Miércoles 2 de noviembre - Bangkok - Chiang Mai ✏️ Diarios de Viajes de Tailandia

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De nuevo toca madrugar a las 6.30 horas para hacer la maleta, ya que hoy por la noche nos marchamos a Chiang Mai

Vamos a desayunar a la cafetería de al lado del apartamento, recomendada por el dueño del mismo (y que el primer día estaba cerrada) y desayunamos unos mini huevos con salchicha, pan bimbo, un zumo y agua y por 195 THB los dos (un desayuno de lo más cutre… Prefiero el Seven eleven y sus sándwiches). Volvemos al apartamento a hacer el check out y, tras dejar las maletas guardadas en la recepción, nos dirigimos de nuevo al puente Saphan Taksin para coger otro barco de bandera naranja, esta vez hasta la parada 9 - Tha Chang, para ir a visitar por fin el Gran Palacio, que abrió ayer tras el fallecimiento del monarca. CONSEJO: No os agobiéis mucho con el tema de la vestimenta para entrar, ya que nosotros compramos unos pantalones justo a 200 metros de la entrada, para Nacho por 100 THB (más barato de ese precio no los encontramos en toda Tailandia), negros largos hasta el suelo y muy finitos ;). Ya en la entrada me ponen problemas por los míos, que cubren un trozo por debajo de la rodilla, pero me hacen estirarlos todo lo que pueda.


Por suerte no nos encontramos cola y podemos entrar nada más llegar y sacar las entradas de 500 THB por persona + 2 audio guías en español por 200 THB por persona, 2 horas dejando a cambio el pasaporte o la tarjeta de crédito. Nosotros dejamos el pasaporte sin miedo, porque todo nos dio muy buen rollo y nos pareció muy seguro. Acabamos visitando el palacio en 1 hora y media aproximadamente debido al calor, a la cantidad de gente y a que habían cerrado parte del recinto por una ceremonia en honor al rey a la que solo podían asistir los tailandeses. El Palacio nos pareció simplemente espectacular :hrt:.



Únicamente, como CONSEJO, recordar que en el Templo del Buda Esmeralda no se pueden hacer fotos y hubo un señor que estaba haciendo fotos y le pillaron y los guardas le sacaron a empujones del templo y le obligaron a borrar las fotos de muy malos modos. Hartos del calor exagerado que hace, ya que es el primer día que está el cielo despejado todo el rato y chorreando sudor sin parar, tomamos un taxi rosa de los que nos gustan y nos dirigimos a Khao San Road, donde nos damos un masaje en Charlie,


que había leído que era muy famoso. Foot massage 250 THB, de 1 hora, espectacular.


Comemos en un puesto callejero, pero que tiene silla y un techo, por 165 THB los dos, una ración de rollitos, 2 pad thai y 2 Coca Cola. Tras quedar repletos, cogemos de nuevo un taxi con un taxista que no hablaba ni pizca de inglés y que aunque había dicho por señas que entendía donde estaba nuestro hotel, de repente paró en medio de la calle para preguntar a una tailandesa (que resultó ser una transexual muy simpática) cómo llegar.

Volvemos al apartamento a recoger las maletas y a reorganizarlas, ya que con Bangkok Airways se supone que de equipaje de mano solo puedes llevar 5 kilos y claro, la maleta vacía ya pesa casi 2. Gracias que hemos llevado nuestra báscula de viaje (que me costó 5€ en los chinos) y que nos permite cuadrar a la perfección los pesos, sin sorpresas al llegar al aeropuerto. CONSEJO: Comprar una báscula de viaje te hará los viajes infinitamente más cómodos. Envuelvo la maleta con mi maravilloso método casero y tomamos el tercer taxi del día hasta el BTS de Krung Thomburi y hacemos el mismo camino que hicimos el primer día, pero a la inversa, para llegar al aeropuerto de Suvarnabhumi. Llegamos con muchísima antelación y sin el check in hecho, pero no hay problema. Al poner las maletas para facturar en la báscula, pesa sobre 23 kg y la chica ya me dice de antemano que nos pasamos de kilos, pero le recuerdo que he pagado para facturar hasta 25 kg, por lo que no me pone problema. Al haber llegado con tanta antelación, no nos facturan las maletas en la cinta como toda la vida, sino que nos mandan llevarlas a otro lugar, a unos 200 metros, donde las metemos en una cinta para que nos las facturen. Al viajar con Bangkok Airways había encontrado en un foro por casualidad, aunque no lo tenía yo claro del todo, que tenían una especie de boutique lounge. Suerte que leí eso por internet, porque podíamos habernos pasado más de 4 horas sentados en una silla incómoda, sin hacer nada, y pudimos pasar todo el tiempo de espera en esa boutique, con cómodas butacas, enchufes individuales, y WiFi, comida y bebida gratuita. Se encuentra en la planta 2, enfrente de la puerta A3. Basta con entregar el billete de avión.


CONSEJO: Utilizar la boutique lounge de Bangkok airways, si viajáis con ellos. Decir que quedamos flipando y encantados de la vida, y aproveché para hacer todo el diario hasta este momento . Agotador por cierto, a partir de mañana lo haré día a día.

El viaje con Bangkok Airways muy bien, los asientos son muy espaciosos y las chicas pasan todo el rato ofreciéndote agua, té, la cena… perfecto! Al llegar al aeropuerto de Chiang Mai cogemos un taxi en el propio aeropuerto, con el precio estándar de 150 THB, que nos deja en nuestro hotel en el centro de Chiang Mai, el Chan Chiang Mai House (www.booking.com/ ...se.es.html) (muy recomendable). Tratamos de coger el taxi a medias con Diana, una chica mexicana que acabamos de conocer antes de embarcar y cuyo hotel estaba cerca del nuestro, pero nos dicen que tenemos que coger taxi independiente o pagar 150 THB para ir a un hotel y 150 para ir al otro hotel.

Resumen de Bangkok: Es una ciudad caótica; muchísimo calor y muchísima humedad; con olores excesivamente intensos, aunque tolerables la mayor parte del tiempo; muchas de las calles no tienen aceras; un tráfico caótico y peligroso, donde tienes que tener mil ojos antes de cruzar porque, por poner un ejemplo, vimos una moto que para saltarse un atasco decidió atajar por la acera llena de gente, no hay stop ni ceda al paso y es un sálvese quien pueda. Alguna rata de vez en cuando en las zonas de la basura, ya que no hay contenedores y ponen las bolsas en el suelo, así mismo hay muy pocas papeleras, nos han dicho que es por unos atentados, con lo cual hay zonas muy sucias porque es muy difícil encontrar una papelera. Ciudad con su encanto particular, aunque estoy segura de que todo lo que nos queda por delante nos va a gustar muchísimo más. Pese a todo, pienso que merece la pena conocerla y dedicarle mínimo un día entero.

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