Conques, Figeac, Saint-Cirq-Lapopie y Rocamadour. ✏️ Diarios de Viajes de Francia

Esta etapa nos llevara desde Conques a Rocamadour, son alrededor de 155 km y durante el recorrido visitaremos las localidades de Figeac y Saint Cirq Lapopie. Antes de irnos, como ya comente en la etapa anterior volvemos a Conques por la mañana aunque la visita no es tan espectacular como la noche anterior, son las 9:10 de la mañana y el parking esta ya casi completo aun así sigue teniendo el pueblo ese aire medieval que le dan sus calles adoquinadas que siguen conservando su trazado original que data de la edad media, excepto el tramo que provoco la apertura de la carretera local que atraviesa el pueblo, uno no se cansara de pasear por sus calles porque mires a donde mires encontraras bellos rincones que admirar, hay una ruta a lo largo del pueblo para ver lo más interesante, el plano para poder realizarla se puede conseguir en la oficina de turismo que se encuentra en una calle situada en la parte de arriba de la abadía (casa con el reloj en parte superior de la fachada). Durante nuestro recorrido aparte de la abadía, hemos encontrado alguna casa de finales del Medievo y otras de entramado de madera, todas ellas con tejados de pizarra, también hemos podido descubrir las fuentes que se distribuyen a lo largo del pueblo alguna es de la época romana, el castillo d´Humieres, dos hornos que se usaban de forma colectiva y que se encuentran fuera de los límites del pueblo para prevenir incendios, un edificio que servía como secador de castañas ya que este fruto era fundamental en la dieta de sus pobladores en la edad media, este edificio tiene dos niveles uno para el secado y otro para su conservación, como antiguo pueblo fortificado encontramos tres de las cuatro puertas de entrada que tenia, la torre circular d´Enceinte del siglo XV y parte de la muralla (en la parte alta del pueblo cerca del centro europeo y el sector que bordea el cementerio).

De la iglesia abacial románica decir que es famosa además de por su tesoro de orfebrería medieval siendo una de las mejores colecciones de Europa, por su célebre tímpano sobre el juicio final obra románica de la primera mitad del siglo XII, tiene una anchura de 6,70 metros por una altura de 3,60 metros y tiene representados 124 personajes muy bien conservados (imagen 360º), también quedan restos de un claustro romanico del siglo XII en uno de los lados de la abadía.

Después de recorrer el pueblo detenidamente puedo decir que es uno de los que mas nos ha gustado, sobre todo a mi y creo que la visita para él que la realice no le dejara indiferente, para mi es una visita obligada y mas si se esta por la zona. Terminada la visita y hechas las compras de rigor salimos hacia Figeac, son casi 50 Km que nos llevara cerca de 1 hora.

Figeac, esta localidad es famosa por ser el lugar donde nació Champollion en 1790, el famoso egiptólogo que descifró la escritura jeroglífica gracias a la Piedra Rosetta, de esta localidad lo más interesante está en la Plaza de las Escrituras, una plaza contigua a la Plaza Champollion, aquí sobre el suelo hay una réplica muy ampliada en granito negro de la Piedra Rosetta, en la plaza contigua se sitúa el museo Champollion que da nombre a la plaza donde hay una exposición de la historia de las escrituras del mundo, en la misma plaza se encuentra la casa más antigua de la localidad justo enfrente del museo.

Otros edificios algo destacables son la iglesia de San Salvador situada en la orilla del rio Le Cele, esta iglesia formaba parte de un antiguo monasterio benedictino la nave construida entre los siglos XI y XIII fue alterada a lo largo de los siglos, hoy en día combina estilos románico y gótico, la bóveda fue reconstruida en el siglo XVII, hay una pila bautismal del siglo XIII en una de las capillas ( La primera capilla a la derecha de la entrada) y su órgano de 1860 tiene 1800 tubos, la iglesia de Notre Dame du Puy de estilo románico fue reconstruida muchas veces desde aquí hay una panorámica de los tejados de Figeac que personalmente creo que no merece mucho la pena y la Casa de la Moneda del siglo XIII es otra casa medieval, aquí se encuentra la oficina de turismo.

Para descubrir la ciudad es interesante hacerse con un plano, bien a través de la oficina de turismo o de su web (guia) porque tiene numerados los edificios importantes de la localidad para no perderte ninguno, los números figuran también en las fachadas de los diferentes edificios para no perderse. Se puede aparcar el coche en el parking du Foirail situado en el Boulevard du Colonel Teulie o en el mismo Bolulevard es gratuito y se encuentra a 300 metros del centro del pueblo, recorrerlo para ver lo que teníamos pensado nos lleva menos de dos horas, desde aquí partimos para Saint-Cirq-Lapopie son menos de 50 Km que los hacemos en 1 hora 30 minutos ya que nos paramos por el camino para comer en uno de los merenderos que uno se puede encontrar en el borde de las carreteras francesa.

