Esta mañana nos despertamos a las 5,30, desayunamos, recogimos todo y nos fuimos hacia la puerta Pile, donde nos esperaban los de la excursión a Mostar que habíamos contratado con Civitatis a través de la agencia local Amico tours.
Salimos a las 6,50 de la mañana con un grupo de 18 españoles más la guía y el conductor, en dirección a Mostar. Hemos tardado mucho tiempo, ya que hemos tenido que pasar por varias aduanas, primero a Bosnia, luego a Croacia y luego a Bosnia de nuevo, donde esta vez la guía nos pidió los pasaportes, y tardaron bastante. Además estuvimos otro rato parados porque había un accidente de moto con coche, heridos y todo. Paramos primero en un hotel en Neum (único pueblo costero de Bosnia), para ir al baño o tomar un café, 10 minutos. Fuimos al baño, hicimos algunas fotos y volvimos a la furgoneta.
También paramos en Pocitelj a hacer un par de fotos y volvimos.
Después fuimos a las cascadas de Kravice. Hay un montón de escaleras para bajar. Fuimos primero al baño y después bajamos. Una MARAVILLA, de lo que más me gustó del viaje.
Había gente que se metía en el agua y nosotros también. Estaba súper fría pero al final te acostumbras. Hicimos fotos, videos y tras un rato, nos salimos ya. Volvimos arriba, lo cual fue horrible y llegamos cansadísimos por tanta escalera empinada, fuimos al baño de nuevo y a la furgoneta.
Al fin llegamos a Mostar, sobre las 12,30, y ahí nos presentaron a la guía local, Mónica, que nos enseñó un puente antiguo de Mostar primero, y luego el famoso Puente Viejo.
Las calles estaban abarrotadas de gente, hacía un calor insoportable y el suelo de piedras súper resbaladizas hacía casi imposible andar. Después nos dieron tiempo libre, tras subir con ella por el puente que era aún más resbaladizo y teníamos que bajar agarrados. Todo un show bajar del puente, agarrados unos a otros, nos faltaban manos, pies y de todo.
Compramos algunos recuerdos por 3,5 euros, muy barato todo, una gorra por 5 euros, una botella de agua 1 euro y fuimos a comer a un bar típico bosnio muy chulo, con los camareros y camareras vestidos con traje típico. Tardaron muchísimo en servirnos pero mereció la pena. Pedimos un plato de cevapi (como kebab) y otro plato gigante con muestras de todo tipo de comida típica, riquísimo todo, 40 euros para los 3 con bebidas. Al salir nos compramos dos helados por 1,5 euros.
Volvimos hacia la torre de la iglesia franciscana donde habíamos quedado como punto de encuentro, y subimos a la misma por un ascensor por 3 euros cada uno. No se sube muy alto y solo se ve a través de cristales, pero no está mal ya que no habíamos visto otra vista aérea de la ciudad. Al final resulta que sí se podía subir más andando, pero no lo supimos hasta volver del viaje.
Esperamos al grupo y nos fuimos de regreso a Dubrovnik, 3 horas de viaje con un control de pasaportes y una parada para ir al baño. Nos fuimos al apartamento, nos duchamos, cenamos paella de sobre y algo de fiambre, preparamos cosas y a dormir pronto para mañana ir a la playa.
Gastos del día:
Helados 1,5 €
Comida 40 €
Torre 9 €
Suvenirs 3,5 €
Gorra 5 €
Botella agua 1 €
Gastos totales: 60 €. Por persona: 20 €
Salimos a las 6,50 de la mañana con un grupo de 18 españoles más la guía y el conductor, en dirección a Mostar. Hemos tardado mucho tiempo, ya que hemos tenido que pasar por varias aduanas, primero a Bosnia, luego a Croacia y luego a Bosnia de nuevo, donde esta vez la guía nos pidió los pasaportes, y tardaron bastante. Además estuvimos otro rato parados porque había un accidente de moto con coche, heridos y todo. Paramos primero en un hotel en Neum (único pueblo costero de Bosnia), para ir al baño o tomar un café, 10 minutos. Fuimos al baño, hicimos algunas fotos y volvimos a la furgoneta.
También paramos en Pocitelj a hacer un par de fotos y volvimos.
Después fuimos a las cascadas de Kravice. Hay un montón de escaleras para bajar. Fuimos primero al baño y después bajamos. Una MARAVILLA, de lo que más me gustó del viaje.
Había gente que se metía en el agua y nosotros también. Estaba súper fría pero al final te acostumbras. Hicimos fotos, videos y tras un rato, nos salimos ya. Volvimos arriba, lo cual fue horrible y llegamos cansadísimos por tanta escalera empinada, fuimos al baño de nuevo y a la furgoneta.
Al fin llegamos a Mostar, sobre las 12,30, y ahí nos presentaron a la guía local, Mónica, que nos enseñó un puente antiguo de Mostar primero, y luego el famoso Puente Viejo.
Las calles estaban abarrotadas de gente, hacía un calor insoportable y el suelo de piedras súper resbaladizas hacía casi imposible andar. Después nos dieron tiempo libre, tras subir con ella por el puente que era aún más resbaladizo y teníamos que bajar agarrados. Todo un show bajar del puente, agarrados unos a otros, nos faltaban manos, pies y de todo.
Compramos algunos recuerdos por 3,5 euros, muy barato todo, una gorra por 5 euros, una botella de agua 1 euro y fuimos a comer a un bar típico bosnio muy chulo, con los camareros y camareras vestidos con traje típico. Tardaron muchísimo en servirnos pero mereció la pena. Pedimos un plato de cevapi (como kebab) y otro plato gigante con muestras de todo tipo de comida típica, riquísimo todo, 40 euros para los 3 con bebidas. Al salir nos compramos dos helados por 1,5 euros.
Volvimos hacia la torre de la iglesia franciscana donde habíamos quedado como punto de encuentro, y subimos a la misma por un ascensor por 3 euros cada uno. No se sube muy alto y solo se ve a través de cristales, pero no está mal ya que no habíamos visto otra vista aérea de la ciudad. Al final resulta que sí se podía subir más andando, pero no lo supimos hasta volver del viaje.
Esperamos al grupo y nos fuimos de regreso a Dubrovnik, 3 horas de viaje con un control de pasaportes y una parada para ir al baño. Nos fuimos al apartamento, nos duchamos, cenamos paella de sobre y algo de fiambre, preparamos cosas y a dormir pronto para mañana ir a la playa.
Gastos del día:
Helados 1,5 €
Comida 40 €
Torre 9 €
Suvenirs 3,5 €
Gorra 5 €
Botella agua 1 €
Gastos totales: 60 €. Por persona: 20 €