Día 4
Cada día había algo nuevo en el desayuno y todo buenísimo. Hoy nos tocaba ver los Jardines de la Menara y por supuesto coger un taxi pues la distancia es considerable para ir andando. Negociamos con el taxista y le dijimos que 30DH, empezó a regatear pero al final nos llevo por ese precio.
Es un típico jardín islámico con árboles frutales, con una gran alberca y un pabellón. El nombre de menara viene de la pequeña pirámide verde (menzeh) del tejado del pabellón. Este pabellón se construyó durante la dinastía Saadi en el siglo XVI y renovado por el sultán Abd ar-Rahman ibn Hicham, quien solía alojarse allí durante el verano. El jardín es gratis no así el pabellón para el cual hay que pagar. Para entrar al jardín después de recorrer una explanada la entrada esta a la derecha y la entrada al pabellón, hay que bordear por la izquierda.
Aquí esta la entrada al pabellón.
Y aquí la alberca con el pabellón, visto lo pequeño que era nosotros no entramos.
Desde aquí por la explanada otra vez a coger otro taxi para volver a la plaza Djemaa Fna.
Los camellos para darte un paseo por los jardines y al fondo la mezquita de La Koutoubia, se ve lejos.
Otros 30DH y volvemos a la plaza parando en el Centre Artisanal, almacenes estatales con precio fijo donde puedes comprar souvenirs el horario es de 8:30 h a 20 h.
Nos adentramos otra vez en la Medina a buscar el zoco de los Tintoreros. Es impresionante los colores que hay y los hornos donde se fraguan esos colores, juzgar vosotros mismos.
Y luego te llevan a una tienda y te visten de árabe, claro con el fin de que compres algo, pero no es obligatorio, eso si les debes de dar propina por las explicaciones que te ha dado.
Ya era hora de empezar a comprar regalos y como no los típicos dulces marroquíes que son bueníiiiiiisimos. En la tienda de la foto dentro del zoco en la calle Souk Semmarine es donde nosotros los compramos, recomendada en el foro. El dependiente era un cachondo pero tuve que pararle los pies porque le tiraba los tejos a mi mujer.
También en los mercadillos de la plaza los venden en cajas de precios según el tamaño de las mismas y te dejan llenarlas hasta que no entren más dulces. Eso si aquí en la plaza cuando te ofrecen a probar siempre te ofrecen el mejor que tienen pero no son tan buenos.
Después de comprar dulces y algunos souvenirs para la familia en los puestos de los zocos no fuimos a comer al restaurante que indicaban en el foro el Chez Brahimz 2. Este esta un poco mas adelante que el Chez Brahimz 1 en la rue Derb Dabachi, esta calle sale dejando la mezquita de la plaza Djemaa Fna a la izquierda, al fondo, la calle de la derecha bajando unos 200m.
En la planta baja esta la pastelería, nosotros subimos a comer a la terraza por dos tramos de escalera empinadas. Hay que ver la maestría que tienen los camareros al subir por ellas pues las cocinas están en el primer piso. Os dejo vistas desde ella.
La comida buenísima y bastante barata, os dejo algunas fotos, la primera era el aperitivo cortesía de la casa, hasta que llegara la comida, en la segunda.
Y como somos muy golosos cuando nos íbamos había que comerse un postre de esos que había en la pastelería. Solo ver la foto se nos hace la boca agua.
Después de patear por la Medina para hacer las últimas compras y volvernos a perder por esas callejuelas, había que volver al riad pues nuestro viaje tocaba a su fin y era hora de preparar las maletas al día siguiente Abdul pasaba a recogernos a la 9 h para llevarnos al aeropuerto.