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Nuestro segundo día en Génova amaneció despejado, con sol espléndido y temperatura agradable. Tras desayunar en el hotel nos paramos en el primer kiosco que vimos para comprar los tickets del autobús urbano. Como teníamos pensado hacer varios viajes optamos por el bono de un día que cuesta 4,50 por persona y permite utilizar sin límite el autobús durante 24 horas desde que se pica.
Nos dirigimos a la calle XX de septiembre y, a la altura del nº 13, frente al mercado oriental, cogimos el bus 14 con dirección a Prato. Nuestro objetivo era visitar uno de los cementerios más destacados de Europa, famoso por albergar una importante colección de escultura funeraria y contar con personajes destacados como la mujer de Oscar Wilde o Giussepe Mazzini.
Aunque pueda sonar un poco raro el turismo de cementerios, bien merece una visita, por tratarse de un auténtico museo al aire libre. La extensión es considerable y nosotros invertimos tres horas en recorrerlo y se nos pasaron volando.
El cementerio monumental de Staglieno es para los genoveses lugar de recuerdo y conmemoración, pero también representa un fascinante testimonio artístico e histórico de la ciudad de Génova. La administración municipal, consciente de la importancia cultural que reviste, ha emprendido iniciativas destinadas a la restauración y puesta en valor de las numerosas obras que han hecho famoso este camposanto.
En una de las puertas principales se encuentra la estatua de la Fe, una obra en mármol blanco de 9 metros de altura, realizada por el escultor Santo Varni.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Nos bajamos junto a los puestos de flores y, en la entrada, un hombre se acercó para ofrecernos un plano del conjunto. Más adelante se presentó otro ofreciendo sus servicios como guía pero decidimos hacer la visita por libre.
Comenzamos por la parte menos monumental, y ya aquí la decoración de las tumbas nos parecía sorprendente. Avanzamos entre esculturas y nichos y pronto cruzamos un acueducto desembocando en la parte del cementerio inglés. Dos esculturas de un matrimonio perfectamente vestido llaman nuestra atención en mitad de un bosque de árboles.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Un poco más arriba estaban las tumbas de los ortodoxos, ya que este camposanto acoge a gente de distintas confesiones, reflejando el carácter cosmopolita que siempre ha tenido Génova.
Las tumbas luteranas lucían de modo más austero y las de los judíos llevaban sus símbolos como la estrella de David y el candelabro de 7 brazos, junto al nombre del difunto escrito en hebreo e italiano.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Habíamos subido escaleras y, desde la parte alta vimos el templo central, al que accedimos sin dejar de sorprendernos con todas las esculturas que allí se encuentran, donde se ha acumulado el polvo con el paso de los años y donde reinaba el silencio, sólo perturbado por los pasos curiosos de algunos visitantes. En el interior de este panteón se conservan los restos de ciudadanos ilustres.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
A lo largo de los muros perimetrales se extienden las galerías, auténticos cofres de obras escultóricas. Existen varios itinerarios temáticos como el Risorgimiento, los Ángeles, la Caridad y Beneficencia y las Emociones.
Empezamos a recorrer las galerías a poniente y levante, por debajo y en la parte superior.Los temas de caridad y beneficencia son representados mediante figuras femeninas que ofrecen de beber a los moribundos o el seno a los niños. En los años centrales del Realismo burgués, a finales del s. XIX la deficinición de los desheredados, se hizo cada vez más presente como se puede apreciar en la tumba Amerigo, benefactor de orfanatos y del instituto para ciegos, o en la tumba Pellegrini, donde se representa a un ciego y a una niña pequeña huérfana con el uniforme del orfanato.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
En cuanto a las emociones, en Staglieno arte y naturaleza se funden, creando una alianza de exclusiva belleza en un contexto de espesa vegetación.
En la tumba Ammirato es exaltada la dramatización, que prevalece sobre la melancolía, evidenciada por la singular pose de la mujer joven, con la cabeza inclinada dejando caer su cabello.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
La emperatriz Sissi, visitando el Cementerio de Staglieno en marzo de 1893, se detuvo un largo rato ante el monumento a Giacomo Carpaneto, notable obra de Scanzi, e hizo copiar en su diario la inscripción: "Avventurato chi nel mare della vita ebbero nocchiero si fido".
