Llegó el gran día, avistamiento de ballenas.
El avistamiento de ballenas se hace de junio a primeros de diciembre, realmente a finales de noviembre, venir en diciembre como hicimos nosotros es arriesgado.
Como ya mencioné en la anterior etapa, desde la playa de Puerto Madryn se ven ballenas en su temporada alta, con sus crías. A 19km de la ciudad se encuentra el Area Natural Protegida el Doradillo donde se las ven a unos 10mts desde la costa, es un lugar ideal para ver a las madres con las crias.
Os pongo un mapa para que sepamos de qué estamos hablando.
A partir de octubre, si queréis verlas tendréis que ir a Puerto Pirámides. Para llegar allí (40 minutos en coche desde Puerto Madryn) se pasa un control de acceso donde se abonan las tasas de entrada (100$ por persona). Todos los prestadores de avistajes salen desde allí. En cuanto a las embarcaciones son 6 empresas que realizan la actividad y ofrecen el servicio de lanchas y semirrigidos, las lanchas tienen capacidad hasta 15 personas y los semirigidos de 60 personas. Ademas hay otro tipo de excursion, llamada SUNSET, que son salidas privadas al atardecer, con un servicio de bianda a bordo y es mucho mas personalizados. Las salidas regulares son, de 09hs a 16hs, cada hora.
El avistamiento de ballenas se hace de junio a primeros de diciembre, realmente a finales de noviembre, venir en diciembre como hicimos nosotros es arriesgado.
Como ya mencioné en la anterior etapa, desde la playa de Puerto Madryn se ven ballenas en su temporada alta, con sus crías. A 19km de la ciudad se encuentra el Area Natural Protegida el Doradillo donde se las ven a unos 10mts desde la costa, es un lugar ideal para ver a las madres con las crias.
Os pongo un mapa para que sepamos de qué estamos hablando.
A partir de octubre, si queréis verlas tendréis que ir a Puerto Pirámides. Para llegar allí (40 minutos en coche desde Puerto Madryn) se pasa un control de acceso donde se abonan las tasas de entrada (100$ por persona). Todos los prestadores de avistajes salen desde allí. En cuanto a las embarcaciones son 6 empresas que realizan la actividad y ofrecen el servicio de lanchas y semirrigidos, las lanchas tienen capacidad hasta 15 personas y los semirigidos de 60 personas. Ademas hay otro tipo de excursion, llamada SUNSET, que son salidas privadas al atardecer, con un servicio de bianda a bordo y es mucho mas personalizados. Las salidas regulares son, de 09hs a 16hs, cada hora.
La Sunset vale unos 600 $ (pesos argentinos, cuando me refiera a dólares diré USD) mientras que la normal 370$. Hay que tener en cuenta que la Sunset es en barcas pequeñas, por lo que la sensación de cercanía es mayor, y también el mareo de los que no estén hechos al mar, así que ya sabéis, Biodramina.
Nosotros lo hicimos con Southern Spirit, pero no tienen servicio Sunset y nos la escogió nuestra agencia, que ya sabéis que veló en todo momento por nuestro interés y satisfacción (irónico). Nosotros avistamos, ballena e hijo, pero costó encontrarlas porque ya casi se había terminado la temporada. Por lo que contaba la gente allí la agencia Botazzi sí que hacía ese servicio Sunset en embarcaciones pequeñas a diario, con salida de tarde (al atardecer), así que si volviera haría dos cosas: coger la Sunset e ir mucho antes, entre junio y septiembre.
El avistaje es impresionante, pero se hace muy corto, casi navegas una hora para estar 15 minutos con los animales. La barca salpica, así que ropa impermeable no os va a sobrar, o una muda para cambiaros cuando termine.
Tras hace el avistamiento, fuimos a la Pingüinera de San Lorenzo. Ya os comenté en la etapa anterior la diferencia entre esta y Punta Tombo, podéis ver sus ubicaciones en el mapa que os he puesto. Una opción puede ser no ir a San Lorenzo si habéis visto suficienes ballenas en Puerto Madryn, ahorrándoos la entrada a Península Valdés (100 $ por persona) y yendo a Punta Tombo, cuya entrada con 60$ (mientras que la excursión a San Lorenzo vale 60 USD), pero tiene más belleza San Lorenzo por el hecho de poder caminar entre los pingüinos. Por favor, no les deis de comer ni les toquéis, son animales salvajes y, haciendo eso, pierden su capacidad de autoabastecerse o, incluso, se impregnan de olor humano y los suyos les rechazan. Disfrutar, sacar buenas fotos y listo.
Después de la pingüinera, fuimos a Punta Norte, que es un mirador donde se ven leones marinos, aunque necesitáras unos prismáticos (bastantes recomendables en general).
Tras esto, cogimos camino de ripio (piedra suelta) hasta Caleta Valdés, donde los reporteros del National Geographic sacan esos vídeos de orcas comiendo crías de leones marinos. Para eso obviamente hay que ir en época de orcas (el mapa que os he puesto dice también las épocas para cada animal)
Finalmente regresamos a Puerto Madryn. Por el camino en Península Valdés podréis ver guanacos (una especie de llama), armadillos, ñandús (avestruces pequeñas), maras (liebres patagónicas parecidas a un canguro-perro-conejo),... es decir, mucha fauna.
Tras un serie de problemas y sobrecargos con ArgentinaVision y Azeta Viajes, que no consiguieron desdibujar lo hermoso de esa zona de Argentina muchas veces obviada por los operadores en detrimento de Buenos Aires, nos fuimos a la cama, porque al día siguiente temprano nos iríamos a Ushuaia.