Saint-Cirq-Lapopie este pueblo medieval está considerado la perla del valle del Lot, está situado en lo alto de un acantilado a unos 100 metros por encima del rio Lot, lo primero que hacemos es dejar el coche en el parking, hay seis diferentes cada uno con un numero, el más cercano al pueblo y por tanto el más caro es el P4, cuando vayáis a este parking parece el más lejano porque hay que seguir la carretera hacia arriba y ves que vas pasando parkings pero después al coger el desvío para el parking se va acercando al pueblo y te deja al lado del mismo, el precio son 4 euros por día, los otros van desde los 2 euros o los 3 euros según el parking que se escoja, aquí el aparcamiento hay que pagarlo si o si, a no ser que lo dejes alejado del mismo pueblo. Saint-Cirq-Lapopie tiene mucho encanto debido una vez más a sus callejuelas empedradas, sus 13 monumentos históricos y sus numerosas casas antiguas cuyas fachadas de piedra y entramado de madera datan de entre los siglos XIII y XVI, el castillo de Saint Cirq Lapopie del que solo hoy en día quedan unos vestigios está situado sobre un peñasco al que llaman “La Popie” desde aquí hay un mirador donde se puede observar el pueblo medieval y el valle del Lot,

En este pueblo aprovechamos para ver una tienda de juguetes de madera que nos encanto en la Rue de la Peyroliere, aunque no faltan otro tipo de tiendas, restaurantes y cafés para disfrutar de una buena jornada, la oficina de turismo se encuentra en el centro del pueblo al pie de la roca de la Popie donde uno puede conseguir un plano en español para guiarse por el pueblo, el recorrido a través del pueblo no tiene perdida, desde el parking 4 se accede a través de su calle más comercial a la place du Sombral lugar donde se encuentra la oficina de turismo, desde aquí parte una calle hacia abajo hasta la puerta de la Pelissaria que es la mejor conservada del pueblo, según vamos bajando la calle se puede ir accediendo a otras calles o plazas para descubrir la iglesia gotica de Saint-Cirq, la Maisons Daura casa medieval del siglo XIII, y otras casas que van desde el siglo XIII al XVI como dije anteriormente, asimismo casi al lado de la Maisons Daura hacia abajo en una casa haciendo esquina encontraremos al único artesano de madera que queda en el pueblo, descendiente de antiguos torneros sigue fabricando objetos de madera que vende a los visitantes como recuerdos, la visita al pueblo no nos lleva más de dos horas por lo que finalizada la visita después de tomar un café y rellenar nuestra botellas de agua fresca en una fuente del pueblo nos dirigimos a nuestra próximo destino.

Desde Saint-Cirq-Lapopie nos acercamos a Bouzies (10 minutos en coche) para hacer una pequeña ruta por el camino de Sirga llamado Le Chemin de Halage, este tipo de caminos se hacían en las orillas de los ríos en los terrenos colindantes y que los propietarios de los mismos deben dejar para uso público, esta ruta en principio empieza en el puerto náutico de Saint Cirq Lapopie, pero según las guías son alrededor de 15 o 10 Km ida y vuelta según desde donde se inicie y a nosotros lo que nos interesa es ver el camino que discurre a pie del acantilado y que se hizo a pico y pala por el hombre en 1845, son algo más de 300 metros en la parte baja del mismo. Una vez aparcado el coche en el parking de Bouzies previo pago de 2 euros iniciamos desde aquí el fácil sendero en dirección a Saint Cirq Lapopie hasta la esclusa del Ganil, este camino era utilizado por los caballos que tiraban de las gabarras cargadas de mercancías en dirección a Burdeos y permitirles remontar la corriente del rio, en total el recorrido ida y vuelta son unos 3 Km (40 minutos a pie), antes de llegar a la esclusa ya vemos la pared esculpida por un artista llamado Daniel Monnier en 1985 con representaciones relacionadas con el rio. Una vez finalizada la ruta podemos observar que desde un lado del parking en temporada alta salen gabarras en dirección a Saint-Cirq-Lapopie se puede hacer el viaje ida y vuelta o solo ida y regresar a pie por el camino de sirga, en el viaje en gabarra para salvar el desnivel se pasa por una esclusa, también hay la posibilidad de alquilar botes por horas. Una cosa que hemos observado es que en todos los parkings al aire libre que estamos utilizando para visitar los pueblos tienen un baño público que es de agradecer.

Son las siete de la tarde así que cogemos al coche y tomamos dirección Rocamadour lugar donde nos alojaremos 2 días, son algo más de 50 Km que nos llevara alrededor de una hora hacerlo, aquí nos ha venido de perlas el GPS, porque si no nos hubiéramos perdido seguro, en la carretera de viaje a Rocamadour se mezclan grandes rectas con tramos bastante sinuosos, aun así el recorrido es bastante bonito ya que discurre el mismo en su totalidad a través del parque natural de Causses du Quercy, a lo largo del recorrido ya hemos podido comprobar lo que será un habitual a lo largo de las siguientes jornadas y que no son otra cosa que sus “fermes” anunciadas en los cruces y bordes de la carretera, lugares donde podrás comprar desde el famoso queso de cabra de Rocamadour a pates o foie de pato o ganso…

Son poco mas de las 8 de la tarde cuando llegamos a L´Hospitalet situado a casi 1 Km de Rocamadour, estaba a punto de irse la recepcionista del hotel ya que por la noche en el hotel que escogimos no queda nadie en recepción, después del check in y de cenar nos acercamos andando a Rocamadour desde L´Hospitalet.