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Capítulo a parte merecen los ángeles muy numerosos y diferentes entre sí.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Esta tumba fue encargada por Francesco Oneto, un rico comerciante y presidente de Banca Generale. El ángel que sostiene la trompeta del juicio universal con su mano derecha, no ofrece ningún gesto de consuelo, pues parece distante e imperturbable. La sensualidad de esta estatua conmocionó profundamente a los contemporáneos, pero disfrutó de un gran éxito ya que se repitió innumerables veces, tanto por el propio Giulio Monteverde, autor de la obra, como por los imitadores del artista. Se puede encontrar en varias versiones en muchos cementerios en Italia, Francia, Alemania o Inglaterra.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
En la tuma de Erba, del escultor genovés Santo Saccomanno, la figura femenina sentada en la tumba con los ojos cerrados y que sostiene en sus manos las semillas de amapola, símbolo pagano del olvido eterno, conmocionó también a sus contemporáneos, debido en parte a la sensualidad que emana del hombro desnudo de la mujer.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
A partir de 1860 el Realismo tuvo una rápida difusión en Staglieno que se aprecia en la representación de las figuras humanas y su entorno, tratadas con enorme precisión y atendiendo al detalle. Se recrean las expresiones de dolor, los gestos de las manos, los vestidos y el cabello parecen tremendamente reales.
En la tumba Pignone, del escultor Giuseppe Benetti, aparece una representación de la muerte por sí misma. La joven esposa descubre el velo, símbolo de larga enfermedad, que cubre a su difunto marido, rico hombre de negocios, propietario de una gran naviera.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
En la tumba de Rivara, de Giovanni Battista Villa, se representa al hermano, la cuñada y el sobrino. El escultor plasmó con máximo detalle sus vestimentas, como se puede apreciar en los zapatos o el pantalón de pana del niño. Representa también en sus rostros su estado de ánimo y la cuña de los preceptos estilísticos del Realismo burgués.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
La tumba de Caterina Campodonico, la vendedora de nueces, quizá sea el monumento más conocido del cementerio. Esta mujer ahorró durante toda su vida para que le hicieran una escultura en Staglieno y aparece representada con el collar de nueces en las manos y una rosca de pan. Caterina consiguió que lorenzo Orengo, escultor de la burguesía genovesa, le hiciera esta escultura.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Por momentos, las esculturas cobran un tinte más macabro y atravesamos pasillos de ambiente fantasmagórico, con las telarañas colgando del techo, las paredes con humedad y un silencio sepulcral, perfecto atrezzo para una peli de terror.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Después del largo paseo por el camposanto y, abrumados por la cantidad de esculturas que hemos visto y las que han quedado por descubrir, cogemos el autobús hacia el centro de Génova. Comemos de nuevo en Taggiou y tras descansar un rato nos dirigimos a Via Garibaldi, muy cerca de allí. En esta calle se asientan varios palacetes y casa señoriales.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Conocida anteriormente como Strada Nuova, Via Garibaldi es uno de los lugares más visitados de la ciudad, pues encierra ese conjunto representativo de la sociedad mercantil del siglo XVI. Sorprenden las numerosas obras de arquitectura renacentista, con fachadas esculpidas, estucados y medallones.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
A lo largo de la calle se alinean edificios con atrios, escalones, patios, salas con frescos y jardines colgantes.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Aquí se encuentran destacadas pinacotecas como Palacio Rojo, Palacio Blanco y el Palacio Spinola.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Abandonamos via Garibaldi caminando por los caruggi, los estrechos callejones que conducen al puerto. Atravesamos la Via de la Maddalena, una curiosa calle que los genoveses no frecuentan ni de noche ni de día.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
LLegamos hasta la catedral y aprovechamos para visitar el interior, puesto que el día anterior nos la encontramos cerrada.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
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*** Imagen borrada de Tinypic ***
En la plaza Dante, justo al lado de la casa de Colón, cogimos el autobús con dirección a Boccadasse, el barrio de pescadores a escasa distancia del centro. En 25 minutos nos apeamos y vimos la recortada silueta de la costa con un grupo de casas próximas al mar. Desde la iglesia pasamos a una plaza bastante concurrida, hay gente de paseo, pescando, tomando un geltao frente al mar o disfrutando de la tarde en este tranquilo lugar.
