante paseo a pie que dura unas dos horas y se hacen en total 6 kilómetros.

Durante el paseo se alternan pistas de tierra, de asfalto y pasarelas de madera.


NOTA: En toda Eslovenia el agua que sale del grifo es buenísima, pero tiene una gran pega: ¡¡sale congelada!! Literalmente no te puedes lavar las manos con agua fría directa, la tienes que templar un poco, porque si no te duelen los huesos de las manos!!

Hay muchísimas zonas prohibidas al baño en Bled pero os aseguro que en esto, la gente hace muy poco caso y se baña donde le da la gana. Justo detrás de esta señal había gente bañándose.


NOTA: En 5 días que estuvimos allí en Bled, no hizo ningún día una temperatura apta para tomar el baño ni para tomar el sol. Se bañaba poquísima gente (se podían contar con los dedos de la mano). De hecho la mayoría íbamos con chaqueta. A lo mejor pillamos mal tiempo con temperaturas bajas...no lo se...en esto nos pueden ayudar otros viajeros que hayan pasado por aquí.


El agua no estaba ni sucia ni transparente...esta más bien limpia y con abundantes peces.

Bañarse en Bled. Si el tiempo acompaña, que no es nuestro caso, para bañarse en el lago Bled hay dos opciones: por libre o en las instalaciones del lago preparadas para el baño....Además la temperatura del agua creo que es estupenda, por lo que pude comprobar. Falta que salga un día soleado y con calor que, por aquí, creo que es un poco raro....

Por libre te puedes tirar de cabeza en cualquier zona del lago, si te atreves. Como ya he comentado anteriormente, vimos gente bañándose donde le daba realmente la gana y, aparentemente, no pasaba nada. Es una opción.

La otra opción sería utilizar, previo pago, las instalaciones que hay en el lago para el baño y el recreo, es decir, toboganes, tumbonas y demás zonas habilitadas para hacer del baño en el lago un negocio para unos pocos. Personalmente, si el tiempo hubiera acompañado, hubiera hecho como la mayoría: tirarme de cabeza al lago donde me diera la gana sin pagar el peaje o impuesto....pero eso ya va a gusto del consumidor.

Por si alguien decide usar las instalaciones privadas de pago, aquí dejo algunas fotos de ellas que hice durante el paseo a pie rodeando el lago.





Bueno, creo que del lago Bled ya he contado muchas cosas. Nos esperan aún muchas cosas todavía de esta zona de Eslovenia que espero relatar en próximas etapas....hasta pronto!!




(CONTINUARÁ)

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