Dia1
Habíamos planeado un viaje a Marruecos pero no teníamos seguro a que ciudad ir. Nuestra primera intención era ir a Casablanca, pero hablando con amigos y leyendo mucha información de este foro así como viendo videos nos decantamos por ir a Marrakech parecía tener ese punto de misterio que habría que descubrir.
Como siempre dar las gracias a la gente del foro que tan amablemente se desviven por ayudar, contestando dudas, aportando sus granitos de arena, así como haciendo diarios y de sobra que lo consiguen.
Nuestro viaje comenzaba, el 2 de enero de 2013, muy buena elección porque el clima era estupendo, después de los preparativos y la planificación de las visitas, nos aventuramos a tomar el vuelo que nos llevaría a esa misteriosa ciudad.
Este salio a mediodía puntual llegando a Marrakech a la hora programada sin retrasos. El aeropuerto es tan pequeño que tienes que ir andando desde donde te deja el avión hasta la terminal.
Lo primero que hay que hacer es rellenar unas hojas para entrar en el país, muy importante lleva bolígrafos porque allí no hay nadie que te los deje a no ser otro turista.
Os dejo imagen del papel.
Después de entregar el papel, enseñar el pasaporte y la tarjeta de embarque a recoger las maletas y a la salida.
En la puerta hay gente repartiendo planos de la ciudad, que a la larga son útiles aunque más te orientas por intuición que por el plano.
Nosotros contratamos el traslado desde el aeropuerto a la medina, donde estaba nuestro alojamiento, en la pagina www.transportelujo.es el precio 10€ que desde luego como dice Hayati en el foro es el mejor dinero empleado. Ya en el correo de confirmación nos dijeron que no cambiáramos dinero en España que lo hiciéramos allí que era mas ventajoso.
Nosotros no cambiamos dinero en el aeropuerto pues el transfer lo pagábamos en euros. Cuando salimos a la terminal allí estaba esperando nuestro chofer Abdul con un cartel con nuestro nombre. El trayecto no era muy largo pues el aeropuerto esta relativamente cerca, y Abdul muy amable nos iba explicando por donde íbamos y ofreciéndonos alguna excursión pero sin compromiso alguno.
Después de que Abdul aparco el coche, pues a la medina no se puede entrar con coche, nos llevó al riad.
Aquí empezamos a tomar contacto con esta ciudad.
Lo más gracioso es que nos metió por unos callejones que a priori dices aquí cuando salgamos nosotros solos nos dejan en cueros. No te preocupes la seguridad en Marrakech es total, pero si te ven despistado se ofrecen a llevarte pero como nos dijo Abdul con un no gracias no te agobian.
Os dejo una foto de noche de la calle desde el riad.
Llegado al riad nos despedimos de nuestro encantador chofer Abdul quedando para el día de partida para llevarnos otra vez al aeropuerto.
Elegimos un riad en vez de un hotel porque nos parecía mucho más auténtico.
Deciros que nuestro riad L´Heure de ÉtÈ estaba en la medina a 3 minutos andando de la famosa plaza Djemaa el Fna. Los riads son casas árabes que acondicionan para los turistas y hay que reconocer que tienen su encanto. Aquí nos recibió Hammou, el recepcionista, pero como nos dijo él llamadme Ramón.
El aroma que desprende el riad no se puede explicar con palabras. Lo primero que te ofrecen es un té a la menta con pastas una gozada.
Después nos enseño el riad y por fin nos lleva a nuestra habitación esta en la 1ª planta y hay que hacer piernas, no hay ascensor. El nuestro esta regentado por un francés y tiene otro riad que es el Villa Wenge.
Hammou nos explica la forma de llegar a la plaza Djemaa el Fna pues cuando llegamos con Abdul no te quedas como llegaste, hasta allí. Para llegar al riad desde la plaza Djemaa el Fna hay dos combinaciones.
Por la Rue Bab Agnaou (la calle mas ancha y peatonal) a la izquierda donde esta el hotel Central Palace te metes por esa calle, 1ª calle a la derecha, (en la esquina hay una tienda de alimentación) luego 1ª calle a la izquierda, pasada una casa medio derruida que esta a la izquierda, 1ª calle a la derecha y 1ª calle a la derecha. El riad esta en esa calle a la izquierda.
Por la Rue Riad Zittoun el Kedim, entras por la calle que en la esquina a la derecha esta el riad Jnane Mogador continuáis por esa calle, 1ª calle a la derecha y 1ª calle a la izquierda, el riad esta a la izquierda. La cuestión era aprenderse cualquiera de las dos rutas y no tienes perdida.
Os dejo un plano cogido del foro.
Una vez desechas las maletas había que tomar el primer contacto con esta ciudad. Deciros que habíamos estado en Egipto y sabíamos como eran los países musulmanes pero nuestra primera toma de contacto con esta ciudad fue decir aquí no vuelvo otra vez.
Con el paso de las horas de los días Marrakech te va cautivando y ves como la gente te hace replantearte muchas cosas llegando a la conclusión que esta ciudad tiene algo especial, mágico y dices SEGURO QUE VOLVERE.
Lo primero era cambiar dinero nosotros fuimos al Hotel Omar en el 22, Rue Bab Agnaou entras como en un portal y al fondo a la derecha esta la oficina de cambio. Aquí encontramos el mejor cambio y de hecho siempre cambiábamos aquí, además estaba cerca de nuestro riad. La moneda marroquí es el dirham (DH) y por 1€ te dan aproximadamente 11DH.
Desde allí fuimos a ver la Mezquita de La Koutoubia la cual no es visitable sino practicas la religión musulmana, ya había anochecido.
En esa misma calle delante de la mezquita hay una parada de calesas y te preguntan uno detrás de otro que si quieres dar un paseo.
Ya era hora de ir a cenar en los puestos de la plaza Djemaa el Fna. Nos decantamos por el Nº 31
Deciros que lo que veis en las fotos de arriba que comimos, las aceitunas y las salsas, nos las pusieron sin nosotros pedirlo y claro luego cuando fuimos a pagar nos dimos cuenta que nos habían clavado.
Pensamos que seria normal por el servicio, pero a otras personas que estaban junto a nosotros tampoco les cuadraba la cuenta.
Después de varios días comiendo en restaurantes nos dimos cuenta que nos habían cobrado la turistada y eso no nos gusto nada. Desde entonces no volvimos a comer en ningún puesto de la plaza.
Después de dar unas vueltas por los alrededores de la plaza, había que volver al riad. Mañana empezaríamos a descubrir los recovecos de callejones y plazas.