Hemos salido tempranito de Zaragoza, camino de Estella. Tenemos una reserva, en el camping Lizarra, de un bungalow. Dos horas más tarde estamos abriendo la puerta de nuestra casita de madera. Nuestro hogar por tres días. Tenemos cocina, que es de lo que se trata, baño y dos habitaciones. Con nuestras hijas, los hoteles se nos quedan pequeños. Necesitamos más espacio y soluciones para cenas, desayunos y demás menesteres. Así es que nos vamos apañando con habitaciones cuádruples, apartamentos o como aquí “viviendo en mi casita de papel”, perdón, de madera. Y aparcamiento en la puerta. Solucionado el asunto.
Puestos en contacto con nuestros amigos, que también vienen de Zaragoza, nos dedicamos a un primer paseo por Estella.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Su nombre, Estella, no es ajeno al de Estrella. Así, al parecer, estaba escrito en el frontispicio de la Capilla que mandara levantar el Rey García Ramírez, en honor a la Virgen del Puy.
“Esta es la estrella que bajó del cielo a Estella para reparo de ella”
Y es que la Virgen del Puy, como en tantos lugares, se apareció, (en esta versión, rodeada de estrellas), en una colina. Nadie logró bajarla de ahí, con lo que se hizo merecedora de santuario y allí se fundaría la ciudad: antigua Lizarra, que en vasco también significa Estrella. Una estrella lleva Estella en su escudo, por si hubiera alguna duda.
Es Estella lugar de peregrinos y vemos a unos cuantos saliendo y entrando del albergue en el que también nosotros nos alojamos.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Aunque nos trataron de maravilla y las instalaciones eran perfectas, a mí no me gustó, me dejó una impresión casi cuartelaria. Sin duda fue debido a que había mucha gente y hasta ese momento, nuestro Camino había sido casi en solitario (habíamos salimos de Somport y a partir de Puente la Reina es donde se unen camino francés y aragonés en uno solo) y este fue el primer albergue, así, en multitudinario, en el que nos alojamos. A partir de entonces buscamos puntos algo más pequeños para los finales de etapa y acertamos.
Hoy, sin embargo, no resisto a la tentación de asomarme y ver si todo sigue igual…
El primer núcleo de población de Estella, fue a lo largo del Camino jacobeo y el río Ega, que atraviesa Estella.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Hoy, este primitivo emplazamiento ocupa la rúa mayor y el patrón era San Pedro en cuyo honor se levantó San Pedro de la Rúa.
Pero primero pasaremos por la iglesia de San Miguel, contemplando su hermoso pórtico y su curiosa estatua de San Jorge en capilla anexa dedicada al Santo.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Iremos después a la Iglesia del Santo Sepulcro que nos ha llamado la atención al ir hacia el Camping, por su impresionante portada del siglo XIV
*** Imagen borrada de Tinypic ***
y aprovechando un prado lleno de margaritas con el río Ega al fondo, allí que nos quedamos un rato, felices y contentos porque estamos de vacaciones (pequeñitas, pero vacaciones, al fin) y el tiempo es nuestro.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Es Estella ciudad románica con multitud de casas señoriales, palacios, conventos e iglesias que llamarán nuestra atención. Sin duda, uno de los edificios más importantes es el Palacio de los Reyes de Navarra.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Vamos contemplando imponentes edificios aquí y allá hasta que llegamos a San Pedro de la Rúa, iglesia mayor de la ciudad, con claustro del siglo XII, uno de los conjuntos arquitectónicos más importantes del románico navarro, que cuando hicimos el Camino estaba cerrada y hoy está… ¡en obras! Maldición, empezamos bien…
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Nos conformaremos con una foto testimonial del claustro, desde arriba, sin que se vean los andamios. ¡Lástima! Era uno de los lugares que tenía pendientes y no le puedo poner la cruz.
Continuamos recorriendo las calles de Estella y descubriendo alguno de sus bonitos rincones.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
La gente disfruta de un domingo soleado y, es día de tapeo masivo. Así lo demuestran las terrazas que están llenas de gente tomando el aperitivo. Nosotros, más prácticos, buscamos un sitio para comer y para planificar el resto de la jornada de hoy.
Cumplido el trámite, decidimos que, ya que hoy hace un día soleado y puede que los restantes haya lluvia (las consultas previas del tiempo así lo anuncian, aunque estas cosas ya se sabe… lo mismo aciertan que no) pues podemos hacer una de esas caminatas que tanto nos gustan a los mayores y no tanto a alguna de las niñas que vienen con nosotros. Pero, no sé por qué, me parece que el esfuerzo va merecer la pena.
Nos vamos al nacedero del Urederra. Para ir hasta allí, nos dirigiremos hacia el Parque Natural de Urbasa-Andía, en el valle de Améscoa. La localidad de referencia es Baquedano, al norte de Estella y allí mismo, en un aparcamiento situado a la entrada del pueblo, comienza el recorrido al Nacedero, perfectamente señalizado.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Algo más de 5 kilómetros de camino, entre la ida y la vuelta y lo que te vas parando… nos costó unas dos horas y media.
El nacedero propiamente es la salida natural del acuífero que se forma en el macizo de Urbasa.
El camino, que comienza normalito, se va convirtiendo en una sucesión de cascadas, pozas de agua de color turquesa… “¡Mamá, el azul es azul!” decía nuestra hija pequeña.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Hayas, robles, olmos y otros de sus centenarios compañeros, dan al recorrido una apariencia de bosque encantado.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Los parajes naturales como este te llenan de energía. Lo comprobé mientras hacía el Camino, lo he comprobado muchas otras veces y, ahora, mientras veo a mis hijas, saltando y gritando como locas, hablando de gnomos y hadas de los bosques y sin protestar, ni una sola vez, de las numerosas subidas y bajadas que nos toca hacer, veo como mi teoría se confirma una vez más.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
A mí el paraje me da la energía necesaria para recorrerlo con dignidad, ya que el día de viaje comienza a pasar factura y, al llegar al final, al nacedero propiamente, respiro aliviada.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
No soy la única, en general los mayores terminamos algo perjudicados de la caminata que nos ha cogido un poco desentrenados, en este primer día. Pero nos queda la satisfacción de haber llegado y esta bonita imagen del final del día.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Una cervecita en el primer bar que hay a la salida del recorrido y poco queda qué hacer por hoy, salvo la vuelta a casa y quedar temprano para mañana, con un nuevo recorrido por hacer.