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Palermo.
Sicilia, resumida en una ciudad.
Via della Liberta (foto).
La primera impresion que tuve de Palermo fue de sorpresa. Siempre escuche el rumor de que Sicilia era muy pobre, y al verlo personalmente, doy por confirmado que es efectivamente, solo un rumor. Palermo es la tipica ciudad donde uno dice: "Yo aca viviría". Los motivos son muchos: tiene un excelente clima (aqui nunca hace frio), está a 10 minutos de Mondello (en mi opinión, la mejor playa de Italia), y a su vez, ademas de estar rodeada por kilometros de mar azul, Palermo también posee montaña. Desde el punto de vista arquitectonico, la ciudad combina historia con presente. Tiene un casco historico, donde se encuentran monumentos de renombre como el Teatro Massimo, Politeama, y los Quattro Canti, entre otros. Un parrafo aparte merece la gastronomia; para mi aca es uno de los mejores lugares del mundo a la hora de comer, sin dudas.
Vista desde el piso 8 del Hotel San Paolo Palace (foto).
Llegamos a Palermo el 5 de junio a las 15 horas, nos alojamos en el Hotel San Paolo Palace, un 4 estrellas superior, ubicado en la rambla, con una vista espectacular al Mediterraneo. Esa tarde la aprovechamos para recorrer el centro de la ciudad, en especial la Via della Liberta; un amplio boulevard arbolado donde se encuentran las mejores tiendas. Louis Vuitton, Gucci, Prada, Ralph Lauren,Trussardi, entre otras, forman parte del paisaje de esta calle. Por la noche, cenamos en el restaurante del hotel.
El dia siguiente, fuimos a pasar el dia a Mondello, un balneario de jovenes y para jovenes, con playas paradisiacas. Desde mi punto de vista, una de las 3 playas más lindas de Europa, sin dudas. Almorzamos en un parador de playa, Insalata Gostosa (con jamon crudo y champignones frescos), y Torre Capresa (ensalada caprese con berenjenas grlladas). 18 euros por todo. Era un dia soleado, como no podia ser de otra manera, aproveche para pasar un espectacular dia de playa. El agua es de película.
Playa de Mondello (foto).
Nuestro último dia en Palermo, decidimos pasarlo en Monreale, un pueblo en la montaña a 10 km del centro. Aqui se obtienen las mejores vistas panoramicas de la ciudad. Almorzamos en el restaurant Il Trogoletto, en una terraza en lo mas alto de la montaña. Tagliatelle con pez espada y langostinos, y Penne al pomodoro. De postre, cannolo siciliano (un postre tipico de Sicilia que consta de una masa philo crocante en forma de cañon, rellena de una crema exquisita a base de ricotta, que dicho sea de paso, es totalmente distinta a la que estamos acostumbrados en Uruguay). 35 euros.
Vista panorámica de la ciudad, desde Monreale (foto).
En la tarde, la maltratada fue la billetera; me fui de compras a la Via della Liberta. Por la noche, cenamos en el hotel. Habia que aprontar las valijas; nos esperaba Agrigento a la mañana siguiente.
Sicilia, resumida en una ciudad.
La primera impresion que tuve de Palermo fue de sorpresa. Siempre escuche el rumor de que Sicilia era muy pobre, y al verlo personalmente, doy por confirmado que es efectivamente, solo un rumor. Palermo es la tipica ciudad donde uno dice: "Yo aca viviría". Los motivos son muchos: tiene un excelente clima (aqui nunca hace frio), está a 10 minutos de Mondello (en mi opinión, la mejor playa de Italia), y a su vez, ademas de estar rodeada por kilometros de mar azul, Palermo también posee montaña. Desde el punto de vista arquitectonico, la ciudad combina historia con presente. Tiene un casco historico, donde se encuentran monumentos de renombre como el Teatro Massimo, Politeama, y los Quattro Canti, entre otros. Un parrafo aparte merece la gastronomia; para mi aca es uno de los mejores lugares del mundo a la hora de comer, sin dudas.
Llegamos a Palermo el 5 de junio a las 15 horas, nos alojamos en el Hotel San Paolo Palace, un 4 estrellas superior, ubicado en la rambla, con una vista espectacular al Mediterraneo. Esa tarde la aprovechamos para recorrer el centro de la ciudad, en especial la Via della Liberta; un amplio boulevard arbolado donde se encuentran las mejores tiendas. Louis Vuitton, Gucci, Prada, Ralph Lauren,Trussardi, entre otras, forman parte del paisaje de esta calle. Por la noche, cenamos en el restaurante del hotel.
El dia siguiente, fuimos a pasar el dia a Mondello, un balneario de jovenes y para jovenes, con playas paradisiacas. Desde mi punto de vista, una de las 3 playas más lindas de Europa, sin dudas. Almorzamos en un parador de playa, Insalata Gostosa (con jamon crudo y champignones frescos), y Torre Capresa (ensalada caprese con berenjenas grlladas). 18 euros por todo. Era un dia soleado, como no podia ser de otra manera, aproveche para pasar un espectacular dia de playa. El agua es de película.
Nuestro último dia en Palermo, decidimos pasarlo en Monreale, un pueblo en la montaña a 10 km del centro. Aqui se obtienen las mejores vistas panoramicas de la ciudad. Almorzamos en el restaurant Il Trogoletto, en una terraza en lo mas alto de la montaña. Tagliatelle con pez espada y langostinos, y Penne al pomodoro. De postre, cannolo siciliano (un postre tipico de Sicilia que consta de una masa philo crocante en forma de cañon, rellena de una crema exquisita a base de ricotta, que dicho sea de paso, es totalmente distinta a la que estamos acostumbrados en Uruguay). 35 euros.
En la tarde, la maltratada fue la billetera; me fui de compras a la Via della Liberta. Por la noche, cenamos en el hotel. Habia que aprontar las valijas; nos esperaba Agrigento a la mañana siguiente.
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