Rocamadour, esta comuna francesa se sitúa en el departamento del Lot, en el parque regional de los Causes du Quercy y muy cerca del valle del Dordoña, esta localidad está cargada de historias y del que se desconoce realmente los orígenes de la misma, aunque la más verosímil y que nos dejaron los monjes benedictinos es de que aquí vivió un ermitaño cuyo nombre Amador le dio su nombre actual, asimismo los mismos monjes nos dejaron la historia de que un habitante en 1166 quiso ser enterrado a la entrada del oratorio de la capilla de Notre Dame y cuando se empezó a excavar apareció el cuerpo intacto de San Amador, desde entonces sus reliquias descansan en el Santuario aunque fueron saqueadas y quemadas en 1562 por los hugonotes (protestantes calvinistas).

Sobre Rocamadour decir que está incluida dentro del camino de Auvernia, una de las cuatro rutas del camino de Santiago que discurren por Francia, esta ciudad santuario es uno de los sitios más sagrados de Francia y lugar de peregrinaje con más de mil años de antigüedad. Empezó a cobrar gran importancia debido a los numerosos milagros que se producían, e incluso provocó que se redactara el famoso Libro de los Milagros de nuestra señora de Rocamadour en 1170 que hizo que la peregrinación que hasta ese momento era modesta creciera de forma importante, la ciudad santuario gira en torno a sus siete antiguas capillas pero que antiguamente llegaron a ser muchas más, fueron creadas para venerar a su misteriosa y milagrosa Virgen Negra, que se encuentra en la capilla de Notre Dame, según cuenta la historia la primera talla fue realizada por San Amador, pero fue sustituida por la actual en el siglo XII. La Virgen Negra de Rocamadour es una talla de madera de nogal que según se cree ya que la falta de archivos deja muchas preguntas sin respuesta, el paso del tiempo y debido a su permanencia dentro de una cueva, el humo y el hollín procedente de los cirios que encendían los peregrinos, además de las laminas de plata que con las que fue recubierta para realzarla y que ennegreció debido al oxido, provocó que la imagen se fuera oscureciendo hasta tomar ese color negruzco que tiene en la actualidad.

En nuestro primer paseo partiendo desde L´Hospitalet para tener el primer contacto con Rocamadour cogemos la calle que empieza en la parte trasera del hotel Logis le Belvedere, es un camino en bajada al principio bastante suave para ir cogiendo pendiente según uno se va acercando al pueblo de Rocamadour, este camino te deja justo en la Puerta de Figuier en 10 minutos, puerta que da paso a la Rue Roland le Preux, siguiendo esta calle vemos el acceso al ascensor que se encuentra cerrado para subir a la ciudad religiosa, seguimos caminando y llegamos a la segunda puerta fortificada llamada puerta Salmon que es la mejor conservada y que da acceso a la Rue de la Couronnerie, las dos calles unidas por esta última puerta parecen una única calle, es tarde pero se intuye que debe ser muy animada debido a la multitud de tiendas y restaurantes que hay, casi finalizada la calle y antes de llegar a la puerta fortificada de Hugon, empieza la gran escalera monumental con sus 216 escalones y que antiguamente algunos peregrinos subían de rodillas, estas escaleras te llevaran al corazón de Rocamadour, la explanada donde se agrupan protegidas por las rocas del acantilado siete antiguas capillas e iglesias, nosotros en ese momento no las subimos ya que no hay casi iluminación, a lo largo de nuestro recorrido nocturno por el pueblo hemos podido observar algunas de las ocho puertas que se conservan y que en la antigüedad llegaron a ser once, las mismas daban la entrada a los diferentes barrios y cuya función era controlar el flujo de peregrinos que acudían a adorar a la Virgen Negra.

Son poco más de la diez de la noche y no hay ningún ambiente cosa diferente a lo que tendremos dos días después cuando visitemos la ciudad de día, por la calle solo quedan los últimos comensales en el interior de algún restaurante, imposible tomar algo ya que en los pocos sitios que quedan abiertos se preparan para cerrar, por lo que decidimos tomar la ruta de vuelta que la verdad da un poco de pereza, debido a la fuerte pendiente que tiene, una vez llegados arriba y antes de irnos a dormir vamos al mirador de L´Hospitalet para contemplar las vistas de Rocamadour de noche, luego… después de diez minutos decidimos irnos a la habitación a descansar ya que mañana madrugamos para ir a la sima de Gouffre de Padirac, ya que queremos ser de los primeros y no soportar las largas colas que se suelen formar a la entrada de la cueva.