Mañana con cielo azul en Manhattan. Un poquito de calor quizá más que ayer pero se puede llevar. Desayuno un bagel plane de sésamo con queso crema. Que buenos que están.
Decido ir andando hasta Union Square pero esta vez por la 5º Avenida para poder ver despertar al rey de la ciudad. No subí porque como ya había estado arriba de él 6 veces, preferí visitar otro dia al Rockefeller Center.
Empire State Building
*** Imagen borrada ***
Una cosa que si que vi fueron los parques para perros. Allí meten a los perros y todos juntos sueltos a jugar unos con otros. Me gustaría a mi ver a Bulmita con la pandilla. Se los merienda a todos. En cada parque había uno para ellos para así poder corretear, en la calle tienen que ir atados en todo momento.
Visita de rigor al mercadillo donde me compro unas manzanas y unos plátanos y continuo caminando. Paseándome y perdiéndome por las calles. Oliendo a ese aceite quemado, pitos de taxis, sirenas de bomberos. Que especial eres y cuanto tienes.
*** Imagen borrada ***
Flatiron Building
*** Imagen borrada ***
Esa noche cruzábamos el puente de Brooklyn con mi amigo Antonio que estaba pasando allí un mes fantástico. Quedamos en el hotel y cogimos el metro hasta Brooklyn Bridge y comenzamos a pasear. Estuvimos primero en el embarcadero al lado de River Café en el parquecito tan magnífico que han hecho. Aquí tuvimos estas divinas vistas.
Cruzando el puente
*** Imagen borrada ***
Desde el parquecito
*** Imagen borrada ***
*** Imagen borrada ***
*** Imagen borrada ***
*** Imagen borrada ***
Después fuimos al otro parquecito que tampoco está nada mal, es una maravilla. Podría estar ahí horas y horas admirando la ciudad.
Desde el otro parquecito, el de Fulton
*** Imagen borrada ***
*** Imagen borrada ***
Cogimos el subway en York St y para la isla. A mi me apetecia chino de nuevo, Dim Shum o algo asi, pero las horas que se nos hicieron estaba ya todo cerrado, pero todo eh? Creo recordar que eran las diez y media o por ahí. Otro dia seria.
Cené en el East Village unas porciones de pizza que valían 1$ y estaban divinas. Me quedé con hambre y enganché otro. Veis? Por 2$ cenada, New York no es caro comer. Mi primo y amigo comieron un falafel por 2$ también muy bueno, pero a mi no me sienta bien.
Me acosté rendida y pasando las fotos al ordenador y mirando y admirando la ciudad. Es increíble como después de haberla visitado tantas veces siempre me está ofreciendo algo nuevo. Un nuevo edificio, una nueva sensación, un nuevo placer para los sentidos siendo una ciudad tan y tan grande y tan llena de todo.