MUSEO AL AIRE LIBRE DE BALLEMBERG-LAGO DE BRIENZ ✏️ Diarios de Viajes de Suiza

---

Gran día de nuevo, así que hoy pasaremos el día en el Museo al Aire Libre de Ballemberg.
Cuando supe de su existencia me imaginé que sería como el que hay en la Selva Negra y que visitamos el año pasado,pero me equivoqué...el de Suiza le da mil vueltas!!
La entrada nos costó 44Chf.- para los dos adultos y el parking 5 Chf.- todo el día, porque allí se pasa toooodo el día y más.
Una de las entradas está preparada para personas con movilidad reducida y carros, y de una entrada a la otra hay una distancia de 2km, para que os hagáis una idea de lo grande que es aquello.
Junto con la entrada nos dieron un papel con los horarios de los talleres que hacían ese día y en qué casa se hacían: había taller de pan, de hierbas aromáticas, y además una pequeña feria de plantas medicinales.
Es una visita para grandes y pequeños pero sobre todo los niños disfrutarán de lo lindo. Muchas de las casas están preparadas por dentro para ellos, ahora os pongo fotitos. Además de parques infantiles, animales, juegos tradicionales, un carrusel,...Y si os hace mucho calor como nos pasó a nosotros allí se está fenomenal, hay mucha vegetación y un pequeño lago también.

En la feria de plantas medicinales pudimos hacer gratuítamente sales especiadas, nos regalaron té y los niños participaban en pequeños juegos en cada puesto y se llevaban un regalito, también gratis, sin colas, y con la gente esforzándose por explicarnos en qué consistían sus productos.
Ésta era la feria:

Éstas algunas de las cientos de casas:

Y éste el interior de algunas de las que estaban preparadas para los más pequeños de la familia:
unas con todo tipo de juegos tradicionales de madera, a los que no les faltaban ni una sola canica (perdonadme que sea tan insistente en estos detalles pero es que me encanta el respeto que la gente tiene por sus cosas)

y otras ambientadas en el mundo de los gnomos:

Había muchísimos animales, vacas, conejos, cerdos, caballos, cabras...os dejo solo una porque en todas sale mi hijo:

A esta zona de cabras en concreto se podía entrar y tocarlas o darles de comer.

Salimos de allí poco antes del cierre maravillados por todo lo que habíamos vivido, fuera hacía un calor horrible así que decidimos acercarnos al cercano LAGO DE BRIENZ
Aparcamos cerca de uno de los numerosos muelles para barcas que hay. Previo pago por supuestísimo...
Los mayores solo nos mojamos los pies porque el agua cortaba y nosotros somos muy de Mediterráneo, pero Hugo...acabó metido entero, aún no sé como no se constipó.

Después de pasar allí un buen rato paseamos por Brienz, que también nos gustó mucho, tiene mucho comercio dedicado a las tallas de madera puesto que allí está la escuela suiza de talla, y todo el pueblo está salpicado de muestras de arte; pero tuvimos que volver corriendo al coche, cayó una tormenta de granizo...es que ese calor no era normal....Además eran ya las 19:30, Brienz dejaba de tener vida...

Así que rumbo a casita y a ver llover desde nuestro bonito balcón mientras preparamos la ruta del día siguiente...

---