Boccadasse es un pequeño barrio que se abre en torno a un reducido puerto y una playa de guijarros. Hay gente tumbada y otros bañándose, pues la temperatura acompaña.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
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EN CONSTRUCCIÓN.....
Nos dirigimos a la calle XX de septiembre y, a la altura del nº 13, frente al mercado oriental, cogimos el bus 14 con dirección a Prato. Nuestro objetivo era visitar uno de los cementerios más destacados de Europa, famoso por albergar una importante colección de escultura funeraria y contar con personajes destacados como la mujer de Oscar Wilde o Giussepe Mazzini.
Aunque pueda sonar un poco raro el turismo de cementerios, bien merece una visita, por tratarse de un auténtico museo al aire libre. La extensión es considerable y nosotros invertimos tres horas en recorrerlo y se nos pasaron volando.
El cementerio monumental de Staglieno es para los genoveses lugar de recuerdo y conmemoración, pero también representa un fascinante testimonio artístico e histórico de la ciudad de Génova. La administración municipal, consciente de la importancia cultural que reviste, ha emprendido iniciativas destinadas a la restauración y puesta en valor de las numerosas obras que han hecho famoso este camposanto.
En una de las puertas principales se encuentra la estatua de la Fe, una obra en mármol blanco de 9 metros de altura, realizada por el escultor Santo Varni.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Nos bajamos junto a los puestos de flores y, en la entrada, un hombre se acercó para ofrecernos un plano del conjunto. Más adelante se presentó otro ofreciendo sus servicios como guía pero decidimos hacer la visita por libre.
Comenzamos por la parte menos monumental, y ya aquí la decoración de las tumbas nos parecía sorprendente. Avanzamos entre esculturas y nichos y pronto cruzamos un acueducto desembocando en la parte del cementerio inglés. Dos esculturas de un matrimonio perfectamente vestido llaman nuestra atención en mitad de un bosque de árboles.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Un poco más arriba estaban las tumbas de los ortodoxos, ya que este camposanto acoge a gente de distintas confesiones, reflejando el carácter cosmopolita que siempre ha tenido Génova.
Las tumbas luteranas lucían de modo más austero y las de los judíos llevaban sus símbolos como la estrella de David y el candelabro de 7 brazos, junto al nombre del difunto escrito en hebreo e italiano.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Habíamos subido escaleras y, desde la parte alta vimos el templo central, al que accedimos sin dejar de sorprendernos con todas las esculturas que allí se encuentran, donde se ha acumulado el polvo con el paso de los años y donde reinaba el silencio, sólo perturbado por los pasos curiosos de algunos visitantes. En el interior de este panteón se conservan los restos de ciudadanos ilustres.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
A lo largo de los muros perimetrales se extienden las galerías, auténticos cofres de obras escultóricas. Existen varios itinerarios temáticos como el Risorgimiento, los Ángeles, la Caridad y Beneficencia y las Emociones.
Empezamos a recorrer las galerías a poniente y levante, por debajo y en la parte superior.Los temas de caridad y beneficencia son representados mediante figuras femeninas que ofrecen de beber a los moribundos o el seno a los niños. En los años centrales del Realismo burgués, a finales del s. XIX la deficinición de los desheredados, se hizo cada vez más presente como se puede apreciar en la tumba Amerigo, benefactor de orfanatos y del instituto para ciegos, o en la tumba Pellegrini, donde se representa a un ciego y a una niña pequeña huérfana con el uniforme del orfanato.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
En cuanto a las emociones, en Staglieno arte y naturaleza se funden, creando una alianza de exclusiva belleza en un contexto de espesa vegetación.
En la tumba Ammirato es exaltada la dramatización, que prevalece sobre la melancolía, evidenciada por la singular pose de la mujer joven, con la cabeza inclinada dejando caer su cabello.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
La emperatriz Sissi, visitando el Cementerio de Staglieno en marzo de 1893, se detuvo un largo rato ante el monumento a Giacomo Carpaneto, notable obra de Scanzi, e hizo copiar en su diario la inscripción: "Avventurato chi nel mare della vita ebbero nocchiero si fido".
