Cualquier viajero que recorra Estambul no quedará indiferente.
País número 25 y octavo viaje del año...
El viaje se planteó por el mes de septiembre, puesto que la compañía Iberia sacó una oferta de las de "Apriétate el cinturón".
Cuadrando fechas para que concidieran con las vacaciones de mi marido, conseguí los vuelos Madrid-Estambul por 137 euros i/v cada uno.
Fechas del viaje: Del 23 al 27 de Noviembre.
Si mandáis un mail a: turquia@telefonica.net os mandarán una guía con un plano y dvd en muy pocos días.
Fuimos con nuestro coche a Madrid y lo dejamos como siempre en el pueblo de Barajas, con la intención de coger el autobus 101 que te lleva al aeropuerto. Nos dimos cuenta de que este autobus no va a la terminal T4, que era desde donde salía nuestro vuelo, por lo que al final fuimos en metro.
Una aclaración con la T4: Calculad bien el tiempo, ya que desde que entras en la terminal hasta que llegas a la puerta de embarque tardas media hora más que si sales desde cualquier otra terminal.
Aún no siendo un vuelo Low Cost, decidimos que no íbamos a facturar maletas, por la comodidad de no tener que esperar a recogerlas, total, para 5 días no es necesario llevar demasiadas cosas.
El vuelo salía a las 18.10 horas. No realicé el check-in on line, por lo que nos tocaba pasar por mostrador para que nos diesen nuestras tarjetas de embarque. Nos asignaron asientos separados en las filas 12 y 14 (no existe la fila 13, ¿curioso, verdad?) puesto que la mayoría de la gente había facturado por internet, pero cuando llegamos al avión no tuvimos problemas en que nos los cambiaran para poder ir juntos.
Una vez dentro del avión el vuelo se retrasó una hora.
El avión de Iberia aburridísimo...sin pantalla, sin pelis, sin música...y eso que son 4 horas de vuelo! Bueno, al menos nos dieron una cenita, que no estaba mal y que nos entretuvo durante un rato.
El vuelos sin incidencias aunque la última hora fue muy movidita debido a las turbulencias.
Llegamos al aeropuerto de Atatürk. En Estambul es una hora más. Lo primero que hay que hacer es pagar la visa, que cuesta 15 euros por persona, y de ahí pasar al control de pasaportes.
Era apróximadamente la una de la madrugada por lo que nuestra única opción para desplazarnos al centro era coger un taxi. Nuestro hotel nos había ofrecido ir a buscarnos por 25 euros, pero me pareció un poco caro, así que decidí arriesgarme a la llegada.
Cuando sales del aeropuerto aquello es una odisea...Dos larguísimas filas paralelas de taxis y dos personas controlando la subida de pasajeros a cámara rápida. Mi idea de regatear con los taxistas que hubiese por allí se quedó en eso, en una idea...
Nos llegó el turno y un taxista de avanzada edad se bajó a toda leche del coche, abrió el maletero, nos cogió las maletas y las metió dentro sin ni siquiera darme tiempo a decirle dónde íbamos...qué energía por Dios! Le dije a mi marido que se subiera delante para controlar el taxímetro, puesto que había leído muchas cosas sobre la picaresca de los taxistas...
Le dije al taxista que tenía que pagarle en euros, puesto que aún no había cambiado moneda y me contestó: No problem! Le dí un trocito de periódico que había cogido en el avión y dónde había apuntado la dirección del hotel con letra pequeña, puesto que no tenía mucho espacio...A estas alturas el hombre ya nos había sacado del aeropuerto a una velocidad de vértigo, y yo pensando, madre mía, dónde nos va a llevar este hombre que ni siquiera ha leído el papel que le he dado? Desplegué mi mapa y le señalé dónde quería ir, y el hombre ni lo miró, sólo se limitó a decirme de nuevo: No problem! Mi marido estaba flipando, yo creo que durante el trayecto se sintió como el copiloto de Carlos Sainz...y yo seguía empeñada en señalarle el punto exacto en el mapa...al rato el hombre se puso las gafas y leyó el papelito, por fin!!! Le volví a señalar el mapa y de nuevo me contestó: No problem! Creo que era lo único que sabía decir en inglés, aunque fue más que suficiente para nuestro entendimiento.
Llegamos al hotel en 15 minutos...Por cierto el taxímetro estaba en tarifa "Günduz" que es la de día, puesto que en el 2009 se anuló la tarifa nocturna que es "Gece", y marcaba 30,74 liras, así que le dí 15 euros (un poquito menos, No problem!) y le dije que era "A good driver", no sé si lo entendió...
Nuestro hotel estaba en la zona de Sultanahmet, a 5 minutos caminando de Santa Sofía y la Mezquita Azul, desde mi punto de vista la situación es inmejorable.
Hotel Ida:
www.hotelida.net/
Reservé por internet desde su página, sin hacer ningún pago por adelantado y sin tener que facilitar el número de la tarjeta de crédito, así da gusto!
Elegí la habitación en sótano "half window-no view" por 20 euros por noche, con desayuno incluído.
Era una habitación limpia y sencilla con cama de matrimonio, armario, mesilla, baño con ducha, y TV con canal internacional, qué más se puede pedir?
Todo el personal es muy amable.
Nos metimos en la habitación y después de comentar la aventura de la "drag racing" y deshacer las maletas nos metimos en la cama.
