Necesitabamos cambiar dinero, entre otras cosas porque mi nueva tarjeta me estaba dando algunos problemas. Y aprovechamos la horita de margen, hasta la apertura de los bancos, para hacer unas compras en Wellington, más concretamente para ir a una tienda de Adidas dedicada a los All-blacks. Compramos varias camisetas, pero creo recordar que las mismas se pueden comprar en el Aeropuerto un poco más baratas.
Una vez hechas las gestiones monetarias salimos destino el Parque Regional de Kaitoke. No hablan muy bien de él en la Lonely Planet, pero al fin y al cabo allí montaron Rivendel los chicos del Señor de los Anillos, por lo que decidimos acercanos, ya que faltaba alguna visita totalmente friki en nuestro viaje.
Y pese a mis dudas iniciales Kaitoke me pareció un lugar precioso, menos salvaje que los bosques de la isla sur pero muy bonito.
En el parque es posible nadar y hacer algunos deportes acuáticos, por lo que si se va con tiempo merece la pena llevar bañador y toalla.
En el bosque abundan los helechos, de varias variedades, siendo la más carismática el Silver Fern, emblema del país, y que por primera vez vimos en este parque.
Silver Fern
También en Kaitoke vimos numerosas trampas para Possums, y carteles que advertían de la distribución de veneno 1080 en la zona, para acabar con este depredador foráneo. Pero esto será objeto de otra entrada completa en mi diario.
Salimos de Kaitoke direccion Whakapapa con más de 300 kilómetros de camino. Lo que vimos de la Isla Norte nos pareció muy distinto a la isla Sur. Era muy verde, pero sin embargo la naturaleza estaba totalmente domesticada y europeizada, con mucha más población y más zonas cultivables.
Paramos a comer en Te Horo, en The Red House Cafe, un agradable cafe con una carta interesante, buen precio y buen servicio.
Y seguimos camino del tirón hasta Whakapapa Village, una estación de ski dentro de Parque Nacional Tongariro. Se trata de una zona volcánica donde destacan tres conos: Ngauruhoe, Tongariro y Ruapehu. Donde se supone aún habitan Kiwis en libertad.
Peligro: "Kiwis esquiando"
Nuestro alojamiento era el carismático Bayview Chateau Tongariro, un maravilloso edificio histórico, donde un gran salón con piano de cola recibe a los visitantes, numerosas cristaleras permiten una preciosa vista sobre el parque natural y gruesos corinajes rojos crean un ambiente delicioso.
Suelo fiarme mucho de las críticas de Tripadvisor, y sobre este hotel decían verdaderas barbaridades por lo que estaba un poco preoupada con la calidad del alojamiento. Pero sucedió todo lo contrario, no sé si se debió a que teníamos una situación privilegiada en el ala nuevo del hotel, pero nuestra habitación era cómoda y moderna, y con unas vistas espectaculares sobre el volcán Ruapehu.
La siguiente foto no es mía pero me parecía que la localización de este hotel no puede valorarse sin la misma:
Foto de Tim Whittaker
Whakapapa Village es un pequeño resort de ski, pero es tan abrumadora la naturaleza circundante, que hace que la estancia allí merezca la pena. Nosotros tan sólo pasamos dos noches en el lugar, lo suficiente para afrontar al día siguiente la Tongariro Alpine Crossing...pero eso es otra historia.
Cenamos en Tussock, unas fantásticas hamburguesas, ya que era importante coger fuerzas para nuestra siguiente aventura.
Wellington - Whakapapa Village (pasando por Kaitoke R.P.) 354 km.