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Capítulo a parte merecen los ángeles muy numerosos y diferentes entre sí.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Esta tumba fue encargada por Francesco Oneto, un rico comerciante y presidente de Banca Generale. El ángel que sostiene la trompeta del juicio universal con su mano derecha, no ofrece ningún gesto de consuelo, pues parece distante e imperturbable. La sensualidad de esta estatua conmocionó profundamente a los contemporáneos, pero disfrutó de un gran éxito ya que se repitió innumerables veces, tanto por el propio Giulio Monteverde, autor de la obra, como por los imitadores del artista. Se puede encontrar en varias versiones en muchos cementerios en Italia, Francia, Alemania o Inglaterra.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
En la tuma de Erba, del escultor genovés Santo Saccomanno, la figura femenina sentada en la tumba con los ojos cerrados y que sostiene en sus manos las semillas de amapola, símbolo pagano del olvido eterno, conmocionó también a sus contemporáneos, debido en parte a la sensualidad que emana del hombro desnudo de la mujer.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
A partir de 1860 el Realismo tuvo una rápida difusión en Staglieno que se aprecia en la representación de las figuras humanas y su entorno, tratadas con enorme precisión y atendiendo al detalle. Se recrean las expresiones de dolor, los gestos de las manos, los vestidos y el cabello parecen tremendamente reales.
En la tumba Pignone, del escultor Giuseppe Benetti, aparece una representación de la muerte por sí misma. La joven esposa descubre el velo, símbolo de larga enfermedad, que cubre a su difunto marido, rico hombre de negocios, propietario de una gran naviera.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
En la tumba de Rivara, de Giovanni Battista Villa, se representa al hermano, la cuñada y el sobrino. El escultor plasmó con máximo detalle sus vestimentas, como se puede apreciar en los zapatos o el pantalón de pana del niño. Representa también en sus rostros su estado de ánimo y la cuña de los preceptos estilísticos del Realismo burgués.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
La tumba de Caterina Campodonico, la vendedora de nueces, quizá sea el monumento más conocido del cementerio. Esta mujer ahorró durante toda su vida para que le hicieran una escultura en Staglieno y aparece representada con el collar de nueces en las manos y una rosca de pan. Caterina consiguió que lorenzo Orengo, escultor de la burguesía genovesa, le hiciera esta escultura.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Por momentos, las esculturas cobran un tinte más macabro y atravesamos pasillos de ambiente fantasmagórico, con las telarañas colgando del techo, las paredes con humedad y un silencio sepulcral, perfecto atrezzo para una peli de terror.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
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Después del largo paseo por el camposanto y, abrumados por la cantidad de esculturas que hemos visto y las que han quedado por descubrir, cogemos el autobús hacia el centro de Génova. Comemos de nuevo en Taggiou y tras descansar un rato nos dirigimos a Via Garibaldi, muy cerca de allí. En esta calle se asientan varios palacetes y casa señoriales.
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Conocida anteriormente como Strada Nuova, Via Garibaldi es uno de los lugares más visitados de la ciudad, pues encierra ese conjunto representativo de la sociedad mercantil del siglo XVI. Sorprenden las numerosas obras de arquitectura renacentista, con fachadas esculpidas, estucados y medallones.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
A lo largo de la calle se alinean edificios con atrios, escalones, patios, salas con frescos y jardines colgantes.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Aquí se encuentran destacadas pinacotecas como Palacio Rojo, Palacio Blanco y el Palacio Spinola.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Abandonamos via Garibaldi caminando por los caruggi, los estrechos callejones que conducen al puerto. Atravesamos la Via de la Maddalena, una curiosa calle que los genoveses no frecuentan ni de noche ni de día.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
LLegamos hasta la catedral y aprovechamos para visitar el interior, puesto que el día anterior nos la encontramos cerrada.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
En la plaza Dante, justo al lado de la casa de Colón, cogimos el autobús con dirección a Boccadasse, el barrio de pescadores a escasa distancia del centro. En 25 minutos nos apeamos y vimos la recortada silueta de la costa con un grupo de casas próximas al mar. Desde la iglesia pasamos a una plaza bastante concurrida, hay gente de paseo, pescando, tomando un geltao frente al mar o disfrutando de la tarde en este tranquilo lugar.
Boccadasse es un pequeño barrio que se abre en torno a un reducido puerto y una playa de guijarros. Hay gente tumbada y otros bañándose, pues la temperatura acompaña.
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