País número 25 y octavo viaje del año...
El viaje se planteó por el mes de septiembre, puesto que la compañía Iberia sacó una oferta de las de "Apriétate el cinturón".
Cuadrando fechas para que concidieran con las vacaciones de mi marido, conseguí los vuelos Madrid-Estambul por 137 euros i/v cada uno.
Fechas del viaje: Del 23 al 27 de Noviembre.
Si mandáis un mail a: turquia@telefonica.net os mandarán una guía con un plano y dvd en muy pocos días.
Fuimos con nuestro coche a Madrid y lo dejamos como siempre en el pueblo de Barajas, con la intención de coger el autobus 101 que te lleva al aeropuerto. Nos dimos cuenta de que este autobus no va a la terminal T4, que era desde donde salía nuestro vuelo, por lo que al final fuimos en metro.
Una aclaración con la T4: Calculad bien el tiempo, ya que desde que entras en la terminal hasta que llegas a la puerta de embarque tardas media hora más que si sales desde cualquier otra terminal.
Aún no siendo un vuelo Low Cost, decidimos que no íbamos a facturar maletas, por la comodidad de no tener que esperar a recogerlas, total, para 5 días no es necesario llevar demasiadas cosas.
El vuelo salía a las 18.10 horas. No realicé el check-in on line, por lo que nos tocaba pasar por mostrador para que nos diesen nuestras tarjetas de embarque. Nos asignaron asientos separados en las filas 12 y 14 (no existe la fila 13, ¿curioso, verdad?) puesto que la mayoría de la gente había facturado por internet, pero cuando llegamos al avión no tuvimos problemas en que nos los cambiaran para poder ir juntos.
Una vez dentro del avión el vuelo se retrasó una hora.
El avión de Iberia aburridísimo...sin pantalla, sin pelis, sin música...y eso que son 4 horas de vuelo! Bueno, al menos nos dieron una cenita, que no estaba mal y que nos entretuvo durante un rato.
El vuelos sin incidencias aunque la última hora fue muy movidita debido a las turbulencias.
Llegamos al aeropuerto de Atatürk. En Estambul es una hora más. Lo primero que hay que hacer es pagar la visa, que cuesta 15 euros por persona, y de ahí pasar al control de pasaportes.
Era apróximadamente la una de la madrugada por lo que nuestra única opción para desplazarnos al centro era coger un taxi. Nuestro hotel nos había ofrecido ir a buscarnos por 25 euros, pero me pareció un poco caro, así que decidí arriesgarme a la llegada.
Cuando sales del aeropuerto aquello es una odisea...Dos larguísimas filas paralelas de taxis y dos personas controlando la subida de pasajeros a cámara rápida. Mi idea de regatear con los taxistas que hubiese por allí se quedó en eso, en una idea...
Nos llegó el turno y un taxista de avanzada edad se bajó a toda leche del coche, abrió el maletero, nos cogió las maletas y las metió dentro sin ni siquiera darme tiempo a decirle dónde íbamos...qué energía por Dios! Le dije a mi marido que se subiera delante para controlar el taxímetro, puesto que había leído muchas cosas sobre la picaresca de los taxistas...
Le dije al taxista que tenía que pagarle en euros, puesto que aún no había cambiado moneda y me contestó: No problem! Le dí un trocito de periódico que había cogido en el avión y dónde había apuntado la dirección del hotel con letra pequeña, puesto que no tenía mucho espacio...A estas alturas el hombre ya nos había sacado del aeropuerto a una velocidad de vértigo, y yo pensando, madre mía, dónde nos va a llevar este hombre que ni siquiera ha leído el papel que le he dado? Desplegué mi mapa y le señalé dónde quería ir, y el hombre ni lo miró, sólo se limitó a decirme de nuevo: No problem! Mi marido estaba flipando, yo creo que durante el trayecto se sintió como el copiloto de Carlos Sainz...y yo seguía empeñada en señalarle el punto exacto en el mapa...al rato el hombre se puso las gafas y leyó el papelito, por fin!!! Le volví a señalar el mapa y de nuevo me contestó: No problem! Creo que era lo único que sabía decir en inglés, aunque fue más que suficiente para nuestro entendimiento.
Llegamos al hotel en 15 minutos...Por cierto el taxímetro estaba en tarifa "Günduz" que es la de día, puesto que en el 2009 se anuló la tarifa nocturna que es "Gece", y marcaba 30,74 liras, así que le dí 15 euros (un poquito menos, No problem!) y le dije que era "A good driver", no sé si lo entendió...
Nuestro hotel estaba en la zona de Sultanahmet, a 5 minutos caminando de Santa Sofía y la Mezquita Azul, desde mi punto de vista la situación es inmejorable.
Hotel Ida:
www.hotelida.net/
Reservé por internet desde su página, sin hacer ningún pago por adelantado y sin tener que facilitar el número de la tarjeta de crédito, así da gusto!
Elegí la habitación en sótano "half window-no view" por 20 euros por noche, con desayuno incluído.
Era una habitación limpia y sencilla con cama de matrimonio, armario, mesilla, baño con ducha, y TV con canal internacional, qué más se puede pedir?
Todo el personal es muy amable.
Nos metimos en la habitación y después de comentar la aventura de la "drag racing" y deshacer las maletas nos metimos en la cama.